Realismo en España: Sociedad, Literatura y Arte en la Segunda Mitad del Siglo XIX

Sociedad del Realismo: Cambios Políticos y Sociales en la Segunda Mitad del Siglo XIX

La época del Realismo tiene su origen en el movimiento revolucionario de 1848 que sacudió a toda Europa. La monarquía de Luis Felipe es derrocada y sustituida por un régimen republicano. Las transformaciones sociales que se producen en este periodo son de gran trascendencia. El crecimiento de la industria va asociado al aumento de población en las grandes ciudades, que concentran también el comercio y los servicios.

España vivirá todos estos fenómenos sociales con considerable retraso. La revolución de 1868 pretendió impulsar un proceso democrático, pero fracasó y en 1875 se restableció la monarquía borbónica, con lo que se inicia el periodo conocido como Restauración. Será también esta la época en que surja la novela realista española.

Progreso Científico y Técnico

Es de especial importancia la teoría de la evolución de Charles Darwin, que explica la evolución de la vida en la tierra mediante leyes de la selección natural y la adaptación al medio. En el campo de la técnica, surgieron numerosos inventos (telégrafo, barco de vapor, acero, aspirina…).

Todos estos avances proporcionaron un extraordinario prestigio a la ciencia, convertida en motor del progreso, el gran mito de la época. El marxismo se convirtió en la ideología del movimiento obrero, y a través de los sindicatos y los partidos socialistas, fue adquiriendo gran influencia política en los países industrializados.

Literatura del Realismo

Las repercusiones de los cambios sociales y científicos en el terreno del arte y la literatura fueron importantes. Por eso la realidad social es descrita ahora tal y como es, y no como debería ser. Se busca por encima de todo la objetividad; la subjetividad del autor, sus sentimientos, deben quedar al margen de la obra.

El afán de objetividad es compatible, sin embargo, con el punto de vista narrativo omnisciente. Los argumentos se basan en la realidad vulgar, cotidiana; no se sitúan en épocas anteriores o ambientes exóticos, sino en el contexto próximo, reconocible, contemporáneo del autor y del lector.

Las obras giran en torno a un protagonista que con frecuencia da título a la obra (David Copperfield, Ana Karenina, Madame Bovary…). Se trata del conflicto que ya habían planteado los románticos, solo que ahora el autor se pone del lado de la realidad, castigando con el fracaso a los personajes demasiado idealistas.

El estilo es sobrio, sencillo. Esta sencillez aparente no debe, sin embargo, atribuirse al descuido o a la espontaneidad. Con frecuencia es fruto de una intensa labor de depuración.

El realismo se expresa sobre todo por medio de la novela, el género más apto para describir la realidad social. La poesía del periodo realista tiene escaso valor literario, mientras que el teatro sigue utilizando los procedimientos románticos sin alcanzar grandes resultados.

El escritor realista se limita a describir el mundo de la burguesía, de la clase media, con escasas incursiones en los ambientes de los obreros o los marginados. Será el naturalismo el que incorpore estos sectores a la novela.

Poesía Realista y Posromántica

La exaltación del primer romanticismo va dando paso a una mentalidad más escéptica y sosegada. La reacción contra el sentimentalismo romántico se hizo desde posiciones diversas. En el caso de la poesía, podemos señalar varias tendencias:

Poesía Realista

Principal representante: Ramón de Campoamor, que no atendía al sentimentalismo y tenía un lenguaje prosaico.

Poesía Ideológica

Temática filosófica, religiosa o social, estilo retórico. Principal representante: Gaspar Núñez de Arce.

Poesía Posromántica

Con un tono menos retórico que el romántico y un lenguaje más sencillo. Principales representantes: Bécquer y Rosalía de Castro.

La Novela Realista y Naturalista en Europa

La novela experimentó en el siglo XIX un gran auge en toda Europa.

  • En Inglaterra, Charles Dickens retrató las condiciones de vida de la clase obrera en David Copperfield.
  • En Rusia, Dostoievski con Crimen y Castigo, que analiza la psicología y las pasiones de los personajes, y Tolstoi con Guerra y Paz, donde retrata la sociedad de su país.
  • En Francia, Balzac con La Comedia Humana, que refleja la sociedad francesa del momento; Flaubert con Madame Bovary, que narra las aventuras amorosas de una mujer casada; y Zola, que crea el Naturalismo, que se basa en las teorías deterministas de la biología y de la medicina, con su obra Nana.

Generación de 1868

El realismo se introduce en España con notable retraso; una de las primeras obras fue La Fontana de Oro de Galdós. La profunda transformación de la sociedad española durante la Restauración tuvo su expresión en el terreno ideológico. Los defensores de las ideas progresistas chocaron con los sectores católicos tradicionalistas, opuestos a las ideas democráticas y a las innovaciones científicas y filosóficas. Este conflicto ideológico se reflejará también en la narrativa, que describe la transformación de la sociedad española.

La Generación del 68 está formada por un conjunto de novelistas que publican sobre todo entre 1874 y 1884, la década que da comienzo a la Restauración. José María de Pereda añoraba la sociedad agraria y tradicional. Juan Valera hace una novela entretenida y estética. Galdós y Clarín eran partidarios de los fracasados ideales de la revolución de 1868, defienden una profunda modernización de España y critican a los sectores conservadores. Emilia Pardo Bazán fue una precursora del feminismo de ideología conservadora. El realismo español presenta una marcada tendencia regionalista (los escritores suelen situar sus obras en ambientes cercanos al suyo).

Prensa y Ensayo

Prensa Decimonónica

La prensa tuvo un papel decisivo en el desarrollo de la sociedad. Diarios como El Imparcial o El Liberal son algunas de las publicaciones más destacadas. La mayor parte de los autores ejercieron el oficio de periodista.

El Ensayo Decimonónico

Los artículos de Mariano José de Larra constituyen la muestra más importante del ensayismo romántico en España. El enfrentamiento entre modernidad y tradición motivó que los autores se alinearan en dos bandos: los pensadores tradicionalistas y los liberales.