Las Vanguardias Artísticas y Literarias del Siglo XX: De la Ruptura a la Rehumanización

LAS VANGUARDIAS EN EUROPA, ESPAÑA E HISPANOAMÉRICA

Las vanguardias tienen su apogeo en el período de entreguerras, años 20 y 30. Eclosionaron a raíz de la Primera Guerra Mundial y duraron hasta la Segunda Guerra Mundial. Tuvieron una fuerza muy potente en Europa y América. A España llegan por tener un fenómeno muy potente.

El término vanguardias designa a un conjunto de movimientos que rechazan la tradición estética occidental y proponen nuevas concepciones artísticas que afectan a las artes plásticas, al arte escénico, a las letras y al pensamiento.

Características de las Vanguardias

Las vanguardias se caracterizan por ser la ruptura radical con la tradición.

  • Existe un agotamiento por la guerra y la destrucción que supone esta.
  • Son efímeras, consiste en un grupo de amigos descontentos, que escriben un manifiesto en el que cuentan lo que van a cambiar de lo que no les agrada. Las vanguardias destacan por tener un sufijo característico, el cual es “ismos”.

Principales Vanguardias

  1. El futurismo: Vanguardia surgida en Italia, fundada por Filippo Tommaso Marinetti en 1909. Exalta el progreso mecánico y técnico, la velocidad, el deporte y la agresividad. Rechaza todo sentimentalismo.
  2. El cubismo: Se propone descomponer la realidad para recomponerla de nuevo, mediante la combinación libre de conceptos, imágenes o frases.
  3. El dadaísmo: Busca romper con la racionalidad, aprecia lo absoluto, la metamorfosis es un claro ejemplo de dadaísmo.
  4. El expresionismo: Busca la belleza del horror, rompe con la tonalidad y se vuelve tonal.
  5. El surrealismo: Duró más que todas las otras vanguardias, propugna la liberación del poder creador frente a la lógica, y la liberación de instintos reprimidos en el subconsciente.

Vanguardias Hispanoamericanas

Las vanguardias hispanoamericanas tuvieron una fuerte influencia de Europa, sobre todo por parte de Francia. Las vanguardias que destacaron fueron:

  1. Estridentismo: Se da en México (1922) con la revista Ulises. A James Joyce se le conoce como el promotor de las vanguardias. Tiene mucha influencia del surrealismo y cubismo.
  2. El creacionismo: Surge en Chile. Vicente Huidobro fue el creador de esta vanguardia. Intenta crear de la nada.

Vanguardias en España

Las vanguardias en España tienen dos fases:

  1. Primera fase: Marcada por José Ortega y Gasset y la deshumanización del arte. Esta etapa coincide con los años 20.
  2. Segunda fase: Se le puede llamar rehumanización, se produce como consecuencia de la extensión del surrealismo. Se da en los años 30. Esta humanización consistía en hacer arte para cualquiera y significó la politización del arte.
  • El ultraísmo: Fue una vanguardia hispánica, se creó en España por Guillermo de Torre. Es una vanguardia muy ecléctica (mezcla varias vanguardias).
  • La greguería: Ramón Gómez de la Serna es el creador de la greguería, un género literario. Éste lo definía como humorismo más metáfora. Las piezas que mejoran esta estética son El rastro, El circo o Gollerías.

REALISMO Y NATURALISMO

Durante el último cuarto del siglo XIX, el contexto histórico-cultural experimentó una serie de transformaciones significativas que dejaron una marca indeleble en la sociedad europea. Este período estuvo marcado por la conmoción provocada por la Guerra de la Independencia, que tuvo lugar entre 1808 y 1814, y que, aunque se libró en su mayoría en la península ibérica, tuvo repercusiones en toda Europa. Este conflicto condicionó en gran medida el resto del siglo, dando lugar a una restauración del absolutismo en algunos países, mientras que en otros se gestaba un ambiente propicio para el surgimiento de ideas revolucionarias.

La lucha entre el absolutismo y las fuerzas revolucionarias fue una constante a lo largo del período, lo que resultó en una profunda inestabilidad política en muchos países europeos. Sin embargo, el año 1875 marcó un punto de inflexión, ya que se logró establecer cierta estabilidad en algunos lugares, sentando las bases para un período de relativa calma.

El Auge del Realismo

En este contexto de transformaciones y tensiones sociales y políticas, el último cuarto del siglo XIX presenció el surgimiento y la consolidación del movimiento literario y artístico conocido como realismo. Originado en Francia a mediados del siglo, el realismo se caracterizaba por su afán de reproducir con fidelidad y exactitud la realidad contemporánea, especialmente centrándose en los problemas sociales derivados de la revolución industrial.

Las características distintivas del realismo incluían la búsqueda de la verosimilitud, la crítica social, el uso de una prosa clara y sobria, y la adopción de un narrador omnisciente que ofrecía una visión profunda de los personajes y sus circunstancias. Este movimiento literario tuvo un profundo impacto en la narrativa europea, influyendo en autores de renombre como Benito Pérez Galdós, quien es considerado uno de los máximos exponentes del realismo español.

El Naturalismo: Un Paso Más Allá

Posteriormente, surgió el naturalismo literario, impulsado principalmente por Émile Zola en Francia. Este enfoque llevó el realismo un paso más allá al introducir elementos de determinismo y materialismo en la narrativa, argumentando que el comportamiento humano estaba condicionado por factores sociales y biológicos. Los temas del naturalismo ahondaban en las vidas de las clases sociales bajas y reflejaban un profundo pesimismo sobre la condición humana y la sociedad en general.

En España, destacados escritores como Leopoldo Alas “Clarín”, Emilia Pardo Bazán y Vicente Blasco Ibáñez también contribuyeron al panorama literario con obras que exploraban las complejidades sociales y políticas de la época. En poesía y teatro, aunque el Romanticismo continuaba ejerciendo su influencia, especialmente en autores como Gustavo Adolfo Bécquer y Rosalía de Castro, también se observaban elementos de transición hacia corrientes más modernas, como el Modernismo.

MODERNISMO Y GENERACIÓN DEL 98

El modernismo y la generación del 98 surgieron en un momento crucial para España, marcado por la crisis y la derrota en la guerra contra Estados Unidos en 1898, que supuso la pérdida de Cuba y Puerto Rico. Esta situación de desaliento y desencanto permeó en la sociedad y la cultura española, generando un clima propicio para la emergencia de corrientes literarias que buscaban dar voz a los conflictos y anhelos del momento.

El Modernismo Literario

El modernismo literario, influenciado por figuras como José Martí y especialmente Rubén Darío, nació en Hispanoamérica pero tuvo un impacto significativo en España. Esta corriente se caracterizaba por su énfasis en la evasión y la belleza sensorial, tomando influencias del parnasianismo y el simbolismo. Los modernistas exploraron temas como la desazón romántica, el escapismo, el amor imposible y el erotismo, además de abrazar una profunda renovación del lenguaje poético, con el uso de cultismos, americanismos y neologismos. Destacaron por su experimentación y renovación métrica, utilizando recursos literarios, musicalidad y riqueza de imágenes y símbolos.

Entre los principales autores modernistas se encuentra Rubén Darío, cuya obra Azul es considerada como el inicio del modernismo. También destacan figuras como Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado en sus primeras etapas.

La Generación del 98

Por otro lado, la generación del 98 estuvo compuesta por un grupo de escritores que compartían una preocupación y pesimismo común ante la situación de España. Estos autores, entre ellos Miguel de Unamuno, Pío Baroja y José Martínez Ruiz “Azorín”, se caracterizaban por su preocupación por las cuestiones existenciales, religiosas y sociales del país. Su estilo se distinguía por su sobriedad y sencillez expresiva, con un marcado subjetivismo que reflejaba la proyección del estado de ánimo del autor en el paisaje castellano. La generación del 98 también se destacó por su revalorización de la literatura del pasado y por sus innovaciones en la prosa, especialmente en la novela y el ensayo.

En la poesía del 98, Antonio Machado es una figura central, explorando temas como la soledad, el paso del tiempo y la búsqueda del yo más íntimo y verdadero. Su obra lírica, como Soledades y Campos de Castilla, se caracteriza por el empleo de símbolos y una profunda introspección.

Teatro y Novela Anterior a 1936

En el teatro anterior a 1936, Ramón María del Valle-Inclán se destacó con su producción dramática, organizada en ciclos que abordaban temas como el mito, la farsa y el esperpento, este último reflejando de manera crítica lo absurdo y miserable de la existencia humana.

En cuanto a la novela anterior a 1936, autores como Pérez de Ayala, Gabriel Miró y Jarnés también dejaron su huella, abordando temas intelectuales y sociales que reflejaban la época y sus preocupaciones.

Análisis de Nada de Carmen Laforet

Nada, escrita por Carmen Laforet, es una obra de la literatura española escrita en 1945. Se centra en la historia de Andrea y las personas que la rodean entre 1939 y 1940 durante su año de estudio en Barcelona. Esta obra nos muestra los efectos de la Guerra Civil Española, como la falta de libertad o de opciones de vida. Todo esto mientras nos va narrando el proceso de madurez y cambios que atraviesa Andrea hasta lograr la independencia. Andrea atraviesa el hambre, el desamor y por último la destrucción de sus ilusiones de juventud. Además, tiene una gran variedad de personajes, reflejando a una mujer sumisa en la pobreza y en necesidad económica. Se ve además una gran importancia al papel del padre de familia sobre cómo esta te forma y condiciona como persona. Se hacen alusiones a la relación católica y a la fe falsa. Llena de simbolismo y metáforas que se relacionan con la búsqueda de libertad y el conflicto de generaciones. Enseña un relato de angustia, soledad y libertad de expresión en un ambiente de posguerra.

Análisis de Luces de Bohemia de Valle-Inclán

Luces de Bohemia es una obra teatral escrita por Valle-Inclán, publicada por primera vez en España en 1920 bajo el título Esperpento y publicada como libro en 1924. Se sitúa en la época de crisis política desde finales del siglo XIX a principios del siglo XX. En esta obra se nos muestra, a través del ciego Max Estrella, la inestabilidad política, el descontento social y las diferencias entre burguesía y proletariado. En el transcurso de la noche, la última de Max, se nos deja ver la hipocresía de los personajes madrileños, como el materialismo y egoísmo de la burguesía (preocupándose más de un escaparate roto que de un niño muerto). Solo la madre del niño muerto, la prostituta y el anarquista se representan con respeto y con rasgos positivos. El resto de personajes se representan de forma esperpéntica, como el ministro, viejo amigo de Max, representado como un corrupto al igual que las fuerzas del orden. Se presentan además manifestaciones y revueltas unidas a la situación política y social. Se hacen continuas referencias literarias, ya sea con la narrativa (Homero) o directamente a personajes reales como Rubén Darío. Se dan además contrastes entre lo trágico y lo cómico, y en registros más cultos o más vulgares.

ultos o más vulgares.