Protozoos Parásitos en Medicina: Tipos, Ciclo de Vida, Síntomas y Tratamiento

Protozoos Parásitos en Medicina

Este documento proporciona información detallada sobre diversos protozoos parásitos que causan enfermedades en humanos. Se describe su ciclo de vida, epidemiología, patogenia, síntomas, diagnóstico, tratamiento y prevención.

Entamoeba histolytica

Entamoeba histolytica es un parásito protozoario unicelular que infecta al ser humano y causa una enfermedad llamada amebiasis. Es el agente etiológico de diversas formas de infección, que van desde una infección asintomática hasta la disentería amebiana grave o abscesos hepáticos.

Epidemiología

  • La amebiasis es común en áreas tropicales y subtropicales con malas condiciones sanitarias, especialmente en países en desarrollo.
  • La transmisión ocurre principalmente a través del agua y alimentos contaminados, así como por contacto persona a persona en condiciones de hacinamiento.

Forma del Quiste

Los quistes son la forma infectante y de resistencia del parásito. Tienen una estructura adaptada para sobrevivir en el ambiente externo, como el agua, el suelo o los alimentos contaminados.

  • Forma: Ovalada o esférica.
  • Tamaño: Varía entre 10 y 20 micrómetros de diámetro.
  • Núcleos: Los quistes inmaduros tienen uno o dos núcleos, mientras que los quistes maduros presentan cuatro núcleos, lo que los hace más resistentes e infectivos.
  • Cuerpo cromatoide: En los quistes inmaduros, se pueden observar cuerpos cromatoides, que son estructuras alargadas formadas por ARN.
  • Pared quística: Poseen una pared gruesa que los protege de condiciones adversas, como el ácido gástrico del estómago y cambios en el ambiente externo.

Función: Los quistes son responsables de la transmisión de la enfermedad. Se excretan en las heces y, si son ingeridos, pueden iniciar una nueva infección en otro huésped.

Forma del Trofozoíto

El trofozoíto es la forma activa, móvil y patogénica del parásito. Esta forma es la que invade los tejidos y causa los síntomas de la amebiasis.

  • Forma: Irregular y ameboide (puede cambiar de forma), ya que posee pseudópodos, que son extensiones del citoplasma que utiliza para moverse.
  • Tamaño: Son más grandes que los quistes, midiendo entre 15 y 30 micrómetros, aunque pueden llegar a ser más grandes en condiciones favorables.
  • Núcleo: Los trofozoítos tienen un solo núcleo, que posee una característica forma de “rueda de carro” o “ojo de buey”, con un cariosoma central prominente y cromatina fina en la periferia.
  • Citoplasma: El citoplasma se puede dividir en dos partes: una externa o ectoplasma, que es clara y sin gránulos, y una interna o endoplasma, que es granulada y puede contener inclusiones como eritrocitos fagocitados, lo cual es una señal de invasión tisular.

Función: Los trofozoítos se adhieren y destruyen las células del epitelio intestinal, causando ulceraciones y síntomas como diarrea y disentería. También pueden migrar a otros órganos a través del torrente sanguíneo, como el hígado, donde forman abscesos.

Ciclo de Vida

  • Fase quística: La Entamoeba histolytica se encuentra en su forma infecciosa en quistes. Los quistes son resistentes a condiciones ambientales adversas y pueden sobrevivir fuera del cuerpo, en alimentos o agua contaminados.
  • Fase trofozoítica: Una vez ingeridos los quistes, estos se desenquistan en el intestino delgado y liberan trofozoítos, que son la forma activa y patógena del parásito. Los trofozoítos pueden invadir la mucosa intestinal y, en casos graves, diseminarse a otros órganos como el hígado, pulmones o cerebro, causando abscesos.

Mecanismo de Infección

  • Ingestión de quistes: La infección se adquiere principalmente por consumir agua o alimentos contaminados con quistes.
  • Invasión tisular: Los trofozoítos pueden adherirse y destruir las células epiteliales del intestino, produciendo ulceraciones que dan lugar a la disentería amebiana (diarrea con moco y sangre). En casos graves, los trofozoítos pueden invadir la circulación y llegar a otros órganos, como el hígado, produciendo abscesos hepáticos.

Síntomas

La mayoría de las infecciones son asintomáticas, pero cuando lo son presentan:

  • Intestinales: Diarrea, disentería (diarrea con sangre), dolor abdominal, tenesmo (sensación constante de querer defecar).
  • Extraintestinales: Cuando el parásito migra a otros órganos, puede provocar abscesos hepáticos (dolor en el costado derecho, fiebre, ictericia) y, en casos raros, afectaciones pulmonares o cerebrales.

Diagnóstico

  • Amebiasis intestinal: Examen directo y de concentración, Serológicas: HAI, IFl, IEF, DD I ELISA, Rectoscopia, colonoscopia y radiografía.
  • Amebiasis hepática: Ecografía y punción hepática, Serologías: HAC, III, IEF, DD y ELISA, Imagenología: radiografía, ecografía, etc.

Tratamiento

  • Metronidazol o tinidazol: Son los fármacos de primera línea para tratar la amebiasis invasiva.
  • Paromomicina (si presenta alergia) o iodoquinol: Se usan como tratamiento para eliminar los quistes en portadores asintomáticos o después del tratamiento de una amebiasis invasiva para evitar la reinfección.

Resumen de forma

  • Quiste: Esférico u ovalado, resistente, con hasta 4 núcleos, adaptado para la supervivencia y transmisión.
  • Trofozoíto: Ameboide, móvil, con un núcleo, adaptado para la invasión y la multiplicación en el huésped.

Prevención

  • Mejoras en el saneamiento: Proveer agua potable segura y mejorar las condiciones de higiene es fundamental para prevenir la propagación.
  • Higiene personal: Lavarse bien las manos, evitar consumir alimentos o bebidas contaminados, y tener un adecuado manejo de aguas residuales son medidas clave.

Naegleria fowleri

Naegleria fowleri, comúnmente conocida como la “ameba comecerebros”, es un parásito protozoario unicelular perteneciente al grupo de las amebas de vida libre. Este microorganismo es capaz de causar una infección rara, pero casi siempre fatal, llamada meningoencefalitis amebiana primaria (MAP), que afecta el cerebro humano.

Características Generales

  • Clasificación: Naegleria fowleri pertenece al filo Percolozoa, dentro del género Naegleria. Es una ameba de vida libre que puede alternar entre vivir en ambientes acuáticos y sobrevivir en organismos como los humanos.
  • Hábitat natural: Se encuentra principalmente en aguas dulces cálidas, como lagos, ríos, aguas termales, y ocasionalmente en piscinas mal tratadas con cloro. También puede hallarse en el suelo húmedo.

Epidemiología

  • Casos: La infección por Naegleria fowleri es extremadamente rara. Desde su identificación en la década de 1960, se han reportado solo unos pocos cientos de casos en todo el mundo. La mayoría de las infecciones han ocurrido en los Estados Unidos, Australia, y algunas regiones de Asia.
  • Estacionalidad: Las infecciones son más comunes en los meses de verano y en climas cálidos, ya que la ameba prefiere temperaturas cálidas entre 25 °C y 40 °C.
  • Grupos de riesgo: Aunque cualquier persona que entre en contacto con aguas contaminadas puede estar en riesgo, la mayoría de las víctimas son niños y adolescentes que nadan o practican deportes acuáticos en cuerpos de agua dulce.

Ciclo de Vida

Naegleria fowleri tiene tres formas principales en su ciclo de vida, adaptadas a diferentes condiciones ambientales:

  • Trofozoíto: Es la fase activa e infecciosa. Es móvil gracias a la formación de pseudópodos, lo que le permite moverse en busca de alimento y penetrar en los tejidos. Se encuentra en este estado cuando las condiciones ambientales son favorables, como en aguas templadas.

    • Forma: Ameboide, con pseudópodos que le permiten desplazarse y fagocitar bacterias, su principal fuente de alimento en el ambiente.
    • Tamaño: Oscila entre 10 y 35 micrómetros.
    • Función: En el ambiente natural, los trofozoítos se alimentan de bacterias. Sin embargo, en un huésped humano, pueden invadir el cerebro y causar una inflamación severa.
  • Flagelado: Cuando las condiciones ambientales son adversas, como un cambio en la concentración de nutrientes, los trofozoítos pueden transformarse en una forma flagelada, que es más móvil, pero no infecciosa. Esta fase le permite buscar ambientes más favorables.

    • Forma: Ovalada, con dos flagelos que le permiten nadar.
    • Función: Es una forma transitoria, y no se asocia directamente con la infección.
  • Quiste: En condiciones extremas, como bajas temperaturas o desecación, Naegleria fowleri puede entrar en una fase quística, donde se encapsula en una estructura de resistencia.

    • Forma: Esférica, con una pared gruesa.
    • Función: Es una forma resistente que le permite sobrevivir en condiciones desfavorables, aunque no es infecciosa en esta fase.

Mecanismo de Infección

La infección ocurre cuando el trofozoíto de Naegleria fowleri ingresa al cuerpo humano a través de la nariz, generalmente cuando una persona se sumerge o realiza actividades en aguas contaminadas.

  • Ruta de infección: La ameba viaja a través de los nervios olfatorios, que conectan la cavidad nasal con el cerebro, logrando alcanzar el sistema nervioso central.
  • Invasión cerebral: En el cerebro, la ameba se multiplica rápidamente y destruye el tejido cerebral, lo que lleva a una inflamación severa (meningitis y encefalitis).

Síntomas

La meningoencefalitis amebiana primaria (MAP) causada por Naegleria fowleri es una enfermedad rápida y devastadora que afecta principalmente el cerebro. Los síntomas iniciales aparecen entre 1 y 9 días después de la exposición, y suelen ser similares a los de la meningitis bacteriana, lo que puede retrasar el diagnóstico.

  • Fase inicial (1-3 días):

    • Dolor de cabeza severo.
    • Fiebre alta.
    • Náuseas y vómitos.
    • Rigidez en el cuello.
    • Cambios en el gusto o el olfato.
  • Fase avanzada (4-9 días):

    • Confusión y alteraciones mentales.
    • Alucinaciones.
    • Convulsiones.
    • Coma.
    • Muerte, que generalmente ocurre entre los 7 y 14 días tras la aparición de los síntomas si no se trata a tiempo.

Diagnóstico

El diagnóstico es extremadamente difícil, ya que la enfermedad es muy rara y los síntomas imitan otras afecciones neurológicas. Los métodos diagnósticos incluyen:

  • Análisis de líquido cefalorraquídeo (LCR): El parásito puede observarse en una muestra de LCR obtenida mediante punción lumbar. Se utiliza la observación microscópica directa, además de técnicas de tinción.
  • PCR: La amplificación por PCR puede detectar el ADN de Naegleria fowleri en muestras de LCR.
  • Inmunofluorescencia: Pruebas con anticuerpos específicos pueden ayudar a identificar la ameba.

Tratamiento

  • Anfotericina B: Este es el fármaco principal utilizado para tratar infecciones por Naegleria fowleri. Se administra por vía intravenosa y a veces directamente en el cerebro a través de una punción lumbar.
  • Miltefosina: Este agente antiparasitario ha sido utilizado en algunos casos recientes con éxito.
  • Hipotermia inducida: Se ha utilizado para reducir la inflamación cerebral en algunos pacientes.

Prevención

Debido a la alta mortalidad de la infección, la prevención es esencial, especialmente cuando se realizan actividades en aguas dulces cálidas:

  • Evitar actividades en aguas cálidas (como lagos y ríos) durante los meses de verano, cuando las temperaturas son elevadas.
  • Uso de pinzas nasales al nadar en cuerpos de agua potencialmente contaminados para evitar la entrada de agua por la nariz.
  • Mantener piscinas bien cloradas y desinfectar adecuadamente otras fuentes de agua recreativa.

Acanthamoeba

Acanthamoeba es un género de amebas de vida libre que se encuentran comúnmente en el ambiente y que, en raras ocasiones, pueden causar infecciones graves en humanos, tanto a nivel ocular, neurológico, como sistémico. Las infecciones por Acanthamoeba son difíciles de tratar y pueden poner en riesgo la vida o causar secuelas permanentes si no se diagnostican y tratan adecuadamente.

Características Generales

  • Clasificación: Acanthamoeba pertenece al reino Protista, específicamente dentro del grupo de amebas de vida libre. Existen varias especies en este género, pero las más comunes que causan enfermedades humanas incluyen Acanthamoeba castellanii, Acanthamoeba polyphaga, y Acanthamoeba culbertsoni.
  • Hábitat natural: Estas amebas son muy comunes y se pueden encontrar en ambientes diversos, como suelo, agua dulce, agua salobre, aire, polvo, e incluso en sistemas de ventilación o agua potable.

Epidemiología

  • Las infecciones por Acanthamoeba son raras, pero pueden ocurrir en todo el mundo debido a la ubicuidad de la ameba en el ambiente.
  • Los usuarios de lentes de contacto son el grupo de mayor riesgo para desarrollar queratitis.
  • Las infecciones sistémicas y cerebrales son más comunes en personas inmunodeprimidas, aunque en algunos casos también pueden afectar a personas con sistemas inmunitarios normales.

Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Acanthamoeba incluye dos fases principales: el trofozoíto (forma activa) y el quiste (forma latente y resistente).

Trofozoíto

  • Es la fase activa y móvil del parásito.
  • Forma: Presenta una forma irregular, con extensiones llamadas acantópodos (proyecciones espinosas) que usa para moverse.
  • Tamaño: Oscila entre 15 y 45 micrómetros.
  • Función: En el ambiente, los trofozoítos se alimentan de bacterias, hongos y otros microorganismos. En el cuerpo humano, pueden invadir tejidos y causar daño celular. Son capaces de cambiar de forma en respuesta a las condiciones del entorno.

Quiste

  • Es la fase resistente, en la que la ameba forma una cápsula protectora que le permite sobrevivir en condiciones adversas.
  • Forma: Esférico o poligonal, con una doble pared gruesa, lo que lo hace extremadamente resistente a condiciones ambientales extremas (desecación, temperaturas bajas, desinfectantes, etc.).
  • Tamaño: Varía entre 10 y 25 micrómetros.
  • Función: Los quistes pueden sobrevivir en el ambiente durante largos períodos y se activan nuevamente cuando las condiciones mejoran, convirtiéndose en trofozoítos.

Mecanismo de Infección

  • Acanthamoeba puede causar infecciones en humanos cuando los quistes o trofozoítos entran en contacto con el cuerpo a través de diversas rutas, siendo la más común la exposición ocular y las heridas cutáneas, aunque también puede entrar al sistema nervioso central (SNC).

Rutas de infección más comunes

  • Contacto con los ojos: Especialmente en personas que usan lentes de contacto y no siguen los cuidados adecuados, como desinfección o uso de soluciones contaminadas. Esto puede causar una infección severa llamada queratitis por Acanthamoeba.
  • Inhalación o contacto con la piel lesionada: En individuos inmunocomprometidos, los trofozoítos pueden entrar por heridas o ser inhalados, lo que puede llevar a la infección sistémica o cerebral.

Enfermedades Asociadas

Queratitis por Acanthamoeba

  • Esta es una infección del ojo, específicamente de la córnea, y es la manifestación más común en personas con lentes de contacto. Puede llevar a una pérdida severa de la visión si no se trata.
  • Síntomas:
    • Dolor ocular intenso.
    • Enrojecimiento del ojo.
    • Sensación de cuerpo extraño.
    • Visión borrosa.
    • Fotofobia (sensibilidad a la luz).
    • Lagrimeo excesivo.
  • Causas:
    • Usar lentes de contacto mientras se nada o se ducha.
    • Mala higiene en el manejo de los lentes de contacto (uso de soluciones contaminadas o no aprobadas).

Encefalitis amebiana granulomatosa (EAG)

  • Esta es una infección cerebral extremadamente rara, que ocurre principalmente en personas inmunocomprometidas, como pacientes con SIDA, cáncer o enfermedades autoinmunes.
  • Síntomas:
    • Dolor de cabeza severo.
    • Rigidez en el cuello.
    • Fiebre.
    • Náuseas y vómitos.
    • Convulsiones.
    • Alteraciones mentales y neurológicas.
    • Coma.
  • Progresión: La EAG es una enfermedad de curso lento en comparación con la meningoencefalitis amebiana primaria causada por Naegleria fowleri, pero sigue siendo letal en la mayoría de los casos.

Infecciones cutáneas y diseminadas

  • En personas inmunodeprimidas, Acanthamoeba puede infectar la piel, provocando úlceras cutáneas crónicas o abscesos. En casos más graves, el parásito puede diseminarse a través del torrente sanguíneo y afectar otros órganos como los pulmones y el corazón.

Diagnóstico

  • Microscopía: Observación directa de quistes o trofozoítos en muestras de tejido o líquido.
  • Cultivo: Se puede cultivar Acanthamoeba en medios especiales.
  • Inmunofluorescencia: Se utilizan anticuerpos específicos para identificar la presencia del parásito.
  • PCR: La amplificación del ADN por PCR es una técnica sensible que puede detectar pequeñas cantidades de material genético del parásito.

Tratamiento

Queratitis por Acanthamoeba

  • Antimicrobianos tópicos: Se usan combinaciones de agentes antimicrobianos como la clorhexidina, poliexametilen biguanida (PHMB) y propamidina.
  • Tratamiento prolongado: El tratamiento puede durar varias semanas o incluso meses debido a la capacidad del parásito para persistir en su forma quística.
  • En casos graves, puede ser necesario un trasplante de córnea.

Encefalitis amebiana granulomatosa

  • El tratamiento incluye fármacos como miltefosina, anfotericina B, sulfadiazina y otros agentes antimicrobianos, aunque los resultados suelen ser pobres en casos de infección cerebral.

Infecciones cutáneas y diseminadas

  • Se utilizan antimicrobianos sistémicos en combinación con otros tratamientos dependiendo del estado inmunológico del paciente y la extensión de la infección.

Prevención

  • Higiene con los lentes de contacto: Para prevenir la queratitis por Acanthamoeba, es fundamental seguir buenas prácticas de higiene al manejar los lentes de contacto:
    • Evitar el uso de lentes al nadar o ducharse.
    • Desinfectar los lentes con soluciones adecuadas y evitar usar soluciones salinas caseras.
    • No reutilizar soluciones de desinfección.
  • Precauciones en pacientes inmunodeprimidos: Se debe tener cuidado con el uso de fuentes de agua no tratadas y mantener una adecuada higiene de heridas en personas vulnerables.

Giardia lamblia

Giardia lamblia, también conocida como Giardia intestinalis o Giardia duodenalis, es un protozoo flagelado que parasita el intestino delgado humano y de otros mamíferos, causando una enfermedad conocida como giardiasis. Es una de las principales causas de diarrea infecciosa en el mundo, especialmente en áreas con saneamiento deficiente y en viajeros.

Características Generales

  • Clasificación: Pertenece al filo Metamonada, dentro del género Giardia. Es un parásito unicelular y eucariota.
  • Distribución: Giardia lamblia se encuentra en todo el mundo, especialmente en regiones con malas condiciones higiénicas, y afecta tanto a humanos como a animales.
  • Transmisión: La principal vía de transmisión es la fecal-oral, a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados con los quistes del parásito.

Epidemiología

  • Prevalencia mundial: Es uno de los protozoos intestinales más comunes en humanos. La prevalencia varía según la región, pero es más alta en países en desarrollo, donde las condiciones de saneamiento y el acceso a agua potable segura son deficientes.
  • Grupos de riesgo:
    • Personas que viven en áreas con agua potable no tratada adecuadamente.
    • Niños en guarderías o instituciones.
    • Viajeros a regiones endémicas.
    • Campistas y excursionistas que beben agua de fuentes naturales sin tratar.
    • Personas inmunocomprometidas.

Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Giardia lamblia tiene dos fases principales: la fase de quiste (la forma infectante) y la fase de trofozoíto (la forma activa).

Quiste

  • Es la forma infectante y resistente del parásito, diseñada para sobrevivir fuera del huésped.
  • Forma: Ovalada, con una pared gruesa.
  • Tamaño: Entre 8 y 14 micrómetros de largo.
  • Estructura interna: Contiene 4 núcleos en los quistes maduros (los quistes inmaduros tienen dos núcleos).
  • Resistencia: Los quistes son altamente resistentes a las condiciones ambientales, pueden sobrevivir durante meses en ambientes húmedos y son relativamente resistentes al cloro en las concentraciones utilizadas para el tratamiento de agua potable.
  • Función: Los quistes son excretados en las heces de personas infectadas. Cuando son ingeridos por un nuevo huésped, atraviesan el sistema digestivo hasta llegar al intestino delgado, donde se excistan y liberan los trofozoítos.

Trofozoíto

  • Es la forma activa y replicativa, responsable de la colonización e invasión del intestino.
  • Forma: Tiene forma de pera o de cometa, con una estructura bilobulada que le da una apariencia distintiva de “cara sonriente” bajo el microscopio, debido a sus dos núcleos prominentes que parecen ojos.
  • Tamaño: Varía entre 10 y 20 micrómetros de largo.
  • Estructura: Posee dos núcleos, 8 flagelos (que le permiten moverse), un disco suctorio ventral que utiliza para adherirse a las células epiteliales del intestino delgado, y organelos especializados para su metabolismo anaerobio.
  • Función: En el intestino delgado, los trofozoítos se adhieren a la mucosa intestinal y se multiplican por fisión binaria. No invaden los tejidos profundos, pero interfieren con la absorción de nutrientes, causando diarrea y otros síntomas. Algunos trofozoítos se transforman en quistes, que son excretados en las heces.

Transmisión

La giardiasis se transmite principalmente por la vía fecal-oral, y las principales fuentes de contagio incluyen:

  • Agua contaminada: Es la causa más común de giardiasis. Los quistes de Giardia pueden estar presentes en aguas superficiales como lagos, ríos y manantiales. Los quistes son resistentes al cloro y pueden sobrevivir en agua potable si no está adecuadamente tratada.
  • Alimentos contaminados: Los alimentos que han sido manipulados por personas infectadas o que han estado en contacto con agua contaminada también pueden ser fuente de infección.
  • Contacto persona a persona: Especialmente en guarderías, asilos, instituciones y otros lugares donde el saneamiento puede ser deficiente.
  • Zoonosis: Aunque la transmisión de animales a humanos no es la principal fuente de infección, algunas especies de animales, especialmente perros y castores, pueden portar Giardia y contribuir a la contaminación ambiental.

Patogenia

La infección por Giardia lamblia afecta principalmente el intestino delgado, especialmente el duodeno y el yeyuno. Aunque no invade los tejidos, su presencia y multiplicación interfieren con las funciones normales del intestino, lo que provoca una serie de síntomas gastrointestinales.

  • Adherencia: Los trofozoítos se adhieren al epitelio intestinal mediante su disco suctorio, causando daño físico y desencadenando una respuesta inflamatoria.
  • Interferencia en la absorción: El parásito altera la superficie de las vellosidades intestinales, lo que reduce la absorción de nutrientes, especialmente grasas, carbohidratos y vitaminas.
  • Producción de toxinas: Aunque no está del todo claro si Giardia produce toxinas, algunos estudios sugieren que ciertos factores liberados por el parásito pueden contribuir a los síntomas.

Síntomas

La giardiasis puede ser asintomática o causar una amplia gama de síntomas gastrointestinales, dependiendo de la cantidad de parásitos ingeridos, el estado inmunológico del huésped y otros factores. Los síntomas más comunes incluyen:

  • Diarrea: La diarrea es generalmente acuosa, fétida y no sanguinolenta.
  • Esteatorrea: Las heces pueden contener grasa debido a la mala absorción (esteatorrea), lo que les da una apariencia grasosa y un olor fuerte.
  • Dolor abdominal: En la región superior del abdomen, con distensión abdominal.
  • Náuseas y vómitos.
  • Pérdida de peso: Debido a la mala absorción de nutrientes.
  • Fatiga.
  • Síntomas crónicos: En algunas personas, especialmente inmunocomprometidas, la infección puede volverse crónica, con episodios recurrentes de diarrea y desnutrición a largo plazo.

Diagnóstico

  • Examen microscópico de las heces: Para observar la presencia de quistes o trofozoítos. Debido a la naturaleza intermitente de la excreción de quistes, se recomienda analizar múltiples muestras (generalmente tres) en diferentes días.
  • Pruebas de antígenos fecales: Ensayos inmunoenzimáticos (ELISA) y pruebas de inmunofluorescencia directa pueden detectar antígenos específicos de Giardia en las heces.
  • Pruebas de amplificación de ADN (PCR): Se pueden usar para detectar el ADN del parásito en las heces.
  • Biopsia intestinal: En raras ocasiones, puede ser necesaria una biopsia intestinal para diagnosticar casos complicados o crónicos.

Tratamiento

La giardiasis es tratable con medicamentos antiparasitarios. El tratamiento se recomienda incluso en casos asintomáticos, ya que las personas infectadas pueden actuar como portadores y transmitir la enfermedad. Los medicamentos más comúnmente usados incluyen:

  • Metronidazol: Es el tratamiento de primera línea. Se toma por 5 a 7 días, pero puede causar efectos secundarios como náuseas y sabor metálico en la boca.
  • Tinidazol: Un antiparasitario de una sola dosis que también es altamente efectivo contra Giardia.
  • Nitazoxanida: Otro fármaco utilizado para tratar la giardiasis, especialmente en niños.
  • Albendazol y mebendazol: Aunque más comúnmente usados para tratar infecciones helmínticas, también han demostrado ser efectivos contra Giardia.

Prevención

La prevención de la giardiasis se centra en evitar la exposición a los quistes de Giardia a través de medidas de higiene y saneamiento:

  • Saneamiento adecuado del agua: Hervir o filtrar el agua potable en áreas donde no se garantiza la potabilidad. También se pueden usar desinfectantes químicos, pero los quistes de Giardia son resistentes a ciertos niveles de cloro.
  • Higiene personal: Lavarse las manos con agua y jabón, especialmente después de usar el baño y antes de manipular alimentos.
  • Evitar la contaminación fecal: Las personas infectadas deben evitar manipular alimentos y tener contacto con otras personas hasta que se haya completado el tratamiento.
  • Tratamiento adecuado de los alimentos: Lavar frutas y verduras con agua potable y cocinar los alimentos adecuadamente.

Balantidium coli

Balantidium coli es un protozoo ciliado que causa una infección intestinal conocida como balantidiasis. Es el único ciliado conocido que infecta a los seres humanos y puede provocar síntomas graves, especialmente en personas con sistemas inmunitarios debilitados o en áreas con malas condiciones higiénicas.

Características Generales

  • Clasificación: Pertenece al reino Protista, filo Ciliophora, clase Litostomatea. Es el protozoo ciliado más grande que infecta a los humanos.
  • Forma: Balantidium coli tiene dos formas en su ciclo de vida: el quiste y el trofozoíto. La característica distintiva de este parásito es su cubierta de cilios, que usa para moverse en el entorno intestinal.
  • Distribución: Se encuentra predominantemente en áreas rurales y zonas con malas condiciones sanitarias, especialmente donde los cerdos son abundantes, ya que son los principales reservorios del parásito.

Epidemiología

Balantidium coli tiene una distribución mundial, pero es más común en áreas rurales de países en desarrollo, donde los cerdos son abundantes y las condiciones sanitarias son deficientes.

  • Reservorios animales: Los cerdos son el principal reservorio de Balantidium coli. Aunque los seres humanos también pueden ser portadores, la zoonosis (transmisión entre animales y humanos) es la principal vía de propagación del parásito.
  • Grupos de riesgo: Las personas que trabajan con cerdos o en contacto cercano con ellos, como granjeros y trabajadores de mataderos, tienen un mayor riesgo de infección. También está presente en personas que viven en áreas rurales sin acceso a agua potable segura y saneamiento adecuado.

Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Balantidium coli incluye dos fases: el trofozoíto (la forma activa) y el quiste (la forma infectante).

a. Trofozoíto:

  • Forma: Ovalada o esférica, con una capa densa de cilios que le permite moverse y una boca (citostoma) a través de la cual ingiere alimento.
  • Tamaño: Varía de 50 a 200 micrómetros de largo y 40 a 70 micrómetros de ancho, lo que lo convierte en el protozoo intestinal más grande que infecta a los humanos.
  • Estructura: Tiene dos núcleos, uno macronúcleo arriñonado y un micronúcleo esférico. Posee una vacuola contráctil que regula la cantidad de agua dentro de la célula y fagocita bacterias y restos celulares.
  • Función: El trofozoíto es la forma activa que se encuentra en el colon, donde se alimenta de bacterias y desechos orgánicos del intestino. Puede invadir la mucosa intestinal en casos graves y causar úlceras.

b. Quiste:

  • Forma: Esférica o ovalada, con una pared gruesa que lo protege en el ambiente exterior.
  • Tamaño: De 40 a 60 micrómetros.
  • Función: Es la forma infecciosa y de resistencia del parásito. Se forma cuando el trofozoíto se rodea de una capa protectora en el intestino grueso antes de ser expulsado con las heces. Los quistes pueden sobrevivir en el ambiente, especialmente en el agua y en condiciones húmedas, y son ingeridos por nuevos huéspedes para comenzar el ciclo de infección.


4. Transmisión

La transmisión de Balantidium coli ocurre principalmente por la vía fecal-oral, a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados con quistes del parásito. Las principales formas de transmisión incluyen:

  • Agua contaminada: El agua contaminada con heces de humanos o animales infectados es una de las principales fuentes de transmisión, especialmente en zonas rurales y con falta de saneamiento.
  • Alimentos contaminados: Verduras y frutas regadas con agua contaminada o manipuladas por personas infectadas también pueden ser fuentes de infección.
  • Contacto con animales: Los cerdos son el principal reservorio de Balantidium coli. Las personas que trabajan con cerdos o en granjas tienen un mayor riesgo de infección.

5. Patogenia

Aunque Balantidium coli puede vivir en el intestino humano sin causar daño (portadores asintomáticos), en algunos casos invade la mucosa intestinal, provocando inflamación y ulceración. Esto puede llevar a la aparición de síntomas graves.

  • Invasión de la mucosa: Los trofozoítos pueden invadir la mucosa del colon, lo que lleva a la formación de úlceras y necrosis.
  • Respuesta inflamatoria: La infección desencadena una respuesta inflamatoria en el intestino, lo que agrava los síntomas.
  • Destrucción tisular: En casos graves, los trofozoítos pueden causar daño tisular extenso, llevando a hemorragias y perforaciones intestinales, lo que puede ser potencialmente letal.


6. Síntomas

La balantidiasis puede ser asintomática en algunas personas, pero en otros casos puede causar síntomas gastrointestinales moderados o graves. Los síntomas más comunes incluyen:

  • Diarrea: Es el síntoma más característico. Puede ser aguda o crónica, y a menudo es acuosa o sanguinolenta.
  • Dolor abdominal: El dolor, en general, es de tipo cólico y se localiza en el abdomen inferior.
  • Náuseas y vómitos.
  • Pérdida de peso: Debido a la diarrea prolongada y la mala absorción de nutrientes.
  • Fiebre: Puede aparecer en infecciones severas.
  • Deshidratación: Debido a la diarrea intensa y pérdida de líquidos.
  • Síntomas severos: En casos graves, la invasión extensa de la mucosa intestinal puede provocar úlceras, hemorragias y, en raras ocasiones, perforación intestinal que puede llevar a peritonitis, una condición potencialmente mortal.

7. Diagnóstico

El diagnóstico de la balantidiasis se basa en la identificación de quistes o trofozoítos de Balantidium coli en muestras fecales, junto con pruebas clínicas. Los métodos más comunes incluyen:

  • Examen microscópico de heces: El diagnóstico primario se realiza mediante el examen directo de heces en busca de trofozoítos o quistes. Dado que los trofozoítos no sobreviven mucho tiempo fuera del cuerpo, es ideal analizar muestras frescas.
  • Examen de sigmoidoscopia: En casos graves, la sigmoidoscopia puede revelar úlceras en la mucosa intestinal y se puede tomar una biopsia para observar trofozoítos en los tejidos.
  • Biopsia intestinal: Se puede realizar una biopsia para detectar la presencia del parásito en el tejido intestinal.


8. Tratamiento

La balantidiasis puede tratarse eficazmente con medicamentos antiparasitarios. Los fármacos más comúnmente utilizados incluyen:

  • Tetraciclinas: Son el tratamiento de elección para la balantidiasis. Se administran durante 10 días y suelen ser muy eficaces.
  • Metronidazol: Es otra opción para el tratamiento, especialmente cuando las tetraciclinas no están disponibles o no son adecuadas.
  • Iodoquinol: También puede usarse en combinación con otros fármacos.

En los casos graves, puede ser necesario un tratamiento de soporte para corregir la deshidratación y el desequilibrio electrolítico debido a la diarrea prolongada.

9. Prevención

La prevención de la balantidiasis se centra en mejorar las condiciones de saneamiento y en la educación sobre medidas de higiene personal y alimentaria. Las principales medidas preventivas incluyen:

  • Mejora del saneamiento: Garantizar el acceso a sistemas de agua potable segura y mejorar el manejo de aguas residuales y desechos animales en áreas rurales.
  • Higiene personal: Lavarse las manos adecuadamente con agua y jabón después de ir al baño y antes de comer o preparar alimentos.
  • Manipulación adecuada de alimentos: Lavar y cocinar los alimentos adecuadamente para evitar la ingestión de quistes presentes en alimentos contaminados.
  • Control de cerdos: Mantener a los cerdos alejados de fuentes de agua potable y promover buenas prácticas de cría para reducir la contaminación del agua.


Blastocystis hominis (ahora conocido simplemente como Blastocystis spp.) es un protozoo unicelular que habita en el tracto gastrointestinal humano y de otros animales. Es uno de los organismos más comunes encontrados en las muestras fecales humanas, pero su papel patógeno aún no está completamente claro. Aunque en muchos casos es asintomático, se ha asociado con síntomas gastrointestinales en algunos pacientes. Su relación exacta con la enfermedad sigue siendo objeto de estudio, ya que puede estar presente tanto en personas sanas como en aquellas con trastornos intestinales.

1. Características Generales

  • Clasificación: Blastocystis pertenece al grupo de los estramenopilos (Stramenopiles), que incluye organismos tanto unicelulares como multicelulares. Se clasifica dentro del filo Heterokonta, aunque durante mucho tiempo fue considerado un protozoo.
  • Morfología: Blastocystis hominis presenta diversas formas morfológicas en su ciclo de vida, lo que ha dificultado su estudio y clasificación. Las formas incluyen quistes, trofozoítos, vacuolares, granulares y ameboides.

2. Epidemiología

Blastocystis hominis tiene una distribución mundial y es particularmente prevalente en áreas con saneamiento deficiente y donde el acceso a agua potable segura es limitado. 

  • Prevalencia: Blastocystis es uno de los protozoos más comunes encontrados en las heces humanas. Se estima que entre el 5% y el 50% de la población mundial puede estar infectada, dependiendo de la región.
  • Grupos de riesgo: Las personas que viven en áreas rurales o con condiciones higiénicas deficientes, los viajeros a regiones endémicas y las personas inmunocomprometidas tienen mayor riesgo de infección.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Blastocystis no está completamente claro, pero se sabe que incluye al menos dos formas principales: trofozoítos (forma activa) y quistes (forma resistente e infecciosa).

a. Trofozoíto:

  • Es la forma activa que se encuentra en el intestino. Hay varios subtipos morfológicos:
    • Forma vacuolar: La más comúnmente observada. Tiene una gran vacuola central rodeada por citoplasma y núcleos. Puede medir entre 5 y 40 micrómetros.
    • Forma granular: Similar a la forma vacuolar, pero con gránulos en el citoplasma.
    • Forma ameboide: Se cree que es más patogénica y se encuentra en pacientes con síntomas gastrointestinales.
    Las funciones exactas de estas formas no están claras, pero el trofozoíto es la forma replicativa que se encuentra en el intestino.

b. Quiste:

  • Es la forma infectante y resistente, que sobrevive fuera del huésped. Los quistes de Blastocystis son excretados en las heces y pueden infectar a otros individuos a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados.
  • Tamaño: Los quistes son más pequeños que los trofozoítos, de aproximadamente 2-5 micrómetros.
  • Resistencia: Los quistes pueden sobrevivir en el ambiente, lo que facilita la transmisión fecal-oral.


4. Transmisión

La transmisión de Blastocystis hominis ocurre principalmente a través de la vía fecal-oral. Las principales formas de transmisión incluyen:

  • Agua y alimentos contaminados: El consumo de agua contaminada con quistes de Blastocystis es una de las formas más comunes de transmisión. Los alimentos que han sido lavados con agua contaminada o manipulados por personas infectadas también pueden ser una fuente de infección.
  • Transmisión zoonótica: Aunque no es común, algunos estudios sugieren que ciertos animales pueden actuar como reservorios de Blastocystis, contribuyendo a la transmisión entre especies.

5. Patogenia

El papel de Blastocystis en la enfermedad aún es controversial. Mientras que algunas personas pueden tener Blastocystis sin presentar ningún síntoma, en otros casos se ha asociado con síntomas gastrointestinales. No está claro si Blastocystis causa la enfermedad por sí solo o si actúa en combinación con otros factores.

  • Interacción con la microbiota intestinal: Blastocystis podría alterar el equilibrio de la microbiota intestinal, lo que puede contribuir a la aparición de síntomas en personas susceptibles.
  • Daño directo: En algunas formas, como la ameboide, se ha sugerido que el parásito podría invadir los tejidos intestinales, causando inflamación y daño.
  • Inflamación intestinal: Se ha propuesto que Blastocystis podría inducir una respuesta inflamatoria en el intestino, lo que resultaría en síntomas como diarrea, dolor abdominal y distensión.


6. Síntomas

La infección por Blastocystis puede ser asintomática o estar asociada con una variedad de síntomas gastrointestinales. Los síntomas pueden variar en gravedad, desde leves molestias hasta condiciones más severas.

Síntomas más comunes:

  • Diarrea: Puede ser acuosa o semilíquida, y puede ser intermitente o crónica.
  • Dolor abdominal: Generalmente en la parte baja del abdomen.
  • Distensión abdominal y gases.
  • Náuseas y, en algunos casos, vómitos.
  • Fatiga.
  • Pérdida de apetito y pérdida de peso.

Síntomas severos:

En casos raros, se ha informado de infecciones severas que causan úlceras intestinales o colitis, aunque esto es poco común.

7. Diagnóstico

  • Examen microscópico de las heces: Es el método más común para diagnosticar la infección por Blastocystis. Sin embargo, debido a la intermitencia de la excreción de quistes y la variabilidad morfológica, se recomienda analizar múltiples muestras de heces (generalmente tres) en diferentes días.
  • Pruebas de amplificación de ADN (PCR): Las pruebas de PCR pueden detectar el ADN de Blastocystis en muestras fecales con alta precisión y son útiles para confirmar infecciones, especialmente en casos con baja carga parasitaria.
  • Pruebas de antígenos fecales: Estas pruebas buscan detectar antígenos específicos de Blastocystis en las heces.


8. Tratamiento

El tratamiento de las infecciones por Blastocystis hominis sigue siendo un tema de debate, especialmente en personas asintomáticas. No siempre se recomienda tratar a individuos que no presentan síntomas. Sin embargo, cuando se asocia con síntomas gastrointestinales, los siguientes medicamentos se usan comúnmente:

  • Metronidazol: Es el tratamiento de primera línea más utilizado. Se administra durante 5-10 días, dependiendo de la gravedad de los síntomas.
  • Trimethoprim-sulfamethoxazole (TMP-SMX): Puede ser efectivo en algunos casos, especialmente cuando el metronidazol no funciona.
  • Nitazoxanida: Un antiparasitario de amplio espectro que también se utiliza en el tratamiento de infecciones por Blastocystis.
  • Iodoquinol y paromomicina: Otros agentes que han mostrado eficacia en el tratamiento de la infección.

9. Prevención

Las medidas preventivas para evitar la infección por Blastocystis hominis incluyen:

  • Mejora del saneamiento: Garantizar el acceso a agua potable segura y sistemas de alcantarillado adecuados.
  • Higiene personal: Lavarse las manos con agua y jabón después de usar el baño y antes de comer o manipular alimentos.
  • Tratamiento adecuado del agua: Evitar el consumo de agua de fuentes no tratadas o inseguras. En áreas de riesgo, hervir el agua o usar filtros adecuados para eliminar quistes.
  • Manipulación adecuada de alimentos: Lavar y cocinar los alimentos adecuadamente para evitar la ingestión de quistes presentes en alimentos contaminados.


Trichomonas vaginalis es un protozoo flagelado que causa una infección comúnmente conocida como tricomoniasis, la cual afecta principalmente el tracto urogenital humano. Esta es una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más frecuentes a nivel mundial, afectando tanto a hombres como a mujeres, aunque los síntomas son más evidentes en las mujeres. La infección puede ser asintomática o causar síntomas molestos, como secreción vaginal, dolor y picazón. Si no se trata, la tricomoniasis puede aumentar el riesgo de otras infecciones y complicaciones, como el parto prematuro en mujeres embarazadas.

1. Características Generales

  • Clasificación: Pertenece al filo Metamonada, clase Parabasalia, y es un protozoo flagelado.
  • Tamaño y forma: Trichomonas vaginalis es un organismo de forma ovalada o piriforme (en forma de pera) y mide aproximadamente entre 10 y 20 micrómetros de largo.
  • Estructura: Tiene cinco flagelos (cuatro anteriores y uno que forma parte de una membrana ondulante), lo que le da motilidad. También posee una estructura llamada axostilo, una varilla rígida que se proyecta a través de la célula, y una membrana ondulante que le ayuda a moverse a través de los fluidos urogenitales.

2. Epidemiología

  • Distribución mundial: Trichomonas vaginalis es la ITS no viral más común en todo el mundo, con una estimación de más de 200 millones de infecciones anuales. Es más prevalente en mujeres que en hombres y en países en vías de desarrollo donde el acceso a servicios de salud puede ser limitado.
  • Factores de riesgo: Los factores de riesgo incluyen múltiples parejas sexuales, no usar preservativo y antecedentes de otras ITS.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Trichomonas vaginalis es simple y consta de una sola fase, el trofozoíto. No tiene una fase de quiste resistente, lo que lo diferencia de muchos otros protozoos. El trofozoíto es la única forma morfológica y es la que se transmite y causa la infección.

Trofozoíto:

  • Forma infecciosa: Es la única forma presente en el ciclo de vida de Trichomonas vaginalis.
  • Reproducción: Se reproduce por fisión binaria longitudinal, un proceso en el que la célula se divide en dos nuevas células hijas.
  • Sobrevivencia: Como no forma quistes, el parásito necesita condiciones húmedas para sobrevivir y se transmite principalmente durante el contacto sexual. Puede sobrevivir fuera del cuerpo en ambientes húmedos (como en toallas húmedas) por un corto tiempo, pero su transmisión ocurre casi exclusivamente a través del contacto directo.

4. Transmisión

Trichomonas vaginalis se transmite casi exclusivamente a través de la vía sexual. El protozoo se encuentra en los fluidos urogenitales y se propaga mediante el contacto directo durante las relaciones sexuales sin protección.

  • Transmisión sexual: Es la principal vía de infección. La transmisión ocurre durante el coito vaginal. El protozoo infecta principalmente la vagina en las mujeres y la uretra o próstata en los hombres.
  • Supervivencia en objetos: Aunque la transmisión no sexual es poco común, Trichomonas puede sobrevivir por un corto período de tiempo en objetos húmedos como toallas, baños compartidos o ropa interior mojada, lo que podría ser una vía de transmisión en raras ocasiones.


5. Patogenia

Una vez que Trichomonas vaginalis ingresa al tracto urogenital, coloniza las superficies epiteliales de la vagina, la uretra y la próstata. El parásito provoca una respuesta inflamatoria en los tejidos.

  • Adhesión a las células epiteliales: Trichomonas se adhiere a las células epiteliales del tracto urogenital mediante proteínas de adhesión, lo que le permite permanecer en el área infectada.
  • Daño a los tejidos: Libera enzimas proteolíticas que dañan las células del epitelio, lo que contribuye a la aparición de los síntomas. La inflamación resultante también aumenta la producción de secreción vaginal o uretral.
  • Resistencia inmune: Aunque el sistema inmunitario responde a la infección, Trichomonas tiene varios mecanismos para evitar la respuesta inmune, lo que le permite persistir en el huésped durante largos periodos.

6. Síntomas

Los síntomas de la tricomoniasis pueden variar entre los sexos, y muchos infectados son asintomáticos, lo que facilita la diseminación de la infección. Aproximadamente el 70% de las personas infectadas no presentan síntomas evidentes, pero aun así pueden transmitir la infección a otros.

a. Síntomas en mujeres:

Las mujeres tienden a tener síntomas más pronunciados que los hombres.

  • Secreción vaginal: Es el síntoma más común. Suele ser abundante, espumosa, de color amarillo-verdoso, y puede tener un mal olor.
  • Picazón y ardor: Se presentan con frecuencia en la vulva y la vagina.
  • Dolor al orinar (disuria): Las mujeres infectadas pueden experimentar ardor o dolor al orinar debido a la inflamación de la uretra.


  • Dolor durante las relaciones sexuales (dispareunia): La inflamación y la irritación vaginal pueden hacer que las relaciones sexuales sean incómodas o dolorosas.
  • Enrojecimiento e inflamación: La mucosa vaginal puede estar inflamada y enrojecida, y en algunos casos se pueden formar pequeñas úlceras en el área genital.
  • Cervicitis: En algunos casos, la infección puede causar inflamación del cuello uterino (cervicitis), lo que se observa como un cuello uterino “en fresa” (por la aparición de pequeñas lesiones).

b. Síntomas en hombres:

En los hombres, la infección suele ser más leve o asintomática, pero aún así pueden transmitir el parásito.

  • Secreción uretral: Aunque es menos común, algunos hombres pueden experimentar una secreción uretral ligera.
  • Ardor al orinar o al eyacular.
  • Irritación en el pene: Puede haber picazón o irritación en la uretra o en el glande.
  • Prostatitis: En casos más graves, Trichomonas puede infectar la próstata, lo que provoca dolor en la zona baja del abdomen o la pelvis.

7. Complicaciones Si no se trata

  • Aumento del riesgo de ITS: Las lesiones e inflamaciones causadas por Trichomonas vaginalis aumentan el riesgo de contraer y transmitir otras infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH.
  • Complicaciones en el embarazo: Las mujeres embarazadas con tricomoniasis tienen un mayor riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer y ruptura prematura de membranas.
  • Infertilidad: Aunque menos frecuente, la tricomoniasis no tratada se ha asociado con problemas de infertilidad tanto en hombres como en mujeres.


8. Diagnóstico

El diagnóstico de la tricomoniasis puede hacerse a través de varios métodos, dependiendo de la disponibilidad de recursos y la precisión requerida.

  • Examen microscópico de secreciones: Es el método más común. Se toma una muestra de secreción vaginal (en mujeres) o una muestra uretral (en hombres) y se examina bajo el microscopio para observar los trofozoítos móviles de Trichomonas.
  • Cultivo del parásito: Aunque menos común, se puede hacer un cultivo de las secreciones para identificar la presencia de Trichomonas vaginalis.
  • Pruebas rápidas de antígenos: Existen pruebas rápidas que detectan los antígenos de Trichomonas, que pueden dar resultados en pocos minutos.
  • PCR (Reacción en cadena de la polimerasa): Es una técnica altamente sensible que detecta el ADN del parásito en muestras de orina o secreciones. Es el método más preciso, pero más costoso.

9. Tratamiento

El tratamiento de la tricomoniasis es efectivo y sencillo con el uso de antibióticos.

  • Metronidazol: Es el tratamiento de primera línea y el más utilizado. Se administra una dosis única de 2 gramos o un curso más largo (500 mg dos veces al día durante 7 días).
  • Tinidazol: Es otra opción de tratamiento, similar en eficacia al metronidazol, y también se administra en dosis única.

Es importante que las parejas sexuales también reciban tratamiento para evitar la reinfección y que se eviten las relaciones sexuales hasta que el tratamiento esté completo.


10. Prevención

La prevención de la tricomoniasis se basa en las prácticas de sexo seguro y la educación sobre ITS.

  • Uso de preservativos: Los preservativos son eficaces para reducir el riesgo de transmisión de Trichomonas vaginalis.
  • Examen y tratamiento de parejas: Las parejas sexuales deben someterse a pruebas y recibir tratamiento para prevenir la reinfección.
  • Evitar compartir objetos personales: Aunque es raro, evitar el uso compartido de toallas u objetos húmedos puede reducir el riesgo de transmisión indirecta.


Toxoplasma gondii es un protozoo parásito que causa la enfermedad toxoplasmosis, una infección ampliamente distribuida en todo el mundo y que afecta a una gran variedad de mamíferos y aves, incluidos los humanos. Aunque la mayoría de las personas infectadas no presenta síntomas, la toxoplasmosis puede ser grave en personas inmunodeprimidas y en mujeres embarazadas, ya que puede causar daño al feto.

1. Características Generales

  • Clasificación: Toxoplasma gondii pertenece al filo Apicomplexa, un grupo de protozoos que incluyen otros parásitos importantes como Plasmodium (causante de la malaria).
  • Morfología: Toxoplasma gondii tiene diferentes formas morfológicas en su ciclo de vida:
    • Taquizoíto: Forma activa y replicativa. Es en forma de media luna, mide entre 4 y 8 micrómetros de largo y se replica rápidamente durante la fase aguda de la infección.
    • Bradizoíto: Forma latente que se encuentra en los quistes tisulares durante la infección crónica. Se replica lentamente y puede persistir en el huésped durante toda su vida.
    • Ooquiste: Forma resistente que se encuentra en las heces de los gatos, que son los huéspedes definitivos.

2. Epidemiología

Toxoplasma gondii está presente en todo el mundo.

  • Prevalencia: Se estima que entre el 30% y el 50% de la población mundial ha estado expuesta a Toxoplasma. La infección es más común en áreas con climas cálidos y húmedos, donde los ooquistes sobreviven mejor en el suelo.
  • Factores de riesgo: Entre los principales factores de riesgo se incluyen la exposición a las heces de gatos, el consumo de carne poco cocida y la falta de higiene adecuada.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Toxoplasma gondii es complejo e involucra a dos tipos de huéspedes: el huésped definitivo (los felinos) y el huésped intermediario (incluidos humanos, mamíferos y aves).

a. Fase sexual (en gatos):

  • El ciclo sexual de Toxoplasma ocurre exclusivamente en los intestinos de los gatos, que son los huéspedes definitivos.
  • Cuando los gatos ingieren presas infectadas (como roedores o aves), el parásito se libera en el intestino y se reproduce sexualmente para formar ooquistes.
  • Estos ooquistes se excretan en las heces del gato, donde pueden sobrevivir en el medio ambiente durante semanas o meses. Después de uno o dos días en el suelo, los ooquistes se vuelven infecciosos.

b. Fase asexual (en huéspedes intermediarios):

  • Los ooquistes infecciosos pueden ser ingeridos por humanos, otros mamíferos o aves. En el intestino del huésped, los ooquistes liberan esporozoítos que invaden las células.
  • Dentro de las células, los esporozoítos se diferencian en taquizoítos, la forma activa que se replica rápidamente y puede diseminarse por todo el cuerpo.
  • El sistema inmunológico del huésped eventualmente controla la replicación de los taquizoítos, que se transforman en bradizoítos. Estos bradizoítos forman quistes tisulares latentes, que pueden persistir en los tejidos del cerebro, los músculos y otros órganos durante toda la vida del huésped.
  • Los humanos y otros animales pueden infectarse al ingerir quistes tisulares en carne cruda o poco cocida o al ingerir ooquistes contaminados del suelo, agua o alimentos.


4. Transmisión

  • Ingestión de ooquistes: Los ooquistes infecciosos pueden encontrarse en el suelo, agua, frutas, verduras u otros alimentos contaminados por heces de gatos.
  • Ingestión de quistes tisulares: Comer carne cruda o poco cocida (especialmente de cordero, cerdo o venado) que contenga quistes tisulares de Toxoplasma es una fuente importante de infección.
  • Transmisión congénita: Una mujer embarazada infectada por primera vez puede transmitir el parásito al feto, lo que puede provocar toxoplasmosis congénita con graves consecuencias.
  • Transfusiones de sangre o trasplante de órganos: En casos raros, Toxoplasma puede transmitirse a través de transfusiones de sangre o trasplantes de órganos infectados.

5. Patogenia

Una vez que Toxoplasma gondii ingresa al cuerpo, los taquizoítos invaden las células y se replican rápidamente, provocando una fase aguda de infección. Si el sistema inmunitario controla la infección, los taquizoítos se transforman en bradizoítos que forman quistes latentes, que pueden persistir en el huésped durante toda su vida sin causar síntomas.

  • Respuesta inmune: El sistema inmunológico juega un papel clave en limitar la replicación de los taquizoítos y controlar la infección. En personas inmunocompetentes, los síntomas son leves o inexistentes, pero en personas con sistemas inmunitarios debilitados, como los pacientes con VIH/SIDA, el parásito puede reactivarse y causar una enfermedad grave.
  • Infección crónica: Aunque la mayoría de las personas sanas no presentan síntomas después de la fase aguda, los quistes tisulares pueden persistir de forma latente durante años o décadas, con el potencial de reactivarse si el sistema inmune se debilita.


6. Síntomas

La mayoría de las personas infectadas por Toxoplasma gondii son asintomáticas o presentan síntomas leves. Sin embargo, en ciertos grupos de riesgo, la toxoplasmosis puede causar complicaciones graves.

a. Toxoplasmosis aguda:

En personas sanas, la toxoplasmosis aguda suele ser asintomática o presenta síntomas leves similares a los de la gripe.

  • Síntomas comunes:
    • Fiebre leve
    • Fatiga
    • Dolor muscular
    • Dolor de cabeza
    • Inflamación de los ganglios linfáticos (especialmente en el cuello)

La mayoría de las personas no buscan tratamiento médico debido a la naturaleza leve y autolimitada de los síntomas.

b. Toxoplasmosis en personas inmunodeprimidas:

En personas con sistemas inmunitarios debilitados, como aquellos con VIH/SIDA, en tratamiento de quimioterapia o que reciben trasplantes de órganos, la toxoplasmosis puede ser mucho más grave.

  • Síntomas en inmunodeprimidos:
    • Encefalitis toxoplásmica: Inflamación del cerebro, que puede causar confusión, convulsiones, dolor de cabeza severo y síntomas neurológicos.
    • Neumonía: La infección puede afectar los pulmones, causando tos, dificultad para respirar y fiebre.
    • Coriorretinitis: Inflamación de la retina, lo que puede llevar a la pérdida de visión.


c. Toxoplasmosis congénita:

Si una mujer se infecta durante el embarazo, el parásito puede atravesar la placenta y causar toxoplasmosis congénita en el feto.

  • Consecuencias en el feto:
    • Muerte fetal o aborto espontáneo
    • Parto prematuro
    • Malformaciones congénitas, como hidrocefalia, calcificaciones cerebrales, retraso mental y ceguera.

Los efectos son más graves cuando la infección ocurre en el primer trimestre, pero el riesgo de transmisión aumenta hacia el final del embarazo.

7. Diagnóstico

El diagnóstico de toxoplasmosis puede realizarse mediante diferentes pruebas:

  • Pruebas serológicas: Son las más comunes y buscan anticuerpos específicos contra Toxoplasma gondii en la sangre. Estas incluyen:

    • IgM: Indica una infección reciente.
    • IgG: Indica una infección pasada o crónica.
  • PCR (Reacción en cadena de la polimerasa): Detecta el ADN del parásito en líquidos corporales, como líquido amniótico, sangre o líquido cefalorraquídeo. Se utiliza en casos graves o para detectar la toxoplasmosis congénita.

  • Biopsia de tejidos: En algunos casos graves, puede ser necesario realizar una biopsia para identificar la presencia de quistes o taquizoítos en los tejidos afectados.


8. Tratamiento

El tratamiento de la toxoplasmosis depende del estado inmunológico del paciente y de la gravedad de la infección.

  • En personas sanas: No siempre se requiere tratamiento si la infección es leve o asintomática.
  • En personas inmunocomprometidas y embarazadas: El tratamiento es necesario y suele incluir los siguientes medicamentos:
    • Pirimetamina: Es el fármaco principal utilizado contra Toxoplasma, generalmente combinado con otros.
    • Sulfadiazina: Se utiliza en combinación con pirimetamina para mejorar la eficacia.
    • Ácido folínico: Se administra junto con pirimetamina para prevenir los efectos secundarios sobre la médula ósea.
    • Espiramicina: En mujeres embarazadas, la espiramicina se utiliza para reducir el riesgo de transmisión al feto.

9. Prevención

Las medidas preventivas para evitar la infección por Toxoplasma gondii incluyen:

  • Cocinar bien la carne: Asegurarse de que la carne esté bien cocida para destruir los quistes.
  • Evitar la exposición a las heces de gatos: Limpiar cajas de arena diariamente y usar guantes al hacerlo.
  • Lavarse las manos y los utensilios: Después de manipular carne cruda o trabajar en el jardín.
  • Lavado de frutas y verduras: Asegurarse de lavar bien los productos antes de consumirlos.


Cystoisospora belli (anteriormente conocido como Isospora belli) es un protozoo parásito que causa la enfermedad llamada isosporiasis o cistoisosporiasis, una infección intestinal que afecta principalmente a humanos, especialmente a aquellos con sistemas inmunodeprimidos. La infección se caracteriza por diarrea acuosa prolongada y otros síntomas gastrointestinales. Se encuentra principalmente en regiones tropicales y subtropicales, y su transmisión ocurre a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con ooquistes.

1. Características Generales

  • Clasificación: Cystoisospora belli pertenece al filo Apicomplexa, familia Eimeriidae, un grupo de parásitos intracelulares obligados que también incluye a Cryptosporidium y Toxoplasma.
  • Morfología: Su ciclo de vida involucra diferentes formas morfológicas:
    • Ooquiste inmaduro: Tiene una forma ovalada y mide entre 25 y 30 micrómetros. Los ooquistes inmaduros no son infecciosos inmediatamente después de ser excretados.
    • Ooquiste maduro: Los ooquistes esporulados (maduros) contienen dos esporoblastos, cada uno con cuatro esporozoítos, que son las formas infecciosas del parásito.

2. Epidemiología

La isosporiasis es más común en regiones tropicales y subtropicales, aunque también se han reportado casos en áreas más templadas, especialmente en personas con inmunodeficiencia.

  • Distribución geográfica: Se encuentra principalmente en América Latina, África, el sudeste asiático y ciertas regiones del Caribe.
  • Grupos de riesgo: Los más afectados suelen ser personas inmunodeprimidas, especialmente pacientes con VIH/SIDA, aunque también puede afectar a individuos sanos en áreas endémicas.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Cystoisospora belli es directo, lo que significa que no requiere un huésped intermediario. Su ciclo involucra tanto una fase exógena (en el ambiente) como una fase endógena (en el huésped humano).

a. Fase exógena (en el ambiente):

  1. Excreción de ooquistes no esporulados: Los ooquistes inmaduros (no esporulados) son excretados en las heces de un huésped infectado.
  2. Maduración en el ambiente: Los ooquistes requieren de uno a dos días en el ambiente para esporular y volverse infecciosos. Este proceso ocurre principalmente en condiciones cálidas y húmedas, lo que facilita la transmisión en áreas tropicales y subtropicales.

b. Fase endógena (en el huésped humano):

  1. Ingestión de ooquistes esporulados: Los humanos se infectan al ingerir ooquistes esporulados a través de agua o alimentos contaminados.
  2. Liberación de esporozoítos: Una vez ingeridos, los ooquistes liberan esporozoítos en el intestino delgado. Los esporozoítos invaden las células epiteliales del intestino.
  3. Reproducción asexual (esquizogonia): Dentro de las células epiteliales, los esporozoítos se desarrollan y se multiplican asexualmente mediante esquizogonia, produciendo merozoítos.
  4. Reproducción sexual (gametogonia): Los merozoítos luego se diferencian en gametos masculinos y femeninos, que se fusionan para formar cigotos, los cuales maduran en ooquistes.
  5. Excreción de ooquistes no esporulados: Los ooquistes no esporulados se liberan al lumen intestinal y se excretan nuevamente en las heces, comenzando el ciclo de vida de nuevo.


4. Transmisión

La transmisión de Cystoisospora belli ocurre principalmente por la ingestión de agua o alimentos contaminados con ooquistes esporulados. Esta ruta de transmisión es similar a otros parásitos intestinales y está asociada con malas condiciones sanitarias e higiene deficiente.

  • Fecal-oral: Es la principal vía de transmisión. Las personas pueden infectarse al consumir alimentos o bebidas contaminadas con ooquistes esporulados, o al entrar en contacto con superficies contaminadas.
  • Zonas endémicas: La transmisión es más común en regiones tropicales y subtropicales, donde la falta de acceso a agua potable y saneamiento adecuado facilita la propagación del parásito.

5. Patogenia

  • Cystoisospora belli* infecta las células epiteliales del intestino delgado, lo que provoca una serie de reacciones inflamatorias y daño tisular que resultan en diarrea y otros síntomas gastrointestinales.
  • Invasión celular: Los esporozoítos invaden las células epiteliales del intestino delgado y se multiplican dentro de ellas, lo que lleva a la destrucción de las células.
  • Inflamación: La infección provoca una reacción inflamatoria en la mucosa intestinal, lo que causa un mal funcionamiento de la absorción de nutrientes y agua, lo que da lugar a diarrea acuosa.
  • Desnutrición y pérdida de peso: En casos graves, especialmente en pacientes inmunocomprometidos, la diarrea crónica y la malabsorción pueden provocar desnutrición severa y pérdida de peso.


6. Síntomas

Los síntomas de la infección por Cystoisospora belli varían dependiendo del estado inmunológico del paciente. En individuos inmunocompetentes, los síntomas suelen ser más leves y autolimitados, mientras que en personas con sistemas inmunodeprimidos, la infección puede ser más grave y prolongada.

a. En personas inmunocompetentes:

  • Diarrea acuosa: Es el síntoma más característico. La diarrea puede ser leve o moderada, pero en general es persistente.
  • Dolor abdominal: Suele presentarse como cólicos abdominales.
  • Malestar general: Los pacientes pueden experimentar fatiga, debilidad y malestar general.
  • Fiebre: Puede presentarse fiebre leve.

En la mayoría de los casos, la enfermedad es autolimitada y dura de 1 a 2 semanas.

b. En personas inmunodeprimidas:

En personas con sistemas inmunitarios debilitados, como los pacientes con VIH/SIDA, receptores de trasplantes o personas bajo quimioterapia, la infección puede ser mucho más grave y prolongada.

  • Diarrea crónica severa: La diarrea puede ser intensa, persistente y llevar a deshidratación severa.
  • Malabsorción: Puede haber malabsorción de nutrientes, lo que conduce a desnutrición y pérdida de peso significativa.
  • Fiebre alta.
  • Dolor abdominal severo: El dolor abdominal puede ser más intenso.

En estos pacientes, la infección puede durar semanas o incluso meses si no se trata, y puede recurrir.


7. Diagnóstico

El diagnóstico de Cystoisospora belli se realiza principalmente mediante la identificación de los ooquistes en muestras de heces.

  • Examen microscópico: Se utilizan técnicas como la tinción con ácido rápido modificada (tinción de Ziehl-Neelsen) para visualizar los ooquistes de Cystoisospora belli en las heces. Los ooquistes de este parásito son más grandes que los de otros parásitos intestinales, lo que facilita su identificación.
  • Concentración de heces: En algunos casos, se utilizan técnicas de concentración de heces para aumentar la sensibilidad de la prueba, especialmente cuando la carga parasitaria es baja.
  • Biopsia intestinal: En casos graves o cuando no se pueden encontrar ooquistes en las heces, puede realizarse una biopsia intestinal para observar el daño en la mucosa y la presencia del parásito en las células epiteliales.

8. Tratamiento

El tratamiento de la isosporiasis es efectivo y suele incluir medicamentos antimicrobianos.

  • Trimetoprim-sulfametoxazol (TMP-SMX): Es el tratamiento de elección para la infección por Cystoisospora belli. Se administra durante 7 a 10 días en personas inmunocompetentes. En personas inmunodeprimidas, puede ser necesario un tratamiento más prolongado o dosis de mantenimiento para prevenir recaídas.
  • Pirimetamina: En algunos casos, la pirimetamina se puede utilizar como alternativa, especialmente en pacientes que no toleran TMP-SMX.
  • Reposición de líquidos: En casos de diarrea severa, es importante administrar líquidos y electrolitos para prevenir o tratar la deshidratación.


9. Prevención

La prevención de la infección por Cystoisospora belli se basa en medidas para mejorar el saneamiento y la higiene personal, así como en evitar la ingesta de alimentos y agua contaminados.

  • Higiene personal: Lavarse las manos adecuadamente antes de comer o después de usar el baño es fundamental para reducir el riesgo de infección.
  • Agua potable: El consumo de agua potable segura


Cyclospora cayetanensis es un protozoo parásito que causa la infección intestinal conocida como ciclosporiasis, caracterizada por episodios prolongados de diarrea acuosa. La infección ocurre principalmente a través de la ingestión de alimentos o agua contaminados con ooquistes esporulados. Es un patógeno relativamente nuevo y ha causado brotes en varias partes del mundo, incluidos países desarrollados. La ciclosporiasis es más común en regiones tropicales y subtropicales, aunque también ha habido brotes en regiones templadas debido a la importación de alimentos contaminados.

1. Características Generales

  • Clasificación: Cyclospora cayetanensis pertenece al filo Apicomplexa, lo que la relaciona con otros parásitos intestinales como Cryptosporidium y Toxoplasma.
  • Morfología: Su ciclo de vida incluye varias etapas, pero la forma más importante desde el punto de vista de transmisión es el ooquiste.
    • Ooquistes: Son esféricos, de aproximadamente 8 a 10 micrómetros de diámetro, más grandes que los de Cryptosporidium, y contienen dos esporocistos, cada uno con dos esporozoítos.

2. Epidemiología

La ciclosporiasis se encuentra en todo el mundo, pero es más prevalente en regiones tropicales y subtropicales.

  • Zonas endémicas: Se ha encontrado en América Latina, el sudeste asiático, África y Medio Oriente.
  • Brotes en países desarrollados: En países como Estados Unidos y Canadá, la ciclosporiasis se ha asociado con el consumo de frutas y verduras importadas de regiones endémicas.
  • Grupos de riesgo: Las personas que viajan a áreas endémicas o consumen productos frescos importados de estas regiones están en mayor riesgo.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Cyclospora cayetanensis es directo y simple, pero requiere una fase ambiental fuera del cuerpo humano para que los ooquistes maduren y se vuelvan infecciosos.

a. Fase exógena (en el ambiente):

  1. Excreción de ooquistes no esporulados: Los ooquistes no esporulados se excretan en las heces de una persona infectada, pero estos ooquistes no son inmediatamente infecciosos.
  2. Maduración en el ambiente: Los ooquistes requieren entre 7 y 14 días en condiciones ambientales favorables (calor y humedad) para esporular, es decir, convertirse en ooquistes infecciosos. Este proceso de esporulación solo ocurre fuera del huésped.

b. Fase endógena (en el huésped humano):

  1. Ingestión de ooquistes esporulados: Los humanos se infectan al ingerir agua o alimentos contaminados con ooquistes esporulados.
  2. Liberación de esporozoítos: En el intestino delgado, los ooquistes liberan esporozoítos que invaden las células epiteliales intestinales.
  3. Reproducción asexual (merogonia): Dentro de las células epiteliales, los esporozoítos se desarrollan en formas merontes que se replican asexualmente para formar merozoítos.
  4. Reproducción sexual (gametogonia): Los merozoítos luego se diferencian en gametos masculinos y femeninos, que se fusionan para formar cigotos.
  5. Formación de ooquistes no esporulados: Los cigotos se convierten en ooquistes no esporulados que se excretan nuevamente en las heces, repitiendo el ciclo.


4. Transmisión

La vía fecal-oral es la principal ruta de transmisión de Cyclospora cayetanensis, que ocurre al consumir agua o alimentos contaminados con ooquistes esporulados.

  • Alimentos frescos contaminados: Brotes de ciclosporiasis han estado asociados con frutas y verduras frescas como frambuesas, albahaca, lechuga, cilantro y otras plantas que crecen cerca del suelo y que pueden estar expuestas a agua contaminada.
  • Agua contaminada: El consumo de agua no tratada o contaminada, especialmente en áreas con saneamiento deficiente, puede ser una fuente de infección.
  • No hay transmisión de persona a persona: Dado que los ooquistes necesitan esporular en el ambiente para volverse infecciosos, no es posible la transmisión directa de una persona a otra inmediatamente después de la excreción.

5. Patogenia

Una vez que los ooquistes esporulados son ingeridos, los esporozoítos liberados invaden las células epiteliales del intestino delgado, donde se reproducen y causan daño a las células. Este daño provoca malabsorción de nutrientes y un aumento en la secreción de líquidos en el intestino, lo que resulta en diarrea acuosa.

  • Invasión celular: Los esporozoítos se adhieren a las células del epitelio intestinal y las invaden, lo que provoca inflamación y alteración de la función intestinal.
  • Destrucción celular: A medida que el parásito se multiplica dentro de las células intestinales, estas son destruidas, lo que afecta la capacidad del intestino para absorber nutrientes y líquidos.


6. Síntomas

a. Síntomas comunes:

  • Diarrea acuosa: Es el síntoma principal, a menudo acompañado de cólicos abdominales. La diarrea puede durar varias semanas si no se trata.
  • Dolor abdominal: Generalmente en forma de cólicos.
  • Fatiga: La diarrea prolongada y la malabsorción de nutrientes pueden causar fatiga severa.
  • Pérdida de peso: La diarrea crónica puede llevar a una pérdida de peso significativa debido a la malabsorción.
  • Náuseas y vómitos.
  • Fiebre leve.
  • Anorexia: Pérdida del apetito.
  • Dolor muscular y articular.

En pacientes inmunocompetentes, los síntomas generalmente se resuelven después de varias semanas, pero en personas inmunocomprometidas, como pacientes con VIH/SIDA, la enfermedad puede ser más prolongada y grave.

7. Diagnóstico

  • Examen microscópico: Los ooquistes de Cyclospora son difíciles de identificar con un examen microscópico directo. Se utilizan técnicas especiales como la tinción de ácido rápido modificada o tinción de Kinyoun para visualizar los ooquistes. Los ooquistes de Cyclospora son más grandes que los de Cryptosporidium y presentan una autofluorescencia bajo luz ultravioleta.
  • Concentración de heces: Se utilizan técnicas de concentración para aumentar la sensibilidad de la prueba, ya que los ooquistes pueden ser excretados de manera intermitente y en pequeñas cantidades.
  • PCR (Reacción en cadena de la polimerasa): Esta técnica molecular puede usarse para confirmar el diagnóstico cuando las pruebas microscópicas no son concluyentes.


8. Tratamiento

  • Trimetoprim-sulfametoxazol (TMP-SMX): También conocido como cotrimoxazol, este es el tratamiento de elección para la ciclosporiasis. Generalmente se administra durante 7 a 10 días y es muy eficaz para detener los síntomas. En pacientes inmunodeprimidos, puede ser necesario un tratamiento más prolongado o incluso profilaxis a largo plazo para evitar recaídas.
  • Alternativas: Para personas alérgicas o intolerantes al TMP-SMX, no existen tratamientos de segunda línea bien establecidos, pero la ciprofloxacina se ha utilizado en algunos casos con éxito variable.
  • Reposición de líquidos: En casos de diarrea severa, puede ser necesario rehidratar a los pacientes mediante líquidos y electrolitos para prevenir la deshidratación.

9. Prevención

La prevención de la ciclosporiasis se basa principalmente en mejorar las condiciones de saneamiento y el control de la calidad de los alimentos.

  • Higiene alimentaria: Lavar cuidadosamente frutas y verduras frescas antes de consumirlas es fundamental para prevenir la infección. Sin embargo, el lavado con agua sola puede no ser suficiente para eliminar todos los ooquistes.
  • Filtración y tratamiento del agua: Beber solo agua potable segura, especialmente en áreas endémicas, es clave para evitar la infección. El agua debe ser filtrada o hervida en zonas donde la calidad no sea confiable.
  • Buenas prácticas agrícolas: Los brotes han estado relacionados con la contaminación de los cultivos mediante el uso de agua contaminada para el riego o la manipulación inadecuada de los alimentos en las cadenas de suministro.


Cryptosporidium es un protozoo parásito que causa una infección intestinal conocida como criptosporidiosis. Esta enfermedad se caracteriza por diarrea acuosa prolongada y afecta tanto a humanos como a una amplia variedad de animales. La infección ocurre principalmente a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados con ooquistes del parásito.

1. Características Generales

  • Clasificación: Cryptosporidium pertenece al filo Apicomplexa, como otros parásitos intestinales (Toxoplasma, Cyclospora), y comprende varias especies, pero las dos más comunes que infectan a los humanos son:
    • Cryptosporidium hominis: Afecta principalmente a humanos.
    • Cryptosporidium parvum: Afecta tanto a humanos como a animales (zoonótica).
  • Morfología: El parásito tiene un ciclo de vida complejo, y las principales formas infecciosas son los ooquistes.
    • Ooquistes: Son pequeños, miden entre 4 y 6 micrómetros, son resistentes a muchos desinfectantes comunes y son excretados en grandes cantidades en las heces de los individuos infectados.

2. Epidemiología

Se estima que es una de las principales causas de diarrea en niños menores de 5 años en países en desarrollo.

  • Distribución geográfica: Es común en áreas con saneamiento deficiente y en lugares donde el acceso a agua potable es limitado. También se ha reportado en brotes en países desarrollados asociados con el consumo de agua o alimentos contaminados.
  • Grupos de riesgo: Los niños pequeños, los ancianos, las personas inmunodeprimidas y aquellos que viajan a zonas endémicas están en mayor riesgo de infección.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Cryptosporidium es complejo e incluye tanto fases asexuales como sexuales. A diferencia de otros parásitos, Cryptosporidium puede completar su ciclo de vida en un solo huésped.

a. Fase exógena (en el ambiente):

  1. Excreción de ooquistes: Los ooquistes de Cryptosporidium se excretan en las heces de los humanos o animales infectados. Estos ooquistes son inmediatamente infecciosos y pueden sobrevivir en el ambiente durante largos períodos debido a su resistencia a condiciones adversas.

b. Fase endógena (en el huésped humano):

  1. Ingestión de ooquistes: La infección ocurre cuando una persona ingiere ooquistes infectantes a través de agua o alimentos contaminados, o al tener contacto directo con superficies o personas infectadas.
  2. Liberación de esporozoítos: En el intestino delgado, los ooquistes liberan esporozoítos, las formas móviles que invaden las células epiteliales intestinales.
  3. Reproducción asexual (merogonia): Dentro de las células epiteliales, los esporozoítos se replican asexualmente para formar merozoítos, que luego liberan nuevas generaciones de merozoítos para continuar la infección.
  4. Reproducción sexual (gametogonia): Los merozoítos se diferencian en gametos masculinos y femeninos, que se fusionan para formar cigotos.
  5. Formación de ooquistes: Los cigotos se desarrollan en ooquistes, que pueden ser excretados en las heces (ooquistes de pared gruesa) o reiniciar la infección dentro del huésped (ooquistes de pared delgada).


4. Transmisión vía fecal-oral

  • Agua contaminada: Cryptosporidium es altamente resistente a los métodos convencionales de tratamiento del agua, como la cloración, lo que lo convierte en una causa importante de brotes de enfermedades transmitidas por el agua en piscinas, parques acuáticos y sistemas de suministro de agua potable.
  • Alimentos contaminados: Los alimentos que han estado en contacto con agua contaminada o han sido manipulados por personas infectadas pueden transmitir el parásito.
  • Contacto persona a persona: La transmisión directa puede ocurrir al tener contacto cercano con una persona infectada, como en guarderías, hospitales o familias.
  • Zoonosis: Las personas pueden infectarse al entrar en contacto con animales infectados o sus heces, especialmente en granjas.

5. Patogenia

La patogenia de la criptosporidiosis se debe principalmente a la invasión y destrucción de las células epiteliales del intestino delgado por parte de los esporozoítos y merozoítos.

  • Invasión de las células epiteliales: Los esporozoítos invaden las células epiteliales intestinales y causan inflamación y daño estructural.
  • Disfunción intestinal: La destrucción de las células epiteliales y la inflamación provocan una alteración en la capacidad del intestino para absorber agua y nutrientes, lo que da lugar a diarrea acuosa y malabsorción.
  • Respuesta inmunológica: En individuos inmunocompetentes, el sistema inmunológico suele controlar la infección, pero en personas inmunodeprimidas (como los pacientes con VIH/SIDA), la respuesta inmunitaria no es lo suficientemente fuerte para eliminar el parásito, lo que provoca una infección crónica y grave.


6. Síntomas

Los síntomas de la criptosporidiosis varían dependiendo del estado inmunológico del individuo infectado.

a. En personas inmunocompetentes:

  • Diarrea acuosa: Es el síntoma más común, y puede durar entre 1 y 2 semanas.
  • Dolor abdominal: Generalmente en forma de cólicos.
  • Náuseas y vómitos.
  • Fiebre baja.
  • Fatiga: La diarrea prolongada puede llevar a la fatiga y al malestar general.
  • Pérdida de peso: Debido a la diarrea prolongada y la malabsorción.

En la mayoría de los casos, los síntomas desaparecen por sí solos sin necesidad de tratamiento específico, aunque la diarrea puede ser debilitante.

b. En personas inmunodeprimidas:

En pacientes con sistemas inmunitarios comprometidos, como aquellos con VIH/SIDA o que reciben quimioterapia, la criptosporidiosis puede ser mucho más grave y prolongada.

  • Diarrea crónica: La diarrea puede ser severa y durar semanas o meses, llevando a una deshidratación severa y pérdida de peso.
  • Desnutrición: La malabsorción severa puede provocar desnutrición grave.
  • Complicaciones extraintestinales: En algunos casos, el parásito puede afectar otros órganos, como el sistema biliar (colangitis criptosporidial) o el sistema respiratorio.


7. Diagnóstico

El diagnóstico de criptosporidiosis se basa en la identificación del parásito en las heces mediante varias técnicas de laboratorio.

  • Examen microscópico: Los ooquistes de Cryptosporidium pueden detectarse en muestras de heces utilizando tinciones especiales, como la tinción de ácido rápido modificada o la tinción de Kinyoun.
  • Inmunofluorescencia: La inmunofluorescencia con anticuerpos específicos es una técnica más sensible para detectar los ooquistes en muestras de heces.
  • Pruebas moleculares (PCR): La PCR es una técnica de diagnóstico muy precisa que permite identificar el ADN del parásito en las heces.
  • Pruebas antigénicas: También se pueden utilizar pruebas de detección de antígenos para detectar proteínas específicas del parásito en muestras de heces.

8. Tratamiento

No existe un tratamiento específico altamente eficaz para Cryptosporidium, pero algunos medicamentos pueden ayudar a controlar los síntomas, especialmente en personas inmunocomprometidas.

  • Nitazoxanida: Es el medicamento aprobado para tratar la criptosporidiosis en personas inmunocompetentes. Puede reducir la duración de la diarrea, aunque su eficacia es limitada en personas inmunodeprimidas.
  • Tratamiento sintomático: Incluye la reposición de líquidos y electrolitos para prevenir la deshidratación en pacientes con diarrea severa.
  • Mejora del sistema inmunológico: En personas inmunodeprimidas, el fortalecimiento del sistema inmunológico mediante terapia antirretroviral (en pacientes con VIH) puede ser crucial para controlar la infección.


9. Prevención

Dado que Cryptosporidium es resistente a muchos desinfectantes comunes, la prevención de la criptosporidiosis requiere medidas específicas.

  • Filtración del agua: Beber agua filtrada o hervida en áreas con riesgo de contaminación. Los sistemas de filtración que eliminan partículas de 1 micrómetro o menos son efectivos.
  • Higiene alimentaria: Lavar bien frutas y verduras, especialmente en áreas con saneamiento deficiente.
  • Evitar el contacto con animales infectados: Las personas que trabajan con animales deben practicar buenas medidas de higiene, como lavarse las manos con frecuencia.
  • Evitar la ingesta de agua no tratada: No beber agua de ríos, lagos o piscinas no tratadas adecuadamente.


Plasmodium es un género de protozoos parásitos que causan la malaria, una de las enfermedades infecciosas más prevalentes y mortales en todo el mundo. La malaria afecta principalmente a regiones tropicales y subtropicales y es transmitida por la picadura de mosquitos del género Anopheles.

  • Plasmodium falciparum: Responsable de la mayoría de los casos graves y mortales de malaria.
  • Plasmodium vivax: Causa una forma menos grave, pero con mayor capacidad de recaída.
  • Plasmodium ovale: Similar a P. vivax, también puede causar recaídas.
  • Plasmodium malariae: Causa una malaria más crónica, pero menos severa.
  • Plasmodium knowlesi: Una especie zoonótica que afecta principalmente a macacos, pero también puede infectar a humanos.

1. Características Generales

  • Clasificación: Plasmodium pertenece al filo Apicomplexa, al igual que otros parásitos como Toxoplasma y Cryptosporidium.
  • Ciclo de vida complejo: El ciclo de vida de Plasmodium es extremadamente complejo y abarca varias fases, tanto en los mosquitos Anopheles (huésped definitivo) como en los humanos (huésped intermedio).
  • Vector de transmisión: Los parásitos Plasmodium son transmitidos por la picadura de mosquitos hembra infectados del género Anopheles, que inyectan esporozoítos en el torrente sanguíneo humano.

2. Epidemiología

La malaria es una enfermedad endémica en más de 90 países, principalmente en África subsahariana, el sudeste asiático, América del Sur y partes de Oriente Medio. África subsahariana soporta la mayor carga de la enfermedad, especialmente en niños menores de 5 años y mujeres embarazadas.


3. Ciclo de Vida

El ciclo de vida de Plasmodium incluye dos fases principales: una fase asexual en los humanos y una fase sexual en los mosquitos. Cada fase involucra varias etapas morfológicas y funcionales.

a. Fase en humanos (huésped intermedio):

  1. Fase hepática (fase exoeritrocítica):

    • Cuando un mosquito infectado pica a un humano, inyecta esporozoítos en el torrente sanguíneo.
    • Los esporozoítos viajan al hígado y entran en los hepatocitos (células hepáticas).
    • Dentro del hígado, los esporozoítos se desarrollan en esquizontes que contienen miles de merozoítos.
    • Después de unos días, los esquizontes se rompen y liberan merozoítos en el torrente sanguíneo.
  2. Fase eritrocítica (fase en glóbulos rojos):

    • Los merozoítos invaden los glóbulos rojos y se desarrollan en trofozoítos, que luego maduran en esquizontes.
    • Los esquizontes se dividen nuevamente y liberan nuevos merozoítos que invaden más glóbulos rojos.
    • Este ciclo de invasión y destrucción de glóbulos rojos es el que causa los síntomas clásicos de la malaria, como fiebre y anemia.
  3. Formación de gametocitos:

    • Algunos merozoítos dentro de los glóbulos rojos se diferencian en gametocitos, que son las formas sexuales del parásito. Estos gametocitos no causan síntomas en los humanos, pero son cruciales para la transmisión de la enfermedad al mosquito.


b. Fase en el mosquito (huésped definitivo):

  1. Ingestión de gametocitos:
    • Cuando un mosquito Anopheles pica a una persona infectada, ingiere los gametocitos junto con la sangre.
  2. Desarrollo sexual en el mosquito:
    • En el intestino del mosquito, los gametocitos maduran en gametos masculino y femenino.
    • Los gametos se fusionan para formar un cigoto que se convierte en un ookinete, una forma móvil del parásito.
    • El ookinete penetra en la pared intestinal del mosquito y forma un ooquiste.
  3. Producción de esporozoítos:
    • El ooquiste madura y libera miles de esporozoítos, que migran a las glándulas salivales del mosquito.
    • Cuando el mosquito pica a otro humano, los esporozoítos son inyectados, iniciando el ciclo de vida nuevamente.

4. Transmisión

La malaria se transmite principalmente por la picadura de mosquitos Anopheles infectados. Otras formas menos comunes de transmisión incluyen:

  • Transfusiones de sangre.
  • Uso compartido de agujas o jeringas.
  • Transmisión de madre a hijo durante el parto (malaria congénita).

5. Patogenia

El daño en la malaria se produce principalmente durante la fase eritrocítica, cuando los merozoítos invaden y destruyen los glóbulos rojos. Los síntomas y complicaciones de la malaria son el resultado de:


  • Lisis de glóbulos rojos: La ruptura repetida de los glóbulos rojos provoca anemia, ictericia y fatiga.
  • Obstrucción capilar: En la malaria por Plasmodium falciparum, los glóbulos rojos infectados se adhieren a las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede provocar daño a órganos vitales como el cerebro (malaria cerebral), los riñones y los pulmones.
  • Respuesta inmunitaria: La fiebre y otros síntomas se deben a la liberación de mediadores inflamatorios en respuesta a la destrucción de los glóbulos rojos y la liberación de merozoítos en el torrente sanguíneo.

6. Síntomas

Los síntomas de la malaria varían en función de la especie de Plasmodium y el estado inmunológico del individuo

  • Fiebre cíclica: La fiebre tiende a ser intermitente y se presenta en ciclos regulares (cada 48 o 72 horas, dependiendo de la especie de Plasmodium).
  • Escalofríos y sudoración: Los pacientes suelen tener episodios de escalofríos seguidos de sudoración profusa.
  • Dolor de cabeza.
  • Fatiga extrema.
  • Dolor muscular y articular.
  • Anemia: Resultante de la destrucción de glóbulos rojos.
  • Ictericia: Por la destrucción masiva de glóbulos rojos y la liberación de bilirrubina.

a. Complicaciones graves:

  • Malaria cerebral: Se produce cuando P. falciparum afecta el cerebro, causando confusión, convulsiones y coma.
  • Fallo renal agudo.
  • Edema pulmonar.
  • Anemia severa.
  • Shock y muerte: En casos graves, especialmente sin tratamiento.


7. Diagnóstico

El diagnóstico se basa en la identificación de Plasmodium en la sangre del paciente.

  • Microscopía de sangre: El examen de frotis sanguíneo teñido con Giemsa permite identificar las diferentes etapas de Plasmodium dentro de los glóbulos rojos.
  • Pruebas rápidas de antígeno (RDT): Estas pruebas detectan antígenos específicos del parásito en la sangre y son útiles en situaciones donde la microscopía no está disponible.
  • PCR: Se utiliza en laboratorios avanzados para detectar ADN del parásito y determinar la especie de Plasmodium.

8. Tratamiento

El tratamiento de la malaria depende de la especie de Plasmodium, la gravedad de la infección y la resistencia a los medicamentos en la región.

a. Tratamiento estándar:

  • Artemisinina combinada (ACT): Es el tratamiento de primera línea para la malaria por Plasmodium falciparum. Este combina derivados de la artemisinina con otro antimalárico para prevenir la resistencia.
  • Cloroquina: Es efectiva para tratar la malaria por Plasmodium vivax, P. malariae y P. ovale en áreas donde no hay resistencia. Sin embargo, en muchas regiones, P. falciparum ha desarrollado resistencia a la cloroquina.
  • Primaquina: Se utiliza para eliminar las formas latentes (hipnozoítos) de P. vivax y P. ovale en el hígado, evitando recaídas.

b. Tratamiento de malaria grave:

  • En los casos de malaria severa por P. falciparum, se utilizan medicamentos intravenosos como artesunato intravenoso o quinina intravenosa, junto con medidas de soporte.


9. Prevención

La prevención de la malaria se basa en controlar la transmisión mediante varias estrategias:

  • Control del vector: Uso de mosquiteros impregnados con insecticida, fumigación de interiores y eliminación de criaderos de mosquitos.
  • Profilaxis antimalárica: Viajeros a áreas endémicas pueden tomar medicamentos profilácticos como atovacuona-proguanil, doxiciclina o mefloquina.
  • Vacunación: La vacuna RTS,S ha sido desarrollada y se está implementando en algunos países africanos como una herramienta adicional en la lucha contra la malaria.