Dinámica Demográfica de Navarra

LA POBLACIÓN EN NAVARRA

1.- DISTRIBUCIÓN Y EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN

DISTRIBUCIÓN

La Comunidad Foral tiene una población de unos 646.000 habitantes (2008) y una densidad de 62,17 hab/km2, inferior a la media española. Ha sido así a lo largo del siglo XX. Su peso demográfico ha descendido desde 1900 hasta hoy. La densidad de Navarra se parece más a las densidades de las otras Comunidades vecinas, La Rioja y Aragón, y muy lejana a la del País Vasco que es muy elevada.

La distribución es muy irregular. Además, esta densidad media muestra diferencias importantes a lo largo del territorio, mostrando la mitad occidental mayor densidad que la oriental. El sector oriental de esta línea comprende comarcas como los valles pirenaicos transversales, al norte, o la Bardenas Reales, en el extremo meridional, poco atractivas para el asentamiento de la población. Por el contrario, en el sector occidental de la línea la densidad es mayor, debido al gran papel de la industrialización de algunos municipios de los valles cantábricos (Lesaka), de la Ribera (San Adrián, Tudela), de la Navarra Media (Tafalla, Estella); Corredor del Araquil (Irurtzun, Alsasua, Etxarri Aranatz).

En el Área Metropolitana de Pamplona encontramos las densidades más elevadas con valores que superan los 1.000 hab/km2 en Barañain, Burlada, Pamplona y Zizur Mayor. Se corresponde con el gran espacio industrial, terciario y urbano de la Comunidad Foral.

Se deducen estas conclusiones:

  • La Montaña es la zona de Navarra menos poblada sin incluir la Cuenca de Pamplona. También destacan el Baztán (cerca de la frontera con Guipúzcoa) y el Corredor del Arakil (Alsasua). La Navarra Húmeda del NO contiene el 11% de la población; en el extremo opuesto se encuentran los Valles del Pirineo Oriental que reflejan un gran vacío demográfico. Representan un 2% de la población de Navarra. En general toda la parte oriental de Navarra está menos poblada, desde las Bardenas hasta el Roncal.
  • Esta distribución se debe sobre todo a factores económicos; factores físicos, la aridez de las Bardenas o el clima de montaña, pueden ser aplicados en casos concretos, pero las causas de esta distribución se deben a la evolución económica de Navarra.
  • Hasta mediados del siglo XX Navarra tenía poca industria y estaba escasamente poblada debido principalmente al éxodo rural que originó una fuerte emigración hacia el exterior. Se dirigía hacia América o a otras partes de España como el País Vasco. También había emigración dentro de Navarra cuyo destino era sobre todo Pamplona que empezó a extenderse dando lugar a la formación del II Ensanche.
  • En los años 60 en el contexto de España del Desarrollo se produce la industrialización de Navarra a partir del Plan de Promoción Industrial, de 1965. Por ello aparecen los primeros polígonos industriales y las primeras grandes empresas. Las zonas más industrializadas fueron la Comarca de Pamplona, el Eje del Ebro, el Corredor del Arakil. El desarrollo económico frenó la emigración hacia el exterior y el éxodo rural se dirigió hacia estas zonas. Navarra al mismo tiempo fue el destino de la inmigración procedente de otras regiones de España como Andalucía y Extremadura. Pamplona tuvo un gran crecimiento. Aparecieron nuevos barrios como Echavacoiz, La Chantrea y La Milagrosa. A mitad de los 70, Iturrama y a finales de los años 60 y a lo largo de los años 70 el barrio de San Juan.
  • A partir de 1975, la crisis económica y la conflictividad laboral relacionada con la coyuntura política por el comienzo de la Transición, frenaron el desarrollo industrial pero la distribución siguió siendo básicamente la misma.
  • En la actualidad, podemos destacar que se está produciendo un gran crecimiento en torno a Pamplona, en municipios de la periferia habitados por jóvenes procedentes de Pamplona y sus alrededores, por ejemplo Huarte y Berriozar han duplicado su población entre el año 2000 y 2006, también Ansoáin, Artica, Mutilva y Sarriguren han experimentado un gran aumento. Igualmente Tudela ha desarrollado un crecimiento importante, así como Estella y Tafalla.

EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN

Durante el siglo XX la población de Navarra se duplicó (de 307.000 habitantes en 1900 a 530.000 en 1998). La década de 1960 fue la de mayor crecimiento demográfico como consecuencia del proceso industrializador que se llevó a cabo en España y de modo más intenso en Navarra entre otros territorios. El crecimiento no ha sido homogéneo, siendo elevado en la mayor parte del Área Metropolitana de Pamplona, en los asentamientos de la Ribera al lado del Ebro (Azagra, Castejón, Lodosa, San Adrián, Tudela y Viana); algunos municipios de los Valles Cantábricos (Bera, Leitza, Lesaka), Alsasua. Algunas comarcas como Estella o Tafalla se suman al crecimiento. Los municipios regresivos corresponden con las menores densidades: La Cuenca de Lumbier-Aoiz; los Valles Pirenaicos y casi toda la Zona Media sobre todo la oriental y algunos valles de Navarra del NO.

2.- MOVIMIENTOS NATURALES (Natalidad, Mortalidad y Crecimiento Natural)

NATALIDAD

La natalidad en Navarra es más baja que la media estatal. Como en el resto de España presenta un crecimiento entre 1955 y 1965 y un descenso brusco desde 1977 hasta finales del siglo XX. El Régimen Demográfico Moderno se presenta a partir del descenso de natalidad posterior a 1975. En Navarra incluso fue más brusco que en España. Fue un gran cambio, si se tiene en cuenta que Navarra era una región ideológicamente muy tradicional y con una influencia de la Iglesia importante. Igualmente se puede destacar que en la actualidad en Navarra se está produciendo un repunte muy evidente de la natalidad. Las causas son el fenómeno de la inmigración y el hecho de que los nacidos en el “baby boom” son los progenitores en la actualidad. Entre las madres de nacionalidad extranjera, se encuentran en primer lugar las marroquíes, seguidas de ecuatorianas y colombianas. En conjunto el nivel de fecundidad de las mujeres inmigrantes es de 1´85 frente al 1´37 de las españolas. También es destacable que las madres de más de 40 años, la edad de la primera maternidad ha descendido. Desde el año 2000 era de unos 32 años y en el año 2007 ha bajado a 31´6. La natalidad es mayor en las zonas en expansión del Área Metropolitana de Pamplona donde se han establecido en los últimos años parejas jóvenes (Mendillorri, Zizur Mayor). Las tasas más bajas se sitúan principalmente en las zonas de mayor envejecimiento, en la Zona Media Oriental, Tierra Estella, en el Pirineo y en algunos municipios del NO, casi todos ellos rurales. El descenso de la natalidad ha ocasionado una reducción del crecimiento real y un aumento de peso de los grupos de mayor edad.

MORTALIDAD

Navarra sigue el comportamiento del resto de España. Era muy baja en los años 80 del siglo XX. Desde entonces ha aumentado debido al aumento de la esperanza de vida y mayor envejecimiento de la población. La esperanza de vida es de las más altas de España especialmente la femenina. La distribución espacial de la mortalidad tiene una relación inversa a la de la natalidad, siendo mayor en las zonas más envejecidas y rurales. En todo caso se puede anotar como aspecto diferente que en Navarra durante los años de la Guerra Civil (1936-39) la mortalidad fue menor que en el conjunto de España, donde se aprecia que es muy elevada superando a la natalidad y dando lugar por tanto a un crecimiento natural negativo. Este hecho se debe a que Navarra, por el apoyo del General Mola y de los Requetés al Alzamiento, no fue frente directo de batalla y sufrió menos bajas que otras zonas de España.

CRECIMIENTO NATURAL

Hasta los años 60 del siglo XX era superior al diez por mil. A partir de entonces la reducción de la natalidad y el ligero incremento de la mortalidad ha provocado una disminución del crecimiento, prácticamente nulo a finales del siglo XX. Las áreas de mayor crecimiento natural son aquellas en las que predominan asentamientos relativamente grandes, bien comunicados y disponen de variados recursos económicos. Algo más de la mitad de los municipios navarros tuvieron tasas de crecimiento natural negativo a finales del siglo XX, siendo más elevados en los Valles Pirenaicos y en la Navarra Media.

3. MOVIMIENTOS MIGRATORIOS

La emigración fue el tipo de flujo migratorio principal durante todo el siglo XIX y primera mitad del siglo XX. Era una emigración externa con destinos a Francia, América y en menor medida Guipúzcoa. La mayor parte de los emigrantes procedían de la Montaña. En los años 70 del siglo XX Navarra se convirtió en un destino de la emigración interna española, en relación a la transformación industrial que experimentó el territorio. El destino de los inmigrantes era Pamplona y municipios limítrofes (Berriozar, Burlada) y otros núcleos como Alsasua, Tudela. Los inmigrantes procedían de las grandes áreas emisoras como Andalucía, Castilla y León y Extremadura. A todo ello hay que añadir el éxodo rural que se produjo a partir de estas fechas de nuevo relacionado con la industrialización de la capital. En el caso de la capital los inmigrantes procedían del Pirineo y de la Navarra Media Oriental, zonas que conocieron un largo proceso de despoblación. Con la crisis industrial del siglo XX cesaron los movimientos procedentes de otras áreas españolas, aunque continuaron con cierta entidad los de provincias limítrofes siendo tanto emigratorios como inmigratorios. A partir de los años 90 del siglo XX se comienza el fenómeno de inmigración externa, como ha ocurrido en el resto de España. En Navarra a principios del siglo XX la presencia de extranjeros se situaba en torno al 0,4 %. En el año 2006 los extranjeros representaban el 10,4% en Navarra. Los 2 colectivos más importantes son los marroquíes y ecuatorianos. Los primeros tienen mayor presencia en la Ribera, en relación a la presencia de actividades agrícolas que utilizaban mayor cantidad de mano de obra. Los segundos tienen mayor presencia en las áreas industriales y el área metropolitana de la capital. Se han hecho habituales los movimientos pendulares, es decir, desplazamientos diarios de las casas al trabajo, propios del desarrollo industrial y los servicios.