Arte Renacentista en España: Características, Etapas y Artistas

El Arte del Renacimiento en España

El Renacimiento se desarrolló en España durante casi todo el siglo XVI. Además, fueron importantes los contactos con Italia. El arte español del Renacimiento estuvo unido a la nobleza y el alto clero, por lo que se imitó principalmente en palacios y fundaciones religiosas.

Periodización del Arte Renacentista Español

El arte renacentista español se ha dividido en tres etapas a lo largo del siglo XVI:

  • a) Período Plateresco: correspondiente al primer tercio del siglo, y a la llegada del estilo.
  • b) Período Purista: desarrollado a lo largo del segundo tercio del siglo, correspondería a un estilo de mayor clasicismo.
  • c) Período Herreriano: ligado al último tercio del siglo, en el que se dio un triunfo absoluto del clasicismo coincidente con el influjo manierista.

Estilo Plateresco

Convivencia de fórmulas góticas y renacentistas, formándose un estilo de carácter protorrenacentista. Los edificios de ese momento mantuvieron las técnicas constructivas de la arquitectura gótica.

Decoración: grutescos, motivos de candelieri, columnas abalaustradas y medallones, elementos todos conocidos a través de dibujos y estampas grabadas. Poner a ambos lados de un eje las cosas de manera simétrica.

Medallones: adornos redondos propios del Renacimiento.

El estilo plateresco viene de que parece que alguien hizo las tallas de una manera orfebre, de gente que trabaja la plata.

Primeros Pasos

Lorenzo Vázquez construyó en Valladolid la portada del Colegio de Santa Cruz.

En Salamanca:

  1. La Fachada de la Universidad, donde se desarrolla un interesante programa iconográfico sobre la enseñanza ofrecida en el centro y sus patrocinadores.
  2. La Iglesia del convento de San Esteban, de Juan de Álava, con una fachada también concebida a modo de gigantesco retablo.

En Burgos, las principales intervenciones renacentistas en la catedral:

  1. La Puerta de la Pellejería de Francisco de Colonia.
  2. El maestro Diego de Siloé construyó la Escalera Dorada.

En Toledo surgió un estilo constituido por la mezcla de elementos renacentistas y mudéjares, que coincidió con los años en que el cardenal Cisneros fue arzobispo de Toledo, por lo que se ha denominado como estilo Cisneros.

El arquitecto más representativo de este estilo Cisneros fue Pedro Gumiel.

El Purismo

Los arquitectos reciben ahora una mejor formación a través de viajes a Italia, y por la llegada a España de los tratados de arquitectos italianos. Los edificios construidos en este período se caracterizan por una mayor monumentalidad y una decoración de carácter sobrio.

Principales Arquitectos del Período

  1. Alonso de Covarrubias: Tras su experiencia plateresca evolucionó hacia una mayor austeridad decorativa. Obras como la Puerta de Bisagra, en Toledo, con forma de arco triunfal monumental.
  2. Rodrigo Gil de Hontañón: La fachada de la Universidad de Alcalá de Henares, donde se aprecia la austeridad de la decoración. Idea de simetría; superposición de órdenes y el remate con un frontón triangular.
  3. Pedro Machuca: Construyó el Palacio de Carlos V en la Alhambra de Granada. Este tiene una gran monumentalidad y aspecto bramantesco. Lo estructuró con dos plantas, la inferior con columnas de orden toscano y la superior con columnas jónicas. Las fachadas exteriores, compuestas también con dos pisos.
  4. Diego de Siloé: La Catedral de Granada.

Estilo Escurialense o Herreriano

Este período se corresponde casi exactamente con el reinado de Felipe II. La arquitectura se caracteriza por una gran austeridad debida a la evolución del estilo, pero también debida al espíritu de renovación y sobriedad propiciado por la Contrarreforma emanada por el Concilio de Trento.

Motivos ornamentales como las pirámides y las esferas pétreas.

El Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

  1. El arquitecto inicial de El Escorial fue Juan Bautista de Toledo. Se formó en Italia con Miguel Ángel y trabajó posteriormente en Nápoles, hasta que en 1559 fue llamado por Felipe II para que diseñara los planos del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. La idea del monarca era la de construir un edificio que tuviera varias funciones: monasterio, colegio para la formación de religiosos, palacio y panteón real.
  2. Elevación de la fachada delantera, dando más homogeneidad al edificio. Tipología de las torres, planteadas al estilo de las de los Países Bajos.

Escultura en Castilla y León

Características de la Escultura Barroca en España

  1. Predominio absoluto de la temática religiosa. Las obras que más se realizaron fueron sepulcros, sillerías de coro y sobre todo retablos.
  2. Fuerte carácter realista, por lo que carece de la búsqueda de la ”belleza ideal” italiana.
  3. Gran expresividad en buena parte derivada de la escultura gótica.
  4. Entre los materiales empleados estuvieron el mármol, el alabastro y el bronce, pero especialmente se utilizó la madera, tallada y policromada. La piedra se destinaba sobre todo a la escultura funeraria y a la decoración.

Fue el momento de máximo esplendor en la escultura renacentista española. En este período se asentaron definitivamente y con fuerza las formas renacentistas, si bien no llegó a introducirse el sentimiento paganizante italiano. Esta etapa estuvo dominada por la personalidad de dos grandes escultores:

  1. Alonso Berruguete: Siendo joven marchó a Italia donde conoció a Miguel Ángel, copió el Laocoonte y sintió admiración por Donatello. A su regreso se instaló en Valladolid, desarrollando un estilo muy personal caracterizado por un fuerte nerviosismo y expresividad, con figuras estilizadas y con fuertes contorsiones (figura serpentinata), llegando a expresar la fealdad y enlazando su obra con el Manierismo. Entre sus obras destacaron el Retablo de Mejorada de Olmedo, el Retablo de San Benito y el Sacrificio de Isaac. En Toledo, realizó la Sillería del coro de la catedral, donde realizó figuras de gran movimiento, que además, en el caso de Adán y Eva, son importantes ejemplos del tratamiento del desnudo.
  2. Juan de Juni: Nació en Borgoña y se formó en Italia. En su obra unió la fuerza de la escultura borgoña del final del gótico con la estética italiana marcada ya por el manierismo, incorporando finalmente el expresionismo hispano. Trabajó en Valladolid, donde realizó esculturas en madera con figuras pesadas y corpulentas de fuerte musculatura, que visten amplias telas de múltiples plegados, favoreciendo los efectos de claroscuro. Por otra parte, estas figuras son altamente expresivas en su gesticulación, como se aprecia en el Entierro de Cristo de composición simétrica, en la que sobresale el desnudo realista del cuerpo de Jesucristo y la influencia de Miguel Ángel en algunas figuras. En sus retablos abandonó el sistema de división en calles y cuerpos para lograr una mayor expresividad. Así sucede en los Retablos de la iglesia de Santa María de la Antigua de Valladolid, y de la catedral de El Burgo de Osma, en Soria.

Características de la Pintura Española del Renacimiento

  • Se produjo un predominio de la temática religiosa.
  • Introducción de las formas italianas.
  • Predominio de empleo del óleo sobre tabla.

El Greco

El nombre de “El Greco” es una deformación de “El Griego”, como se llamó cuando estuvo en España. El Greco forjó un estilo personal debido a la influencia que recibió en los diversos lugares en que residió. En Roma tuvo influencias de Miguel Ángel y de la pintura manierista. Adquiriendo la fuerza muscular en sus representaciones. Tras un breve paso por Madrid se trasladó a Toledo y allí vivió hasta su fallecimiento.

El paso por España marcó una nueva etapa evolutiva, en la que poco a poco las figuras se fueron alargando y retorciendo más, una estética manierista, creciente espiritualidad y los personajes no pesan y flotan en el espacio.

Expolio de Cristo: manierismo de las figuras patente. La composición estaba dominada por la mancha roja de la túnica de Cristo. El rostro de Jesucristo manifiesta una gran espiritualidad.

El Greco pretendió trabajar para el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, para el que pintó el lienzo del Martirio de San Mauricio. No se colgó en el Monasterio, pues su estética, auténticamente manierista, no se adaptaba bien al gusto español de aquel momento.

Apartado del arte de la corte, se asentó definitivamente en Toledo, realizando los encargos que le hicieron distintos conventos, iglesias y particulares.

Otros Géneros en la Pintura de El Greco

Retratos: entre estos cabe destacar el del Caballero de la mano en el pecho.