ONU: Origen, Hitos Clave y Evolución desde 1945

Origen y Propósito de la ONU

La ONU reemplazó a la Sociedad de Naciones (SDN), fundada en 1919, debido al fracaso de esta última en prevenir otro conflicto internacional. La creación de la ONU buscaba establecer una nueva organización para preservar a las futuras generaciones del flagelo de la guerra. Si bien se ha evitado una guerra general, los impulsores de la iniciativa, surgida tras la Segunda Guerra Mundial, buscaban evitar nuevos conflictos como la Primera Guerra Mundial y construir un mundo sin la posibilidad de una nueva paz armada. Se denomina “paz armada” al periodo entre la época de Bismarck (1871) y la Primera Guerra Mundial. Se pretendía evitar una nueva paz armada que había conducido a la destrucción de Europa y del mundo.

Nietzsche, poco antes de su muerte en 1900, presagiaba una época de destrucción infinita en su obra “Más allá del bien y del mal”. A menudo, Nietzsche es considerado un filósofo del pesimismo. En contraste, después de la Segunda Guerra Mundial, surgió un filósofo del optimismo, José Ortega y Gasset. A partir de “La Rebelión de las Masas”, se le considera pionero de la idea de Europa, del “europeísmo”. Después de la Segunda Guerra Mundial, fue el decano de esta idea. En 1949, viajó a Berlín y habló sobre la necesidad de meditar sobre Europa (“Meditación sobre Europa”). Les dijo a los berlineses que era necesario ver el mundo de forma positiva, que después de las ruinas viene la reconstrucción. Recordó las palabras de Goethe, que él mismo adoptó: “Los tuyos pueden permanecer ociosos, pero quien me siga siempre tendrá cosas que hacer.

Hitos en el Camino hacia la Creación de la ONU

Los dirigentes políticos durante la Segunda Guerra Mundial comenzaron a idear un nuevo sistema de relaciones internacionales, cuyo eje central sería la ONU. En este largo camino, que comienza en 1945, se destacan los siguientes hitos:

1. Las Cuatro Libertades de Roosevelt (1941)

El 6 de enero de 1941, el presidente Roosevelt pronunció un discurso conocido como las “Cuatro Libertades”. Este discurso tuvo una influencia fundamental en los países aliados durante la Segunda Guerra Mundial y contribuyó a estructurar el componente fundamental de la futura ONU. Las Cuatro Libertades son un alegato en favor de la democracia, la justicia social y el bienestar socioeconómico, basados en la libertad de palabra, de conciencia y el derecho a la paz. Estas libertades constituyeron el primer hito en la política que daría contenido a la Carta Fundacional de la ONU.

2. La Carta del Atlántico (1941)

La “Carta del Atlántico”, firmada entre el 9 y el 12 de agosto de 1941 en el Atlántico Norte por el presidente estadounidense Roosevelt y el primer ministro británico Churchill, es el segundo hito. Gran Bretaña enfrentaba dos frentes bélicos: Alemania (III Reich) y Japón. Los puntos 3º y 5º son cruciales. El 3º estipulaba que los pueblos bajo el dominio del Eje tendrían la oportunidad de elegir su forma de gobierno para vivir en paz y armonía. El punto 5º influenció directamente la Carta Fundacional de la ONU, incorporando sus principios.

3. La Declaración de las Naciones Unidas (1942)

El tercer hito es “La Declaración de las Naciones Unidas”, resultado de una reunión en Washington D.C. entre el 22 de diciembre de 1941 y el 14 de enero de 1942. Esta reunión fue significativa por la reciente entrada de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial. Participaron 26 países vinculados al esfuerzo bélico y diplomático angloamericano. La Declaración, que cerró la cumbre, fue de gran importancia y demostró que el Reino Unido ya no estaba solo en sus esfuerzos de guerra.

4. La Conferencia de Moscú (1943)

La “Conferencia de Moscú” (octubre de 1943) marca el cuarto hito. A partir de este momento, la URSS asumió un papel trascendental en la dirección del proceso de creación de la nueva Sociedad Internacional. El cambio en la guerra, debido al fracaso de Alemania en someter a la URSS, y la invasión alemana que anuló el pacto de no agresión, fueron factores clave. Para los angloamericanos, era vital que la URSS se involucrara en el esfuerzo bélico. El 16 de agosto de 1941, el embajador británico, con la potestad del embajador de EE. UU., ofreció ayuda a la URSS. Esta ayuda se negoció en septiembre de 1941 en una cumbre en Moscú, perfilando la Gran Alianza (Reino Unido, EE. UU. y la URSS) contra la Alemania nazi. El 26 de mayo de 1942, Reino Unido y la URSS firmaron un acuerdo bilateral, invitando a EE. UU. a unirse. Tras Stalingrado (febrero de 1943), la URSS, con ayuda militar de Reino Unido y EE. UU., comenzó a expulsar a los alemanes. El éxito soviético llevó a la cumbre de Moscú en octubre de 1943. La declaración del 30 de octubre comprometió a la URSS, Reino Unido, EE. UU. y China a unificar esfuerzos contra el Eje y a crear una nueva organización de naciones. Los angloamericanos se comprometieron a abrir un nuevo frente en el oeste, culminando con el “Desembarco de Normandía” (6 de junio de 1944).

5. La Cumbre de Dumbarton Oaks (1944)

El quinto hito, la “Cumbre de Dumbarton Oaks” (21 de agosto – 7 de octubre de 1944), confirmó a la URSS como una de las grandes potencias. La URSS colaboró con Reino Unido y EE. UU., dando su visto bueno al proceso de redacción de la Carta Fundacional de la ONU. Paralelamente, en julio de 1944, se celebró la “Cumbre de Bretton Woods”, con países capitalistas, que inauguró el nuevo orden económico internacional, creando el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

6. La Cumbre de Yalta (1945)

La “Cumbre de Yalta” (4-12 de febrero de 1945) es el sexto hito. Aunque la guerra continuaba, los líderes internacionales intuían el final de Alemania. Participaron Roosevelt, Churchill y Stalin. En Yalta se acordó la división de Europa y del mundo entre las potencias norteamericanas y sus aliados (Reino Unido y Francia) y la URSS. Se estipuló que los ejércitos líderes de los pueblos bajo dominio alemán serían responsables del proceso de paz. A la URSS se le asignaron los países del este, y a EE. UU. y sus aliados, los occidentales. La Carta del Atlántico (punto 3º) fue fundamental para la reorganización de Europa. La URSS matizó este compromiso, proponiendo el proceso de Frente Popular (inventado en 1930 para impulsar alianzas de izquierda contra la derecha y los regímenes totalitarios). Este Frente Popular implicaba crear una lista única de partidos de izquierda y fuerzas antifascistas, dirigidas por el partido comunista, para asegurar la reconstrucción política de Europa del Este bajo la influencia soviética. Este proceso se evidenció en Hungría. La URSS logró el control de media Europa hasta la caída del muro de Berlín y su propia desintegración. Los planes soviéticos post-guerra incluían: Gracias al final de la guerra, Stalin consolidó a la URSS como una gran potencia mundial, expandiendo su territorio y población. Se estableció un “Telón de Acero”, en palabras de W. Churchill, desde Stettin (Báltico) hasta Trieste (Adriático). Una vez establecido el cordón de seguridad, se buscaba la revolución mundial, impulsada por ideas marxistas y leninistas. Otra consecuencia fue el nacimiento de estados comunistas en el este de Europa.

7. La Reunión de San Francisco (1945)

El séptimo hito es la “Reunión de San Francisco” (1945), donde se finalizó el borrador de la Carta Fundacional de las Naciones Unidas, redactada por 50 países. Se definió la organización y estructura de la ONU, y las pautas del Consejo de Seguridad. La carta no ha tenido cambios significativos hasta la actualidad. Las grandes potencias con derecho a veto son Inglaterra, Francia, EE. UU., Rusia y China. La URSS fue reemplazada por Rusia, y China por la República Popular China. La carta reafirma los derechos fundamentales para evitar atrocidades como las guerras pasadas. Los objetivos incluyen: convertir a la ONU en referente en la resolución de conflictos, garantizar la paz y la igualdad, e impulsar la colaboración internacional en los ámbitos social, económico y cultural.

8. La Cumbre de Potsdam (1945)

El octavo hito es la “Cumbre de Potsdam” (julio-agosto de 1945), donde se aprobó el texto de la Carta Fundacional de la ONU. Sin embargo, Potsdam evidenció la ruptura entre las grandes potencias. Mientras Yalta había producido un acuerdo *de facto* sobre la dominación compartida del mundo, Potsdam marcó el inicio de la controversia por el predominio mundial. Los bloques de la Guerra Fría estaban construidos. Los occidentales eran conscientes del control soviético en Europa central y suroriental. Churchill habló de un “telón de acero” dividiendo Europa. En Potsdam, las potencias occidentales comenzaron a concebir un proyecto de contención de la URSS. Se demostró la imposibilidad de llegar a un acuerdo sobre el futuro de Alemania y Austria, que permanecerían ocupadas y divididas, señal de la división de Europa y la inminente Guerra Fría.

9. Entrada en Vigor de la Carta Fundacional de la ONU (1945)

El noveno hito es la “Entrada en vigor de la Carta Fundacional de la ONU” el 24 de octubre de 1945.

Conclusiones: Evolución y Desafíos de la ONU

Más de 70 años han pasado desde que el 26 de junio de 1945, en San Francisco, 50 Estados decidieron sentar las bases del nuevo orden mundial. Los precedentes eran bochornosos: dos guerras mundiales y el fracaso de la Sociedad de Naciones. El objetivo principal de la ONU era asegurar la paz y la seguridad internacional. El final de la Segunda Guerra Mundial derivó en una tensa bipolaridad, inicialmente en Berlín y luego a nivel global, que puso en riesgo el nuevo experimento. Las potencias se aseguraron una preponderancia en el Consejo de Seguridad, cuyas decisiones han sido cuestionadas por defensores de los derechos humanos.

Lejos de las ciudades occidentales, se libraron las batallas más sangrientas durante la Guerra Fría, principalmente en Sudamérica, Asia y África. Esto auguraba un difícil papel para la ONU, que ya había ampliado sus propósitos con agencias especializadas. La inoperancia del organismo internacional ante estos conflictos causó estupor en Occidente. Ruanda fue un punto de inflexión, y la ONU sintió la necesidad de renovarse.

Esta renovación es aún parcial. Los países emergentes comenzaron a sentirse oprimidos y reclamaron un mayor peso en el máximo órgano mundial. Ya no eran solo las ONG las que criticaban el papel de la ONU, sino países como Brasil, India y Sudáfrica.

La situación actual es delicada. Estos países consideran la creación de un organismo paralelo que refleje mejor la realidad actual. El mundo ha cambiado, y la ONU parece haberse quedado atrás. Esto se suma a un descrédito y una valoración negativa de su desempeño.

“Grandes discursos y poca acción” es la crítica más lapidaria a la Organización de las Naciones Unidas. Esta percepción se acentuó con la invasión a Irak y otros conflictos no resueltos. Sin embargo, la ONU ha significado un cambio tangible en la relación entre estados. Hubo siete decisiones clave que propiciaron replanteamientos significativos, para bien y para mal, del comportamiento de los estados.

Siete décadas llenas de momentos clave que forjaron las actuales relaciones internacionales. Por primera vez, el discurso mayoritario colocó al desarrollo compartido como herramienta para la paz. Desde esta perspectiva, diversos organismos subsidiarios de la ONU y numerosas actividades fueron creadas para fortalecer las capacidades nacionales de los países en desarrollo.

En 2005, la ONU realizó la reforma más significativa de sus estatutos y estructura, buscando los medios para responder a las necesidades de un mundo globalizado.

Diez años después, este ejercicio está por completar. Si las Naciones Unidas pretenden mantener su papel, deben dar respuesta a los retos actuales, incluyendo un nuevo orden mundial que cuestiona la distribución de poder. Este cambio solo será posible si los Estados miembros se comprometen a darle el respaldo político y financiero necesario.