España: Transición Democrática y Constitución de 1978

El Proceso de Transición a la Democracia y la Constitución de 1978

El cambio desde la dictadura a la democracia, conocido como “La Transición”, abarcó desde la muerte de Franco (20 de noviembre de 1975) hasta la victoria del Partido Socialista en las elecciones de octubre de 1982.

La Muerte de Franco y el Inicio del Cambio

El 20 de noviembre de 1975, Franco falleció. Dos días después, Juan Carlos I fue coronado rey ante las Cortes franquistas, jurando lealtad a los Principios del Movimiento Nacional. Sin embargo, el franquismo, ante la oposición democrática, la presión internacional y la voluntad del monarca, no pudo sobrevivir a su creador.

Las Alternativas para el Futuro

Tras la muerte de Franco, surgieron tres alternativas:

  • Continuidad del régimen franquista: Defendida por el “búnker”, los sectores más inmovilistas del franquismo.
  • Ruptura democrática: Propuesta por la izquierda antifranquista y la oposición democrática, buscando un cambio inmediato.
  • Reforma política: Impulsada por los aperturistas del régimen y el Rey, buscando una transición gradual hacia la democracia. Esta fue la opción que finalmente se impuso.

El Gobierno de Arias Navarro (1975-1976)

El Rey mantuvo a Arias Navarro como presidente para tranquilizar a los franquistas. Sin embargo, el gobierno se mostró receloso ante la democratización. España vivió un clima de movilizaciones y huelgas, el terrorismo aumentó su actividad, y la oposición se unió en la “Platajunta”. Ante la incapacidad de Arias Navarro, el Rey forzó su dimisión.

El Primer Gobierno de Adolfo Suárez (1976-1977)

El Rey nombró a Adolfo Suárez presidente. Suárez debía ganarse tanto a los aperturistas del franquismo como a la oposición. Su programa incluyó amnistía para presos políticos, libertad sindical y elecciones. Concedió una amplia amnistía e inició el diálogo con la oposición, incluyendo a Felipe González (PSOE) y Carrillo (PCE).

La Ley para la Reforma Política

Suárez impulsó la Ley para la Reforma Política, clave para la transición. Esta ley reconocía la soberanía popular y establecía el procedimiento para crear nuevas Cortes. Fue aprobada en referéndum el 15 de diciembre de 1976.

Hacia la Democracia

La aprobación de la ley fue un paso crucial, pero existieron problemas: el terrorismo, con el asesinato de los abogados laboralistas de Atocha, y la legalización del Partido Comunista (PCE), que generó tensiones con el Ejército. Suárez legalizó el PCE en abril de 1977, tras lo cual el partido aceptó la bandera nacional y la monarquía.

Las Primeras Elecciones Democráticas

Suárez disolvió el Tribunal de Orden Público, el Sindicato Vertical y el Movimiento Nacional, amplió la amnistía y convocó elecciones. El 15 de junio de 1977 se celebraron las primeras elecciones democráticas, en las que la UCD, liderada por Suárez, obtuvo la victoria.

El Periodo Constituyente (1977-1979)

Suárez formó gobierno y se centró en la crisis económica, la redacción de la Constitución y el terrorismo.

Los Pactos de la Moncloa

En octubre de 1977 se firmaron los Pactos de la Moncloa para afrontar la crisis económica. Estos pactos lograron frenar la inflación, establecer límites a los aumentos salariales y crear el INEM.

La Constitución de 1978

Se creó una ponencia para redactar la Constitución. Tras un proceso de consenso, la Constitución fue aprobada en referéndum el 6 de diciembre de 1978. La Constitución establece la soberanía nacional, una amplia declaración de derechos y libertades, la monarquía parlamentaria, la división de poderes, la no confesionalidad del Estado y el derecho a las autonomías.

El Fin de la UCD

Tras la aprobación de la Constitución, la UCD volvió a ganar las elecciones. Sin embargo, el desgaste por la descentralización autonómica, el terrorismo, la crisis económica y las diferencias políticas llevaron a la dimisión de Suárez. El 23 de febrero de 1981, durante la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo (UCD), se produjo el fallido golpe de Estado de Tejero. Calvo Sotelo fue nombrado presidente, pero la UCD se desmembró, y en las elecciones de 1982, el PSOE obtuvo la mayoría absoluta.