Arte Romano, Paleocristiano y Bizantino: Arquitectura, Escultura y Mosaicos

Arte Romano, Paleocristiano y Bizantino

Arte Romano

Arquitectura Romana

Roma, fundada en el siglo VII a. C., se originó como un conjunto de poblados, siendo el Palatino el más antiguo. En el mismo siglo, los griegos establecieron colonias en el sur de Italia, mientras que los etruscos se asentaron en el norte. Ambas civilizaciones influyeron en el desarrollo de la cultura romana. En esta época, la forma de gobierno era la monarquía, con un carácter legendario. La tradición menciona siete reyes míticos: cuatro latinos y tres etruscos.

El levantamiento de los latinos contra la dominación etrusca dio origen a la República.

Características de la Arquitectura Romana:

Arte Paleocristiano

En esta época, los cristianos, que eran perseguidos, se reunían clandestinamente en dos tipos de lugares:

  • Pequeños espacios adaptados al culto dentro de casas particulares.
  • Las catacumbas, cementerios subterráneos (no exclusivos del cristianismo) formados por galerías con nichos en las paredes.

Tuvieron que pasar tres siglos hasta que el emperador Constantino promulgó el Edicto de Milán, legalizando el cristianismo en el Imperio.

Arquitectura Paleocristiana

Los cristianos adoptaron la basílica como modelo para sus templos.

La Basílica:

Era un edificio utilizado para la administración de justicia y la realización de negocios. Tenía una planta rectangular y se dividía en naves longitudinales separadas por columnas. Al fondo, un ábside albergaba el tribunal. En la entrada, un nártex servía como vestíbulo.

Los cristianos mantuvieron la planta rectangular, la división longitudinal en naves y la separación por columnas. El acceso al templo se realizaba a través de un atrio, al fondo del cual se situaba el nártex. Al final de la nave central se encontraba el presbiterio, en forma de ábside, donde se ubicaba el obispo. Justo delante del ábside se situaba el transepto.

El Mausoleo:

Eran edificios destinados a albergar la sepultura de personajes importantes. Utilizaban la planta centralizada de cruz griega para situar en el centro el objeto de veneración. El espacio central, cubierto con una cúpula, estaba destinado a acoger el sarcófago.

Escultura Paleocristiana

Pintura de las Catacumbas:

La mayor parte de la decoración se encuentra en los cubículos. Se trata de pinturas murales donde predomina el mensaje sobre la forma. Las imágenes son planas y los temas se relacionan con la salvación de las almas.

Arte Bizantino

Tras la división del Imperio Romano por Teodosio en Imperio Romano de Occidente e Imperio Romano de Oriente, Constantinopla asumió la capitalidad de la parte oriental. Esta ciudad había sido fundada por el emperador Constantino en su propio honor sobre la antigua ciudad griega de Bizancio (hoy Estambul). Después de la caída del Imperio Romano de Occidente, el Imperio Romano de Oriente se convirtió en el transmisor del legado cultural y político de la antigua Roma. Se vio influenciado por elementos orientales y griegos, dando lugar a un arte y una cultura propios.

Arquitectura Bizantina

La arquitectura bizantina se caracteriza por el uso de bóvedas y la importancia que se da al interior de los edificios sobre el exterior.

Características:
  • Empleo sistemático de cúpulas.
  • Creación del capitel con cimacio.
  • Utilización de capiteles clásicos con modificaciones.
Iglesia de San Vital:

El núcleo central del edificio está constituido por ocho grandes pilares sobre los que se asienta una cúpula. A partir de los pilares se desarrollan siete exedras. Entre el muro exterior y las exedras corre un deambulatorio. En el sobrio exterior encontramos contrafuertes en los ángulos del octógono.

Basílica de Santa Sofía:

Finalizada en el año 537, se encuentra en Constantinopla. La planta es rectangular con un ábside en uno de los extremos. Tres naves longitudinales recorren el rectángulo. En el centro del rectángulo se levantan cuatro pilares que delimitan un espacio cuadrado. Sobre estos enormes pilares se alza la gran cúpula central de 31 metros de diámetro, que descansa sobre pechinas y tiene un tambor con ventanas que ilumina toda la base. Por debajo hay dos semicúpulas que absorben parte del empuje.

Mosaico Bizantino

Utilizaron la técnica del mosaico para embellecer el interior de sus edificios, recubriendo casi la totalidad de los muros de los templos. Los mosaicos bizantinos no alcanzaron el naturalismo de los romanos, pero destacaron por su técnica y por sus características lumínicas y cromáticas. En muchos mosaicos se emplearon piedras preciosas o se cubrieron las teselas con pan de oro.

Mosaicos de San Vital:

Se trata de dos paneles…