Evolución de los Sistemas Sociales: Desde las Sociedades Primitivas al Capitalismo

El Sistema Social

La Sociedad como Sistema

Cualquier conjunto caracterizado por estar formado por elementos diferenciables, por relaciones mutuas y por poseer propiedades específicas se puede considerar un sistema. El sistema social está formado por una serie de elementos: los individuos particulares, las personas que integran la sociedad. Lo constituyen las relaciones que estos individuos mantienen entre sí: relaciones familiares, económicas, legales, etc. (relaciones sociales).

En la sociedad destaca la importancia de las relaciones que mantienen estos individuos y que hacen que la sociedad sea un conjunto ordenado e interconectado, que posee propiedades y rasgos que no poseen sus miembros.

Evolución de los Sistemas Sociales

Las Sociedades Primitivas: El Sistema Familiar

Dentro del conjunto que forman las distintas organizaciones sociales de los primeros seres humanos, es posible destacar que estaban basadas en el sistema familiar. Las comunidades primitivas eran una extensión del grupo familiar. Las tribus y clanes estaban formados por individuos entre los que existía una relación de parentesco, real o ficticia. Los miembros de la tribu pensaban que todos provenían de un antepasado común, lo que lograba dar cohesión al grupo y limaba las inevitables diferencias que surgían entre los individuos.

Se diferencian dos tipos de sistemas primitivos:

  • Sociedades cazadoras y recolectoras: se organizan en función de un sistema económico concreto: la economía depredadora. Formas de garantizarse la pervivencia:
    • El nomadismo: deben desplazarse en busca de lo necesario para sobrevivir.
    • La cohesión social: está asegurada gracias a los profundos vínculos cooperativos que surgen de la caza colectiva.
    • La división del trabajo: se produce por primera vez, pues los hombres cazan mientras las mujeres cuidan a los hijos y recolectan.
  • Sociedades agrarias: se basan en un sistema económico completamente distinto: la economía productora. Mediante la agricultura y la ganadería se obtiene lo que se precisa:
    • El sedentarismo: ya no existe la obligación de desplazarse tras el alimento, pues las comunidades se asientan en un lugar y producen allí lo que necesitan.

Las sociedades agrarias continúan siendo organizaciones bastante igualitarias y autosuficientes.

Las Sociedades Antiguas: El Sistema Urbano

El crecimiento y desarrollo de los asentamientos agrarios traen la aparición de las primeras ciudades. En estos centros se hace necesaria una organización social, política, económica, legal, etc., más desarrollada.

En las nuevas ciudades se produce un proceso de especialización de las tareas y los trabajos, favoreciendo la diferenciación económica y social entre los distintos grupos. Esta diferenciación culminará en una jerarquización social.

El desarrollo de las nuevas comunidades demanda la creación de normas y leyes explícitas que regulen la convivencia social y el reparto y disfrute de los bienes comunes. Este nacimiento del derecho irá acompañado de la constitución de una autoridad política clara que dicte y haga cumplir estas leyes.

El surgimiento del derecho y de la autoridad supone la aparición de una nueva clase social: el ejército. Esto supondrá la transformación del sistema social de las ciudades-estado en el sistema social de los grandes imperios.

La Sociedad Medieval: El Sistema Feudal

La fragmentación de los últimos grandes imperios produce la aparición de una nueva organización y de un nuevo sistema social, el feudal.

La Edad Media supone el retorno a un sistema de vida fundamentalmente rural, ya que la forma básica de subsistencia es la explotación agrícola. El feudalismo se caracteriza por la fragmentación territorial en parcelas rurales: los feudos.

El feudalismo constituye un sistema social y económico caracterizado por una decisiva jerarquización y estratificación sociales.

La relación social característica del feudalismo es la relación de vasallaje. El vasallaje consiste en la sumisión y servidumbre de estos últimos hacia los primeros.

La Sociedad Moderna: El Sistema Capitalista

La modernidad y el capitalismo suponen un retorno a la vida urbana. Gracias a las reformas agrarias y a la aplicación que se hace de nuevas técnicas agrícolas, se produce una acumulación de excedentes que favorece el intercambio y la actividad comercial. Esto potencia la importancia, vitalidad y riqueza de los mercados, alrededor de los cuales se van concentrando núcleos de población cada vez más densos. Son los burgos o nuevas ciudades.

En la órbita de los mercados surge una nueva clase social: la burguesía. Esto facilita un dinamismo productivo y económico que culminará en la Revolución Industrial.

La aparición de esta clase social será la causa de la Revolución Industrial y de un nuevo sistema social: el capitalismo. En las sociedades capitalistas se produce una concentración del poder en manos del capital.

Socialmente, este nuevo sistema se distingue por rasgos como:

  • Mayor liberalismo e individualismo: se respetan más libertades individuales.
  • Mayor movilidad social: existe la posibilidad de cambiar de clase social.
  • Transformación del modelo familiar: pasa de ser extenso a nuclear.