España en Conflicto: De la Guerra Civil a la Dictadura Franquista

Contexto Internacional de la Guerra Civil Española

La Guerra Civil Española (1936-1939) se considera, a menudo, como el preludio de la Segunda Guerra Mundial. En ella, se enfrentaron las ideologías que dominarían el panorama internacional: los estados liberales y comunistas contra el fascismo y el nazismo. Las potencias extranjeras adoptaron diversas posturas, que se pueden resumir en tres categorías:

Ayudas a los Sublevados

Los países con regímenes fascistas o similares, como la Alemania nazi de Hitler, la Italia de Mussolini y el Portugal de Salazar, apoyaron activamente a los militares sublevados. Alemania proporcionó una ayuda crucial, enviando aviones, carros de combate y apoyo económico. Italia destacó por el papel de su armada. También hubo voluntarios de otras nacionalidades, como portugueses e irlandeses. El apoyo del Vaticano fue fundamental para el reconocimiento del nuevo régimen entre la población católica.

Ayudas a la República

La Unión Soviética y México fueron los únicos países que apoyaron militarmente a la República. La URSS envió armamento ligero y pesado, aviones y técnicos. México proporcionó armas, alimentos y apoyo diplomático. Además, las Brigadas Internacionales, formadas en su mayoría por militantes de partidos comunistas, lucharon en el frente republicano en solidaridad con la izquierda española y contra la amenaza fascista.

Actitudes Ambiguas

Algunas organizaciones internacionales, a pesar de sus valores declarados y su oposición al fascismo, optaron por una postura oficial de inhibición. La Sociedad de Naciones, encargada de la resolución pacífica de conflictos, no intervino directamente. Francia y Gran Bretaña promovieron un acuerdo que prohibía la venta de material militar a España, lo que llevó a la creación del Comité de No Intervención, con sede en Londres. Aunque Francia se inclinaba más hacia la República, las presiones británicas y las divergencias internas la obligaron a suspender la venta de armas. Finalmente, Francia acogió a dirigentes republicanos y a miles de españoles que huían de las tropas de Franco. Gran Bretaña y Estados Unidos, por su parte, apoyaron indirectamente al bando franquista.

Evolución Política y Económica de los Dos Bandos

La Guerra Civil dividió a España en dos zonas: la republicana, fiel al gobierno, y la sublevada, defensora de los militares rebeldes.

Zona Republicana

  • La Revolución Social: El desorden fue notable desde el inicio de la guerra. Hubo levantamientos colectivistas protagonizados por la CNT y la UGT. Se formaron Juntas, Consejos y Comités que reprimieron a los sublevados, requisando sus bienes. Se reanudó la quema de iglesias y conventos, así como los fusilamientos.
  • El Derrumbe del Estado: Tras el golpe, Casares Quiroga y su sucesor, Martínez Barrio, dimitieron. Giral entregó el poder a las milicias. El poder central se derrumbó, y las Juntas y Comités Locales actuaron con autonomía ante el avance de los rebeldes.
  • El Gobierno de Largo Caballero: En septiembre de 1936, se formó un gobierno de coalición de republicanos, socialistas y comunistas. Largo Caballero buscó crear un ejército unificado y restablecer el poder del Estado frente a los Comités revolucionarios.
  • El Gobierno de Negrín: Juan Negrín asumió la presidencia del Gobierno, y Prieto el Ministerio de la Guerra. Los sindicatos fueron alejados del gobierno. Negrín buscaba una salida negociada de la guerra, pero Franco no aceptó. Negrín esperaba que el estallido de un conflicto europeo salvara a la República, pero esto no sucedió.
  • Economía: Destacaron las colectivizaciones de empresas, especialmente en el ámbito agrario. Sin embargo, la desorganización provocó problemas de abastecimiento en las ciudades.

Zona Sublevada

  • Francisco Franco, Generalísimo: Franco fue elegido jefe supremo del ejército. Sustituyó la Junta de Defensa Nacional por la Junta Técnica del Estado, con sedes en Valladolid y Burgos. El Cuartel General del Generalísimo se estableció en Salamanca.
  • Creación del Partido Único: En abril de 1937, Franco promulgó el Decreto de Unificación, creando FET de las JONS (Falange Española Tradicionalista y de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista). La Falange tenía un papel preponderante, y Franco se convirtió en Jefe del Partido y Jefe del Estado, cargos que mantuvo hasta su muerte.
  • El Primer Gobierno de Burgos: Se formó en enero de 1938. Franco era llamado comúnmente “Caudillo”. El Estado se organizó de forma corporativa, con la creación del Sindicato Vertical. Se implantó la censura para controlar ideológicamente a la sociedad y se restablecieron las leyes favorables a la Iglesia.
  • Economía: El control de las zonas agrarias evitó problemas de abastecimiento. Se anularon las expropiaciones y se devolvieron las tierras a sus propietarios.

Costes Humanos y Consecuencias de la Guerra

La Guerra Civil tuvo un balance trágico para España, con un alto número de muertes, desapariciones, exiliados, represión y pérdidas económicas.

  • Muertos y Desaparecidos: Se estima que murieron unas 300.000 personas en los campos de batalla. Si se suman los fusilados, asesinados, presos, enfermedades y desnutrición, la cifra superaría el millón de personas.
  • Represión Republicana: Se generalizó la represión y los asesinatos políticos en cárceles clandestinas. El Estado creó los Tribunales Populares. Personalidades ejecutadas: Melquíades Álvarez, José Antonio Primo de Rivera y otros líderes de la Falange.
  • Represión Franquista: Fue ejercida sistemáticamente por el ejército contra todos los posibles enemigos, causando un mayor número de víctimas que la represión republicana y prolongándose después de la guerra. Fueron especialmente graves las matanzas de civiles en Málaga, Sevilla y Badajoz. Los sublevados ejecutaron a todas las personalidades republicanas que capturaron.
  • Exiliados: Desde el inicio de la guerra, la población civil republicana se vio obligada a desplazarse ante el avance de los nacionales. Al final de la guerra, medio millón de personas cruzaron la frontera francesa. La mitad regresó a España, el resto vivió en el exilio.
  • Pérdidas Económicas: Al descenso de la natalidad y de la población activa se sumó el envío a la URSS de más de 500 toneladas de oro del Banco de España, los gastos de la guerra y la destrucción de edificios e infraestructuras.

Fases Militares de la Guerra Civil

La Guerra Civil (1936-1939) es un acontecimiento de gran interés histórico. A nivel interno, marcó el fin de la II República y el enfrentamiento entre “dos Españas” con profundas diferencias. El pronunciamiento militar del 18 de julio de 1936 triunfó en las zonas agrarias más retrasadas y en algunas capitales del interior, pero fracasó en la España más desarrollada e industrializada del este y el norte, y en las grandes ciudades (Madrid, Barcelona, Valencia).

Las fases de la guerra fueron:

  1. Avance hacia Madrid: El ejército africano, dirigido por Yagüe, unificó la zona sublevada del norte con la del sur. Franco liberó el Alcázar de Toledo. Madrid resistió el ataque gracias a un ejército formado por milicias voluntarias, las Brigadas Internacionales y la Columna Libertad.
  2. Batallas en torno a Madrid: Se regularizaron ambos ejércitos. Los sublevados intentaron cercar la capital, dando lugar a las batallas del Jarama y Guadalajara.
  3. Ocupación del Norte: Hubo combates en la franja norte. Los republicanos lanzaron ofensivas en Brunete y Belchite para desviar tropas nacionales.
  4. Avance hacia el Mediterráneo: Los republicanos atacaron Teruel, y los nacionales respondieron con la campaña de Aragón. Franco decidió atacar hacia Valencia en lugar de Cataluña, por temor a acercarse a la frontera francesa en un momento de tensión internacional.
  5. Batalla del Ebro (la más importante): El ejército republicano lanzó una ofensiva sobre el río Ebro. La contraofensiva nacional frenó el ataque y debilitó al bando republicano, iniciando la ofensiva sobre Cataluña. Franco entró en Barcelona sin lucha, y la toma de Gerona provocó el exilio de miles de refugiados y del gobierno republicano.
  6. Final de la Guerra (1 de abril de 1939): A principios de 1939, la República se reducía a la Zona Centro. Negrín volvió del exilio para continuar la resistencia, mientras que Azaña dimitió desde París. Besteiro y otros socialistas crearon la Junta de Defensa para negociar una “paz honrosa”, pero Franco exigió la entrega de armas. Poco después, entró sin resistencia en Madrid y ocupó Albacete, Alicante y Valencia, dando por finalizada la guerra.

Evolución de España durante el Franquismo: Etapas y Características

España durante la II Guerra Mundial (1939-1945)

Se desmanteló la legalidad republicana: la Constitución de 1931, los partidos políticos, los sindicatos, los Estatutos de Autonomía y las libertades fueron suprimidos. El Estado se organizó mediante una serie de leyes, comenzando con el Fuero del Trabajo (1937), que regulaba los derechos de los trabajadores, prohibiendo la huelga y estableciendo el sindicato vertical. En 1942, se promulgó la Ley Constitutiva de las Cortes, una cámara con miembros designados, no elegidos, y con el dictador dictando las leyes.

Se mantuvo la eliminación del adversario con la Ley de Responsabilidades Políticas (1939), la Ley de Represión de la Masonería y el Comunismo (1940) y la Ley sobre la Seguridad del Estado (1940). En 1940, había unos 300.000 presos políticos, un número similar de exiliados y numerosas ejecuciones. La administración pública, la Universidad y las grandes empresas fueron depuradas de “adictos a la República”.

El Aislamiento (1945-1953)

Tras la II Guerra Mundial, Franco intentó maquillar su sistema político para evitar el parecido con el fascismo. Se suprimió el saludo fascista y se redujo el número de falangistas en el gobierno. Se promulgó el Fuero de los Españoles (1945), que recogía derechos con restricciones, y la Ley de Referéndum, que permitía consultas no libres y con fraude. La Ley de Sucesión (1947) estableció que España era un reino, con Franco como jefe del Estado vitalicio y con la potestad de nombrar a su sucesor con título de rey. Esta ley disgustó a D. Juan de Borbón, hijo de Alfonso XIII, quien defendía un modelo democrático con él como rey. D. Juan, tras un acercamiento inicial a Franco, se distanció en 1945 con el Manifiesto de Lausana, pero en 1948 permitió que su hijo, D. Juan Carlos, se educara en España.

Organización Política del Estado Franquista

Serrano Suñer influyó en la configuración del régimen, con los siguientes rasgos:

  • Concentración del Poder: Franco concentró el poder político y militar, asumiendo las jefaturas de gobierno, del ejército, del Estado y del Movimiento Nacional.
  • Poder Legislativo: El poder legislativo recaía en la Jefatura del Estado. En 1942, se crearon unas Cortes como instrumento de colaboración con Franco, con miembros (procuradores) designados, no elegidos, en lo que se llamó “Democracia Orgánica”.
  • Régimen de Partido Único: Los partidarios de la sublevación se unificaron en la Falange Española Tradicionalista y de las JONS (FET de las JONS). Su ideología se basaba en el antiliberalismo, el antisocialismo, el nacionalismo exaltado y el catolicismo conservador, en lo que se llamó el Movimiento Nacional.
  • Presencia de la Falange: La Falange tuvo una fuerte presencia en el aparato del Estado y en la vida social. El Fuero del Trabajo definía a España como un Estado nacionalsindicalista, y símbolos falangistas como el Cara al Sol, el saludo, el yugo y las flechas, y la camisa azul se convirtieron en elementos del Estado.
  • Carencia de Constitución: El régimen se institucionalizó con las Leyes Fundamentales, que regulaban aspectos del Estado y sus órganos.
  • Familias Políticas No Institucionalizadas: Existían familias políticas no institucionalizadas, como los monárquicos, los tecnócratas (muchos vinculados al Opus Dei) y los franquistas puros o integrales (que formaron el “Bunker” en los últimos años). Estas familias ganaban o perdían influencia, pero su fidelidad a Franco era lo único que las unía.

Causas de la Crisis Final del Franquismo (desde 1973)

La clase política no introdujo novedades significativas, a pesar de los cambios en España. La hostilidad hacia el franquismo crecía, incluso la Iglesia, tradicional aliada, se distanciaba, pidiendo la revisión del Concordato de 1953 y perdón por su parcialidad durante la guerra civil. Los franquistas acusaron a la Iglesia de ingrata y habilitaron la cárcel de Zamora para reprimir a los curas opositores.

Surgieron problemas entre los propios franquistas, entre el sector aperturista y los inmovilistas (“bunker”). La crisis del régimen se evidenció con el escándalo de corrupción Matessa (1969). Franco cambió el gobierno, y Carrero Blanco ocupó la vicepresidencia. Franco, enfermo y anciano, abandonó por primera vez su cargo de jefe del gobierno en 1973, nombrando a Carrero Blanco, quien fue asesinado por ETA (20 de diciembre de 1973). Franco, afectado, nombró a Arias Navarro como nuevo jefe de gobierno. El día del atentado se produjo el Proceso 1001, un juicio a dirigentes de CCOO.

Arias Navarro enfrentó una oposición creciente, con bandas terroristas como el FRAP y ETA. La Crisis del Petróleo afectó a la economía española. Arias Navarro anunció cierto aperturismo (“espíritu del 12 de febrero”), pero la oposición del sector inmovilista impidió su implementación.

Relación entre la Evolución Política del Régimen y el Contexto Internacional

España durante la II Guerra Mundial (1939-1945) – Política Exterior

España se declaró neutral al inicio de la II Guerra Mundial, a pesar de su afinidad con Alemania e Italia, debido a su estado ruinoso tras la Guerra Civil. Las presiones de Hitler solo lograron que España pasara de neutral a no beligerante (1940). En 1941, Franco envió la División Azul a luchar contra el comunismo en la URSS. En 1943, ante el retroceso alemán y la caída de Mussolini, Franco volvió a la neutralidad y retiró la División Azul, enfriando sus relaciones con Alemania. Este cambio tardío no convenció a las potencias vencedoras.

El Aislamiento (1945-1953)

Franco se alejó de las potencias fascistas al final de la II Guerra Mundial. Sin embargo, las potencias vencedoras no olvidaron su papel. La ONU rechazó el ingreso de España en 1945 y recomendó la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales, debido a su carácter antidemocrático y su vinculación con el fascismo. La mayoría de los países siguieron la recomendación, excepto Argentina, Portugal, la Santa Sede, Suiza e Irlanda. España quedó aislada internacionalmente. Franco respondió con una campaña de propaganda, mezclando patriotismo y adhesión a su persona, con manifestaciones multitudinarias en la Plaza de Oriente.

Transformaciones Sociales en la España Franquista

España durante la II Guerra Mundial (1939-1945)

Se mantuvo la eliminación del adversario, con unos 300.000 presos políticos en 1940, un número similar de exiliados y numerosas ejecuciones. Se actuó contra los maquis, y la oposición a la dictadura casi desapareció.

El Aislamiento (1945-1953)

Se promulgó el Fuero de los Españoles, con derechos restringidos, y la Ley de Referéndum, con consultas no libres.

El Desarrollismo (1959-1969)

El gobierno impulsó los Planes de Desarrollo, priorizando el sector industrial en el País Vasco, Cataluña y Madrid. Miles de campesinos emigraron a estas zonas, reduciendo la conflictividad social en regiones como Extremadura y Andalucía. Se crearon polos de desarrollo en ciudades como La Coruña, Vigo, Valladolid y Zaragoza, pero estas medidas no fueron efectivas, marginando a regiones como Extremadura.

La oposición se organizó en:

  • Universidad: Estudiantes e intelectuales demandaban derechos y libertades, con represión policial en Madrid y Barcelona. Se produjo la “Caputxinada” (1966), una reunión en el convento de los Capuchinos de Barcelona para la Asamblea Constituyente del Sindicato Democrático de Estudiantes.
  • Trabajadores: Se celebraban huelgas, a pesar de estar prohibidas, en Madrid, Barcelona, País Vasco, Asturias, Sevilla y Pamplona, en sectores como la construcción, la minería y Seat. El sindicato protagonista fue CCOO, creado en 1962 bajo influencia comunista y el liderazgo de Marcelino Camacho.

Grupos de Oposición Política al Franquismo y su Evolución

España durante la II Guerra Mundial (1939-1945)

La oposición casi desapareció, con la depuración de “adictos a la República” y la actuación contra los maquis.

La Consolidación del Franquismo (1953-1959)

La oposición resurgió. Los partidos y sindicatos antifranquistas actuaban fuera de España, pero el PCE mantuvo cierta organización interna. Hubo un cambio de táctica, con una política de reconciliación nacional a partir de 1956. Se produjeron protestas como la Huelga de tranvías en Barcelona y otras en Navarra, Asturias y País Vasco. La universidad de Madrid (1956) pidió elecciones democráticas. Se creó el FELIPE (Frente de Liberación Popular) (1956-1962). Hubo voces críticas en la literatura, como Dámaso Alonso, Blas de Otero y Rafael Sánchez Ferlosio.

El Desarrollismo (1959-1969)

La oposición se organizó en:

  • Universidad: Estudiantes e intelectuales demandaban derechos y libertades, con represión policial.
  • Trabajadores: Se celebraban huelgas, a pesar de estar prohibidas. El sindicato protagonista fue CCOO.
  • Iglesia: Hubo distanciamiento entre sectores de la Iglesia y el régimen. Tras el Concilio Vaticano II, hubo renovación, con acciones como la firma de un documento por sacerdotes vascos pidiendo libertades y las declaraciones del abad de Montserrat condenando al régimen. La conferencia de obispos criticó a los sindicatos franquistas. Vicente Enrique Tarancón, Primado de la Iglesia desde 1960, se identificó con el aperturismo del Concilio Vaticano II.
  • Oposición Política: Se produjo el “Contubernio de Múnich”, con la asistencia de personalidades españolas al IV Congreso del Movimiento Europeo, donde se exigió legitimidad democrática para ingresar en los organismos europeos.
  • Nacionalismos: En Cataluña, intelectuales y el FC Barcelona mantuvieron viva la conciencia nacional. Los partidos clandestinos aumentaron su actividad, formando la Asamblea de Cataluña (1971). En el País Vasco, un grupo de jóvenes disidentes del PNV fundó ETA (1959), que inició la lucha armada (1968).
  • Cultura: El mundo del cine (Berlanga, Bardem, Saura), la literatura (Aldecoa, Martín Gaite, Marsé, Gil de Biedma) y el arte (Oteiza, Chillida, el grupo El Paso) mostraron su oposición. La Ley de Prensa de Fraga (1966) suprimió la censura previa.

Franco respondió con la creación del TOP (Tribunal de Orden Público), que dictó duras condenas, cerró universidades y decretó estados de excepción.

Hacia el Final (1969-1975)

La oposición creció, con bandas terroristas como el FRAP y ETA. La oposición del sector inmovilista impidió el aperturismo de Arias Navarro. Se ejecutó a Salvador Puig Antich (1974), y el obispo de Bilbao fue arrestado. La oposición se organizó con la Junta Democrática (1974, liderada por el PCE) y la Plataforma Nacional de Convergencia Democrática (1975, liderada por el PSOE), con puntos comunes como amnistía, libertad de asociación, elecciones y autonomías. El régimen reprimió las protestas. La Iglesia y algunos militares (UMD) se opusieron. Franco promulgó una ley antiterrorista (1975) y se ejecutó a dos militantes de ETA y uno del FRAP, generando un escándalo internacional.

La Consolidación del Franquismo (1953-1959)

La Guerra Fría entre EEUU y la URSS llevó a EEUU a acercarse a la España de Franco, a pesar de ser una dictadura, debido a su anticomunismo. Los Acuerdos España-EEUU (1953) fueron favorables a EEUU, que entregó material de guerra y ayuda económica a cambio de la instalación de cuatro bases militares. La ayuda estadounidense fue inferior a la de otros países, pero fue bienvenida. Franco obtuvo reconocimiento internacional. El Concordato con la Santa Sede (1953) formalizó las relaciones entre la Iglesia y el régimen. La ONU admitió a España como miembro en 1955. Se produjo la descolonización de Marruecos.

El Desarrollismo (1959-1969) – Política Exterior

España se desprendió de sus colonias: Guinea Ecuatorial (1968) e Ifni (1969).

La Consolidación del Franquismo (1953-1959)

Franco se alejó de las ideas falangistas, aunque la Falange mantuvo su importancia. Los nuevos gobiernos tenían ministros católicos, que consiguieron la aceptación de España en la ONU. La Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958) mantuvo los planteamientos del régimen.

El Desarrollismo (1959-1969)

El gobierno impulsó los Planes de Desarrollo. Se favoreció la emigración a países europeos y se promovió el turismo. La Ley Orgánica del Estado (1967) recogía principios anteriores. Franco nombró a Don Juan Carlos de Borbón como heredero (1969).

Hacia el Final (1969-1975)

La clase política no introdujo novedades, a pesar de los cambios en España. La hostilidad hacia el franquismo creció. Franco nombró a Carrero Blanco como presidente del gobierno (1973), quien fue asesinado por ETA. Franco nombró a Arias Navarro, quien anunció su muerte el 20 de noviembre de 1975. Juan Carlos de Borbón se convirtió en el sucesor de Franco.