Filosofía de Ortega y Wittgenstein: Perspectivismo, Lenguaje y Realidad

Ortega y Gasset

Para Ortega, la filosofía aspira al conocimiento de la totalidad de la realidad. Critica tanto el Realismo, que comprende la realidad como independiente del sujeto, como el Idealismo, que la reduce a ideas del sujeto. Para Ortega, la verdadera realidad reside en la interacción del yo con las cosas, ambos dependientes en su constitución y desarrollo. Esta relación se da en la vida, fundamento de toda realidad. Tanto el yo como el mundo se constituyen a lo largo de la vida, que se convierte en la Realidad Radical.

Ortega define la vida como:

  1. Autoconciencia de vivir: reconocerse como conciencia.
  2. Encontrarse en una circunstancia: relación mutua entre la vida y el mundo.
  3. Algo imprevisto: no hay elección en vivir aquí y ahora. Este imprevisto genera la vida como un problema que exige decisión personal. Relacionado con este proyecto, la vida es temporalidad, futuro permanente.

Siendo la vida primordial, también lo es la razón, la única capaz de clarificar la vida. Surge así el Raciovitalismo, donde la razón no es algo externo o anterior a la vida, sino que se encuentra en la vida concreta de cada uno. Es una razón vital y personal, pero inmersa en una realidad social e histórica. La razón vital se realiza en y desde la vida, siempre concreta y, por tanto, histórica. Razón vital y razón histórica son una misma. Esta razón asume la vida como temporalidad y comprende la realidad en su devenir. No acepta nada como fijo, sino que estudia el proceso de la realidad. Por ello, es móvil, un proceso inacabado.

Surge el Perspectivismo: cada individuo tiene una verdad propia, perspectivas de la realidad, no verdades absolutas. La realidad se da en perspectivas diversas y cambiantes, desde las que cada individuo da significado, valor y sentido, creando su mundo propio. Estas perspectivas individuales pueden unirse formando otras más amplias, pero nunca se alcanza la verdad absoluta.

El yo posee Ideas y Creencias: las ideas tienen contenido intelectual; las creencias, contenido vivencial o existencial.

Para Ortega, la historia se analiza según las generaciones, que se cumplen en periodos de 15 años. Hay dos tipos: las establecidas (mayores con control social) y las emergentes (nuevas). La ruptura entre ambas genera crisis social.

Ortega distingue entre hombre masa (satisfecho de sí mismo, creyéndose completo) y minoría selecta (se exige a sí mismo, busca su desarrollo máximo). El problema actual es que el hombre masa gobierna, imponiendo su capricho uniformador, irrespetuoso con la libertad individual.

Wittgenstein

En el Tractatus, Wittgenstein estructura la realidad como aquello lógicamente posible. El mundo es el conjunto de hechos existentes dentro de las posibilidades. Los hechos son el estado de cosas actual. Las cosas son lo individual, existente y fijo. Wittgenstein busca conocer los límites de lo que tiene sentido. Traza los límites del lenguaje y su relación con el pensamiento.

Primera Etapa (Tractatus)

Defiende la isomorfía: relación entre realidad y lenguaje que permite hablar del mundo. La estructura lógica del lenguaje se relaciona con la forma lógica del mundo. El lenguaje fija el límite de lo conocible racionalmente. Las proposiciones lingüísticas tienen sentido cuando la isomorfía es aplicable. Sentido no implica verdad. Una proposición es verdadera cuando coincide con un hecho. El lenguaje solo habla de la realidad cuando se aplica la isomorfía. Las proposiciones verdaderas son el contenido de la ciencia. Aquellas donde no se aplica la isomorfía son pseudoproposiciones:

  1. Lógicas y matemáticas: carecen de sentido, pero no son absurdas, pues son útiles para analizar el lenguaje.
  2. Filosóficas: la verdad filosófica aspira a estar más allá de la experiencia, un sinsentido. Las cuestiones filosóficas no tienen respuesta. La filosofía critica el lenguaje y analiza los límites de la ciencia.

Segunda Etapa (Investigaciones Filosóficas)

Abandona la isomorfía y defiende los juegos de lenguaje y el concepto de uso. El significado está en el uso del lenguaje, en un juego entre hablante y oyente. El significado lo determina el juego de lenguaje. La precisión reside en las reglas del uso concreto. Saltarse las reglas impide la comprensión. Los usos del lenguaje proceden del lenguaje en la situación concreta y de la tradición.

Wittgenstein replantea el problema de la filosofía, fascinada por problemas que trascienden nuestra comprensión. Su problema es el mal uso del lenguaje. La filosofía debe aclarar los términos del lenguaje. Su función es describir las estructuras del lenguaje y del conocimiento, esclareciendo las reglas y el uso correcto. Los límites del lenguaje marcan de qué se puede hablar con sentido. La filosofía clarifica el lenguaje.

La ética y la estética trascienden el mundo, al mirar objetos como obras de arte y sujetos como seres morales. Modifican el sentido del mundo como característica humana.

Finalmente, el problema del sentido de la vida. No se puede hablar de la muerte ni de la vida eterna por falta de experiencia. Estas reflexiones llevan a lo místico, inexpresable, que se muestra en el sentimiento. Al ser sentimiento, no se puede hablar de ello.