De acuerdo a lo planteado por el autor ¿Por qué debemos ser tolerantes con los demás?
El autor no aborda directamente la cuestión de la tolerancia hacia los demás, pero sí destaca la importancia de aceptar la realidad y los fracasos propios, así como de comprender y someterse a los valores que se oponen a la satisfacción inmediata. Esto implica una disposición a aceptar y respetar las diferencias y perspectivas de los demás, lo que podría requerir una forma de tolerancia. Por ejemplo, el fumador se somete al valor que invocan a los no fumadores, aunque le desagrade, porque comprende que es así. Además, el autor destaca que la lectura y la experiencia pueden ayudarnos a comprender y apreciar diferentes valores y perspectivas. Según el autor, la exigencia de ser tolerantes con los demás no se basa en el relativismo moral, sino en una convicción moral que pretende tener validez universal. La tolerancia se fundamenta en una idea determinada de la dignidad del ser humano. Para que la idea de tolerancia sea obvia, ya se debe tener una idea clara de la dignidad del hombre. Además, el autor señala que exigir tolerancia no es suficiente para resolver los conflictos entre los propios deseos y los de los demás, ya que muchos de estos deseos pueden ser irreconciliables.
¿Cuál es la tarea del educador en relación a la ética?
El PDF no menciona explícitamente cuál es la tarea del educador en relación a la ética. Sin embargo, se menciona que al comienzo de toda ética, de todo cuestionamiento consciente sobre la vida recta, se sitúa el proceso en el que el niño es introducido en la realidad desde la parcialidad de su subjetivo mundo de sentimientos. Esto implica que la educación desempeña un papel importante en la formación ética al ayudar al niño a comprender la realidad y a desarrollar su capacidad de autodeterminación.
¿Qué es lo que denominamos valores y su relación con el gozo?
Llamamos valores a los objetos o contenido de los sentimientos como la alegría, tristeza, veneración, respeto, amor, odio, temor y esperanza. Estos valores son el contenido valioso de la realidad. El autor menciona que aquel que convierte el placer y el bienestar subjetivo en el tema de su vida y en el fin de su actividad, no experimentará aquel bienestar más profundo que llamamos gozo. En cambio, aquel que se manifieste en toda su riqueza el contenido valioso de la realidad y esté dispuesto a prescindir de sí mismo para poder gozar de algo y con algo, experimentará ese gozo más profundo. En resumen, la relación entre los valores y el gozo radica en la capacidad de apreciar y disfrutar de los contenidos valiosos de la realidad.
¿Qué es la formación y cuál es la tarea de la educación?
La formación es el proceso de sacar al hombre de su encierro en sí mismo, a la objetivación y diferenciación de sus intereses, y con ello, al aumento de su capacidad de dolor y de gozo. La educación, por su parte, tiene como tarea enseñar a los hombres a tener intereses, a interesarse por algo, y a crear intereses objetivos, es decir, el conocimiento de los valores de la realidad. Según el autor, la formación y la creación de intereses objetivos son elementos esenciales para una vida lograda.
¿Cómo debemos actuar éticamente frente a los contenidos de imágenes de miseria que nos muestra la televisión?
El PDF no proporciona una respuesta explícita a esta pregunta. Sin embargo, el autor menciona que la televisión puede tener un efecto negativo en la sensibilidad vital de las personas que la ven en exceso, lo que puede llevar a una impresión más triste en sus manifestaciones comunes de sensibilidad vital. Además, se menciona que la ética debe tener en cuenta la realidad y que la reflexión sobre la naturaleza de las cosas puede servir como justificación de lo que ya sabemos que debemos hacer. En este sentido, se podría argumentar que, éticamente, deberíamos limitar nuestra exposición a imágenes de miseria en la televisión para proteger nuestra sensibilidad y nuestra capacidad de apreciar los valores de la realidad. Sin embargo, esto es una interpretación y no una respuesta explícita del texto.
¿Qué criterio ético debemos tener frente al sentido de la justicia de nuestro tiempo?
El autor menciona que la justicia es una disposición general de hacer justicia a la realidad, particularmente a la realidad de los demás hombres, y que la benevolencia es esencial para una vida buena. Además, se plantea la pregunta de qué exige la benevolencia y qué medida, más allá de la justicia, debemos satisfacer para ser buenos. En este sentido, el autor presenta la controversia filosófica entre la ética de convicción y la ética de responsabilidad. La ética de responsabilidad implica considerar el conjunto de las previsibles consecuencias de nuestras acciones y actuar en consecuencia, incluso si eso implica realizar algo que, aisladamente considerado, podría ser considerado como malo. Por lo tanto, el criterio ético que debemos tener frente al sentido de la justicia de nuestro tiempo es considerar las consecuencias de nuestras acciones y actuar de manera responsable para hacer justicia a la realidad y a los demás hombres, incluso si eso implica tomar decisiones difíciles o realizar acciones que puedan ser consideradas malas en un contexto aislado.
De acuerdo al sentido de la responsabilidad ética ¿Quién se consideraría como un buen hombre o una buena mujer frente a la responsabilidad por omisión y la responsabilidad por incapacidad física?
Según el texto, un buen hombre o una buena mujer sería aquel que asume la responsabilidad por la omisión de una acción que no es lícito realizar, así como la responsabilidad por aquello que no se puede realizar físicamente. Esto implica que una persona éticamente responsable no solo se preocupa por sus acciones directas, sino también por las acciones que omite y por aquellas que no puede llevar a cabo debido a limitaciones físicas. Por lo tanto, un buen hombre o una buena mujer frente a la responsabilidad por omisión y la responsabilidad por incapacidad física sería aquel que reconoce su responsabilidad en ambas situaciones y actúa de acuerdo con ello.
¿Cómo podemos distinguir la conciencia ética verdadera de una conciencia errónea?
El autor plantea que no hay un criterio absoluto que nos permita distinguir una conciencia verdadera de una conciencia errónea. Sin embargo, menciona que una prueba segura de que uno sigue su conciencia y no su capricho es la disposición a controlar y confrontar su propia conciencia, es decir, reflexionar críticamente sobre las razones y motivos detrás de sus acciones y decisiones. Además, el autor sostiene que lo que es objetivamente bueno debe ser considerado también subjetivamente bueno por la persona, ya que para el hombre no existe nada que sea tan solo ‘objetivamente bueno’. Por lo tanto, una conciencia ética verdadera sería aquella que está basada en una reflexión crítica y honesta sobre los valores y principios que guían nuestras acciones, y que considera tanto la perspectiva objetiva como subjetiva de lo que es bueno.
¿Qué es lo que hace que una acción sea buena?
Según el texto, lo que hace que una acción sea buena es el amor. El autor menciona que el amor es una actitud de fundamental afirmación de la realidad, que brota de una universal benevolencia. Esta actitud de amor nos lleva a no poner a nosotros mismos en el centro del mundo, sino a extender nuestra benevolencia hacia los demás. En este sentido, el autor sostiene que para vivir bien, es necesario tener una buena relación con uno mismo. Por lo tanto, medidos por la medida del amor, solo somos condicionalmente buenos. En resumen, el amor y la benevolencia hacia los demás y hacia uno mismo son lo que hace que una acción sea buena.
Cual a sido la influencia q a ejercido l cristianismo frente a nuestro actuar etico y frente a la justicia, la injusticia y l perdon?
El cristianismo ha tenido una influencia significativa en nuestro actuar ético y en nuestra comprensión de la justicia, la injusticia y el perdón. Según el texto, el cristianismo ha aumentado el sentido de los valores y nos ha hecho más perspicaces hacia la realidad. Esto implica que el cristianismo ha contribuido a desarrollar una conciencia más delicada y una mayor sensibilidad hacia lo que es justo y lo que es injusto. Además, el cristianismo ha enfatizado la importancia del perdón, enseñando que el perdón es una virtud y una forma de liberación tanto para el que perdona como para el que es perdonado. En resumen, el cristianismo ha influido en nuestro actuar ético al promover una mayor conciencia de los valores, una sensibilidad hacia la justicia y una valoración del perdón como parte integral de nuestras relaciones humanas.
Que papel juega nuestra serenidad frente a la posibilidad de los cambios de nuestra vida?
Nuestra serenidad juega un papel fundamental frente a la posibilidad de los cambios en nuestra vida. Según el texto, lo que no podemos modificar ocurre de todos modos, y por eso debemos estar en paz con ello. Aceptar el destino y estar en paz con los cambios que ocurren nos permite estar en paz con nosotros mismos. Si no aceptamos el destino y luchamos constantemente contra los cambios, no podemos aceptarnos a nosotros mismos y no podemos llevar una vida recta. Por lo tanto, nuestra serenidad nos ayuda a enfrentar los cambios de manera tranquila y aceptarlos como parte de nuestra existencia.
Existe algún sustituto para la serenidad?
Según el texto, no existe sustituto alguno para la serenidad, nunca y bajo ninguna circunstancia, sobre todo bajo las malas. La serenidad es la propiedad del hombre feliz y es la virtud que no puede ser reemplazada por ninguna otra cosa.