Federico García Lorca: Poeta en Nueva York – Cosmogonía y Crítica Social

La voz poética se va a desplazar a dos terrenos nuevos en su obra: la gran ciudad y el propio yo. García Lorca, en una conferencia sobre estas obras, expone las ideas sobre lo que pretendía. Tanto la angustia como el vacío son constantes en Poeta en Nueva York, y se comprenden al observar la vida social. Esa angustia es tal que hace perdonable hasta el crimen y el bandidaje. La angustia se manifiesta como la pérdida de la identidad única y estable del sujeto. Aparece ya en el primer poema del libro, pero no solo en Poeta en Nueva York, también aparece en El Público. Donde más evidente se hace es en Nueva York: desestructurada, inconexa y llena de angustia, el lugar perfecto para hablar de esta crisis de conciencia. El verso libre es una forma de escribir en libertad, que entra de lleno en la mitología de la escritura en la libertad vanguardista.

Vuelta de paseo

  • Lo irracional
  • Cercano al surrealismo
  • Poesía pura: no se va a centrar en esto, pero la gran ciudad tampoco lo va a olvidar.
  • Las formas retorcidas, como la sierpe de vida. Es una forma de decir que no todo vale.

Divide la gran ciudad entre:

  • Opresores
  • Oprimidos (él habla desde este lado, el de los que sufren).

Ha pasado un tiempo desde los poemas en prosa. Es la lógica básica de la metamorfosis.

Muerte (p.183)

La instancia básica es el deseo. Se poetiza de manera negativa, no como en los poemas en prosa. Habla del deseo: todos los seres desean inevitablemente ser otro, y habla de que ello es imposible. La amargura. Sin embargo, no se realiza el deseo por la muerte. La recuperación del ser en medio de esa crisis es lo que le queda al poeta. Va a ser una de las líneas de fuerza del poemario. La categoría del ser converge con la categoría de la infancia perdida en todo el poemario.

1910

Su mirada de niño no había visto esas cosas negativas. La categoría de la infancia perdida asociada a lo positivo, la idea de la vida y el origen.

  • Origen: es el lugar del ser y la infancia. Se asocia a la verdad, libre de errores y de todo lo malo. Es habitual en los poetas del 27, el anhelo de un lugar originario libre de errores. Algo así aparece en Tres recuerdos del cielo de Rafael Alberti en Sobre los ángeles.

La imagen del tiempo originario es básica en toda la tradición occidental, como el pecado original. Es también una de las imágenes básicas de Poeta en Nueva York. La infancia se presenta como un paraíso perdido. El papel de todo esto en el poemario:

Origen (primer momento de la vida humana) Infancia

El origen y la naturaleza se oponen a la Historia y la civilización. La realidad que ven sus ojos de niño es la anterior a la caída. La pérdida del ser. Tras la caída, los hombres conservan la imagen pero pierden la semejanza. Es una idea platónica que luego se cristianiza. El reflejo puede ser de dos tipos:

  • Copia: idea con semejanza (antes de la caída en el cristianismo)
  • Simulacro: idea sin semejanza (tras la caída en el cristianismo).

Deleuze nos habla de esta “lógica del sentido” en Platón y el simulacro. Esta es una idea básica de Poeta en Nueva York. Tras la caída el ser humano es un simulacro. Es un poemario organizado en torno a la cosmogonía judeocristiana:

  1. La caída
  2. Vivencia del infierno
  3. Apocalipsis
  4. Esperanza de un nuevo paraíso

La caída

Es la pérdida del Paraíso, que se relaciona con el origen y la infancia. No sólo es una caída individual, sino que también lo es colectiva. El Paraíso y la infancia se oponen a:

  • Historia
  • Civilización
  • Cultura

El infierno

Esa sociedad capitalista se hace coincidir con la gran ciudad de Nueva York, emblema de las nuevas relaciones y cultura. Habla de las multitudes sin rostro, y está en parte relacionado con el siguiente punto.

El apocalipsis

Lorca acude a una nueva categoría estética del Romanticismo inglés que toma fuerza en las vanguardias, también con la parte infernal: lo siniestro. Antes de este momento, las categorías estéticas eran otras, como lo estético o lo sublime. El surrealismo reclama la parte irracional frente a la represiva, reivindican así que aflore lo oscuro e irracional. Los surrealistas se van a apropiar del psicoanálisis freudiano, y Freud precisamente escribió sobre lo siniestro en el ser humano y su reflejo en la literatura en Lo siniestro.

  • Resulta siniestra la duda de si algunas realidades que consideramos inanimadas son luego animadas, con el ejemplo del cuento de Hoffmann sobre una muñeca. Lorca lo refleja en Nocturno del hueco.
  • Freud considera también siniestro todo lo que tiene que ver con muertos y cadáveres. El poema más claro de lo apocalíptico es Danza de la muerte. Es un género medieval que ya es de por sí siniestro en que la muerte saca a bailar. Se describe en el de Lorca la ciudad como selva, la forma animal que irrumpirá en la ciudad tras la revolución social y política.

Nuevo paraíso

Lo anterior es el Paraíso. En varios lugares nos dice que la llegada de ese nuevo Paraíso será anunciada por un niño de raza negra, lo que también está relacionado con el origen perdido. Hay una clara simbología cristiana. El anuncio del nuevo orden hace que el “yo” poético asuma de manera clara la retórica del profeta. Es llamativo el paralelismo que establece con Cristo como una víctima predestinada a ser sacrificado por una sociedad que en principio lo rechaza. Posteriormente aparece el comienzo de la vida pública, la llegada de un nuevo orden o reino. Finalmente, el yo poético acepta voluntariamente el sacrificio como muestra de la autenticidad de su mensaje (pág. 205). Paralelismo entre el “yo” poético y Zaratustra. Zaratustra es quien anuncia la muerte de Dios en Así habló Zaratustra de Nietzsche. Es el libro en que escribe de manera más sistemática su filosofía. En la nueva manera espiritual de Lorca hay una gran influencia de Nietzsche, de quien reescribe párrafos enteros. En Juego y teoría del duende la destaca de forma muy clara:

  1. Retórica del profeta
  2. La multitud de la gran ciudad: Zaratustra “la columna de fuego”, Poeta en Nueva York “impúdica Norteamérica”.
  3. Conocimiento de la ficción de la identidad: el sujeto o individuo es una ilusión. Nietzsche negó la noción moderna de sujeto, yo e individuo. La falsedad del concepto y la ilusión fomentada por el lenguaje. En Nietzsche la ficción ontológica más importante fomentada por el lenguaje es la del sujeto. El yo poético tiene la noción de que la identidad única es falsedad fomentada por el lenguaje (pág. 167).

El modelo del cuerpo: algo donde se dan cuenta elementos de signo contrario. Un cuerpo está compuesto por toda una serie de afectos, pulsiones y fuerzas de signo contrario (Nietzsche), algo que Lorca también toma. Para que esta pulsión de elementos sea posible toma también los conceptos nietzscheanos de:

  • Lo dionisíaco (cuerpo, pulsiones, El nacimiento de la tragedia)
  • Lo apolíneo

En un primer momento original de lo dionisíaco, se produjo una caída que supuso el advenimiento de lo apolíneo. Para volver a lo dionisíaco hay que recuperar el sentido de la tierra. Zaratustra dice que los que no quieren recuperar el sentido de la tierra son incapaces de asumir la realidad. Esto aparece en Poeta en Nueva York, reescribe frases famosas de Nietzsche, Panorama ciego de Nueva York. La diferencia entre Nietzsche y Lorca es el ateísmo radical del primero frente a la recuperación del sentido de la tierra de una forma más social que teológica del segundo. En Poeta en Nueva York se dice que la Iglesia ha manchado el mensaje de Cristo y solo cuando vuelva el orden de Cristo se recuperará la verdad.

Grito hacia Roma (p. 217)

Los últimos versos son reescritura materialista del Padre Nuestro. Hay que rebelarse en nombre del amor y Cristo, los hombres de la gran ciudad. Esto no es estrictamente teológico, sino social. Esa intención está relacionada con la Oda a Walt Whitman y la llegada del nuevo Paraíso.