Evolución de la Literatura Norteamericana: Autores y Obras Clave del Siglo XIX y XX

La Literatura Norteamericana del Siglo XIX: Del Romanticismo a la Transición al Siglo XX

En el terreno cultural, Estados Unidos no se reflejará como nación hasta que el poeta Emerson publique su ensayo El hombre de letras americano.

La novela americana busca su propio camino en los rasgos que singularizan la realidad de la nueva nación: tradición bíblica, importancia de la naturaleza y de la lucha del hombre por dominarla, huida de los formalismos y personajes que encarnan la acción. Es una literatura saturada de ansia de libertad, donde los autores llevan su experiencia vital a la literatura.

La narrativa norteamericana del siglo XIX pasa por tres momentos:

1. La narración del Romanticismo al Realismo

El primer narrador norteamericano de renombre es Washington Irving. En la línea del Romanticismo destacan Cuentos de la Alhambra, ambientados en la Edad Media española, y La leyenda de Sleepy Hollow, cuento entre gótico y policial.

James Fenimore Cooper, autor de El último mohicano (llevada al cine por Michael Mann), se sitúa también entre el Romanticismo y el Realismo, ya que en esta novela los personajes están dominados por sus pasiones, y añade minuciosas descripciones de la naturaleza.

La importancia de Cooper se debe a que esta novela está ambientada en los orígenes de la colonización, y narra el choque entre la cultura indígena y la europea, siendo así la iniciadora del género del oeste.

La figura más interesante de este momento es Edgar Allan Poe, cuya narrativa puede clasificarse en tres categorías:

  • Relatos policiales.
  • Narraciones de aventuras y viajes extraordinarios, como El escarabajo de oro.
  • Cuentos de terror, que presentan lo más oscuro del alma humana, su brutalidad y maldad.

El carácter común es la combinación de lo inexplicable (Romanticismo) y la lógica racional (Realismo).

2. El esplendor de la narrativa norteamericana

Nathaniel Hawthorne. Escribe novelas que exploran temas como el pecado y sus consecuencias. Su obra maestra, La letra escarlata, aborda el drama de una mujer condenada socialmente a la marginación por haber cometido adulterio.

Herman Melville. Es autor de Moby Dick. En esta novela asistimos a una expedición que organiza el capitán Acab para capturar a Moby Dick, una enorme ballena blanca que, en una expedición anterior, le había dejado sin una pierna. Esta persecución simboliza el afán del ser humano por controlar la naturaleza.

Mark Twain. Utilizó para los temas de sus relatos la vida cotidiana, sus recuerdos de niñez y las costumbres populares. Sus obras más destacadas son Las aventuras de Tom Sawyer, donde relata las travesuras de un grupo de niños, y Las aventuras de Huckleberry Finn, que narra la escapatoria por el río Mississippi del joven protagonista con un esclavo fugitivo.

Stephen Crane. Se decanta por el Realismo en su novela La roja insignia del valor, donde realiza un profundo análisis psicológico de un joven soldado en la Guerra de Secesión.

3. La transición hacia el siglo XX

Destaca Henry James, con novelas en las que destacan temas como el choque entre las culturas norteamericana y europea, las reformas sociales desde una perspectiva progresista o el mundo de lo paranormal y misterioso. Sobresale su novela Otra vuelta de tuerca.

Poesía Norteamericana: Walt Whitman

El primer gran poeta norteamericano es Walt Whitman. Sus poemas se fueron publicando bajo el título de Hojas de hierba. Es el cantor de América, de su geografía y de sus gentes. En él hay optimismo, fe en el ser humano y amor a la vida. Trata también los temas de su tiempo y se manifiesta a favor de la igualdad y la democracia.

El Renacimiento del Cuento en el Siglo XIX

El siglo XIX es el gran siglo del cuento. En la primera mitad, algunos escritores como los hermanos Grimm en Alemania recogen por escrito narraciones populares de transmisión oral: Caperucita, Pulgarcito, La Cenicienta

En Norteamérica hay que mencionar a Washington Irving por cuentos como el de Rip van Winkle, y a Edgar Allan Poe. Es el gran impulsor del género y puede que sea el primer escritor estadounidense con una nueva forma de entender la ficción y la poesía. Prefiere los detallados análisis psicológicos a la acumulación de acciones externas, en vez de la descripción de lugares. En cuanto a los contenidos, predomina el terror, el misterio, crímenes, personajes en situaciones límite, las pesadillas, los espectros, lo insólito y lo sobrehumano. Los relatos más conocidos son: “Manuscrito hallado en una botella”, “El escarabajo de oro”, “El corazón delator”, “El gato negro”, “La caída de la casa Usher” o “Los crímenes de la calle Morgue”.

El ruso Antón Chéjov es también un gran renovador del cuento. Por sus relatos breves desfilan todos los estratos sociales (médicos, artesanos, criados, aristócratas…). Los relatos apenas tienen argumento y están relatados con sencillez y objetividad. Destaca su cuento Vanka, en el que el protagonista, que es un aprendiz de zapatero, escribe a su abuelo con nostalgia. Podemos mencionar también al francés Guy de Maupassant con cuentos como El Horla, en el que el autor, a través de un diario, nos muestra las supuestas alucinaciones del protagonista. También destacan relatos como Bola de sebo y El collar.

Las Vanguardias de Principios del Siglo XX

Las vanguardias son movimientos artísticos de principios del siglo XX que proponen concepciones profundamente nuevas del arte. Suponen una ruptura con la estética anterior. Dentro de las vanguardias podemos destacar:

1. Futurismo

Nace en Italia con Marinetti, que publica el primer manifiesto futurista, de carácter antirromántico: “¡Matemos el claro de luna!”. En Rusia el Futurismo está representado por Maiakovski, que defiende la creación de palabras arbitrarias.

El Futurismo exalta la ciudad, la mecánica, la técnica y la velocidad. También defiende la acción y la guerra.

El estilo busca el dinamismo y así desaparece lo accesorio, prescindiendo de adjetivos y adverbios. Además, se destruye la sintaxis.

2. Cubismo

Nace como escuela pictórica con Las señoritas de Aviñón de Picasso. En literatura hay que mencionar a Apollinaire con sus Caligramas, que son poemas en los que la disposición tipográfica de los versos forma imágenes visuales que aluden al contenido del poema.

3. Dadaísmo

Es el precedente del Surrealismo. Fue promovido por un grupo de escritores refugiados en Suiza en la Primera Guerra Mundial y fue encabezado por Tristan Tzara. Surge como consecuencia del desencanto de la Primera Guerra Mundial. Su nombre fue elegido al azar y simula un balbuceo infantil.

El Dadaísmo es la provocación, la rebeldía pura: contra la lógica, contra las convenciones estéticas y sociales, contra el sentido común. Busca la destrucción de los valores tradicionales como la familia o el trabajo. Nace de una violenta repulsa a la racionalidad que ha inducido al absurdo de la guerra.

Expresa el caos, el absurdo y la irracionalidad. Cree en la inutilidad de todo esfuerzo creador y así se explica su técnica del “collage arbitrario” que consiste en recortar las palabras de un artículo periodístico, agitarlas en un saco e irlas ordenando según vayan saliendo.

4. Creacionismo

Fue iniciado por el poeta chileno Huidobro que, al venir a Europa, entró en contacto con los movimientos de vanguardia. El Creacionismo pretendía crear objetos a través de la metáfora. El poeta grita su independencia, crea un mundo propio, no imitativo del mundo real: se trataba de hacer un poema como la naturaleza hace un árbol. Para ello utiliza una sucesión de imágenes libres y asociaciones insólitas. Podemos destacar Altazor del propio Huidobro.

5. Expresionismo

Fue un movimiento artístico desarrollado en Alemania. Su origen está en grupos pictóricos como “El Puente”, “El Jinete Azul” y “Nueva Objetividad”. En literatura se manifiesta en autores como Kafka y Brecht. Algunas de sus características son:

  • La obra de arte ya no representa la realidad objetiva, sino el sentimiento interior del artista, cuya tensión espiritual se convierte en desesperación.
  • Se presentan así personas con crisis psicológicas o ideológicas.
  • La belleza clásica se transforma en apología de lo feo.
  • Hay gusto por lo negativo, oscuro, catastrófico o caótico.
  • Hay tendencia a la deformación de las figuras humanas y del paisaje.

6. Surrealismo

Es un movimiento vanguardista del siglo XX, cuya teoría la expuso Breton en su Manifiesto del Surrealismo. La traducción exacta de “surréalisme” es la de sobrerrealismo, una superación de la realidad más allá de lo objetivo y de lo que registra conscientemente la psique humana. Esta superrealidad nace de la interrelación entre sueño y realidad (con supremacía del primero).

Podemos mencionar algunas de sus características:

  • Escritura automática como medio de expresar el funcionamiento real del pensamiento. Se trata de escribir sin la intervención reguladora de la razón y sin preocupaciones estéticas o morales, de ahí el carácter hermético de sus textos y, por otro lado, la discutible calidad estética de sus escritos.
  • Con la escritura automática se deja aflorar el subconsciente y aparece otra realidad, la superrealidad.
  • Se aspira a una total renovación del espíritu.

Algunas de sus obras son desde Poisson soluble de Breton, hasta obras de carácter seminovelesco y semibiográfico como Nadja.

La Culminación de la Gran Literatura Americana: La Generación Perdida

La participación a última hora de los Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial (1914-1918) a favor de los aliados supuso ventajas para los Estados Unidos, que ve incrementar su mercado y fortalecer su conciencia de gran nación. Empiezan así unos años de prosperidad que convierten a Estados Unidos en la primera potencia económica del mundo. Este logro va unido a un despegue político y cultural. Son los “felices años veinte”, que se cerrarán con la caída de la bolsa de Nueva York en 1929. En esta época encuentra su mayor esplendor la Generación Perdida.

1. La Generación Perdida

  • Supone la culminación de la literatura americana. Se trata de un conjunto de jóvenes intelectuales que, decepcionados por las vivencias de la Primera Guerra Mundial de la que habían sido testigos, introducen una nueva estética en la narrativa americana.
  • Marcados por la guerra e incapaces de reintegrarse en la sociedad, se encuentran desorientados, perdidos, sin esperanzas. Critican la guerra, la falsedad de los políticos, los valores tradicionales y la opulencia de la sociedad americana.
  • En sus obras mantienen la objetividad. El narrador se convierte en un mero testigo que finge saber tan poco de los personajes como el propio lector. De esta manera, hay un distanciamiento del narrador con respecto a los personajes.
  • Hay también una visión múltiple de la realidad a través del empleo de diferentes puntos de vista y del fragmentarismo en la presentación de personajes y situaciones.

1.1. Ernest Hemingway

  • Destaca el extravío vital de sus personajes, que combaten el miedo a la muerte mediante la aventura, la violencia, el amor físico o la bebida.
  • Hay un distanciamiento de los personajes, ya que no se comentan sus sentimientos y predomina el diálogo.
  • Dentro de sus obras destacan:
    • Adiós a las armas, que ofrece una visión decepcionante del amor y de la guerra.
    • Por quién doblan las campanas, ambientada en la Guerra Civil española, es un canto al sacrificio y la solidaridad.
    • París era una fiesta, que recuerda sus años de periodista en París y sus contactos con los otros escritores de la Generación Perdida.
    • Fiesta, que se desarrolla en la Pamplona de los sanfermines.

1.2. John Dos Passos

  • Describe personajes de clase humilde en permanente lucha por la supervivencia. Es una literatura de protesta, surgida de la indignación ante las diferencias sociales.
  • En sus obras utiliza un montaje cinematográfico a base de trozos de historias, de conversaciones, recortes de prensa y todo tipo de materiales fragmentarios. El autor utiliza también el protagonista colectivo y la simultaneidad de acciones que leemos en progresión. Cela en La colmena iba a tomar estos elementos.

Entre sus obras podemos mencionar Manhattan Transfer y la trilogía USA, en las que la ciudad se convierte en el protagonista colectivo. En estas novelas nos ofrece la cara oculta de América, corroída por la frivolidad y la degeneración.

1.3. Scott Fitzgerald

  • Escribió El gran Gatsby.
  • Gatsby es un joven rico que organiza en su inmensa casa grandes fiestas, a las que invita a Daisy, casada con un millonario. Todo lo hace para conquistar a Daisy. Ella se siente halagada y da la impresión de acceder a sus pretensiones, pero no es así, sino que sigue con su marido, que también tiene una amante casada. Daisy atropella a la amante de su marido, pero terminan echándole la culpa a Gatsby, que muere por un tiro del marido de la víctima. A su entierro, apenas se presenta nadie, ni siquiera Daisy.

1.4. William Faulkner

Enmarca sus narraciones en un condado imaginario, que simboliza el mundo rural sureño en el que perduran la esclavitud, la intolerancia y los instintos primarios. Faulkner pinta un mundo caótico, macabro y grotesco.

En lo formal, usa el punto de vista múltiple, el monólogo interior, la fusión de tiempos pasado y presente y un estilo lento y cuidado en el que abunda la subordinación. La obra es un puzle de materiales que el lector ha de organizar. Destacan:

  • El ruido y la furia, ¡Absalón, Absalón! y Mientras agonizo, que narran desde diversos puntos de vista la decadencia de diferentes familias.

1.5. John Steinbeck

En sus novelas se aprecia la protesta social y la narración se presenta con sencillez.

Destacan sus obras:

  • Las uvas de la ira, sobre una familia que emigra a California en busca de trabajo durante la depresión económica de los años treinta. Esta familia sufrirá el rechazo social y salarios miserables. El hijo luchará por reivindicar los derechos de los trabajadores.

El Teatro del Absurdo y el Teatro de Compromiso en el Siglo XX

En el siglo XX se produce una renovación teatral. Algunos factores son la influencia del cine; los avances técnicos, que abren mayores posibilidades a la escenografía y luminotecnia; la relevancia del director, que imprime su propia concepción dramática.

  • El director Antoine crea el concepto de “cuarta pared” por el que los actores se desenvuelven en escena de forma natural, como si no hubiera público, al que pueden incluso dar la espalda o salir de su campo de visión.
  • Stanislavsky propone un método que conjuga lo físico, lo emocional y lo intelectual para conseguir que el actor se identifique con su personaje.

1. Teatro del Absurdo

Surge en Francia alrededor de 1950. Está relacionado con el Existencialismo que surge a raíz de las convulsas circunstancias históricas y vitales que sufre el ser humano en la primera mitad del siglo XX.

El sinsentido de la condición humana se refleja a través de argumentos sin significado, diálogos repetitivos, la incoherencia, lo ilógico y el disparate.

1.1. Luigi Pirandello

Es el precursor del teatro del absurdo. Escribe Seis personajes en busca de autor, donde presenta a seis personajes que exponen al director y a sus actores la historia real de sus propias existencias. Pirandello pretende que el espectador no tome a estos personajes como seres de teatro. Se reflexiona así sobre el propio teatro y su artificio.

1.2. Eugene Ionesco

Es uno de los creadores del teatro del absurdo. Dentro de sus obras destacan:

  • La cantante calva, obra en la que no aparece ninguna cantante, sino dos matrimonios y un bombero cuya charla estúpida acaba en un delirio de gritos sin sentido.
  • La lección. Un profesor, para explicar el término cuchillo, mata con él a su alumna.
  • Las sillas. Refleja la soledad y la incomunicación: dos ancianos hablan con seres imaginarios en una reunión, pero el escenario sólo se va llenando de sillas vacías.

1.3. Samuel Beckett

Critica a la sociedad en la que vive y muestra su pesimismo sobre el ser humano. Plantea temas como la imposibilidad de comunicación entre los hombres, la soledad o el sentido de la vida. Escribe:

  • Esperando a Godot, obra en la que el autor anula el escenario (un lugar extraño donde solo hay un árbol), anula también la acción y la identidad de los protagonistas (cada cual podría ser el otro sin que nada cambiase). La obra presenta la angustiosa situación de dos personajes que esperan a alguien que nunca llega.
  • Final de partida, con personajes lisiados y metidos en cubos de basura.
  • Breath, con la que el autor alcanza la absoluta simplicidad dramática: una obra sin actores, ambientada en un descampado lleno de basuras donde se oye el llanto de un niño recién nacido.

1.4. Jean Genet

Escribió Las criadas, donde dos sirvientas juegan a ser señora y criada para liberarse.

Compone El balcón, obra que transcurre en un burdel al que acuden clientes que pueden disfrazarse de diversos personajes. Al final de la obra la encargada del burdel dice a los espectadores que se vayan a casa donde todo será más falso que en el propio burdel.

2. Teatro Comprometido

2.1. Teatro Épico de Bertolt Brecht

Brecht, contrario al nazismo, hace un teatro didáctico y político con el que intenta concienciarnos de la necesidad de transformar la sociedad. El compromiso sociopolítico y las innovaciones dramáticas caracterizan su “teatro épico”. En este teatro épico se busca que el espectador presencie con cierta “distancia” lo que ocurre en escena para que pueda juzgar críticamente. Brecht denuncia la guerra, la explotación, la represión… No le gustan los héroes, sino las criaturas contradictorias de las que nos ofrece su lado más débil y humano. Entre sus obras destacan: Madre coraje y sus hijos, sobre una mujer que pierde a sus hijos en la guerra.

2.2. Dramaturgos Estadounidenses

2.2.1. Arthur Miller

Destaca su obra Muerte de un viajante. Es una crítica al sueño americano en la figura de un viajante cuya frustración le conduce al suicidio.

Escribe Las brujas de Salem, en la que ataca la “caza de brujas” del senador McCarthy.

2.2.2. Tennessee Williams

Escribe El zoo de cristal, donde aparecen personajes débiles y frustrados con problemas sociales, sexuales y mentales que se van a repetir en el resto de sus obras.