El Presidente de la República nombró a Manuel Azaña jefe de gobierno para formar el primer gobierno de la República. La Constitución estuvo vigente durante la República, hasta 1939, aunque se suspendió su vigencia al estallar la Guerra Civil en 1936 debido al estado de guerra.
Causas de la Formación del Frente Popular
En España, el Frente Popular se formó como consecuencia de la radicalización de los enfrentamientos políticos durante el Segundo Bienio (1933-1935), es decir, de la polarización de la vida política, que llevó a la formación de dos bloques que compitieron en las elecciones de febrero de 1936: derechas e izquierdas.
Bloque de Izquierdas
Para las elecciones de febrero de 1936, se formó un Frente Popular (coalición electoral) entre republicanos (IR, UR), socialistas (PSOE, UGT) y comunistas (PCE). El programa del Frente Popular era reformista: restablecer la legislación y continuar las reformas del primer bienio, conseguir la amnistía para los presos y anular las represalias por la revolución de octubre de 1934.
Bloque de Derechas
La derecha comenzó la campaña desunida, pero pronto vieron la necesidad de formar alianzas. En algunos lugares, los monárquicos (alfonsinos y carlistas) se presentaron con la CEDA, agrarios (PAE) y otros, formando el Bloque Nacional, que no tuvo carácter general. Falange Española presentó candidaturas propias.
Resultados de las Elecciones del 6 de Febrero de 1936
En las elecciones de febrero de 1936, el Frente Popular, a pesar de conseguir un triunfo ajustado en votos, obtuvo una cómoda mayoría parlamentaria: PSOE (99) e Izquierda Republicana (87) fueron los partidos con más diputados del Frente Popular. La izquierda obtuvo sus mejores resultados en las grandes ciudades, en las provincias costeras y en el sur y Levante. Las derechas (la CEDA consiguió 88 diputados) perdieron la mayoría parlamentaria, pero obtuvieron buenos resultados en las dos Castillas, Navarra y Aragón.
El Gobierno del Frente Popular
El nuevo gobierno se formó solo con los republicanos de izquierda (Izquierda Republicana y Unión Republicana), tal como estaba previsto en el programa del Frente Popular. Los socialistas se mantuvieron fuera, al igual que los comunistas. El gobierno estuvo presidido por Casares Quiroga hasta el 19 de julio de 1936, mientras que Manuel Azaña fue nombrado Presidente de la República en sustitución de Niceto Alcalá Zamora.
Actuaciones del Nuevo Gobierno
Las actuaciones del nuevo gobierno se orientaron a:
- Aprobar la amnistía de todos los encarcelados o represaliados por la Revolución de octubre de 1934.
- Aprobar el restablecimiento del Estatuto de Autonomía de Cataluña e iniciar el proceso para la aprobación de Estatutos de Autonomía para el País Vasco y Galicia.
- Apartar del poder a generales favorables al golpismo o a la vuelta de los partidos de derechas al gobierno (el general Franco, que era Jefe de Estado Mayor, fue desterrado a Canarias, y el general Mola, que era Jefe del Ejército de Marruecos, fue destinado a Navarra).
- Reanudar el proceso reformista interrumpido en el bienio derechista, sobre todo con la reforma agraria.
La impaciencia de los jornaleros les llevó a llevar a cabo ocupaciones de tierras que luego el ministerio se veía obligado a legalizar. Por su parte, la CNT exigió la jornada de 35 horas y la expropiación de las fincas de más de 50 hectáreas.
La formación del nuevo gobierno y su actuación provocaron la reactivación de la confrontación:
- Con los grupos empresariales que organizaron cierres patronales, empezaron a sacar capitales del país y mostraron su rechazo al nuevo gobierno.
- Con la Iglesia por el temor a una vuelta a la política anticlerical del primer bienio.
Así que la situación derivó en una sucesión de desórdenes públicos continuos por:
- La intensa movilización popular y el clima de tensión social en las ciudades y en el campo (ocupación de tierras) generado en torno a la radicalización de los partidos y sindicatos de izquierda (CNT-FAI, PCE, FETT, UGT).
- En la derecha, Falange Española (partido fascista con escasa representación en las Cortes) se convirtió en el principal protagonista de la violencia callejera.
Los enfrentamientos entre militantes de derecha e izquierda se sucedieron y los dos partidos mayoritarios de la Cámara de Diputados, el PSOE y la CEDA, fueron haciendo sus discursos cada vez más agresivos. Otro tanto hizo Renovación Española (monárquicos autoritarios de Calvo Sotelo) con un discurso a favor de la subversión y de la insurrección armada, muy próximo al de Falange Española.
El recrudecimiento de la violencia armada alcanzó su culminación con el doble asesinato el 12 de julio de 1936 del teniente Castillo (Guardia de Asalto y militante socialista), se supone que por militantes falangistas, y del diputado Calvo Sotelo (Renovación Española) el 13 de julio como represalia del primero, se supone que por militantes socialistas y guardias de asalto compañeros del teniente.
La Preparación del Golpe Militar del 18 de Julio de 1936
La conspiración militar se fue fraguando ya desde la formación del gobierno del Frente Popular. El gobierno ya había intentado desactivar esa trama al trasladar al general Mola a Navarra y al general Franco a Canarias. En marzo, un grupo de generales (Mola, Saliquet, Varela), a los que se unió el general Franco, acordaron “un alzamiento que restableciese el orden”, la dirección del cual recayó en el general Mola, y previeron que la jefatura suprema de la sublevación fuera para el general Sanjurjo. La conspiración contó, desde el principio, con el apoyo de los monárquicos de Renovación Española, de los carlistas (Comunión Tradicionalista y sus Requetés) y de los falangistas. En la elección de la fecha tendrá mucho que ver el asesinato del líder de Renovación Española, Calvo Sotelo el 13 de julio de 1936. Así, la noche del 17 de julio se insurreccionaba la guarnición de…