Conceptos Fundamentales de la Lengua Española

CONCEPTOS PREVIOS

Lenguaje

En sentido amplio, se entiende como una forma de comunicación. De esta manera, se habla del lenguaje humano, del lenguaje de las abejas, del lenguaje del cine, etc. Pero, en sentido estricto, se refiere al lenguaje verbal y a la capacidad de todo ser humano de poder comunicarse mediante sonidos articulados, es decir, mediante palabras habladas o escritas.

Lengua

Es un código que consta de una serie de sonidos, palabras y reglas gramaticales, y que permite la comunicación entre los hablantes de una comunidad. La lengua es ese conjunto de signos orales usados por un grupo humano: español, chino, francés, alemán, sueco, ruso.

Habla

Es el uso individual de la lengua que cada hablante realiza en una situación comunicativa concreta. El habla es la utilización que cada individuo hace de la lengua, de tal manera que si no hubiera hablantes no habría lengua, y al revés. La lengua es siempre la misma, el hablante cambia con frecuencia por el uso.

Norma

Es el conjunto de las reglas para usar correctamente la lengua. Se sitúa entre la lengua y el habla. El hablante no puede utilizar la lengua a su capricho, hay unas reglas que le obligan a un uso determinado y le coartan la libertad.

RELACIÓN LENGUA, NORMA Y HABLA

El habla es el gran campo de las expresiones orales y escritas de todo tipo de cada individuo; la norma reduce el espacio y elimina todo aquello que es individual o expresiones momentáneas; la lengua es un campo aún más cerrado en el que sólo encontramos aquello que es indispensable para la comunicación. Observamos, pues, que la lengua es abstracta –se conoce con el pensamiento– y social, ya que estaría formada por todos los sonidos, palabras y reglas que utiliza el conjunto de los hablantes. El habla, por el contrario, es concreta e individual: las personas pueden oírla o leerla y la emplean de modo particular en cada acto comunicativo.

NIVELES EN EL ESTUDIO DE LA LENGUA

Nivel Fonético

El texto es una unidad comunicativa total, y de su estudio se encarga la lingüística del texto. El texto emplea unidades muy diversas, lo que obliga a su estudio en distintos niveles: fónico, morfológico, sintáctico, semántico y textual. Observa el cuadro en el que se resumen los niveles superiores al nivel fonológico.

ALGUNOS CONCEPTOS

La materia sonora de que se vale la lengua para construir unidades comunicativas está constituida por:

Fonema

Es la unidad lingüística más pequeña, desprovista de significado y formada por rasgos distintivos o fonológicos. Ejemplo: g-a-t-a y p-a-t-a están formadas por cuatro unidades indivisibles que no tienen ningún significado (g y p marcan la diferencia).

Sonidos

Los sonidos que emitimos y escuchamos. No pronunciamos igual la b de bueno que la b de abuelo, pero no es una diferencia significativa.

Sílaba

Sonido o conjunto de sonidos emitidos en cada uno de los cortes naturales que hacemos al hablar. En la cadena hablada no pronunciamos los sonidos aislados, sino agrupados en sílabas: va-mos-a-es-tu-di-ar (vamos a estudiar).

Acento

Es la mayor fuerza o intensidad con que se pronuncia una sílaba de la palabra. Tiene valor significativo, es decir, permite diferenciar palabras: amara-amará.

Entonación

Representa la curva melódica que realizamos al hablar, y permite establecer el significado de la oración según la modalidad o intención del hablante.

FONÉTICA Y FONOLOGÍA

Los hablantes pronuncian los sonidos de manera diferente. Al cambiar en una secuencia b por p cambia el significado de la palabra: cava/capa, baso/paso. Estos sonidos ideales son los fonemas. En este nivel, tenemos dos disciplinas diferentes: fonética y fonología.

Fonética

Se encarga del estudio de los sonidos, de los órganos y mecanismos de la producción sonora, y de la articulación en la cadena hablada, y de sus propiedades físicas (cantidad, intensidad, tono, timbre, entonación…). Los sonidos se representan entre corchetes: [a], [p]…

Fonología

Se ocupa del estudio de los fonemas, que permitirán diferenciar signos o palabras. Los fonemas se representan entre barras inclinadas: /a/, /p/…

SISTEMA FONOLÓGICO: VOCALES Y CONSONANTES

En el español se distinguen 24 fonemas. Los fonemas se definen por una serie de rasgos distintivos o fonológicos que permiten diferenciarlos de los demás. Una primera diferenciación, permite distinguir los fonemas vocálicos y consonánticos.

Fonemas Vocálicos

Son aquellos que por sí solos pueden constituir una sílaba o palabra: ah, u, ve-í-a… en su emisión por los órganos articulatorios, el aire no encuentra ningún obstáculo. Los fonemas consonánticos necesitan, en cambio, una vocal para conseguir su pronunciación: me-sa, ni, que… En su emisión el aire sí encuentra obstáculos en los órganos de articulación.

Características de los Fonemas Vocálicos

Los fonemas vocálicos son cinco: /a/, /e/, /i/, /o/ y /u/. Presentan dos rasgos. Utilizando estos se puede definir cada fonema, por ejemplo, /a/ fonema vocálico abierta y de localización media. El conjunto de estos rasgos se suele representar en un esquema triangular. Todas las vocales son sonoras (las cuerdas vocales vibran al pronunciarlas).

  • El grado de abertura de la boca al pronunciarlos, que permite distinguir: /a/ abierta; /e/, /o/, abertura media; e /i/, /u/, cerradas.
  • La localización, según se articulen en la parte posterior de la cavidad bucal: /o/, /u/; en la parte media o central: /a/; o en la zona anterior: /i/, /e/.

FONEMAS CONSONÁNTICOS

Los fonemas consonánticos son diecinueve. Se clasifican según los rasgos siguientes:

Sonoridad

Cuando pasa el aire las cuerdas vocales pueden vibrar o no. Si vibran se producen los fonemas sonoros, si no, se producen los sordos. Este es el rasgo distintivo de:

  • /p/: fonema consonántico, oclusivo, bilabial, sordo.
  • /b/: fonema consonántico, oclusivo, bilabial, sonoro.

Modo de Articulación

Se refiere a cómo se coloca el obstáculo a la salida del aire, los fonemas pueden ser:

  • Oclusivos: el canal está cerrado impidiendo el paso del aire, se abre de golpe. /p/, /t/, /k/, /b/, /d/, /g/
  • Fricativos: el aire sale sin obstrucción, haciendo fricción: /f/, /Θ/, /s/
  • Africados: el canal está cerrado y después se permite la salida del aire con una pequeña obstrucción /t∫/
  • Laterales: el aire sale por los laterales de la boca /l/.
  • Vibrantes: el aire sale intermitentemente /r/ simple y múltiple.
  • Nasales: cuando el aire sale por la nariz, /m/, /n/, y el fonema ñ.

Punto de Articulación

Es el lugar de la boca donde los órganos articulatorios oponen un obstáculo a la salida del aire. En función de los órganos que intervienen, los fonemas se llaman:

  • Bilabiales: los dos labios intervienen y se juntan: /b/, /p/, /m/
  • Labiodentales: cuando los dientes superiores se apoyan en el labio inferior: /f/
  • Interdentales: la lengua se coloca entre los dientes: /Θ/ (c, z)
  • Dentales: la lengua se apoya en los dientes: /t/, /d/
  • Alveolares: la lengua se apoya en los alvéolos superiores: /s/, /n/, /l/, /r/ (vibrante simple y múltiple)
  • Palatales: la lengua se apoya en el paladar /t∫/ (ch), /j/ (y), el fonema de “ll” y fonema de “ñ”. Ten en cuenta que en muchas zonas de España los fonemas /j/ (y) y el fonema de ll no se diferencian. Esto es lo que conocemos como “yeísmo”: pronunciación de “ll” como “y”. No se considera, actualmente, una incorrección.
  • Velares: la lengua se apoya en el velo del paladar /k/, /g/, /x/. El fonema /x/ se corresponde con la “j” y la “g” de “geranio”.

EL NIVEL MORFOLÓGICO: LA PALABRA

La palabra es la unidad mayor de la morfología y la menor de la sintaxis. Las palabras son unidades de la lengua muy diferentes entre sí, tanto por su forma como por su significado. Estas particularidades hacen que la palabra sea una unidad difícil de definir en la lingüística; sin embargo, cualquier hablante la reconoce y aísla de manera intuitiva y, desde esta perspectiva, se acepta la siguiente definición: la palabra es una unidad de la lengua que tiene significado y que puede aislarse mediante pausas en la lengua hablada y por espacios en blanco en la escritura.

FORMA, FUNCIÓN Y SIGNIFICACIÓN

La palabra puede estudiarse desde tres puntos de vista: la forma, la función y la significación.

Significado

El significado, que explican los diccionarios. La semántica estudia el significado de las palabras; la lexicografía, las técnicas de componer diccionarios. Las clases de palabras que tienen significado léxico son los nombres (expresan conceptos), los verbos (acciones o estados), los adjetivos (cualidades) o adverbios; otras, como los artículos, las preposiciones y las conjunciones (a, que), solo tienen significado gramatical para expresar diferentes tipos de relaciones.

Forma

Variaciones que adquiere al emplearse en los textos. La morfología estudia las palabras aisladas: clases o categorías (nombre, adjetivos, verbos…), la estructura y desinencias que pueden adoptar al emplearlas en el discurso (género, número, persona, tiempo…) y los modos de combinar sus elementos para formar nuevas palabras (composición, derivación, parasíntesis). Unas varían de forma: vale (valían, valdrían…), palabra (palabras, palabrita, palabrería…), tiempo, destiempo (tiempos, temporal, temporero…). Otras permanecen invariables al emplearlas en el discurso: a, que

Función

Función que realiza en la oración. La sintaxis estudia las palabras consideradas como parte de una oración, es decir, las combinaciones y funciones que realizan en el grupo sintáctico y en la oración.

MORFEMAS Y PALABRAS

El análisis morfológico de las palabras se hace atendiendo a las unidades mínimas con significado (léxico o gramatical). Estudiamos los distintos tipos de morfemas.

Morfemas Léxicos y Gramaticales

El morfema léxico conserva el significado propio de la palabra; se llama lexema (zapat-ería). Los morfemas gramaticales informan de la flexión (niñ-a-s), modifican el significado general de la palabra (sufijo –ería) o establecen relaciones entre grupos u oraciones (pan y vino).

Morfemas Libres y Trabados

Los morfemas libres forman una palabra: alma, sol, cal, tres, que… Los morfemas trabados se unen para formar una palabra: breve-dad, agud-eza, sol-e-ado, cal-iza.

RADICAL, AFIJOS Y MORFEMAS FLEXIVOS

Observa la forma de las palabras de las series horizontal y vertical:

CasaRepintarCarromatoautomovilistaAvión
ReescribirParabrisasCumpleañeroListoTontorrones
Portaobjetosinterminable

Raíz, Radical o Base Léxica

Es la parte de la palabra que conserva el significado léxico y que se repite en las sucesivas variaciones que sufre la palabra: am-a, am-ador-a, des-am-amos

Afijos

Se añaden al radical para formar nuevas palabras. Se distinguen:

  • Prefijos, si van delante del radical: desamar, imponer, deshilar;
  • Sufijos, si van detrás: amador, sabroso, discutible, canturrear
  • Interfijos (o infijos), cuando van en medio de la palabra, normalmente entre el radical y el sufijo: cafe-l-ito, polv-ar-eda.

Morfemas Flexivos o Desinencias

Expresan las categorías gramaticales de género, número, persona, tiempo, modo, etcétera.

TIPOS DE PALABRAS SEGÚN SU ESTRUCTURA

Las palabras son las unidades lingüísticas que más alteraciones sufren en el idioma: se crean voces nuevas, modifican sus significados (ampliándolo o reduciéndolo) y algunas desaparecen: dejan de emplearse por los hablantes. El idioma dispone de varios modos para aumentar el caudal léxico, el número de palabras: la incorporación de voces ajenas (préstamos) y la formación de palabras nuevas con elementos propios. La formación de palabras consiste en la ampliación de voces del idioma mediante mecanismos morfológicos con elementos ya presentes en el lenguaje. Se emplean tres procedimientos: derivación, composición y parasíntesis. Observa:

Palabras Simples

Son aquellas que pueden tener desinencias, pero no afijos: casa: consta de un radical (cas-) y de una desinencia de género (-a).

Palabras Derivadas

La derivación consiste en añadir uno o más afijos (prefijo, interfijo, sufijo) al radical de una palabra simple; además, pueden llevar desinencias: tontorrón: se compone de radical (tont-), sufijo (-orrón-) y desinencia de número (-es).

Palabras Compuestas

La composición es la unión de dos o más voces para formar una nueva. Presentan varias formas:

  • Los componentes se unen con guion y cada uno conserva el acento: teórico-práctico, político-social.
  • Los componentes sin guion y el primero pierde el acento: malvivir (mal+vivir), biempensante (bien+pensante).
  • Verbos con pronombres átonos enclíticos: tómalo (toma+lo), dime (di+me).
  • Compuestos con formantes griegos o latinos: xenofobia (xeno ‘extranjero’ + fobia ‘aversión’), acuífero (acui ‘agua’ + fero ‘llevar’).

Palabras Parasintéticas

Se forman de dos modos:

  • Uniendo los fenómenos de la derivación y la composición: norte + america + ana, norteamericana.
  • Combinando un prefijo y un sufijo con el radical: a-viv-ar, a-clar-ar, en-roj-ecer; pero en estos casos es necesario que no exista en la lengua la estructura de prefijo + raíz (*a+viv), ni de raíz + sufijo (*viv-ar).

Siglas y Acronimia

El abreviación o reducción del cuerpo fónico de una palabra es usual en la lengua. Así, se emplean cine, foto, zoo, y bus junto a cinematógrafo, fotografía, zoológico y autobús. Dos casos especiales de abreviación son las siglas y la acronimia.

Las siglas son palabras formadas con las letras iniciales de una expresión y se escriben en mayúsculas y sin punto: ONG (organización no gubernamental), DNI (documento nacional de identidad).

La acronimia consiste en la formación de palabras de dos modos: mediante siglas, es decir, mediante las iniciales de un nombre, título…: AVE (alta velocidad española), uci (unidad de cuidados intensivos), o bien mediante la fusión de dos o más palabras: ofimática (oficina informática), Aresban (Banco Árabe Español).

Recuerda que las abreviaciones de palabra terminan en un punto o una barra y deben leerse “completas”. Cuando leemos “C/” decimos “calle”. Lo mismo que “Sra.”, “señora”. Detrás del punto hay un espacio siempre. Las siglas y los acrónimos forman palabras nuevas. Se escriben sin puntos y se leen tal como están escritas, o deletreando: “ONG”, “oenegé”; “IES”, “íes”. No llevan s de plural: “las ONG”. Lo mismo sucede con los acrónimos.

Préstamos

Son voces tomadas de otros idiomas. Ha ocurrido en todas las épocas, pues cuando en un país se introduce un objeto o una actividad propios de otro se toman también las palabras que los designan (whisky, golf, judo). En la actualidad, por exigencia del lenguaje científico y técnico, son muy frecuentes los anglicismos y los cultismos, préstamos de una lengua clásica (latín o griego), que se adoptan con ligeras modificaciones: discoteca, enzima, micrófono. La RAE es la encargada de mantener la ortografía de los préstamos.

La lengua oral y la prensa juegan un papel decisivo en esta evolución idiomática. La RAE recomienda evitar los préstamos en la medida de lo posible. Para ello se debe utilizar la traducción de la palabra de origen, en el caso de que sea posible. Se debe preferir “mercadotecnia”, en vez de “merchandising”. Pero a veces no podemos “traducirlos”. En esos casos, debemos escribirlos de manera destacada, bien cursiva, bien comillas. Esta manera destacada nos indica su carácter de préstamo: Por ejemplo: lifting

Las palabras de origen latino y las extranjeras usadas en nuestra lengua, se acentúan según las normas generales del español. Latinismos como alma máter, accésit, ídem, currículum, réquiem, plácet; o extranjerismos como búnker, chalé, bidé, suflé, gánster.