El Arte Griego
El arte griego se caracteriza por su búsqueda de la perfección y la armonía, influyendo profundamente en el arte occidental. Destacan sus órdenes arquitectónicos y esculturas que representan ideales de belleza y proporción.
2. Los Órdenes Arquitectónicos
Los órdenes arquitectónicos son variantes de columnas y elementos de cobertura de los edificios, cada uno con características distintivas.
El Orden Dórico
El orden dórico fue el más antiguo y sobrio, propio de los dorios. La columna dórica carece de basa, arrancando directamente del estilobato. El fuste, originalmente monolítico, está compuesto por tambores y cubierto de estrías. El capitel dórico tiene un equino y un ábaco cuadrangular. El entablamento, que soporta la techumbre, consta de arquitrabe, friso y cornisa. La cubierta es plana, con tejado a doble vertiente, creando frontones triangulares con tímpanos decorados.
El Orden Jónico
El orden jónico, propio de las islas de Jonia y Asia Menor, es más esbelto y elegante que el dórico. Las columnas jónicas tienen basa. El fuste es acanalado y el capitel está decorado con volutas. El arquitrabe jónico está dividido en tres bandas horizontales y el friso es continuo, con relieves.
El Orden Corintio
El orden corintio se distingue del jónico por sus mayores dimensiones y un capitel con dos filas de hojas de acanto y volutas pequeñas en los extremos.
El Partenón
El Partenón es un templo griego dedicado a la diosa Atenea. Fue financiado por Pericles en la Acrópolis de Atenas (447-432 a.C.) como símbolo de poder. Pertenece al estilo dórico clásico.
Este templo rectangular tiene una planta de peristilo y una gran cella interior. Las columnas dóricas generan equilibrio y armonía. Construido con mármol y técnicas avanzadas, las esculturas del friso representan escenas mitológicas y celebraciones atenienses, honrando a Atenea y reflejando el poder de Atenas.
El Coliseo
El Coliseo, o Anfiteatro Flavio, fue construido bajo el emperador Vespasiano en Roma (70-80 d.C.). Es un símbolo del arte romano.
Situado en el centro de Roma, es un anfiteatro elíptico. Su estructura exterior tiene arcos y columnas de órdenes dórico, jónico y corintio. Construido con piedra travertina, concreto y ladrillo, tiene bóvedas de arista. Decorado con estatuas y relieves, servía para espectáculos públicos, reflejando el poder de Roma.
La Maison Carrée
La Maison Carrée es un templo romano construido alrededor del año 16 a.C. en Francia, promovido por el emperador Augusto. Refleja la influencia griega y etrusca.
La planta rectangular con pronaos profundo está rodeada por columnas corintias. Su diseño destaca por la simetría y verticalidad. Construida en piedra caliza, tiene una decoración sencilla. Originalmente era un templo religioso, transmitiendo majestuosidad y armonía.
Basílica de Santa Sofía
La Basílica de Santa Sofía, en Estambul, fue construida por Antemio de Tralles e Isidoro de Mileto bajo el emperador bizantino Justiniano I. Es una obra maestra del arte bizantino.
Mezcla elementos basilicales y de planta central, con una gran cúpula central. Su exterior sencillo contrasta con el interior rico, decorado con columnas, arcos y mosaicos de mármol y oro. Construida con piedra y ladrillo, tiene columnas corintias y bóvedas de cañón. Inicialmente fue una basílica cristiana, luego mezquita, y hoy es museo.
Hermes con el niño Dionisio
Hermes con el niño Dionisio es una escultura atribuida a Praxíteles. Encargada como obra religiosa, Hermes sostiene al niño Dionisio. Tallada con gran maestría, muestra detalles anatómicos y una textura lisa. Hermes está apoyado en un tronco, con el niño en sus brazos.
La obra es independiente de la arquitectura y se caracteriza por su naturalismo idealizado. Su composición destaca por la armonía y la proporción, con una distribución que invita a observarla en su conjunto y de perfil. Es un ejemplo de la evolución hacia una expresión emocional y psicológica más profunda en el arte griego clásico.
Doríforo
El Doríforo es una escultura clásica atribuida a Policleto. La obra, encargada para reflejar el ideal de equilibrio físico y mental, es un ejemplo del estilo clásico griego.
Originalmente en bronce, hoy se conservan copias en mármol, siendo la más famosa la del Museo Arqueológico Nacional de Nápoles. Esta estatua de bulto redondo representa a un joven atleta de pie en actitud relajada, con el peso apoyado en una pierna (contrapposto), que aporta naturalismo a la figura. La escultura es independiente de cualquier arquitectura.
Su expresión es de naturalismo idealizado, siguiendo cánones precisos para lograr proporciones perfectas. La superficie es lisa, con atención a la musculatura y anatomía. La composición, basada en equilibrio y simetría, transmite armonía y serenidad, siendo un modelo de perfección física y espiritual que influyó en el arte clásico griego.
Laocoonte y sus hijos
Laocoonte y sus hijos es una escultura helenística atribuida a Agesandro, Polidoro y Atenodoro de Rodas. Encargada posiblemente para un noble romano, es un ejemplo del estilo helenístico, caracterizado por su expresividad y dramatismo.
Actualmente, se encuentra en los Museos Vaticanos. Es una obra de bulto redondo tallada en mármol, que muestra a Laocoonte y sus hijos en una lucha desesperada contra serpientes enviadas por los dioses. El grupo escultórico captura tensión y sufrimiento en las figuras de pie y enredadas por las serpientes.
La obra es independiente de la arquitectura y utiliza un naturalismo dramático, que idealiza los cuerpos pero expresa realismo en el dolor. La superficie es detallada y pulida, con gran atención a los músculos y gestos, generando dinamismo y profundidad. La composición en espiral guía la mirada, subrayando el drama de la escena y su intenso movimiento.
Augusto de Prima Porta
El Augusto de Prima Porta es una escultura de mármol, representando al emperador Augusto. Se desconoce su autor, pero se encargó como propaganda imperial para resaltar su autoridad y virtudes. Es un ejemplo del estilo romano clásico, influido por el arte griego idealista.
Actualmente se encuentra en los Museos Vaticanos. Es una escultura de bulto redondo que muestra a Augusto de pie, con una armadura ricamente decorada y el brazo derecho alzado en gesto de mando. La obra es independiente de la arquitectura, pensada para espacios abiertos.
El estilo es naturalista e idealizado, buscando resaltar la perfección física y moral del emperador. La superficie es lisa y pulida, con gran detalle en la armadura, donde se esculpen escenas simbólicas. La composición es equilibrada y transmite autoridad y serenidad, destacando la imagen de Augusto como líder y protector del Imperio.
Mosaico de Justiniano
El Mosaico de Justiniano, ubicado en la Basílica de San Vital, fue promovido por el emperador Justiniano I como símbolo de su poder. De estilo bizantino, combina simbolismo y rigidez jerárquica característicos de esta época.
Este mosaico mural muestra al emperador en pie, rodeado por clérigos y soldados, en un espacio dependiente de la arquitectura de la basílica. Realizado con teselas de vidrio y piedras preciosas, utiliza la técnica del teselado para captar detalles vibrantes y coloridos.
La representación es antinaturalista y simbolista, centrada en la autoridad espiritual y temporal de Justiniano. La superficie del mosaico es brillante, captando la luz para destacar el aura del emperador. La composición frontal y simétrica refuerza su figura central, transmitiendo orden y solemnidad, resaltando la divinidad y el poder del imperio.