Contexto de Platón
El fragmento que analizamos pertenece al Libro VIII de La República, obra cumbre del pensamiento de Platón. Este diálogo, el más importante del filósofo, se compone de diez libros que sintetizan su teoría política y su doctrina completa. Los temas centrales de La República son la politeia (política) y la paideia (educación). Escrita durante la madurez de Platón, la obra se caracteriza por la presencia subyacente de la Teoría de las Ideas en todos los temas tratados. Sócrates, como personaje principal, dialoga con otros personajes.
La influencia más evidente en Platón es la de Sócrates. En sus primeras obras, los diálogos de juventud, Platón se centra en definir conceptos socráticos, reproduciendo las enseñanzas de su maestro sobre la virtud (ejemplos: Critón o Lisis). En los diálogos de transición, emergen problemas políticos y la Teoría de las Ideas. Temas como la inmortalidad del alma y la reminiscencia cobran protagonismo. En los diálogos de madurez, Sócrates deja de ser el personaje principal y desaparecen los mitos. Finalmente, en sus últimos diálogos, Platón se centra en la apología.
La intención de los diálogos platónicos es didáctica y propedéutica (preparatoria). Sócrates, presente en la mayoría de ellos, expone las ideas de Platón, quien, a medida que madura, se distancia de su maestro para desarrollar sus propias teorías filosóficas. El pensamiento de Platón se expresa a través de Sócrates, y los títulos de sus diálogos combinan el nombre del interlocutor con un tema específico.
Platón nació en Atenas en el año 427 a. C., durante el período de mayor esplendor de la filosofía griega. Proveniente de la aristocracia ateniense, su entorno familiar y su educación lo inclinaron hacia la política. A los veinte años conoció a Sócrates, quien se convertiría en su maestro e influiría profundamente en su pensamiento. La condena a muerte de Sócrates y el gobierno oligárquico de los Treinta Tiranos alejaron a Platón de la política, volviéndolo crítico y llevándolo a idear un sistema utópico de gobierno. Influenciado por la filosofía presocrática, Platón adoptó características del ser de Parménides para su mundo inteligible, y de Pitágoras su interés por las matemáticas. De Sócrates, heredó el conflicto con los sofistas, el relativismo, la inmortalidad del alma y el escepticismo. El pensamiento platónico gira en torno a su ideal político y a la Teoría de las Ideas.
Contexto de San Agustín
Este fragmento pertenece a La Ciudad de Dios, obra de San Agustín escrita entre los años 413 y 427 d. C. para defender a los cristianos de las acusaciones paganas tras el saqueo de Roma por Alarico en el 410 d. C. Los paganos reprochaban la supuesta falta de protección de un dios omnipotente. La obra contiene una reflexión sobre la sociedad y la historia, vista como el escenario de la manifestación divina y la salvación. “Ciudad” significa aquí “sociedad”. Los cristianos rechazaban la sociedad imperial como Civitas Diaboli (de Satanás) frente a la Civitas Dei (Ciudad de Dios).
- Civitas Diaboli: Se rige por la voluntad humana. Es imperfecta, y la salvación es individual.
- Civitas Dei: Se rige por la voluntad divina. Es perfecta, una comunión de hombres en gracia.
La Ciudad de Dios es una metáfora de la sociedad ideal agustiniana y una teología de la historia. El teocentrismo (Dios como centro del universo) presenta a Dios y la Providencia como autores de la historia. El gobernante perfecto, para San Agustín, es el cristiano. La conclusión agustiniana (agustinismo político) radica en que la Iglesia, guiada por el amor, es superior al Estado. El poder espiritual (Papa) debe estar por encima del temporal (Emperador). La Iglesia debe moldear moralmente al Estado, mero organizador de la paz. La teología de la historia agustiniana subordina la razón a la fe, lo natural a lo sobrenatural, lo temporal a lo divino, el Estado a la Iglesia, y el odio al amor.
Rasgos del Pensamiento Cristiano
Antes de hablar de San Agustín, conviene señalar los rasgos del pensamiento cristiano (no es filosofía, sino religión de salvación, positiva y revelada):
- Creacionismo: Dios crea el mundo ex nihilo (de la nada).
- Monoteísmo: Un solo Dios verdadero.
- Omnipotencia de Dios: Todopoderoso.
- Universalismo: Única verdad revelada.
- Paternidad divina: Dios-Padre se hace humano para salvar a los hombres.