El Texto y sus Propiedades: Adecuación, Coherencia y Cohesión

Concepto de Texto y sus Propiedades

Un texto es una unidad de carácter lingüístico intencionadamente emitida por un hablante en una situación comunicativa concreta y con una finalidad determinada. Se trata de la unidad máxima de comunicación y puede ser entendida como un conjunto estructurado de enunciados de muy variable extensión.

Propiedades del Texto

1. Adecuación

La adecuación es la propiedad pragmática que ajusta el texto a la situación comunicativa. Decimos que se da la adecuación, es decir, que un texto es adecuado, cuando hay una correcta y lógica relación entre todos los elementos de la comunicación que se implican en la producción del texto. Es decir, el texto ha de ser adecuado al:

  • Emisor: (no sería adecuado que un niño de tres años nos diera un discurso de política económica).
  • Receptor: (no sería adecuado, por ejemplo, soltarle una charla de física cuántica al mismo niño de tres años).
  • Canal:
  • Código: (se han de elegir el nivel y registro adecuados).
  • Género:
  • Situación comunicativa en general: (no sería adecuado ponerse a contar chistes en un entierro).
  • Tono del mensaje: etc.

2. Coherencia

La coherencia es la propiedad semántica que establece la lógica progresión temática. Esto quiere decir que un texto es coherente si todos sus párrafos o subpartes se siguen refiriendo al tema general, tiene que ver con aquello de lo que se está tratando y con el sentido común (la idea general que tenemos de nuestro universo). Pero a su vez, las ideas relacionadas con la idea principal (ideas secundarias) han de ir avanzando y transmitirnos cierta información nueva (lo que conocemos como progresión temática) para que el texto sea coherente. El Tema es la información ya conocida, la que vamos añadiendo se denomina Rema.

3. Cohesión

La cohesión es la propiedad sintáctica por la que todos los elementos del texto vienen unidos e interrelacionados, produciéndose una conexión entre todas las frases, oraciones y párrafos del texto. Esto nos permite comprender que el texto ante el que estamos constituye una sola unidad.

Mecanismos para Lograr la Cohesión Textual
1. Conectores

Son conjunciones, locuciones, etc. que sirven para unir las oraciones y los párrafos entre sí.

Lista y Clasificación de Conectores
  • Aditivos: Expresan suma de ideas.
    • Noción de suma: y, además, también, asimismo, por añadidura, igualmente.
    • Matiz intensificativo: encima, es más, más aún.
    • Grado máximo: incluso, hasta, para colmo.
  • Opositivos: Expresan diferentes relaciones de contraste entre enunciados.
    • Concesión: con todo, a pesar de todo, aun así, ahora bien, de cualquier modo, al mismo tiempo.
    • Restricción: pero, sin embargo, no obstante, en cierto modo, en cierta medida, hasta cierto punto, si bien, por otra parte.
    • Exclusión: por el contrario, en cambio.
  • Causativos-Consecutivos: Expresan relaciones de causa o consecuencia entre los enunciados.
    • Consecutivos: por tanto, por consiguiente, de ahí que, en consecuencia, así pues, por lo tanto, por eso, por lo que sigue, por esta razón, entonces, entonces resulta que, de manera que.
    • Causales: porque, pues, puesto que.
  • Comparativos: Subrayan algún tipo de semejanza entre los enunciados.
    • Del mismo modo, igualmente, análogamente, de modo similar.
  • Reformulativos: Indican que un enunciado posterior reproduce total o parcialmente, bajo otra forma, lo expresado en uno o más enunciados anteriores.
    • Explicación: es decir, o sea, esto es, a saber, en otras palabras.
    • Recapitulación: en resumen, en resumidas cuentas, en suma, total, en una palabra, en otras palabras, dicho de otro modo, en breve, en síntesis.
    • Ejemplificación: por ejemplo, así, así como, verbigracia, particularmente, específicamente, incidentalmente, para ilustrar.
    • Corrección: mejor dicho, o sea, bueno.
  • Ordenadores: Señalan las diferentes partes del texto.
    • Comienzo de discurso: bueno, bien (en un registro coloquial), ante todo, para comenzar, primeramente (en un registro más formal).
    • Cierre de discurso: en fin, por último, en suma, finalmente, terminando, para resumir.
    • Transición: por otro lado, por otra parte, en otro orden de cosas, a continuación, acto seguido, después.
    • Digresión: por cierto, a propósito, a todo esto.
  • Temporales: después (de), después (que), luego, desde (que), desde (entonces), a partir de…, antes de, antes que, hasta que, en cuanto, al principio, en el comienzo, a continuación, inmediatamente, temporalmente, actualmente, finalmente, por último, cuando.
  • Espaciales: al lado, arriba, abajo, a la izquierda, en el medio, en el fondo.
2. Mecanismos de Repetición

Cuando se repite un elemento en un texto, esto nos ayuda a comprender que seguimos tratando del mismo tema. Por ejemplo, si el texto habla de la vivienda, será normal que la palabra “vivienda” aparezca varias veces repetida en el texto.

  • Repetición léxica: Es repetir la misma palabra exacta varias veces en el texto.
  • Repetición sinonímica: Es repetir el mismo concepto pero mediante sinónimos, para dar más variedad léxica al texto: vivienda, casa, apartamento…
  • Repetición antonímica: También mediante el uso de antónimos (palabras de significado contrario) se establece la cohesión: paz/guerra…
  • Campos semánticos: Emplear diversas palabras asociadas al mismo campo semántico también demuestra seguir hablando del mismo tema: es frecuente que aparezca el hiperónimo (mueble) y varios hipónimos: mesa, silla, sillón, armario, secreter…
  • Familias léxicas: Palabras asociadas por compartir el mismo lexema: libro, librero, librería, librazo…
  • Si el texto es literario, es frecuente encontrar recursos retóricos de repetición tales como el paralelismo, la aliteración, etc. La rima en los textos en verso también es un mecanismo de repetición.
3. Mecanismos de Recurrencia o Sustitución

La cohesión del texto nos permite referirnos a un elemento que ya se ha mencionado antes o que después se va a mencionar.

Estos mecanismos se conocen como Anáfora y Catáfora.

  • Anáfora: se produce cuando una proforma (adverbio, pronombre, etc.) está sustituyendo o refiriéndose a un término que se ha mencionado antes en el texto. Por ejemplo: El coche se me ha averiado. Me lo arreglan mañana.
  • Catáfora: se produce cuando una proforma (adverbio, pronombre, etc.) está sustituyendo o refiriéndose a un término que se mencionará después en el texto. Por ejemplo: Mira que se lo he dicho mil veces: No debería contarle sus secretos a todo el mundo.
  • También producen recurrencia, al fin y al cabo, las formas verbales y las diferentes concordancias entre sujetos, verbos, atributos, complementos predicativos, etc.
  • Elipsis: El hecho de que el texto esté bien cohesionado permite elidir elementos del mismo que se pueden presuponer (sujetos omitidos, verbos elididos, pero también oraciones enteras). Ejemplo: ya se sabe, tantas veces va el cántaro a la fuente…
  • Deixis: Ciertas proformas (como los adverbios de lugar o los demostrativos, así como los pronombres personales) señalan elementos reales que están fuera del texto, en la situación comunicativa, lo que no solo aporta cohesión, sino que se relaciona con la adecuación.