Semana Trágica de Barcelona y Mancomunidad de Cataluña: Impacto y Evolución (1909-1925)

El impacto de la Semana Trágica en Barcelona

El triste recuerdo que la guerra de Cuba dejó entre las clases populares provocó que en el año 1909 estallara una violenta protesta popular en diferentes lugares de Cataluña, especialmente en Barcelona.

El Conflicto en Marruecos

A partir de 1900, España consolidó su entrada en el norte de África. La Conferencia de Algeciras (1906) y el Tratado Hispano-Francés (1912) establecieron un protectorado franco-español en Marruecos. A España le tocó el territorio del Rif (zona montañosa del norte) con la obligación de administrarlo y pacificarlo. El interés español se basaba en los beneficios económicos y en el deseo de recuperar el prestigio del ejército, hundido después del desastre de Cuba. En 1909, en el Barranco del Lobo, los rifeños infligieron una importante derrota a las tropas españolas, causando muchas bajas. Entonces se decidió aumentar el número de soldados en el Rif con los reservistas (muchos casados), lo que provocó en Barcelona un movimiento de protesta popular muy virulento.

La movilización popular y sus consecuencias

La movilización contra la guerra y contra el injusto sistema de quintas se inició en Barcelona el 18 de julio, generando una huelga general. La revuelta popular se prolongó durante una semana, desbordó el objetivo inicial de protesta y adquirió un fuerte componente antimilitarista y de rechazo a la Iglesia. En la calle se produjeron enfrentamientos con las fuerzas del orden y se incendiaron más de 80 centros religiosos. Las autoridades respondieron declarando el estado de guerra y enviando refuerzos para reprimir las manifestaciones. La represión posterior fue muy dura por parte del gobierno de Maura. Se celebraron 216 consejos de guerra que afectaron a 1700 personas y se dictaron 17 penas de muerte. Se llevaron a cabo cinco, entre ellas la de Francisco Ferrer Guardia, pedagogo anarquista, que en aquellos momentos se encontraba fuera de Barcelona en una conferencia. Le dijeron que no volviera, pero él volvió y fue condenado por ser considerado culpable de enseñar ideas revolucionarias. La actuación del gobierno levantó protestas que hicieron caer al gobierno conservador de Maura. Por lo que se refiere al catalanismo, la coalición Solidaridad Catalana se desintegró y la Lliga Regionalista sufrió un importante retroceso electoral en las elecciones de 1910, acusada de haber apoyado la represión.

La Mancomunidad de Cataluña (1914-1925)

Definición: Asociación de municipios o provincias para un fin común o para atender servicios y problemas de manera conjunta.

La Mancomunidad de Cataluña fue el primer órgano administrativo catalán desde 1714 y la principal concesión de autogobierno lograda por el catalanismo hasta la creación de la Generalitat (1931).

Proceso de formación

Largo y difícil. Los precedentes hay que buscarlos en las actuaciones desarrolladas desde los ayuntamientos y las diputaciones catalanas a partir del momento en que el catalanismo alcanzó responsabilidades de gobierno en estas instituciones. Los políticos eran conscientes de que la regeneración de Cataluña necesitaba un programa de mejora de las infraestructuras, la modernización del sistema educativo, etc. Estos se convirtieron en el programa de la Diputación de Barcelona en 1907, cuando Prat de la Riba fue elegido presidente. Para impulsar y difundir la cultura catalana se crearon el Instituto de Estudios Catalanes y la Biblioteca de Cataluña. En 1913 se fundó el Consejo de Investigación Pedagógica. En 1911, la Diputación de Barcelona, junto con otras diputaciones, promovió la iniciativa de mancomunar las cuatro diputaciones catalanas y presentó una propuesta. Canalejas se comprometió a sacar adelante un proyecto de Mancomunidad (aprobado por las Cortes en 1912). Las circunstancias no le acompañaron. El partido liberal estaba dividido y el partido conservador se opuso. Al año siguiente del asesinato de Canalejas, el Senado bloqueó el proyecto aprobado por las Cortes. En 1913, el nuevo gobierno conservador publicó un decreto que autorizaba a las diputaciones provinciales a mancomunarse para fines exclusivamente administrativos.

Constitución de la Mancomunidad

Se constituyó el 6 de abril de 1914. Enric Prat de la Riba era el presidente y una asamblea designaba un consejo formado por ocho miembros. La Mancomunidad solo fue una delegación de las funciones que ya tenían las diputaciones y contó solo con el presupuesto del que éstas disponían anteriormente. La Lliga Regionalista tuvo una presencia mayoritaria. El organismo tuvo tres presidentes:

  • Prat de la Riba hasta su muerte en 1917.
  • Josep Puig i Cadafalch hasta 1923.
  • Alfons Sala hasta 1925.

La obra de gobierno de la Mancomunidad

Tuvo dos direcciones: crear una infraestructura de servicios públicos y administrativos básicos que potenciaran el desarrollo económico, y el fomento de la lengua y la cultura catalanas a partir de un proyecto cultural y educativo.

Desarrollo económico

La Mancomunidad invirtió buena parte de sus recursos en un plan de mejora de la red viaria y los sistemas postal y telefónico. Se puso en marcha un plan de acción agraria que buscaba la modernización de las formas de producción y el aumento de la productividad de la agricultura y la ganadería.

Cultura y enseñanza

Se inició un proyecto centrado en la reafirmación de la lengua y la cultura catalanas. Incluyó la creación de las Bibliotecas Populares (1918), las Escuelas Experimentales (1918) y los Estudios Normales (1919). El Institut d’Estudis Catalans inició una tarea de unificación ortográfica para normalizar la lengua catalana. Fue encargada a Pompeu Fabra y acabó años más tarde con la elaboración del Diccionario General de la Lengua Catalana (1932).