El Imperio Español bajo los Austrias: Carlos V y Felipe II

El Imperio de Carlos V: Conflictos Internos

Las Comunidades

Carlos I de España heredó un vasto imperio de sus abuelos: las coronas de Castilla y Aragón (Reyes Católicos), Austria, los derechos al Imperio Alemán (Maximiliano I) y los dominios de Borgoña y Países Bajos (María de Borgoña). Criado en Flandes, desconocía la lengua, las costumbres y la política castellana. Su aspiración al título imperial marcó su reinado, descuidando los asuntos internos de Castilla. Esto provocó la sublevación de las ciudades castellanas, conocidas como las Comunidades. Los comuneros reclamaban:

  • Protección de la industria
  • Respeto a las leyes de Castilla
  • Mayor participación política

Formaron la “Junta Santa” para presentar sus peticiones al rey. La revuelta culminó con la derrota de los sublevados en la batalla de Villalar (1521) y la ejecución de sus líderes: Bravo, Padilla y Maldonado.

Las Germanías

En la Corona de Aragón, estallaron las Germanías, revueltas antinobiliarias que buscaban la democratización de los cargos municipales y la mejora de los arrendamientos campesinos. Carlos I se alió con la nobleza para reprimir la revuelta, resultando en la derrota de los agermanados.

La Monarquía Hispánica de Felipe II: La Unidad Ibérica

Con Felipe II, la Monarquía Hispánica alcanzó su máximo esplendor. Madrid se convirtió en la capital en 1561. Felipe II, ferviente defensor del catolicismo, influyó en sus decisiones políticas, prohibiendo la entrada de libros, la salida de estudiantes al extranjero y fortaleciendo la Inquisición.

Política Interior

  • Sublevación de las Alpujarras (1568): Motivada por la prohibición del idioma, costumbres y religión musulmana. Sofocada por Don Juan de Austria.
  • Asunto del Príncipe Carlos (1568): El heredero al trono fue detenido por una posible conspiración contra su padre y murió en circunstancias misteriosas.
  • Asunto de Antonio Pérez: Secretario del rey, encarcelado por sospechas de asesinato.

Política Exterior

  • Guerra contra Francia: Victoria española en la batalla de San Quintín (1557).
  • Sublevación de los Países Bajos: Fracaso español en la imposición del catolicismo.
  • Problema Turco: Felipe II formó la Liga Santa (Venecia, Papado y España) que frenó el avance turco en el Mediterráneo con la victoria en la batalla de Lepanto (1571).
  • Guerra contra Inglaterra: Derrota de la Armada Invencible (1588), causada por el apoyo inglés a los protestantes de Flandes.
  • Unidad Ibérica (1580): Anexión de Portugal y sus posesiones tras la muerte de Don Sebastián, culminando la expansión territorial española. Portugal mantuvo sus instituciones, moneda, lengua y fiscalidad.

El Modelo Político de los Austrias: La Unión de Reinos

Los Austrias implementaron una monarquía multinacional descentralizada y compleja, bajo la primacía de Castilla, basada en un sistema polisinodial iniciado por los Reyes Católicos.

La administración central se componía del Consejo de Estado (política exterior y altas cuestiones de Estado), Consejos territoriales y temáticos (Hacienda, Inquisición, Guerra, etc.). Felipe II creó la figura del secretario real (intermediario entre Consejos y monarca) y las Juntas (comités para temas específicos).

La administración territorial incluía virreyes y gobernadores (delegados del rey), las Cortes (órgano consultivo), Audiencias y Chancillerías (tribunales de justicia). La administración local se encargaba a los corregidores o la oligarquía urbana.

Economía y Sociedad en la España del Siglo XVI

La población aumentó un 15% en el siglo XVI, alcanzando los 8 millones de habitantes, con un importante crecimiento urbano (Madrid, Sevilla…). La economía experimentó dos fases:

  • Primera mitad del siglo XVI (ascendente): Desarrollo de la agricultura, ganadería, manufacturas y comercio con ultramar.
  • Segunda mitad del siglo XVI (depresiva): Bancarrotas del Estado por gastos bélicos y burocráticos, decadencia de la agricultura, manufacturas y comercio (piratería), inflación (“Revolución de los precios”) causada por la llegada de oro y plata de Indias.

La sociedad estamental se mantuvo, dividida en privilegiados (nobleza y clero) y no privilegiados (burguesía, campesinado, marginados…). Los sectores más desfavorecidos sufrieron las consecuencias de la fase depresiva (miseria, picaresca, bandolerismo…).

Cultura y Mentalidades: La Inquisición

La defensa del catolicismo por parte de los Austrias Mayores fomentó el retroceso cultural y social, con medidas como la prohibición de libros y la salida de estudiantes al extranjero. La Corona española se debatió entre el reformismo renacentista y la Contrarreforma europea.

Aumentaron los mecenas, universidades, estudiantes e imprentas, impulsados por el humanismo. La producción cultural estuvo condicionada por el papel político español. La Inquisición, activa contra la herejía protestante, brujería y otras prácticas, tuvo jurisdicción sobre todos los reinos y se usó como arma política.

Los viajes ultramarinos impulsaron la Astronomía, Cartografía y Botánica. La arquitectura evolucionó del gótico al plateresco (Universidad de Salamanca) y herreriano (El Escorial).