La Generación del 27 fue un grupo de jóvenes escritores españoles unidos por estrechos lazos de amistad y por inquietudes culturales y literarias comunes. Su nombre procede del homenaje que realizaron a Luis de Góngora en 1927.
Características principales:
- Acusadas características individuales.
- Intereses poéticos comunes.
- Una estrecha relación personal.
I. Rasgos:
1. Formación Universitaria:
Existía una estrecha amistad entre ellos y sus primeros libros publicados datan de varios años antes. También hubo una rica convivencia en la Residencia de Estudiantes y una participación en los actos culturales organizados por ella. Sus investigaciones en el Centro de Estudios Históricos y la publicación de poemas en las mismas revistas fueron muestras de la fecundidad de su labor común en el periodo anterior a la guerra.
2. Origen acomodado:
La mayoría provenía de familias con una buena posición económica.
3. Actitudes liberales y progresistas:
Poseían un talante abierto, liberal y progresista. Estudiaron en la Universidad y tuvieron una tarea investigadora y profesoral en universidades de todo el mundo. Conocían la literatura extranjera y española. La defensa de la República les costó la muerte o el exilio.
4. Deseo de modernizar la poesía española:
Buscaban una estética que equilibrara la renovación y la tradición. A diferencia de otros vanguardistas, reconocieron que para renovar e innovar no era necesario romper con la tradición literaria. No querían huir de nada: el arte debía integrar herencias tanto de antecedentes inmediatos como lejanos, ya sea en su vertiente culta o en la popular.
II. Evolución del Grupo:
Se pueden distinguir tres grandes etapas:
a) Desde los comienzos hasta 1927:
Predomina una preocupación eminentemente estética, cercana al arte puro. Esto se debe a dos influencias: el magisterio de Juan Ramón Jiménez y los primeros movimientos de vanguardia (Ultraísmo y Creacionismo). El anhelo de la perfección formal y la inclinación por el arte puro hacen que los poemas de esta época resulten herméticos y algo fríos.
b) Segunda etapa (1927-1936):
Se aprecia un proceso de rehumanización de la poesía debido a la coincidencia de una serie de circunstancias:
- El influjo del Surrealismo, movimiento opuesto a la poesía pura, que supone una exploración del subconsciente y un reflejo de los más hondos sentimientos humanos.
- Las circunstancias políticas y sociales provocan actitudes más comprometidas con la realidad del momento.
- El enfriamiento de las relaciones del grupo con Juan Ramón Jiménez coincide con el influjo del poeta chileno Pablo Neruda, partidario de una “Poesía sin Purezas”.
c) Tercera etapa (después de la Guerra Civil):
Las terribles circunstancias de la guerra y sus consecuencias rompen la unidad del grupo. Muerto Federico García Lorca, los demás miembros optan por dos caminos: el exilio o quedarse en España. Aunque cada uno sigue su camino, en todos seguirá y se intensificará el proceso de rehumanización que empezó a partir de 1927.
III. Representantes y Obras Poéticas:
1. Pedro Salinas (1891-1951):
Fue crítico literario y autor de varias obras teatrales. Tras una primera etapa que sigue las líneas trazadas por la poesía pura, se consagra con dos libros: La voz a ti debida y Razón de Amor, que lo convirtieron en el poeta del amor por excelencia. Su visión del amor es antirromántica: supone un sentimiento jubiloso que le da sentido a la vida.
2. Jorge Guillén (1893-1984):
El máximo representante, dentro del grupo, de la poesía pura, más por su condensación y depuración expresiva que por los contenidos. Su obra poética se puede dividir en dos grandes ciclos que abordan la realidad desde enfoques diferentes:
- Cántico, de temática vitalista, refleja una concepción optimista de la vida y una contemplación gozosa de todo lo creado.
- Con Clamor disminuye el optimismo al dar entrada a los elementos negativos de la historia: la miseria, la guerra, el dolor, la muerte… No obstante, no es un libro angustioso ni pesimista.
Su estilo poético es el más cercano a la poesía pura: cuidada elaboración y disposición tipográfica de los versos, ordenación precisa de los poemas, sensación de limpieza y orden. El sentimiento se subordina a la inteligencia, versos cortos y estrofas condensadas. El sustantivo nombra lo esencial de las cosas y predomina sobre las demás categorías gramaticales. La obra de Guillén está estructurada como un todo orgánico. Su título global es Aire Nuestro, compuesta por cinco libros: Cántico, Clamor, Homenaje, Y otros Poemas y Final.
3. Gerardo Diego (1896-1987):
Su producción poética está muy marcada por los movimientos de vanguardia, especialmente por el Creacionismo – en una ocasión definió la labor poética como “crear lo que nunca veremos”-, aunque sin abandonar los temas y formas de la poesía tradicional. Obras: El Romancero de la Novia, Imagen o Manual de Espumas.
4. Dámaso Alonso (1898-1990):
Desarrolló una magnífica labor crítica y filológica con numerosos estudios sobre diversas etapas de la literatura española. Distinguimos dos etapas diferenciadas por la Guerra Civil:
- La anterior a la Guerra Civil: cultiva una poesía de corte juanramoniano que muestra una preocupación eminentemente estética (El Viento y el Verso).
- Tras la contienda: se convierte en uno de los máximos representantes de la denominada “poesía arraigada”: una poesía dominada por la desesperanza y la angustia existencial (Hijos de la Ira).
5. Vicente Aleixandre (1898-1984):
En 1977 fue Premio Nobel de Literatura, en reconocimiento a la labor de todo el grupo en la historia de la literatura hispana y mundial. Buena parte de su obra poética está escrita bajo la influencia del Surrealismo, como se aprecia en Espadas como Labios y La destrucción o el Amor. Tras la guerra se observa un acercamiento del poeta hacia el ser humano, en una actitud más solidaria ante el dolor y las injusticias sociales. El tema central es el deseo de fusión del hombre con la naturaleza. Su lenguaje es deudor del Surrealismo, con metáforas complejas, imaginativas e irracionales. Poema de verso libre. Espadas como Labios.
6. Luis Cernuda (1902-1963):
Su poesía se reúne en un único volumen titulado La Realidad y el Deseo, que ilustra el tema de su obra: la frustración y el dolor del poeta ante una realidad que le impide llevar a cabo sus deseos de realización personal. El tema central es el amor insatisfecho. Su anhelo de belleza y placer tropieza con un mundo vulgar. El estilo: su lenguaje es sencillo y el tono coloquial y conversacional, que influirá en poetas posteriores.