El Teatro Español del Siglo XX: Entre la Tradición y la Vanguardia
En el primer tercio del siglo XX coexisten dos fórmulas teatrales: la comercial y la renovadora, protagonizada por Valle-Inclán y Lorca. Las obras que triunfan, sin embargo, están escritas para una burguesía que busca principalmente evadirse de la realidad, marcada por la inestabilidad política española de esos años. Así, el desgaste de la Restauración y la sucesión de la dictadura de Primo de Rivera, la Segunda República y el estallido de la guerra civil con la victoria de Francisco Franco fueron el telón de fondo de un teatro que quedó malherido en la inmediata posguerra.
El Teatro Comercial
En lo referente al teatro comercial, coexisten tres tendencias:
- La fórmula benaventina
- El teatro cómico
- El teatro modernista en verso
Este último, de escaso interés, glorificaba el pasado nacional a través del verso, como en la obra de Marquina, Las hijas del Cid. Sin embargo, en el teatro comercial triunfaba Jacinto Benavente, ganador del Nobel de Literatura y aclamado por el público que veía representados en escena temas vinculados a su vida cotidiana (el dinero, el adulterio o la maternidad) con una perspectiva crítica, pero no agresiva, de sus vicios y virtudes. Así, destacan varias de sus obras, como La malquerida o El nido ajeno, aunque su obra más reconocida es Los intereses creados.
El Teatro Cómico
Paralelamente a este teatro burgués, otro tipo de teatro resulta del agrado del público: el teatro cómico, marcado por la diversidad de géneros:
- El sainete y el teatro costumbrista de los hermanos Álvarez Quintero, que reflejan el mundo andaluz, su habla y sus costumbres con la intención de hacer reír, como en las obras El patio o Malvarrosa.
- Junto a estos, Arniches triunfa con la tragedia grotesca, donde situaciones dramáticas se combinan con rasgos cómicos como en La señorita de Trevélez.
- Por último, completan el teatro cómico los astracanes de Muñoz Seca, quien combina lo grotesco, lo cómico y lo deformado, pretendiendo hacer reír a través de situaciones disparatadas en obras como La venganza de Don Mendo.
El Teatro Innovador
Por otra parte, también surge el teatro innovador por iniciativa de autores, empresarios y actores en el intento de renovar el teatro y apostar por nuevos grupos escénicos y compañías no comerciales de iniciativa privada o pública, como es el caso de La Barraca (teatro ambulante de García Lorca) o las Misiones Pedagógicas de Alejandro Casona. Con todo, los autores más destacados fueron Valle-Inclán y Federico García Lorca.
Valle-Inclán y el Esperpento
En cuanto a Valle-Inclán, destacó por una etapa inicial modernista y simbólica, que pronto derivó hacia el compromiso político con farsas como La marquesa Rosalinda y su ciclo mítico, donde reflejaba la Galicia primitiva, como en Divinas palabras. Sus obras, cada vez más críticas, acabaron desembocando en una nueva fórmula teatral que el autor bautizó como esperpento, que se caracteriza por deformar la realidad mediante la deformación y la animalización con una actitud de denuncia social y política. Su obra más destacada fue el esperpento Luces de Bohemia, publicada en 1920, donde muestra una visión esperpéntica de la vida madrileña y española de la época escenificada por dos personajes grotescos: Max Estrella y Don Latino.
Federico García Lorca
Por otra parte, la gran figura de la renovación teatral del período fue Federico García Lorca, cuyas obras responden a un eje dramático constituido por la oposición entre el principio de autoridad y el principio de libertad. Lorca se inició en el mundo dramático con su obra El maleficio de la mariposa (1920), pero su primer éxito fue Mariana Pineda, escrita en 1923, protagonizada por una mujer ajusticiada por bordar una bandera liberal, basada en un hecho real. Con todo, Lorca es conocido por los “dramas de mujeres en los pueblos de España” con sus obras Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba, todas de ambientación rural en donde las pasiones humanas se manifiestan con una gran tensión dramática y una enorme fuerza poética.
La Generación del 98 y el Modernismo
La Generación del 98
El desastre del 98 marcó profundamente a España, dando lugar a la Generación del 98, un grupo de escritores y pensadores que reaccionaron contra la decadencia del país. Estos autores abogaron por una regeneración nacional, criticando el caciquismo, la oligarquía y la falta de desarrollo social y económico. Propusieron medidas como la mejora de la educación, la reforma agraria y la implantación de una nueva política hidráulica. Joaquín Costa fue uno de los principales exponentes de este movimiento, con su defensa del colectivismo agrario.
La Novela del 98
se caracteriza.por la sobriedad y contención ….
T2. 190.-1936 negad de playa de la lit , mod estética marcada por el llamado mal del siglo mientras q g.98 debe su nombre a al desastre …. / la poesía mod. resultado de la confluencia hisp y lit francesa simb.decadent.parn) / a nivel temático marcada por la crisis de final de siglo abulia otro de sus rasgo en la sensualidad— femmme cátale + preciosismo __> lujo por todo ello el poeta ser aislado / a nivel formal destaca por su musicalidad ya q renueva la métrica. a través del verso libre / con todo el mod no destacó busqueda de la cesación— sí estética descriptiva y sensorial / ej: manuel machado Alma