El Teatro Neoclásico y el Auge del Romanticismo en la Literatura Española del Siglo XVIII y XIX

Panorama Teatral del Siglo XVIII

En el siglo XVIII, el teatro español se caracterizó por la continuación de las formas establecidas por Lope de Vega y Calderón de la Barca. Durante la primera mitad del siglo, las representaciones teatrales siguieron siendo similares a las del período anterior, destacando las comedias de magia, heroico militar, de santos y de figurón.

Sin embargo, hacia la mitad del siglo, los intelectuales ilustrados comenzaron a oponerse a este teatro predominante, abogando por obras más racionales y con contenido ideológico. Consideraban que el teatro podía ser un instrumento educativo y reformador de la sociedad, criticando costumbres y ofreciendo ejemplos morales. Este cambio de perspectiva se refleja en la obra de Leandro Fernández de Moratín, “La comedia nueva”, donde critica el teatro de la época.

Los ilustrados promovieron obras teatrales con éxito relativo, enfocadas en respetar las tres unidades dramáticas y con un propósito didáctico claro, separando tragedia y comedia. Destacan Vicente García de la Huerta con “Raquel”, una tragedia que muestra las consecuencias de la ambición, y Leandro Fernández de Moratín con comedias neoclásicas. Sin embargo, el teatro popular, como los sainetes de Ramón de la Cruz, como “El petimetre” y “Manolo”, continuaron siendo predominantes.

Leandro Fernández de Moratín

Leandro Fernández de Moratín (1760-1828) es reconocido como el principal exponente del teatro ilustrado español. En sus obras, combina la sátira de los vicios sociales con un final donde prevalecen la verdad y la virtud. Su teatro busca enseñar, reflejando la moralidad de la Ilustración en la elección de temas y la estructura de las obras. Sus principales temas son los matrimonios por interés, la educación de las jóvenes y la crítica al teatro de la época. Ejemplos notables son “El barón”, “El sí de las niñas”, “La mojigata” y “La comedia nueva o El café”

El sí de las niñas

“El sí de las niñas”, la obra más famosa de Moratín, refleja los ideales ilustrados con su enseñanza moral, crítica social y respeto a las unidades dramáticas. Combina inteligencia y sentimiento, siguiendo el decoro poético y la verosimilitud, lo que la convierte en un modelo teatral. La trama gira en torno a un matrimonio concertado entre una joven, doña Francisca, y un hombre mayor, don Diego. Cuando don Diego descubre el amor entre doña Francisca y su sobrino don Carlos, renuncia al matrimonio, y la verdad triunfa al final.

El Romanticismo en el Siglo XIX

Características y Evolución

El Romanticismo es un movimiento que se opone al racionalismo del siglo XVIII, exaltando la libertad y valorando la imaginación y las emociones. Refleja la angustia existencial causada por la brecha entre ideal y realidad. Sus temas principales son:

  • Los sentimientos exaltados
  • El amor apasionado
  • La belleza ideal
  • El destino trágico
  • La incomprensión
  • La soledad y la muerte

Estos temas se desarrollan a menudo en ambientes sombríos y fantasmales. También aborda la rebeldía y la crítica política. Este movimiento se originó en el prerromanticismo del Sturm und Drang alemán, destacando autores como Goethe.

En el siglo XIX, surge el Romanticismo con dos corrientes ideológicas en Europa: la conservadora, que valora el pasado, y la progresista, que busca democracia y libertad. En el posromanticismo, la literatura se enfoca en la realidad social, aunque algunos escritores aún exploran sentimientos personales.

El Romanticismo se introdujo en España en las primeras décadas del siglo XIX, aunque hubo muestras prerrománticas a finales del siglo XVIII. Entre 1833 y 1840, el movimiento alcanzó su apogeo con autores como José de Espronceda, Mariano José de Larra, José Zorrilla y el duque de Rivas. A partir de 1840, el realismo comenzó a ganar terreno, aunque dos grandes poetas románticos, Rosalía de Castro y Gustavo Adolfo Bécquer, publicaron sus obras en este período.

La Poesía Romántica

Características y Variedades Poéticas

La poesía del Romanticismo se caracteriza por expresar temas románticos, sentimientos apasionados y sensibilidad individual. Se destaca por su estilo espontáneo, donde conviven composiciones declamatorias con otras más simples. La poesía se divide en dos tipos:

  • Narrativa: Trata temas filosóficos o históricos.
  • Lírica: Muestra los sentimientos del poeta.

La narrativa abarca desde poemas extensos hasta romances y leyendas. La lírica refleja la subjetividad del poeta, con temas patrióticos y sociales, aunque los posrománticos como Bécquer y Rosalía de Castro se centran más en lo íntimo y melancólico, usando imágenes de la naturaleza.

José de Espronceda

José de Espronceda (1808-1842) es conocido principalmente por sus poemas, donde une una imaginación poderosa a un fervor amoroso, ideológico y vital. Sus temas recurrentes incluyen la rebeldía, la libertad, el desengaño, el patriotismo y la protesta política desde una perspectiva liberal. Su estilo es sonoro e intenso, con rimas agudas, contrastes y exclamaciones, mostrando un dominio de recursos literarios como la adjetivación emotiva y la polimetría. Sus obras más destacadas son “Canción del pirata” y sus poemas narrativos.

Tipos de Poesía de Espronceda

“El estudiante de Salamanca” relata las acciones injustas de Félix de Montemar, quien abandona a su amada Elvira, causando su muerte. Después de matar al hermano de Elvira, Félix asiste a su propio entierro y luego se casa con el esqueleto de Elvira en una mansión de los muertos, todo en un ambiente tétrico y romántico. “El diablo mundo” cuenta la historia de un anciano convertido en joven que enfrenta un mundo desconocido, con un canto dedicado a Teresa Mancha, el gran amor de Espronceda. En su poesía lírica, Espronceda escribió sobre el amor y el desengaño, destacando personajes como el pirata, el cosaco, el mendigo y el reo de muerte, que representan la libertad y la rebeldía romántica frente a las convenciones sociales y los valores establecidos.

Gustavo Adolfo Bécquer

Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870) es el máximo exponente de la poesía lírica posromántica en España. Además de poesía, escribió prosa, incluyendo las “Leyendas”, epístolas literarias, “Cartas desde mi celda” y artículos de prensa. Sus 79 composiciones poéticas se encuentran en su obra “Rimas”, donde trata diversos temas:

  • Rimas I a XI: Reflexiones sobre la creación poética y sus motivos, como el amor y el misterio.
  • Rimas XII a XXIX: Amor ilusionado y apasionado, belleza femenina.
  • Rimas XXX a LI: Amor desengañado, melancolía e ira.
  • Rimas LII y siguientes: Otros temas románticos como angustia, desesperanza, dolor, olvido, soledad y muerte.

Estilo de Bécquer

Su estilo se caracteriza por una aparente sencillez formal, sin mucha ornamentación, pero con un ritmo musical marcado. Emplea principalmente versos heptasílabos y endecasílabos, con muchas metáforas y comparaciones basadas en elementos naturales.

Rosalía de Castro

Rosalía de Castro es una destacada figura de la lírica posromántica junto con Bécquer. Su poesía se centra en la tierra gallega, reflexionando sobre ella y preocupándose por la situación social. Sus obras principales son:

  • Cantares galegos: Poemario en gallego que expresa la añoranza por su tierra y critica la situación de sus paisanos, con tono de protesta y rebeldía.
  • Follas novas: También en gallego, refleja el paisaje gallego con versos que expresan dolor y desengaño vital.
  • En las orillas del Sar: En castellano, con tono melancólico, trata el paso del tiempo, las ilusiones perdidas y la deseada muerte.

Estilo de Rosalía de Castro

Su estilo se caracteriza por un lenguaje emocionado e intimista, evitando la grandilocuencia. Utiliza elementos de la naturaleza para dotar a sus versos de autenticidad. Su innovación en el uso de versos y estrofas poco usuales la convierte en pionera de la poesía moderna.