Renacimiento y humanismo
El Renacimiento es un movimiento cultural que se desarrolló en toda Europa en el siglo XVI y supuso un gran cambio con respecto a la mentalidad medieval, al sustituir la visión teocéntrica anterior por una nueva concepción en la que el ser humano se convertía en el centro de la reflexión intelectual y artística. El Renacimiento surge en Florencia de la mano de Francesco Petrarca en el ámbito de la literatura.
El humanismo
- Antropocentrismo: el ser humano pasa a considerarse centro del estudio de las ciencias y las artes.
- Racionalismo: la razón es el instrumento básico para encontrar la verdad.
- Pasión por la cultura grecolatina: los autores y las obras de la cultura clásica se consideran modelos dignos de imitación.
La nueva estética renacentista
Desde el Quattrocento florentino del siglo XV se comienzan a difundir los principios del movimiento renacentista, que afectarán tanto a las artes plásticas como a la literatura. Las características de la nueva estética se pueden resumir así:
- Equilibrio y armonía: El ideal renacentista se basa en el concepto de término medio de Aristóteles, que afirmaba que en él se hallaba la virtud.
- Idealización de la naturaleza: el mundo natural se ve como un espacio idílico (locus amoenus) en el que se comparten las pasiones y emociones humanas.
- Revisión de mitos, leyendas e historia de la literatura grecolatina: la mitología se convierte en una fuente inagotable para las artes y la literatura.
- Neoplatonismo: se vuelve a las ideas platónicas, en especial en el campo amoroso, con la concepción del amor espiritual hacia la dama como camino que conduce a la perfección.
La poesía renacentista
Etapas de la poesía renacentista
En la lírica española del siglo XVI se pueden distinguir dos etapas:
- Primera mitad de siglo: La llegada del petrarquismo: Se difunde el modelo de la poesía petrarquista, que convivirá en este periodo con la poesía cancioneril anterior.
- Segunda mitad de siglo: La poesía de tema religioso: La influencia de la Contrarreforma en el reinado de Felipe II favoreció el auge de la lírica religiosa, que cultivaron grandes poetas como San Juan de la Cruz o Fray Luis de León. En esta etapa se siguió practicando la poesía amorosa de tipo petrarquista, aunque cada vez más alejada de la armonía y el equilibrio anteriores. Esta estética más recargada y ornamental recibe el nombre de manierismo.
La poesía petrarquista española
Juan Boscán (1492-1542) y Garcilaso de la Vega (1501-1536) fueron los primeros autores españoles en adaptar con éxito las nuevas formas y temas de la poesía petrarquista.
La nueva métrica
Las nuevas innovaciones métricas de la poesía petrarquista son, fundamentalmente estas:
- Se imponen los endecasílabos y heptasílabos.
- Se adoptan nuevas estrofas:
- La lira: 7a 11B 7a 7b 11B
- La octava real: 11A 11B 11A 11B 11A 11B 11C 11C
- Aparecen nuevos poemas estróficos, como la canción compuesta por estancias o, sobre todo, el soneto. 11A 11B 11B 11A X2 11C 11D 11E X2
Los temas y el estilo
El gran tema de la poesía petrarquista es el amor, tratado siempre con un enfoque neoplatónico:
- La belleza de la amada se ajusta a una serie de tópicos (Donna angelicata)
- La amada se considera un ser perfecto e inalcanzable que, aunque puede ser desdeñosa, no manifiesta la crueldad propia de la dama del amor cortés medieval.
- El caballero se aproxima a través del amor a la verdad y a la belleza universales.
- El sentimiento amoroso es omnipotente y se expresa en consonancia con una naturaleza idealizada (locus amoenus) y por medio de referencias mitológicas. (Nunca se ve afectado por la sentimentalidad del poeta).
- El tema amoroso está con frecuencia vinculado a tópicos como el paso del tiempo (tempus fugit) y la necesidad de aprovechar el presente (carpe diem).
En cuanto al lenguaje, esta poesía es un buen ejemplo del estilo renacentista:
- Los poetas emplean un lenguaje claro y diáfano que evita los continuos juegos de palabras propios de la poesía cancioneril anterior. Esta poesía se basa en el conceptismo.
- Los poetas emplean el dinamismo y el dramatismo con la búsqueda de armonía y equilibrio. Se esquivan la expresión afectada y los extremismos, tanto en la manifestación de la pasión como en la del dolor.
Garcilaso de la Vega
La obra poética de Garcilaso de la Vega, publicada por primera vez en 1543, es el máximo exponente de la lírica renacentista española. En su producción literaria encontramos algunas coplas, cuarenta sonetos, cinco canciones, dos elegías, una epístola y tres églogas.
- Elegías: Llanto o lamentación por la muerte de un ser querido.
- Epístolas: Una carta desde el punto de vista literario.
- Égloga: Subgénero de la lírica pastoril y bucólica protagonizada por un pastor culto que se lamenta por la muerte de su amada.
Los sonetos y las canciones
- Sonetos y canciones anteriores a 1533: (año de la muerte de su amada, Isabel Freire), en los que el poeta expresa la imposibilidad de su amor.
- Sonetos y canciones posteriores a 1533: En los que el yo poético manifiesta su dolor ante la pérdida de la mujer amada. En sus sonetos Garcilaso trata, además, tópicos clásicos como el carpe diem e incluye escenas mitológicas en las que expresa, a través de personajes e historias de la literatura grecolatina, sentimientos universales. En cuanto al estilo, los sonetos y canciones de Garcilaso se fueron despojando del efectismo y del tono declamatorio de la poesía anterior, optando por una expresión mucho más íntima y natural.
Las églogas
- Égloga I:
- Contenido: Dos pastores, Salicio y Nemoroso -ambos concebidos como un trasunto literario del propio autor- cantan sus cuitas de amor. Salicio se queja del desdén de su amada Galatea y Nemoroso se duele de la muerte de Elisa.
- Égloga II:
- Contenido: Cuatro ninfas acuden a un prado junto al Tajo para tejer 4 historias de amor: tres relatos mitológicos (Orfeo y Eurídice, Apolo y Dafne, Venus y Adonis) y un relato situado en el tiempo del autor (los amores de Elisa y Nemoroso).
Fray Luis de León y la ascética
- La preferencia por las estrofas breves, en especial la lira.
- La presencia de temas filosóficos o morales: predomina el tópico aurea mediocritas (dorada medianía).
- Un estilo refinado y elegante.
- La musicalidad de las composiciones.
Santa Teresa de Jesús, la mística y la ascética
Aunque la gran aportación de Santa Teresa a las letras españolas se encuentra en el terreno de la prosa, también cultivó con fortuna la poesía, que dedicó a sus compañeras carmelitas. En sus poemas Santa Teresa describe, bien la experiencia mística de la unión con Dios, bien en el ambiente ascético que debía presidir las carmelitas descalzas. Sus poemas destacan por la sencillez y la espontaneidad del lenguaje, lo que confiere a su lírica un estilo ágil y apasionado. La autora emplea las formas de la poesía cancioneril y los tópicos de la poesía amorosa para transmitir, con imágenes tomadas de la vida cotidiana, el amor ideal y las enseñanzas morales.
San Juan de la Cruz y la mística
La poesía mística es una poesía de interpretación ambigua, pues emplea los tópicos propios de la lírica amorosa para expresar la unión del alma y Dios. Esa experiencia unitiva es inefable, es decir, imposible de explicar con palabras, de modo que los autores recurren a paradojas y símbolos. Los poetas místicos se valen de muchas de las imágenes y los recursos de la lírica amorosa, lo que permite leer sus poemas en una doble clave, religiosa y profana.
- Noche oscura del alma
- Cántico espiritual
- Llama de amor viva
La prosa renacentista
Los principales subgéneros de la prosa renacentista se pueden agrupar en dos grandes categorías: la prosa de ideas o didáctica y la prosa de ficción.
El diálogo
El subgénero del diálogo, de origen griego e inspirado en el método filosófico de Platón (la mayéutica: conocimiento a partir del diálogo), es una de las formas más características de la prosa humanística del siglo XVI. Juan de Valdés: Diálogo de la lengua.
El tratado doctrinal
El tratado doctrinal sirvió para expresar las ansias reformistas de muchos intelectuales que, dentro del propio clero, se preocuparon por manifestar sus inquietudes a partir de su propia vivencia religiosa. Fray Luis de Granada / Fray Luis de León / Santa Teresa de Jesús.
La crónica histórica
La crónica histórica conoció un momento de auge en el Renacimiento gracias a los descubrimientos y conquistas realizados desde 1492. De este modo surgió un subgénero muy característico: la crónica de Indias.
- Historia verdadera de la conquista de la Nueva España de Bernal Díaz del Castillo.
- Naufragios de Álvar Núñez Cabeza de Vaca.
- Brevísima relación de la destrucción de las Indias de Fray Bartolomé de las Casas.
La prosa de ficción
- Narraciones de tendencia idealizadora: novela pastoril, bizantina y morisca. Son relatos protagonizados por personajes estereotipados en marcos irreales.
- Narraciones de tendencia realista: novela picaresca y relatos de origen popular. En ellas se traza un retrato crítico de la sociedad contemporánea.
La novela pastoril
Rasgos fundamentales y obras destacadas
- Se idealiza tanto a los personajes como el entorno en que transcurre la acción (locus amoenus).
- El argumento entreteje diversas historias amorosas dentro de un mismo marco narrativo.
- El lenguaje es culto y refinado. Es habitual que se combinen pasajes en prosa y en verso.
- Diana de Jorge de Montemayor / La Galatea de Miguel de Cervantes / La Arcadia de Lope de Vega.
La novela bizantina
Las novelas bizantinas son relatos en los que se cuentan las desventuras de dos amantes que, separados por una serie de obstáculos, luchan por reencontrarse.
- Historia de los amores de Clareo y Florisea de Alonso Núñez de Reinoso.
- Los trabajos de Persiles y Sigismunda de Cervantes.
La novela morisca
La novela morisca plantea una historia de amor que simboliza la posibilidad de convivencia entre las culturas musulmana y cristiana.
Rasgos fundamentales
- Se idealiza la figura del personaje moro, que encarna los valores más nobles.
- La acción suele transcurrir en un entorno cargado de exotismo y fastuosidad.
- El asunto argumental es una historia de amor entre dos personajes de culturas diferentes.
- El Abencerraje y la hermosa Jarifa.
El Lazarillo de Tormes
Argumento
La novela se plantea como una carta autobiográfica que Lázaro escribe a petición de un interlocutor al que conoceremos como Vuestra Merced. En su relato, intenta explicarle lo que él llama “el caso”. Y para ello, se remonta a su infancia, contando cómo ha sido su vida desde su nacimiento hasta la actualidad. Toda la obra se construye, por tanto, con el objetivo de justificar ese caso, que alude al hecho de que Lázaro consiente que su mujer le sea infiel con su superior.
Estructura
- Tratados I a III:
- Son los más conocidos y logrados de la novela.
- Se corresponden con la infancia y adolescencia de Lázaro.
- Se suceden tres amos: el ciego, el clérigo y el hidalgo.
- El carácter de Lázaro se construye a partir de sus experiencias.
- Tratados IV a VII:
- Son más breves y se corresponden con la juventud y edad adulta del protagonista.
- Se suceden cinco nuevos amos: el fraile vendedor de bulas, el maestro de pintar panderos, el capellán, el alguacil y, por último, el arcipreste.
En los tres primeros tratados:
- Aprendizaje con el ciego: Con su primer amo, Lázaro pierde la ingenuidad y aprende numerosos trucos que le serán de utilidad en el futuro.
- Supervivencia con el clérigo: Este es el más avaro de los tres primeros amos y también el que más pone a prueba el ingenio del pícaro.
- Convivencia con el hidalgo: Lázaro, como afirma él mismo, pasa de ser un personaje mantenido por su amo a sentir, movido por el afecto, la obligación de mantenerlo.
Estilo
La novela presenta un equilibrio entre el registro coloquial y el elevado, de modo que su autor combina pasajes próximos al gusto popular con reflexiones de carácter social y moral que expresa a través de la mirada y el lenguaje de su protagonista. En la obra es esencial el uso continuo de la ironía. El humor y el sarcasmo alcanzan su punto culminante en las ambiguas palabras del arcipreste sobre la mujer de Lázaro.
- El narrador utiliza la primera persona.
- Se mantiene el decoro (el diálogo de los personajes va acorde con su posición social) tanto en los personajes altos como en los bajos.
Interpretación y sentido
Lázaro es un antihéroe, un personaje de bajo origen que habrá de luchar por su supervivencia con métodos poco ortodoxos en un mundo regido por la mentira y la violencia. Con cada uno de sus amos irá perdiendo su ingenuidad y su único afán será escalar socialmente y alcanzar una vida lo más acomodada posible, hecho del que se enorgullece.