1. Las Virtudes según Aristóteles
1.1. Clases de Virtudes
La clasificación de Aristóteles se basa en las partes del alma: la racional, cuya función es ordenar, y la irracional, dirigida por la primera.
Virtudes Intelectuales
Son hábitos que perfeccionan la inteligencia.
A) Referentes al Entendimiento Teórico o Especulativo
Tratan sobre cosas necesarias y universales.
- La Ciencia: Facilita el conocimiento demostrativo de las cosas universales y necesarias, es el hábito del buen razonamiento.
- El Intelecto: Su finalidad es el conocimiento de los principios utilizados en la demostración de la ciencia, conocidos por intuición.
- La Sabiduría: Su finalidad son los principios y las razones superiores de las cosas, resultado de la unión de intelecto y ciencia.
B) Referentes al Entendimiento Práctico o Direccional
Les corresponde deliberar (pensar y elegir) sobre las acciones particulares.
- El Arte: Virtud intelectual que regula la función creadora, “consiste en cierta facultad de producir dirigida por la razón verdadera”.
- La Prudencia: La virtud intelectual más importante. “Facultad que perfecciona el intelecto en orden a fijar el justo medio de las demás virtudes”. Su función es deliberar el bien para actuar bien. Supone ciencia, experiencia y deliberación. Ciencia porque el prudente debe juzgar conforme a principios universales. Experiencia porque se aplica a hechos particulares.
Virtudes Morales
Se dividen según regulen la parte irracional del alma o las relaciones del hombre con sus semejantes.
A) Dirigidas a la Parte Irracional del Alma
- Fortaleza: Entre la cobardía y la temeridad (no tener miedo a nada). Está relacionada con el dolor.
- Templanza: Entre la insensibilidad y la intemperancia (dejarse llevar por el deseo de placeres). Está relacionada con los placeres de los sentidos.
- Pudor: Entre la timidez (vergüenza excesiva) y la impudencia (nada de vergüenza). Está relacionada con las emociones.
B) Dirigidas a las Relaciones Sociales
- Liberalidad: Entre la tacañería y la prodigalidad (gastar demasiado).
- Dulzura: Entre la pusilanimidad (amedrentado) y la cólera (ira).
Justicia
es la principal de todas las virtudes morales. Y a la que dedica todo el libro V de la Ética a Nicómaco. Es el fundamento del orden de la sociedad y del de cada persona y la que da armonía a todas las demás virtudes. 1.2) “LA FELICIDAD ES LA ACTIVIDAD DEL ALMA CONFORME A LA VIRTUDPERFECTA” La felicidad consiste en el ejercicio y perfección de las capacidades más propias del hombre. Lo que nos hace felices no es el placer ni los bienes externos. Sino que lo que nos hace felices es la actividad que nos hace hombres (en primer lugar) y hombres buenos (en segundo lugar). No somos felices por lo que tenemos sino por lo que hacemos. La acción que nos hace buenos es la actividad del alma, es decir, el uso del pensamiento. En el libro X de la “ÉTICA A NICÓMACO” aporta varias razones para demostrar que el bien propio y específico del hombre consiste en la vida contemplativa, es decir, en el ejercicio de la capacidad más alta, la inteligencia. Algunas razones por las que afirma Aristóteles que la vida contemplativa (es decir, dirigida por la inteligencia) es la felicidad. Si la felicidad del hombre consiste en la actividad del pensamiento de acuerdo con la virtud, es natural que esa actividad sea de acuerdo con la virtud más elevada. Y puesto que Aristóteles sitúa las virtudes dianoéticas o intelectuales en un plano superior a las morales o éticas está claro que el “acto de pensamiento es lo que hay de más divino en el hombre” Lo que hace al hombre completamente feliz es ocuparse de la ciencia teórica más elevada, cuyo objeto es el mejor objeto, Dios, Acto puro, cumbre de todos los seres y perfecciones.
1.3) CARACTERÍSTICAS DE LA VIRTUD* La virtud es un hábito adquirido, es decir, no surge espontáneamente de la naturaleza humana, sino que es preciso adquirirla por la repetición de actos, mediante esfuerzo y constancia en la práctica del obrar bien. Mejora al hombre y le ayuda a actuar bien, pone al hombre en el camino de la felicidad. La naturaleza dota al hombre de ciertas capacidades tanto para las virtudes intelectuales como para las morales. Unos individuos nacen con más talento que otros o con un temperamento menos agitado por las pasiones. Para convertir esas disposiciones naturales en hábitos firmes y permanentes se requiere un largo ejercicio hasta convertirlos en modos permanentes de actuación. * La virtud tiene por misión completar la buena disposición natural y asegurar la ejecución perfecta, es decir, disponer al hombre para actuar de un modo perfecto. * La virtud es un hábito voluntario. No basta con saber el bien para practicarlo. La virtud es un acto libre y voluntario que implica un acto de elección en el cual intervienen conjuntamente inteligencia y voluntad. 1.4) LA VIRTUD COMO TÉRMINO MEDIO ENTRE DOS EXTREMOSVICIOSOS “La virtud es un hábito selectivo que consiste en un término medio relativo a nosotros, determinado por el pensamiento y por aquello por lo que decidiría un hombre prudente juzgando conforme a la recta razón y experiencia” – Se trata de un término medio en relación a nosotros y no en relación al objeto. Aristóteles lo ilustra con el siguiente ejemplo: si diez minas de alimento es una ración excesiva y dos escasas no hay que concluir que lo virtuoso es que todos los atletas coman seis. Se trata más bien de que cada uno coma de acuerdo con sus necesidades, evitando comer en exceso o en defecto de acuerdo con el criterio de un hombre prudente. – No hay que confundir el término medio con una especie de mediocridad, sino que es el máximo donde se halla el bien y la felicidad. – La virtud ocupa el término medio entre dos extremos viciosos.
1.5) LAS VIRTUDES COMO CRITERIO DE MORALIDAD: LA RECTA RAZÓN Hay casos en los que resulta posible determinar el término medio entre dos extremos viciosos, pero hay actos que no admiten esta posibilidad y hay que contentarse con criterios menos claros. Aristóteles acude a LA RECTA RAZÓN. La cual viene a identificarse con la capacidad de pensar y elegir bien o con prudencia. Aristóteles propone entenderla como el camino que señala la buena elección de un hombre prudente y sensato juzgando conforme a su experiencia. 2) LA FELICIDAD La felicidad es aquello a que se dirigen todas las acciones humanas. La felicidad es sinónimo de perfección. La felicidad constituye la actividad más elevada del ser humano. La felicidad es un bien independiente se busca y vale por sí mismo y no para conseguir otro bien. La felicidad debe hacer al hombre bueno. Su posesión debe tener estabilidad y continuidad a lo largo de toda la vida. Aristóteles rechazaba que el bien propio del hombre consista en los placeres sensibles. Tampoco las riquezas. Tampoco la gloria y los honores. La actividad más original y propia del hombre es la actividad racional. Así, la vida feliz deberá consistir en “VIVIR CONFORME A LA RAZÓN”.