Infección vs. Enfermedad Infecciosa: Entendiendo la Diferencia

Concepto de Infección: Diferenciando Infección de Enfermedad Infecciosa

Como cualquier ser vivo, los humanos han evolucionado de forma paralela, o mejor dicho, coevolucionado con las bacterias. De tal manera que en nuestro cuerpo existen multitud de microorganismos que ejercen un efecto beneficioso para nuestra integridad. Otros microorganismos pueden ejercer un efecto contrario, pudiendo desequilibrar nuestra fisiología y desencadenar diversas patologías.

Biota o Microbiota

El término biota o microbiota (antiguo término “flora normal”) designa a un conjunto de microorganismos que se establecen y crecen sobre nuestra superficie corporal (incluyendo la luz de los tubos digestivos, boca, conductos urogenitales, etc.) sin producir efectos adversos.

Patógenos

Los parásitos son microorganismos que viven a expensas de sus hospedadores; cuando el crecimiento de las colonias de estos organismos ocasiona un daño a las células, tejidos u órganos del hospedador se les puede considerar como patógenos.

Patogenicidad y Virulencia

Patogenicidad: Capacidad potencial de provocar una enfermedad.

Virulencia: Medida del número de microorganismos necesarios para producir una enfermedad.

Infección

La infección, por lo tanto, es el crecimiento y colonización de microorganismos patógenos en un individuo. Existen algunos microorganismos que pueden convertirse en patógenos bajo ciertas circunstancias (patógenos oportunistas). La biota normal de un organismo ocupa su superficie, la cavidad bucal y tractos respiratorios, intestinales y genitourinarios. La colonización de estas zonas por parte de otras bacterias que no sean la biota normal puede provocar diversos tipos de enfermedades.

Ejemplos de Microorganismos en la Biota Normal

  • En la piel y la cavidad bucal proliferan estafilococos y levaduras que a veces originan las típicas “espinillas” de los adolescentes (Propionibacterium acnes o los estreptococos de las placas dentarias).
  • En el tracto intestinal proliferan las gram negativas como el Escherichia coli, muy útil en la síntesis de algunas vitaminas.
  • En las mucosas genitales abundan los hongos como el Candida albicans que podría dar una infección si el pH se hace más ácido de lo normal.

Desarrollo de una Enfermedad Infecciosa

Cuando un microorganismo que no pertenece a la biota normal se introduce en un organismo se puede producir el fenómeno conocido como enfermedad infecciosa. Si logra atravesar nuestras barreras naturales (piel, mucosa, etc.) gracias a una herida incisiva, abrasión o utilizando un vector como chinche, piojos, etc., puede ocurrir una proliferación del microorganismo extraño y provocar una infección. Normalmente se siguen las siguientes pautas:

Etapas de una Enfermedad Infecciosa

  1. Adhesión a los tejidos del hospedador: Las bacterias se adhieren a algunos tipos de células gracias a las fimbrias (Ejemplo: Neisseria).
  2. Invasión de las células del organismo: Los agentes patógenos se introducen en las células por endocitosis o por fusión de membranas.
  3. Desarrollo de la infección: Si el patógeno elude los mecanismos de defensa puede llegar a la sangre, diseminándose por todo el organismo y pudiendo provocar una septicemia (infección generalizada). A partir de este momento puede ocurrir el desarrollo de la enfermedad por diversas causas:
    • Lesión directa o destrucción de las células o tejidos.
    • Producción de factores de virulencia que facilitan la infección.
    • Producción de toxinas que destruyen o inhiben los enzimas celulares.

Estrategias de Evasión de los Patógenos

Para evadir las defensas del hospedador las bacterias usan diversos tipos de estrategias:

Protección frente a fagocitosis:

  • Producción de cápsulas que dificultan la unión con los fagocitos.
  • Producción de proteínas superficiales que interfieren el contacto con fagocitos.

Supervivencia a la fagocitosis:

  • Pared con sustancias que resisten a los enzimas destructivos de los fagocitos.

Evasión del reconocimiento del sistema inmunitario:

  • Algunos patógenos pueden variar sus características antigénicas para evitar ser reconocidos por los linfocitos.

Agentes Antimicrobianos y Quimioterapéuticos

Estos agentes matan, destruyen o inhiben el crecimiento de las bacterias patógenas. Entre ellos destacan los ANTIBACTERIANOS, ANTIVÍRICOS, ANTIFÚNGICOS Y ANTIPARASITARIOS.

Se denominan agentes quimioterapéuticos a aquellas sustancias químicas naturales o artificiales que son inocuos o de baja toxicidad para nuestras células y que son capaces de detener el crecimiento bacteriano y eliminar a las células responsables de la infección: sulfamidas y antibióticos.

Sulfamidas

Actúan sobre las bacterias inhibiendo la síntesis del ácido fólico. Lógicamente solo tienen efecto sobre aquellos microorganismos que sintetizan dicho ácido. Aunque en la actualidad apenas se usan debido a las alergias que pueden producir, sin embargo en combinación con el trimetropim (otro inhibidor de la síntesis de ácido fólico) resulta una terapia muy efectiva para tratar la neumonía.

Antibióticos

Son agentes producidos de forma natural por hongos y actinomicetos. Estos antibióticos naturales pueden modificarse artificialmente para potencializar algunas de sus características. Algunas de estas sustancias son de amplio espectro y destruyen gran cantidad de microorganismos, otros, sin embargo, son de espectro reducido.

Actuación de los antibióticos:

  • Inhibición de la síntesis de la pared bacteriana. Los B-Lactámicos como la penicilina inhibe la síntesis de los peptidoglicanos.
  • Altera la permeabilidad selectiva de la membrana plasmática. Generalmente de uso tópico (Polimixina B).
  • Inhibición de la síntesis proteica actuando sobre los ribosomas (eritromicina). La estreptomicina, que se incluye en este grupo, puede ser tóxica para los nervios acústicos y sobre las nefronas, por lo tanto, su uso está restringido a infecciones muy graves.
  • Inhibición de la síntesis de ácidos nucleicos, (rifamicina y fluorocitosina que actúa sobre los ARN bacterianos).

Clasificación de los Antibióticos según su Estructura Química:

  • B-lactámicos: Penicilinas y Cefalosporinas
  • Aminoglucídicos: Estreptomicinas
  • Macrólidos: Eritromicinas
  • Tetraciclinas: Clorotetraciclinas

Antivirales

Puesto que los virus utilizan nuestra propia maquinaria metabólica, los antivíricos afectarían directamente a nuestras células. No obstante, se han desarrollado recientemente diversas moléculas:

  • Rifamicina: inhibe la función de la ARN polimerasa bacteriana.
  • Azidotimidina: (AZT) inhibe la retrotranscripción inversa de los retrovirus como el del SIDA.

Antifúngicos y Antiparasitarios

Los más usados inhiben la síntesis del ergosterol, componentes de las membranas celulares en eucariotas inferiores en vez del colesterol.

  • Nistatina: Altera la permeabilidad selectiva de las membranas de la Cándida.
  • Metronidazol: Activos sobre diversos parásitos intracelulares como la Tricomonas vaginales o Giardia lamblia.
  • Cloroquinas: Compuesto sintético derivado de la quinina, activo contra el paludismo causado por un protozoo del género Plasmodium.