El Arte Visigodo

El arte visigodo se extiende desde el siglo VI hasta la llegada de los musulmanes a la Península a principios del siglo VIII, alcanzando su mayor esplendor en el siglo VII. El pueblo visigodo estaba romanizado, ya que había convivido con los ejércitos romanos en las fronteras del Imperio. Por eso, su arte aglutina la propia cultura germánica con un importante sustrato tardorromano.

La Arquitectura Visigoda

Aunque era una civilización eminentemente urbana, la mayoría de las edificaciones visigodas se sitúan en el ámbito rural.

Características:

• La mayoría de los edificios son religiosos y adoptan la planta basilical, aunque también la combinan con la planta centralizada.
• Uso de grandes sillares de piedra tallados.
• Introducción del arco de herradura.
• Utilización de bóvedas de cañón.
• Entre la nave del templo y el transepto se sitúa un cancel que recibe el nombre de iconostasio.
• Relacionado también con los oficios religiosos, en la zona de la cabecera se construyeron habitaciones para los clérigos.
• Los edificios tienen pocos vanos.
• Los templos se decoran con relieves esculpidos a bisel con una técnica tosca. Encontramos relieves en los capiteles, basas, líneas de imposta, cimacios, frisos, altares, etc. Los temas son geométricos, vegetales y animales, además de representar escenas bíblicas.

Ejemplos representativos de la arquitectura religiosa visigoda son San Juan de Baños y San Pedro de la Nave.

La Orfebrería Visigoda

Los visigodos destacaron especialmente en el trabajo de los metales nobles. De gran interés es la corona votiva de Recesvinto. Las coronas votivas eran objetos suntuarios que los reyes visigodos ofrendaban a los templos cuando eran coronados y, generalmente, permanecían colgadas en el ábside. Esta consta de un cilindro de oro con engastes de piedras preciosas, del que cuelga pedrería y letras.

El Arte Carolingio

Carlomagno, rey de los francos, fue coronado emperador en el año 800. El arte carolingio se desarrolló en los siglos IX y X, y supuso un intento de recuperar las formas y los símbolos romanos de la época de Constantino bajo el signo del cristianismo, con el fin de lograr la unificación espiritual de Europa.

La Arquitectura Carolingia

Carlomagno potenció la construcción de dos tipos de edificios como expresión de su poder político-religioso: los palacios imperiales con capillas privadas y los monasterios. De esta época se conserva un plano en la abadía de Saint Gall, en Suiza. Este plano será la base de los futuros monasterios medievales. En él se especifican, a partir de módulos, todas las dependencias de un monasterio ideal, entre las que destacan la iglesia de planta basilical y el claustro, alrededor de los cuales se distribuye el resto de espacios.

El Arte Asturiano

En el año 711, los musulmanes, procedentes de África, invadieron la península ibérica. Esto significó la caída del reino visigodo, quedando casi la totalidad de la Península en manos de los musulmanes. Con el tiempo, instauraron una nueva dinastía y fundaron el reino de Asturias, con capital en Oviedo.

Los reyes de la dinastía asturiana se consideraban sucesores de los monarcas visigodos, por lo que intentaron imitar a sus míticos antepasados tanto en los aspectos políticos como en las formas artísticas. El arte asturiano se desarrolló entre los siglos VIII y X, y tomó como base el legado visigodo, sobre todo la arquitectura, aunque también aportó soluciones constructivas que anticipan el arte románico.

La Arquitectura Asturiana

La arquitectura asturiana fue esencialmente religiosa y palaciega, y siguió los modelos constructivos de la arquitectura visigoda. Sus características son:

• Uso de la planta basilical de tres naves con un cerramiento. A los pies del templo solía haber una tribuna elevada, para que los reyes asistieran a los oficios religiosos.
• Los muros son de mampostería, pero en los elementos constructivos utilizan sillería.
• Uso de arcos de medio punto, casi siempre peraltados.
• Tanto en los fustes de las columnas como en los relieves predomina la decoración de soga o cuerda.
• Uso de bóvedas de cañón sobre arcos fajones, reforzadas en el exterior con contrafuertes.
• Uso de ventanas y muros de celosías en piedra, caladas con dibujos geométricos y arquerías.
• El aspecto exterior del edificio adquiere importancia estética y se destaca visualmente gracias a las celosías y los contrafuertes, que proporcionan un ritmo de luces y sombras antes inexistente.

Durante el reinado de Ramiro I se edificó el conjunto del Naranco, del cual solo quedan en pie Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo.

El Arte Mozárabe

El arte mozárabe se desarrolló en la Península durante los siglos X y XI. Se denomina mozárabes a los cristianos que vivían en tierras musulmanas manteniendo su religión y su cultura. Durante el siglo X, algunos mozárabes abandonaron el territorio musulmán, emigrando hacia el norte e instalándose en tierras conquistadas por los cristianos en dirección al río Duero. Por esto, también se le denomina arte de repoblación.

La Arquitectura Mozárabe

El arte mozárabe estuvo al servicio de la religión. Por ello, las construcciones realizadas serán principalmente iglesias y pequeños templos.

La arquitectura mozárabe tiene tres influencias:

• Del arte visigodo y paleocristiano, en las plantas, los relieves y en la reutilización de elementos visigodos.
• Del arte asturiano, en las cabeceras, única y tripartita, y en la tendencia a la verticalidad.
• Del arte califal, en el uso de arco de herradura califal, bóvedas gallonadas y la concepción del espacio reproduciendo el esquema interior de las mezquitas.

Las Miniaturas Mozárabes

Una de las actividades que se realizaban en los monasterios medievales era la copia a mano de libros, los llamados manuscritos. Estos libros se decoraban con miniaturas, es decir, imágenes que servían para hacer más comprensible el contenido.

Hasta el siglo X, la Iglesia había recomendado no presentar figuras humanas para evitar la idolatría. Pero a partir del siglo X, por el miedo ante la llegada del milenio, se extiende la lectura del Apocalipsis de San Juan. En los monasterios cristianos del norte de la Península hubo una gran actividad copiando e ilustrando los Comentarios al Apocalipsis. A partir de ahí, las copias realizadas de esta obra recibirán el nombre de beatos.

Las miniaturas se caracterizan por la riqueza de la policromía, de vivos colores, por el predominio del dibujo rellenado con colores planos y por una fuerte expresividad. Las figuras carecen de perspectiva y se disponen en bandas horizontales.