Contextualización de la Obra de Wittgenstein
El Tractatus Logico-Philosophicus se publicó en 1921 en alemán y un año más tarde, prologado por B. Russell, en inglés. En esta obra, la filosofía de Wittgenstein (W1) es una teoría del lenguaje donde se afirma que hay una esencia única del lenguaje, su función es representar el mundo. La filosofía no es un cuerpo de conocimientos, sino una actividad de esclarecimiento del lenguaje.
El Tractatus, construido por la ordenación rigurosamente lógica de una colección de sentencias cortas, se presenta como una obra cerrada, tanto por su forma como por su contenido. Por su forma, se compone de 6 tesis con sus comentarios respectivos (todas ellas numeradas de 1 a 6, y acompañadas de otra numeración que, como el mismo autor explica en la primera página de la obra, 1.1 sería un comentario de la tesis 1, 1.11 comentario de 1.1, y así sucesivamente) y que se cierra con la escueta tesis 7: “De lo que no se puede hablar hay que callar”. Es también una obra cerrada por su contenido, porque nos dice que los planteamientos establecidos son definitivos y que todos los problemas han sido resueltos. Wittgenstein cierra el prólogo, firmado en Viena, en 1918, con estas palabras: “La verdad de los pensamientos aquí comunicados me parece, en cambio, intocable y definitiva. Soy, pues, de la opinión de haber solucionado definitivamente, en lo esencial, los problemas. Y, si no me equivoco en ello, el valor de este trabajo se cifra, en segundo lugar, en haber mostrado cuán poco se ha hecho con haber resuelto estos problemas”.
Estructura del Tractatus
En la obra hay tres componentes básicos:
- Un análisis lógico del mundo (tesis 1 – 2.1) y del intermediario epistemológico entre éste y el lenguaje, la figura (tesis 2.1 – 3) y el pensamiento.
- Un análisis lógico del lenguaje (tesis 3 – 6.4) y del valor cognoscitivo de los diversos lenguajes considerados científicos, se alude también a su idea de la función de la filosofía (tesis 4.11 – 4.12) sobre la que vuelve en la tesis 6.53.
- Una reflexión acerca de lo que está más allá del lenguaje con sentido, lo místico (tesis 6.4 – 7).
Evolución del Pensamiento de Wittgenstein
Entre 1933 y 1935, Wittgenstein da cursos en la Universidad de Cambridge sobre sus nuevos puntos de vista. De los apuntes tomados y redactados por sus alumnos saldrán los llamados Cuadernos Azul y Marrón. En 1947, en Irlanda, terminará su segunda y gran obra: Investigaciones filosóficas.
En función de las dos grandes obras de Wittgenstein: Tractatus Logico-Philosophicus e Investigaciones filosóficas, se distinguen dos períodos que, aun teniendo a la filosofía como una teoría del lenguaje, se caracterizan de modo distinto:
- El primero (W1) afirma que hay una esencia única del lenguaje y su función es representar el mundo.
- El segundo (W2) entiende que no hay una esencia única del lenguaje, sino que existen diversidad de usos lingüísticos.
En ambos se entiende que la filosofía no es un cuerpo de conocimientos, sino una actividad de esclarecimiento del lenguaje.
Biografía de Ludwig Wittgenstein
Nace en Viena en 1889, en el seno de una familia rica y amante del arte, perteneciente al estamento industrial y de origen judío. Estudió ingeniería en Berlín (1906) y en Manchester (1908), interesándose al mismo tiempo por las matemáticas y el problema de su fundamentación, interés que le llevó a contactar con B. Russell y, a instancias de éste, con G. Frege. En 1912, en Cambridge, estudia Lógica y Filosofía con B. Russell y G. E. Moore. Ese mismo año muere su padre y hereda una inmensa fortuna. En 1913, comienza a escribir retirado en un fiordo noruego. En 1914, en Viena, al comenzar la 1ª Guerra Mundial, dona 100.000 coronas entre escritores y artistas pobres, pues considera que éstos son los verdaderos educadores de la cultura en aquellos problemas que verdaderamente interesan en la vida. Se alista como voluntario en el ejército austriaco y participa en la 1ª Guerra Mundial. Acabada la guerra, trabaja en un centro vienés de formación del profesorado, después como profesor de primaria en pueblos de montaña y como jardinero de un convento. Retoma el contacto con el Círculo de Viena y regresa a Cambridge y se doctora con la presentación del Tractatus Logico-Philosophicus. En 1939 ocupa la cátedra de G. E. Moore en Cambridge. En la 2ª Guerra Mundial se alista voluntario como enfermero. Tras un posterior retiro en Irlanda, cansado de la artificialidad y monotonía de la actividad académica, y un viaje a Estados Unidos, regresa a Cambridge donde muere en 1951.
El Movimiento Analítico
El movimiento analítico nace en Inglaterra de la mano de J. E. Moore (1873 -1958) y B. Russell (1882 –1970), a quienes se les uniría como discípulo y luego como impulsor, L. Wittgenstein. El movimiento analítico entiende la filosofía como análisis del lenguaje, aunque difieren los diversos autores por la concepción del lenguaje y por el método de análisis. El movimiento, que recupera la tradición del empirismo inglés, se desarrolló en tres corrientes filosóficas:
- El atomismo lógico: de B. Russell y del primer Wittgenstein (W1), el del Tractatus, cuyos presupuestos son:
- Isomorfismo: entre la estructura lógica del lenguaje y la estructura de la realidad.
- Teoría referencialista del significado: el significado de los términos del lenguaje son los objetos a los que se refiere.
- El positivismo lógico o neopositivismo: de los filósofos del Círculo de Viena, influidos por Wittgenstein y con el objetivo de determinar el lenguaje con significado, alejándose de toda metafísica y centrándose en las relaciones entre el lenguaje y los hechos.
- La filosofía analítica: originada por el segundo Wittgenstein (W2), el de las Investigaciones Filosóficas, y que pretende llevar el análisis del lenguaje, más allá del lenguaje científico, al lenguaje ordinario.
Interpretaciones del Tractatus
Del Tractatus se han hecho dos interpretaciones (A. Janik-S. Toulmin, La Viena de Wittgenstein): ética y lógica.
La Interpretación Ética
La ética destaca la formación filosófica de Wittgenstein, influenciado por I. Kant, por A. Schopenhauer (El mundo como voluntad y representación, 1819), por S. Kierkegaard (1813 – 1855) y por L. Tolstoy (1828 – 1910). La filosofía es entendida por Wittgenstein como crítica al modo kantiano, pero aquí como crítica del lenguaje. Si Kant pretendió delimitar con precisión lo que puede conocerse, frente a lo que sólo puede pensarse, Wittgenstein pretende delimitar lo que puede ser dicho con sentido, frente a lo que no puede decirse y que, en todo caso, puede sólo mostrarse. El ámbito del sentido de la vida, de la ética y de la estética queda fuera del ámbito de lo decible, lo que, como en Kant, conduce a superar todo dogmatismo, pero, al mismo tiempo, abre el camino a cualquier forma de irracionalismo.
Hay una cierta continuidad histórica que va de Kant a Tolstoy, pasando por Schopenhauer y Kierkegaard y que apoya la interpretación ética del Tractatus. Kant había distinguido y separado entre la función teórica o cognoscitiva y la función práctica o moral de la razón, operación continuada por Schopenhauer separando el mundo como representación del mundo como voluntad y que culminó Kierkegaard al separar radicalmente la razón de todo cuanto pertenece al sentido de la vida.
Contexto Histórico
En el acelerado y convulso siglo XX se ha producido una total transformación del mundo. En el transcurso del mismo, Europa pierde la hegemonía que hasta su comienzo ejercía y aparecen nuevos centros de poder y de influencia.