Variedades Geográficas del Español Meridional
Las variedades geográficas del español meridional surgieron a partir del siglo XVI en el mediodía peninsular. Corresponden a la zona sur de la expansión de Castilla y presentan una mayor evolución en sus rasgos fónicos.
a) Andaluz
- Seseo o ceceo
- Aspiración o eliminación de –s al final de sílaba o palabra: lah niñah/ la niña
- Aspiración del fonema /x/ (grafías ge, gi, j): hefe
- Confusión de –l y –r implosivas: arma por alma
- Relajación y pérdida de la –d- intervocálica: estao
- Yeísmo y pronunciación fricativa de la grafía ch
- Uso del pronombre ustedes por vosotros
- Preferencia del diminutivo en –illo/-illa: chiquilla
b) Canario
- Seseo
- Aspiración de –s y de g y j
- Yeísmo
- El pronombre ustedes sustituye a vosotros
- Empleo de andalucismos y portuguesismos: fonil por embudo, balayo por cesto
- Uso de americanismos: guachimán por vigilante
c) Extremeño
- Aspiración de la h- inicial latina: jambre
- Se aspira también la -s final
- Epéntesis de i: alabancia
- Cierre de las vocales finales -o, -e, en, -u, -i: benditu
- Presencia de yeísmo, ceceo y seseo
- Conservación del grupo -mb-: lamber
- Cambio de l en r en los grupos pl-. cl-, fl-: cravu
d) Murciano
Comprende la provincia de Murcia y alguna zona del sur de Alicante, nordeste de Jaén y Granada, y norte de Almería. Recibe también el nombre de panocho. La huella del catalán y del aragonés se manifiesta en:
- Conservación de las consonantes sordas intervocálicas: pescatero, cocote
- Palatización de l- inicial: lletra, llengua
- Conservación de los grupos pl- cl- fl- en algunos casos: flamarada
- Alargamiento de las vocales finales de palabra
- Confusión de vocales y consonantes
Novela Realista: Benito Pérez Galdós
La novela realista presenta las siguientes características:
- Las historias contadas en esta época son verosímiles. Los personajes, los escenarios y la acción deben basarse en la realidad.
- Las descripciones son muy abundantes, enorme fijación por el detalle, prefieren desarrollar los ambientes que para ellos son conocidos (Madrid, para Galdós)
- El lenguaje de los personajes debe ser reproducido con la máxima exactitud, el autor nos describe al detalle a los protagonistas física y psicológicamente
- Suele haber un narrador omnisciente, realista cuenta la historia en primera y tercera persona y, a veces, combina ambas. La temática es muy variada. El amor y sus problemas, el matrimonio y el adulterio y, por último, la familia y el sentimiento religioso.
Benito Pérez Galdós es el novelista más popular, más leído, más prolífico y más dotado de su época. Se dice que su narración está a la altura de la de Cervantes. Su trayectoria literaria se divide en los siguientes apartados:
Episodios Nacionales Se trata de 46 relatos, distribuidos en cinco series, cada una de diez episodios, con los que pretende narrar la historia de España del siglo XIX. Se sitúan dentro de la novela histórica, de ahí sus títulos: Trafalgar, Bailén…
Novelas de la primera época: Doña Perfecta, Gloria… A partir de Doña Perfecta, Galdós escribe novela de tesis, que exponen conflictos ideológicos, de tema religioso y anticlerical. Los medios empleados por el autor para presentar su tesis son, principalmente, la conducta y las opiniones de los personajes, símbolos y portavoces de las ideas y los comentarios del narrador omnisciente, que apela al receptor, lo guía en la lectura y moraliza.
Novelas contemporáneas: En estas, Galdós inventa un mundo ficticio, reflejo de la realidad de la época y en el que Madrid adquiere un papel protagonista. Este realismo se enriquece con la creación de personajes más complejos y con elementos naturalistas. Además, predomina el narrador omnisciente o cronista de los hechos; también, diálogos que permiten ofrecer perspectivas diversas sobre la realidad y caracterizar a los personajes según sus usos lingüísticos, junto al monólogo interior y el estilo indirecto libre con humor, ironía y parodia. Fortunata y Jacinta, Miau…
Novelas espirituales: Prevalecen los valores evangélicos como el amor y la caridad cristiana. Estos relatos constatan la desilusión ideológica del autor por el fracaso de la burguesía para transformar la sociedad. Aparecen personajes humildes, ya no en el Madrid burgués, sino en los barrios más miserables de la época. Halma y El abuelo.
LAS VANGUARDIAS: def y rasgos comunes
Entre las dos guerras mundiales (1918-1939), se producen en Europa diversos movimientos de revolución estética: las Vanguardias, término que surge en Francia durante los años de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) cuyo origen está precisamente en el vocablo francés avant-garde (1ª línea de combate), término de origen militar y político, que venía a reflejar el espíritu de lucha, de combate y de confrontación que el nuevo arte del siglo oponía frente al llamado arte decimonónico o académico. Los llamados ismos se sucederán uno tras otro hasta la década de los cuarenta. Pueden señalarse, eso sí, algunas características generales comunes a los diferentes movimientos de la vanguardia:
- Internacionalismo. Los artistas de vanguardia se consideran ciudadanos del mundo
- Antitradicionalismo: desprecian todo lo heredado de periodos anteriores
- Es un arte intelectual y minoritario
- Es un arte fiel a su época y por eso refleja el espíritu de su tiempo
- Arte deshumanizado: desprovisto de sentimientos y pasiones humanas
- Libertad absoluta del artista
- Relación de dependencia entre distintas artes. La pintura invade la lírica, la música se traslada al verso. En este sentido, tuvo mucha importancia el cine.
Los Vanguardismos en España
España está en consonancia con el resto de Europa en cuanto a la incorporación de los ismos a nuestras letras, siendo pionero e impulsor Ramón Gómez de la Serna. Entre las tertulias son famosas las del Café de Pombo, presidida por Gómez de la Serna, o la del Café Colonial, en torno a Cansino-Asséns. De las muchas revistas que surgieron, en general efímeras, destacan dos: la Revista de Occidente (fundada por Ortega y Gasset) y La Gaceta Literaria (fundada por Giménez Caballero y Guillermo de Torre).
-Creacionismo Surge de la mano de Vicente Huidobro y su intento es demostrar que la obra literaria es totalmente autónoma del mundo. El poeta debe dejar ya de cantar a la naturaleza; lo que tiene que hacer es imitar a la naturaleza, eliminar todo lo descriptivo o anecdótico. Junto a Huidobro hay que destacar a Juan Larrea y a Gerardo Diego como fundadores del Creacionismo -Ultraísmo: Participan en su gestación personas como Cansino-Asséns, Eugenio Montes o Jorge Luis Borges, serán numerosas las revistas que difunden sus principios poéticos: Grecia, Cervantes… Características: – El poema ultraísta deja notar las influencias del cubismo, futurismo y dadaísmo – Imágenes y metáforas chocantes, ilógicas, donde destacan el mundo del cine, del deporte, del adelanto técnico: “Los motores suenan mejor que endecasílabos”. – Eliminación de la rima – Tendencia a establecer una disposición tipográfica nueva de las palabras del poema, pretendiendo de este modo hacer ver una fusión de la plástica y la poesía – Neologismos, tecnicismos y palabras esdrújulas. –Ramón Gómez de la Serna: Su obra se caracteriza por su arrolladora personalidad, hasta tal punto que creó un estilo conocido como el ramonismo. Fundó la Tertulia del Café Pombo: Allí se daban cita Picasso, Pío Baroja, Azorín, Marañón y un largo etcétera de personalidades. Es también conocida su original faceta de conferenciante. Ramón viajaba con frecuencia por España y otros países pronunciando conferencias humorísticas con puesta en escena incluida: en una ocasión se vistió de torero, dio otra a lomos de un elefante en París, lo más destacable es la introducción de un género literario nuevo: las greguerías. Esta es una metáfora insólita y en general breve que surge de un choque casual entre el
pensamiento y la realidad. El propio inventor la define esquemáticamente del siguiente modo: humorismo + metáfora = greguería: Su carácter crítico y sarcástico se ve reflejado en las novelas y relatos breves, en especial en obras como El chalet de las rosas, análisis de la psicología criminal; El torero
Carancho, visión grotesca del ambiente taurino, Destacables son también sus novelas eróticas: Senos, La Nardo… Escribió un libro de memorias en dos volúmenes titulado Automoribundia y Nostalgias de Madrid. En teatro destacan Los medios seres. A Ramón de la Serna no se le puede incluir dentro de ningún movimiento concreto sino que toma rasgos del cubismo, del futurismo, del dadaísmo y del surrealismo.
conferencias humorísticas con puesta en escena incluida: en una ocasión se vistió de torero, dio otra a lomos de un elefante en París, lo más destacable es la introducción de un género literario nuevo: las greguerías. Esta es una metáfora insólita y en general breve que surge de un choque casual entre el
pensamiento y la realidad. El propio inventor la define esquemáticamente del siguiente modo: humorismo + metáfora = greguería: Su carácter crítico y sarcástico se ve reflejado en las novelas y relatos breves, en especial en obras como El chalet de las rosas, análisis de la psicología criminal; El torero
Carancho, visión grotesca del ambiente taurino, Destacables son también sus novelas eróticas: Senos, La Nardo… Escribió un libro de memorias en dos volúmenes titulado Automoribundia y Nostalgias de Madrid. En teatro destacan Los medios seres. A Ramón de la Serna no se le puede incluir dentro de ningún movimiento concreto sino que toma rasgos del cubismo, del futurismo, del dadaísmo y del surrealismo.
Gen 27: Defi, caract generales y evolución: El término “generación del 27” se eligió para designar a un grupo de escritores nacidos en torno a 1900 que en 1927 se unieron para realizar un homenaje a Luis de Góngora en el tercer
centenario de su muerte en el Ateneo de Sevilla. Esa fecha servirá para darlos a conocer como Grupo o Generación del 27. De este grupo de poetas los más relevantes son Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Federico García Lorca, Dámaso Alonso, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda, Rafael Alberti, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados. Pero hemos de mencionar también, entre otras escritoras vinculadas a la generación, a las poetas Concha Méndez, Carmen Conde o Ernestina Champourcín. Características: a) Todos se dan a conocer en torno a los años 20, coincidiendo con las Vanguardias, y pretenden renovar la poesía de entonces. Todos vivían o frecuentaban la Residencia de Estudiantes: Buñuel, Dalí, Lorca…. b) La Residencia de Estudiantes se convertiría en el núcleo cultural de numerosas actividades culturales: actos poéticos, revistas… La más importante fue Homenaje a Góngora con motivo del tercer centenario de su muerte en 1927 c) Pretenden renovar el lenguaje poético, utilizando para ello el verso libre d) Sus influencias poéticas proceden de varias vertientes: – Poesía Tradicional: tanto popular (sobre todo romances y canciones) como culta (Manrique, Garcilaso) – Vanguardias: el Futurismo en Alberti o Salinas; el Surrealismo en Lorca, Cernuda o Aleixandre; el Creacionismo en Gerardo Diego; Ultraísmo en Pedro Salinas… – Poesía Conntemporánea: recibieron la cátedra de Ramón Gómez de la Serna, Ortega y Gasset y Juan Ramón Jiménez. e) Cultivará una poesía intelectual, hermética, original. f) Se distinguen tres etapas en la evolución de esta generación: – Hasta 1927, con la influencia de una poesía pura y la presencia de las Vanguardias. – Hasta 1939 (fin de la Guerra Civil), etapa de madurez. Se rehumaniza la poesía y se
tratan abiertamente temas sociales y políticos. Nace la llamada poesía existencial. – Tras la Guerra Civil, la mayoría de los poetas de la Generación del 27 se exilian y el grupo desaparece. g) Sus rasgos estéticos principales son: – Intentan la renovación estética de nuestra poesía. – En sus poemas, cuidan y renuevan las formas a través de la utilización de léxico culto, palabras coloquiales, términos alejados hasta entonces de la poesía, etc. – En cuanto a la métrica, utilizaron estrofas clásicas como el soneto, el romance o el villancico, pero también innovaron con versos libres. – Evolucionan desde el punto de vista temático. Al principio la preocupación principal era la forma del poema, el arte por el arte, pero poco a poco los autores del 27 desarrollan una poesía humanizada, más preocupada por el dolor, la alegría o los recuerdos. La Guerra Civil acentúa esta visión humanizada hasta el punto de que muchos autores se decantan por los temas comprometidos.
La tendencia a la deshumanización…: tendencias basadas en la deshumanización del arte destacan: – La poesía pura: estética que en el periodo de entreguerras reaccionó contra el nuevo romanticismo que pretendía introducir el decadentismo. Se oponía a la retórica y buscaba la esencialidad de la palabra. Muy cultivada por Juan Ramón Jiménez, principal exponente de este estilo poético con obras como Eternidades. En la Generación del 27 fue cultivada por Jorge Guillén con obras donde prima la supresión de lo anecdótico, escasez de verbos o la precisión lingüística. Ejemplo Cántico. -La poesía vanguardista: afán de ruptura con las formas tradicionales así como la búsqueda de la originalidad a través de nuevas formas de expresión. Destacan autores como Gerardo Diego, Manual de espumas dentro del Ultraísmo o Biografía incompleta dentro del
Creacionismo. En esta última vanguardia también destacó Pedro Salinas con Fábula y Signo. -Poesía neopopular: que se acercó a la poesía tradicional-popular de la literatura española, recuperando un estilo poético al modo de los versos de Gil Vicente, Lope de Vega, los Romanceros y los Cancioneros de la literatura clásica. Recuperan ritmos propios de la época. Destaca Alberti con Marinero en tierra, El alba del alhelí. -Poesía clasicista: corriente lírica compuesta con metros tradicionales (sonetos, décimas…) propiciadas por la eclosión de una poesía de inspiración barroca debida al centenario de Góngora, la deshumanización del arte, el dominio formal de los poetas
del 27 y la pasión por la imagen. La imitación de los clásicos se une a motivos y técnicas de vanguardia y se convierte en un ejercicio de virtuosismo: Cal y canto de Rafael Alberti o Sonetos del amor oscuro de Lorca.
La tendencia a la rehumanización…: tendencias basadas en la rehumanización del arte destacan: – Poesía surrealista: empieza a observarse cierto pesimismo y angustia ante los efectos “deshumanizantes” de la civilización moderna, uso de unos mecanismos expresivos (metáfora, imágenes oníricas) para mostrar la amenaza de una civilización que conduce al desarraigo, a la soledad y a la muerte. Así pasan a primer término los eternos sentimientos del hombre: el amor, el ansia de plenitud y las frustraciones o la inquietud ante los problemas existenciales. Sobre los ángeles de Rafael Alberti, Poeta en Nueva York de Lorca. -Poesía neorromántica: los poetas, llegados a su plena madurez, comienzan a sentirse cansados de las aventuras formalistas. Se iniciará así el conocido proceso de “rehumanización” de su lírica, donde defiende una poesía sin pureza, es decir, inmersa en las circunstancias humanas y sociales, una vuelta a lo humano y un “arte para la vida”. A esta lírica se le aplicó el adjetivo de Neorromántica. Destacan Luis Cernuda, Donde habite el olvido y, sobre todo, Pedro Salinas con La voz a ti debida. -Poesía social: Los acentos sociales y políticos que clausuraron las Vanguardias entran también en la poesía del 27. Adelantado de esa actitud será Rafael Alberti con El poeta en la calle. Otro poemario que invita a reflexionar sobre la barbarie humana es Cancionero y romancero de ausencias de Miguel Hernández, se trata de una buena muestra de esa poesía desnuda, estremecida y angustiada. -Poesía de posguerra: tras la Guerra Civil, el grupo del 27 se dispersa. Mueren Lorca y
Miguel Hernández, y los demás, salvo Dámaso Alonso, Vicente Aleixandre y Gerardo Diego, parten al exilio. Cada cual sigue su rumbo poético, pero ninguno abandonará ya los caminos de una poesía humana En el exilio, Jorge Guillén inicia con Clamor. La nota dominante en todos los exiliados será la nostalgia de la patria perdida. En España, la poesía derivará hacia un humanismo angustiado, de tonos
existenciales, cuya muestra más intensa es Hijos de la ira de Dámaso Alonso. La concesión del premio Nobel de 1977 a Vicente Aleixandre fue, en cierto modo, la confirmación de la importancia de todo un grupo que ha dado a la lírica española una nueva Edad de Oro.