El Caso de Víctor de Aveyron y Marcos Rodríguez Pantoja: Biología vs. Cultura
A finales del siglo XVIII, en Aveyron (Francia), unos cazadores encontraron a un niño que vivía en el bosque, desnudo y comportándose como un animal. No sabía hablar ni relacionarse con los humanos. Fue llevado a París, donde generó un gran debate filosófico: algunos pensaban que, al no haber sido criado en sociedad, carecería de sentido moral; otros veían en él la oportunidad de comprobar la teoría de Jean-Jacques Rousseau sobre la bondad natural del hombre. Jean Itard, un pedagogo especializado en sordomudos, intentó educarlo para enseñarle el lenguaje y las normas sociales, pero tras años de esfuerzo reconoció que no logró transformarlo en un “ser humano normal”. Víctor (nombre que le dieron) nunca aprendió a hablar ni a comportarse como una persona integrada en la sociedad. Su historia fue llevada al cine por François Truffaut en la película El pequeño salvaje (1970).
Marcos Rodríguez Pantoja nació en 1946 en una familia pobre de la sierra de Córdoba (España). En 1953, tras la muerte de su madre, fue entregado a un cabrero que vivía en una cueva. Al fallecer el cabrero, Marcos quedó solo y pasó más de una década viviendo en la naturaleza, conviviendo con lobos y otros animales. Cuando la Guardia Civil lo encontró en 1965, apenas tenía habilidades humanas: aullaba, mordía y no hablaba. A diferencia de Víctor de Aveyron, Marcos sí había adquirido el lenguaje antes de su aislamiento, lo que le permitió reaprender a hablar y reintegrarse parcialmente en la sociedad. Sin embargo, nunca se adaptó del todo a la vida civilizada y siempre recordó su vida con los lobos como su etapa más feliz.
Los casos de Víctor de Aveyron y Marcos Rodríguez Pantoja muestran que el ser humano necesita tanto la biología como la cultura para desarrollarse plenamente. Víctor, sin contacto con la sociedad en su infancia, nunca aprendió a hablar ni a comportarse como una persona normal. En cambio, Marcos, que sí tuvo una infancia con humanos, pudo readaptarse tras vivir aislado. Esto demuestra que la cultura y la interacción social son esenciales para la formación del ser humano.
Evolución del Pensamiento sobre el Origen del Ser Humano
- Creacionismo: Durante siglos, se creyó que Dios había creado a Adán y Eva, nuestros primeros padres, al principio de la creación del Mundo.
- Darwinismo: En el siglo XIX, Charles Darwin propuso la teoría de la evolución por selección natural, según la cual las especies cambian gradualmente sin intervención divina.
- Síntesis evolutiva (1940): Theodosius Dobzhansky y otros científicos combinaron la teoría de Darwin con la genética moderna.
- Richard Dawkins y el “relojero ciego”: Dawkins argumentó que la evolución no tiene un propósito ni un diseñador, sino que es un proceso ciego que da la ilusión de diseño en los organismos vivos.
Genética y Humanidad: El Caso del Chimpancé
La gran semejanza genética entre el ser humano y el chimpancé (compartimos casi el 99% de nuestros genes) indica que ambos tenemos un ancestro común y que la evolución ha jugado un papel clave en nuestro desarrollo. Sin embargo, ese pequeño 1% de diferencia ha dado lugar a capacidades exclusivamente humanas, como el lenguaje complejo, el pensamiento abstracto y la cultura. Esto plantea preguntas sobre qué nos hace verdaderamente humanos: si es solo la biología o si la cultura y el entorno también tienen un papel fundamental en nuestra identidad y evolución.
Distopía Genética: Reflexiones a partir de la Película Gattaca
Gattaca nos presenta un futuro donde la sociedad se basa en la manipulación genética. Los niños son concebidos mediante selección de ADN, dividiendo a la población en “válidos” y “no válidos”. Vincent Freeman, un “no válido”, sueña con ser astronauta, pero su genética le impide acceder a la élite de la corporación Gattaca. Asume la identidad de Jerome Morrow, un “válido” parapléjico, usando su ADN. Una investigación policial amenaza con descubrir su verdadera identidad. La película plantea importantes cuestiones éticas sobre la manipulación genética y la discriminación.
Comunidad y Sociedad: Gemeinschaft y Gesellschaft
La Gemeinschaft es propia de las sociedades rurales y tradicionales, de los pueblos. La Gesellschaft es la moderna sociedad urbana, individualista. En la Gemeinschaft tradicional, existe una auténtica comunidad, pequeña y con fuertes vínculos entre sus miembros. En general, la cultura occidental es Gesellschaft, “sociedad”, y la cultura oriental es Gemeinschaft, “comunidad”.
Definición y Componentes de la Cultura
La cultura de una sociedad es el conjunto de conocimientos, creencias, valores, costumbres y prácticas que caracterizan a un grupo humano y que se transmiten de generación en generación. Incluye tanto aspectos materiales, como la tecnología y la arquitectura, como elementos inmateriales, como el lenguaje, la moral, las tradiciones y las normas sociales. La cultura es lo que diferencia a los seres humanos de los animales. Es un elemento dinámico que evoluciona con el tiempo. Cada sociedad desarrolla su propia cultura, lo que da lugar a una gran diversidad cultural en el mundo. Comprender la cultura y respetar la diversidad es clave para la convivencia.
Culturas Occidental y Oriental: Un Contraste de Valores
Cultura occidental: Está marcada por el individualismo, la democracia, la mentalidad científica, la igualdad de derechos, la visión de la religión como algo secundario y la libertad sexual.
Cultura oriental: Menos individualista, más centrada en la comunidad y en el orden social, en el respeto a los mayores y la tradición, en la disciplina y la obediencia. Es la mentalidad propia de países como China, Japón o Corea del Sur. La cultura occidental subraya la importancia de la juventud y la libertad individual, mientras que Oriente está más centrado en los valores familiares y la solidaridad social.