Se conoce con el nombre de Generación Perdida al grupo de escritores estadounidenses —Francis Scott Fitzgerald, Ernest Hemingway, John Dos Passos, John Steinbeck y William Faulkner— que forjaron su carrera después de la Primera Guerra Mundial y en su obra reflejaron el clima de desconcierto y pesimismo de la posguerra y la Depresión. Frustrados por el vacío cultural de su país, la mayoría de ellos viajó en algún momento a Europa y se instaló en París, donde vivió intensamente los años veinte, la era del jazz y su ambiente artístico.
Estos autores comparten los siguientes rasgos:
- Muestran muchos puntos de vista, con técnicas como el contrapunto, el fragmentarismo de los relatos y la aparición del narrador.
- Sus obras muestran una visión crítica sobre la Primera Guerra Mundial y el modo de vida norteamericano, también la falta de fe en los valores tradicionales y en la sociedad burguesa. Esta actitud se manifiesta en la búsqueda de la diversión y en aprovechar el momento. O también conduce al radicalismo político desde la izquierda, también la búsqueda del riesgo a través de la acción para alcanzar la dignidad personal.
William Faulkner (1897-1962)
Uno de los novelistas estadounidenses más importantes del siglo XX. Exige mucho a sus lectores, por eso es difícil de comprender. Escribe frases largas y complejas, experimenta con múltiples narradores e interrumpe el discurso narrativo con monólogos interiores, saltos temporales y espaciales. Crea un estilo que mantiene en vilo al lector. Es el mejor exponente del vanguardismo americano.
Desde su novela Sartoris, sus obras pueden clasificarse en torno a los siguientes temas que a menudo se entrecruzan:
- La aristocracia sureña en decadencia desde el final de la Guerra de Secesión. Su enfoque varía entre la crítica de su primitivismo y brutalidad, y la tristeza por la desaparición de valores como la educación y el honor.
- La ambición y el egoísmo como el valor primordial de la nueva clase dominante que se establece en el sur y que determina una nueva forma de vida.
- El amor obsesivo hasta la locura.
- La brutalidad y la miseria de un mundo sometido por la pobreza de la tierra, que es el tema central de Santuario y Mientras agonizo.
Sus obras aportan innovaciones técnicas como:
- Múltiples puntos de vista: la innovación de los autores anteriores reside en la multiplicación de dichos puntos de vista. Elimina el narrador omnisciente.
- Microcosmos: novelas situadas en un lugar ficticio que representa la región del Misisipi de la que desciende su familia. Es un espacio sometido a la miseria y la violencia en el que se enfrentan personajes de diferentes orígenes.
En sus obras destaca un grupo de admirable e intensa sencillez que las convierte en lo mejor de su obra: Una rosa para Emily, Septiembre seco, Todo estará bien, Victoria…
John Dos Passos (1896-1970)
Fue el más comprometido políticamente (se manifestó contra la pena de muerte y a favor de algunos anarquistas, de los mineros, de los obreros…) y el más innovador en técnicas narrativas. Su obra más importante es la novela vanguardista Manhattan Transfer, como en la Trilogía USA, donde nos muestra la cara oculta de América. Describe personajes de carácter social humilde en permanente lucha por la vida y por la supervivencia. En Manhattan Transfer la protagonista es la ciudad de Nueva York, donde los personajes son egoístas e hipócritas. Al final triunfan los cínicos, mientras que los débiles se van viendo embarcados y derrotados en la misma cobardía y pereza.
Ernest Hemingway (1899-1961)
Las obras de Ernest Hemingway tienen como tema principal la búsqueda de nuevos valores en el amor, la aventura, la acción, el peligro y otras emociones directas. Su estilo es sobrio, directo y algo descuidado, pero tiene fuerza expresiva y ha sido muy imitado por autores posteriores.
En las novelas de Hemingway aparecen sus obsesiones y su inquieta vida: Adiós a las armas recrea su paso por la Primera Guerra Mundial, Fiesta se desarrolla en París; en Por quién doblan las campanas, sobre la Guerra Civil española (canto al espíritu de sacrificio y la solidaridad). También es autor de El viejo y el mar, historia de pescadores en Cuba.
Francis Scott Fitzgerald (1896-1940)
Es el reflejo de los problemas de su país en los años posteriores a la Primera Guerra Mundial. Fitzgerald escribió cinco novelas y docenas de historias breves que abordan temas como la desesperación. Fue quien mejor encarnó la desorientación y el malestar de la época. El gran Gatsby, novela en la que utilizó la propia experiencia para retratar a toda su generación marcada por la carencia de valores morales y deslumbrada por el éxito social y el dinero.
John Steinbeck (1902-1968)
Autor de múltiples novelas, denuncia las injusticias que padecen los sectores más humildes del país, sobre todo los trabajadores del campo, que se vieron muy afectados por la depresión económica de los años treinta. Sus obras exponen la realidad cotidiana y pintan tipos sencillos e ingenuos en lucha contra el egoísmo y la corrupción. Su novela más famosa es Las uvas de la ira, narra con sencillez y crudeza el peregrinaje por todo el país de ambientación rural y se localizan en las grandes extensiones de cultivo del centro y sur del país. También son famosas La perla, sobre un humilde pescador, y Al este del edén, drama rural que refleja a través de dos familias la ideología y los valores de la sociedad de la época. Recibió el premio Nobel en 1962.