La Guerra Civil Española (1936-1939): Causas, Desarrollo y Consecuencias

La Guerra Civil Española (1936-1939)

1. La Sublevación Militar

La Guerra Civil (1936-1939) marcó el fin del enfrentamiento entre las dos Españas que se formaron durante la Segunda República. Las causas principales fueron las diferencias sociales y económicas de la población, los conflictos en la industria, la unidad española y los nacionalismos, y las medidas anticlericales tomadas durante la Segunda República. Sin embargo, el detonante definitivo fueron los asesinatos de un teniente de la Guardia de Asalto por fuerzas de derechas y de Calvo Sotelo por fuerzas de izquierdas. Este hecho precipitó el estallido de un complot contra la República que se venía preparando desde hacía meses. Sus principales dirigentes (Mola, Sanjurjo, Goded) avisaron a Franco, quien organizó un ejército en Marruecos.

El alzamiento se inició en Marruecos el 17 de julio de 1936, un día después en la Península. Los sublevados contaron con el apoyo de Sevilla, Valladolid, Zaragoza, y la Capitanía General de Oviedo, que estaba dirigida por el General Aranda.

2. Desarrollo de la Guerra

La guerra dividió España en dos zonas: la nacional y la republicana.

  • Zona Republicana: Contaba con la mayor parte de la población y los principales centros industriales, además del control de la marina y la aviación.
  • Zona Nacional: Disponía de los recursos agrarios y el 80% de los cuadros de mando del ejército.

El jefe de gobierno republicano, Giral, formó las milicias populares (población civil armada).

La guerra duró tres años, en los que las tropas nacionales llevaron casi siempre la iniciativa.

2.1. Guerra de Columnas (Primera Fase)

Tras cruzar el estrecho en barcazas proporcionadas por Mussolini, los sublevados convirtieron Sevilla en centro de operaciones. Su objetivo era la toma de Madrid. Las tropas de Mola, procedentes del norte, fueron frenadas en el paso de Guadarrama, formándose el primer frente. Desde el sur, apoyado por Yagüe, Franco se dirigió a Madrid pasando por Extremadura. Al conocer la detención de Mola, Franco se dirigió a Toledo y liberó el Alcázar, aumentando su prestigio.

A finales de 1936 los sublevados habían cercado Madrid, que estaba defendida por el General republicano Miaja. Tuvieron lugar entonces la Batalla del Jarama (sin claro vencedor) y la de Guadalajara (sublevados derrotados).

2.2. Ofensiva del Norte y Batalla del Ebro

Franco cambió su estrategia, la ofensiva comenzó desde el este, ocupando Vizcaya, Cantabria y Asturias, haciéndose con el control de importantes zonas industriales y mineras.

En 1938 los sublevados planeaban romper la unidad territorial de la zona republicana. Dejaron aislada a Cataluña, y los republicanos reaccionaron en el valle del Ebro. Con esta batalla Franco perdió tiempo y causó muchas bajas en ambos bandos, pero finalmente ganaron los nacionales. Estos se dirigieron a Barcelona con 500 aviones, y tomaron Tarragona, la Ciudad Condal y Girona. Azaña se refugió en Francia.

2.3. Fin de la Guerra

La República se dividió en dos: aquellos que eran partidarios de negociar con Franco (el General Casado) y los que se negaban a aceptar sus condiciones (Negrín).

Las tropas sublevadas entraron en Madrid, y el 1 de abril de 1939 Franco firmó el último parte de guerra.

El desconcierto afectó a los republicanos y Casares Quiroga dimitió. Su sucesor, Giral, no mantuvo el control.

En 1939, finalmente Negrín aceptó la derrota y se exilió.

2.4. Consolidación del Régimen Franquista

La zona nacional tenía que renovar las instituciones de las zonas que iba tomando. El ejército organizó todo, y la Iglesia manifestó su apoyo a través de una Carta Pastoral. La Falange Española Tradicionalista y de las JONS fue el único partido permitido. El capitalismo y el orden daban más confianza a los inversores españoles y extranjeros.

En Burgos se había formado la Junta de Defensa, que nombró a Franco Generalísimo de los Ejércitos y Jefe de Gobierno del Estado Español. Poco a poco se fue configurando un régimen centralista, autoritario y personalista.

3. Dimensión Internacional

Por iniciativa francesa e inglesa, los países europeos suscribieron un pacto de no intervención en España, pero este pacto fue violado. El bando nacional recibió ayuda militar de Hitler (la Legión Condor), de Mussolini (barcazas, tropas de infantería, material de guerra) y de Portugal (puertos). Por su parte, el bando republicano contó con el apoyo de Francia y de la URSS, y el diplomático de Inglaterra. También recibieron la ayuda de las Brigadas Internacionales (voluntarios de varios países), entre 35.000 y 100.000.

4. Consecuencias de la Guerra

Las consecuencias de la Guerra Civil fueron muy negativas.

  • Demográficas: Muchas muertes, no solo en el campo de batalla, también en la cárcel. Caída de la natalidad y auge del exilio de intelectuales, científicos, escritores y artistas (empobrecimiento cultural). Además de fusilamientos, ejecuciones…
  • Económicas: Campos arrasados y las infraestructuras destruidas.

5. Castilla y León en la Guerra Civil

Castilla y León abrazó el levantamiento desde el primer momento, por el control del general Mola, la población conservadora y la importancia de la Falange.

Se formaron columnas militares, soldados de reemplazo y voluntarios civiles partieron hacia Madrid, donde fueron frenadas. En el transcurso de la guerra muchas ciudades castellanas fueron bombardeadas por la aviación republicana.

Los republicanos fueron detenidos y sometidos a sentencias de muerte o penas de cárcel.

En el plano político, Castilla y León tuvo un papel muy destacado. Valladolid sirvió de puente para llegar a Asturias. En Burgos se estableció la Junta de Defensa Nacional, en Salamanca se instaló el Cuartel General de Franco. A nivel económico, Castilla y León era el principal núcleo de producción agraria.