1. Teatro Comercial (Principios del Siglo XX)
1.1 La Comedia Burguesa de Benavente
Jacinto Benavente propuso un teatro sin excesos, con atención preferente a los ambientes cotidianos. Su obra supone una crítica amable de los ideales burgueses, como se aprecia en Lo cursi, Rosas de Otoño y Los intereses creados. También incursionó en el “drama rural” con obras como Señora Ama y La Malquerida. Benavente gozó de gran popularidad a nivel nacional, y en 1922 recibió el Premio Nobel.
1.2 El Teatro en Verso
Representó la presencia del arte verbal modernista en los escenarios. Destacan:
- Francisco Villaespesa (1877-1936): Doña María de Padilla, Abén Humeya y La leona de Castilla.
- Eduardo Marquina (1879-1946): Las hijas del Cid, En Flandes se ha puesto el sol.
- Manuel y Antonio Machado: Julianillo Valcárcel, Juan de Mañara, Las adelfas y La Lola se va a los puertos.
1.3 El Teatro Cómico
Los tipos y ambientes castizos del Romanticismo regresan con autores como:
- Hermanos Álvarez Quintero: Presentan una imagen superficial y tópica de Andalucía en obras como La reina mora, El ojito derecho, El patio y Las de Caín.
- Carlos Arniches (1866-1943): Sainetes madrileños y “tragedia grotesca”, mezclando lo risible y lo conmovedor (La señorita de Trévelez).
2. Teatro de la Generación del 98
Autores como Unamuno, Azorín, Valle-Inclán y Jacinto Grau buscaron un teatro para expresar sus conflictos religiosos, existenciales y sociales. Crearon un teatro intelectual y complejo, conectado con las tendencias filosóficas y teatrales de la época.
2.1 Valle-Inclán
Su obra, que incluye novelas, cuentos, poesía y teatro, evoluciona del Modernismo elegante (Sonatas, 1902-1905) a una literatura crítica (El esperpento, desde 1920). Su teatro se agrupa en tres ciclos:
- El Mito: Ambientada en una Galicia mítica (Comedias bárbaras, Divinas palabras).
- La Farsa: Espacios ridículos del siglo XVIII (La marquesa Rosalinda, Farsa y licencia de la reina castiza).
- El Esperpento: Luces de Bohemia (1920) y la trilogía Martes de carnaval.
2.1.1 El Esperpento
Presenta la realidad española de forma exagerada y burlesca, deformándola para que el espectador reflexione. Su objetivo es similar al “distanciamiento” de Bertolt Brecht.
2.1.2 El Teatro Esperpento
Critica una realidad falsa y valores caducos, retomando la actitud crítica del 98.
3. El Teatro de la Generación del 27
Aunque se centraron en la poesía, también incursionaron en el teatro con autores como Salinas (El dictador), Alberti (El adefesio), Hernández (El labrador de más aire) y Casona (La dama del alba).
3.1 Federico García Lorca
Su obra se divide en:
- Primeras Piezas Teatrales: Influencia modernista y tema de la insatisfacción amorosa (El maleficio de la mariposa, Mariana Pineda, La zapatera prodigiosa, Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín, Los títeres de cachiporra).
- Teatro Vanguardista: Influencia surrealista para explorar los instintos ocultos (El público).
- Etapa de Plenitud: Éxito comercial con obras protagonizadas por mujeres (Bodas de sangre, Yerma, Doña Rosita la soltera, La casa de Bernarda Alba).
Bodas de sangre y Yerma son tragedias clásicas con prosa, verso, coros y elementos simbólicos. Doña Rosita la soltera es un drama urbano sobre la soltería en provincias.
4. Teatro de los Años 40: Evasión y Humor
Destaca el teatro humorístico e innovador de Jardiel Poncela y Miguel Mihura (Tres sombreros de copa, 1952, satiriza la burguesía y el teatro de variedades).
5. Teatro de los Años 50: Existencialismo y Social
El teatro realista se opuso a la dictadura, abordando temas como la injusticia social y la vida de las clases bajas. Destacan:
- Alfonso Sastre (Escuadrón hacia la muerte, 1953; La mordaza, 1954).
- Lauro Olmo (La camisa, 1962).
- Antonio Buero Vallejo:
- Etapa existencial: Reflexión sobre la condición humana (Historia de una escalera, 1949; En la ardiente oscuridad, 1950).
- Teatro social: Denuncia de injusticias (Un soñador para un pueblo; El concierto de San Ovidio, 1962; El tragaluz, 1967).
- Etapa de innovaciones: Efectos de inmersión (El sueño de la razón, Llegada de los dioses, La fundación, 1974; La denotación, 1977).
6. Teatro en el Exilio
- Max Aub: San Juan (1942), sobre emigrados judíos.
- Alejandro Casona: La dama del alba (1944), La barca sin pescador (1945), Los árboles mueren de pie (1949).
7. Teatro de los Años 60 y 70: Renovación Formal
- Teatro comercial: Mihura, Salom, Armiñán, Diosdado y Antonio Gala (Los verdes campos del Edén, 1963; Anillos para una dama).
- Experimentación: Oposición al realismo social.
- Fernando Arrabal: Teatro del absurdo, surrealista e infantil (El triciclo, 1953; obras del “teatro pánico”).
- Teatro independiente: Grupos como Los Goliardos, Tábano y Teatro Libre.
8. Teatro desde 1975
Tras la dictadura, la crisis del teatro se agudizó. Se crearon instituciones teatrales oficiales (Centro Dramático Nacional, Centro Nacional de Nuevas Tendencias Escénicas, Compañía Nacional de Teatro Clásico). Francisco Nieva, dramaturgo experimental, exploró lo surrealista, onírico y fantástico (Pelo de tormenta, 1972; Nosferatu, 1975).
9. La Novela Hispanoamericana del Siglo XX
9.1 Primeras Décadas: El Regionalismo (Hasta 1940)
- Novela de la tierra: Naturaleza americana (Doña Bárbara, La vorágine, Don Segundo Sombra).
- Novela indigenista: Injusticias hacia los indígenas (El mundo es ancho y ajeno, Huasipungo).
- Novela política: Revolución mexicana (Los de debajo).
9.2 Pioneros de la Renovación: Inicios del Realismo Mágico (1945-1960)
Se incorporan temas urbanos, lo fantástico y nuevas técnicas narrativas (El pozo, La invención de Morel, El reino de este mundo).
9.3 La Novela de los 60: El Boom y el Realismo Mágico
El boom hispanoamericano, impulsado por editoriales españolas, trajo autores como Sábato, Onetti, Vargas Llosa, Fuentes, Cortázar, Carpentier, Cabrera Infante y García Márquez (Cien años de soledad).
9.4 La Novela Más Reciente (Desde 1970)
Se reduce la complejidad técnica, prevalece el realismo con lenguaje coloquial y realismo mágico (El amor en los tiempos del cólera, Tres tristes tigres, El beso de la mujer araña).
9.5 El Cuento Hispanoamericano
Destacan autores como Borges, Rulfo, Carpentier, Onetti, Cortázar, Benedetti, Monterroso, Allende y Skármeta.