El Estallido de la Guerra Civil Española
Del Golpe de Estado a la Guerra Civil
El coronel Yagüe, jefe militar de la legión, se alzó en armas contra la República junto a la mayoría de las guarniciones militares, así como sectores civiles de falangistas y carlistas (requetés). Desde Marruecos, el general Franco había asegurado el triunfo en Canarias y se dirigió hacia la Península al frente del ejército de África. El jefe de gobierno, José Giral, decidió entregar armas a las milicias de los sindicatos y de los Partidos del Frente Popular. Parte del ejército y de las fuerzas de seguridad se mantuvieron fieles al gobierno. La sublevación triunfó en gran parte de España. El alzamiento fracasó donde las fuerzas obreras y de izquierda tenían más peso. Después de una semana, el golpe militar no había triunfado y originó la división del país en dos bandos para enfrentarse en la Guerra Civil.
La Consolidación de los Bandos
El bando de los sublevados: militares conservadores, monárquicos de derechas, grupos católicos, falangistas, carlistas y todos los que se opusieron a las reformas de la República. Inspirados por el fascismo, se definían como nacionales y católicos. Su objetivo era restablecer una dictadura militar, y tras el tiempo necesario, establecer una forma de poder de monarquía o república. Los falangistas querían imponer un régimen fascista y los carlistas una monarquía carlista.
Los leales a la República: clases más populares, obreros, pequeña burguesía, campesinado sin tierras, intelectuales, artistas y clases medias. Se agrupaban en organizaciones socialistas, comunistas y anarcosindicalistas que defendían la legitimidad republicana.
La Significación del Conflicto
La Guerra Civil fue una confrontación entre democracia (socialista o comunista) y fascismo (Alemania o Italia). Fue, más bien, el enfrentamiento armado entre los viejos grupos dominantes de la Restauración.
La Internacionalización de la Guerra Civil
A favor de la República estaba la opinión democrática progresista, partidos obreros y la URSS. Por el contrario, Francia, Gran Bretaña y los gobiernos fascistas veían el alzamiento de Franco como un freno a la expansión del comunismo.
Ambos bandos buscaron apoyo en el exterior y sus gobernantes intentaron evitar la extensión del conflicto. Francia creó el Comité de No Intervención, que supuso una gran injusticia para la República, siendo una de las causas de su derrota.
La Ayuda Exterior
La existencia del Comité de No Intervención no impidió que los bandos tuvieran ayuda exterior. Largo Caballero envió a la Unión Soviética las reservas de oro, donde los militares soviéticos tuvieron un gran papel en la táctica de la guerra del Partido Comunista.
En el bando republicano, las brigadas internacionales ayudaron a la República. Los sublevados fueron los que tuvieron más apoyo, con la ayuda de Alemania (aviación y Legión Cóndor) y de Italia (cuerpos voluntarios).
La Zona Republicana: La Revolución Contenida
El Derrumbe del Estado Republicano
Se entregaron armas a las milicias de partidos y sindicatos, se disolvió el ejército tradicional y el cuerpo policial, y se crearon batallones voluntarios. El poder del Estado se desplomó y fue sustituido por organismos revolucionarios (consejos, comités y juntas). En Cataluña se creó el Comité Central de Milicias Antifascistas y se reconstituyó el poder de la Generalitat.
El Desencadenamiento de la Revolución Social
En el territorio que permaneció fiel a la República, el alzamiento militar provocó la extensión de un clima revolucionario. El elemento más significativo de la revolución social fue la colectivización de la propiedad industrial y agraria, donde las empresas se autogestionaban. Una serie de decretos dieron cobertura legal a las incautaciones: en el campo se extendieron la ocupación y expropiación de fincas. La iglesia, la burguesía y las clases acomodadas fueron objeto de persecución y asesinatos. El resto de fuerzas políticas reclamaban un poder que ganara la guerra.
El Gobierno de Largo Caballero
Se formó un gobierno capaz de reunir esfuerzos para ganar la guerra, creando un pacto que permitiera la unidad antifascista. El gobierno, compuesto por republicanos, socialistas, comunistas y anarcosindicalistas, se trasladó a Valencia. Su objetivo era recomponer el Estado y crear el Ejército Popular. Los fracasos militares abrieron enfrentamientos entre fuerzas republicanas: un sector buscaba poner orden y construir un Estado fuerte, mientras que otro sector (POUM y anarquistas) buscaba afianzar transformaciones revolucionarias para la movilización popular contra el fascismo. El enfrentamiento entre bandos de la misma República en Barcelona provocó la derrota de los anarquistas y el POUM, con 200 muertos.
El Gobierno de Negrín
Las posiciones comunistas se fortalecieron y se restó influencia a los anarquistas, ya que tenían una gran influencia en la ayuda de la Unión Soviética. El presidente de la República, Manuel Azaña, encargó la formación de un nuevo gobierno a Juan Negrín. Basó su política en el esfuerzo militar, reforzó el poder central, integró las milicias en el Ejército Popular y trasladó la sede de gobierno a Barcelona. Se intentó buscar una salida a la guerra con el programa de los Trece Puntos, pero Franco no aceptó negociaciones y Negrín insistía en la necesidad. Más tarde, se produjo la pérdida de Barcelona, que provocó el exilio de la República de Cataluña y el País Vasco. Gran Bretaña y Francia reconocieron el gobierno de Franco y Manuel Azaña presentó en París su dimisión como presidente de la República.
La Zona Sublevada: La Creación de un Estado Totalitario
Francisco Franco: Generalísimo
La muerte del general Sanjurjo, jefe del movimiento golpista, y el hecho de que el alzamiento no triunfase y diera origen a una guerra, dieron origen a una nueva situación. Se creó la Junta de Defensa Nacional, presidida por Cabanellas. La misión de la junta era gobernar el territorio ocupado, prohibir la actividad de los partidos políticos, paralizar la reforma agraria y suspender la Constitución. Para dirigir la guerra, Francisco Franco fue ganando seguidores, le eligieron jefe del alzamiento y el 1 de octubre de 1936 se le nombró Jefe de gobierno del Estado y Generalísimo del ejército.
La Creación del Partido Único. El Gobierno de Burgos
Existía un mando militar único pero ninguna cohesión política. Esto provocó que se prohibieran los partidos que formaban parte del Frente Popular y los sindicatos. Los grupos políticos eran Falange Española, JONS y Carlistas. Franco desplegó una estrategia de alargamiento de la guerra mediante la cual consolidó su liderazgo militar y consiguió imponerse a las diversas fuerzas que apoyaban la insurrección. El Decreto de Unificación creó el partido único, Falange Española y de la JONS. Llevaban un uniforme con una camisa azul de Falange y boina roja de Carlistas, y con un saludo fascista. Todo aquel que impusiera una resistencia iba a la prisión o al destierro. Se formó el primer gobierno de Franco, que concentraba la jefatura del Estado y la presidencia del gobierno, y pasó a llamarse Caudillo de España. El nuevo Estado se inspiraba en el fascismo y defendía un modelo social basado en el conservadurismo y el predominio del catolicismo. Se suprimieron las libertades, los estatutos de autonomía y se restableció la pena de muerte. Se impuso el fuero del trabajo y un Estado Confesional. Se respetaba la influencia de la Iglesia.
Una Represión Institucionalizada
La constitución del Estado franquista vino acompañada de una violencia extrema para acabar con los vencidos en los territorios que se ocupaban. Se asesinaron a personas importantes y se ejecutaron a políticos del bando republicano y militares contrarios al alzamiento. La represión fue de carácter sistemático, planificado, ejercida por el ejército y las autoridades o la Falange contra cualquier sospecha de simpatizar con las izquierdas.
Las Operaciones Militares
Entre las operaciones militares destacan el avance hacia Madrid, la ocupación del norte, la Batalla del Ebro y la ocupación de Cataluña.
Los Efectos de la Guerra
Muerte, Carestía y Destrucción
La guerra comportó miseria y muerte para personas de uno y otro bando. Hubo víctimas de la represión, muertes y graves carestías de alimentos, pero más graves en la zona republicana. A medida que avanzaba el conflicto, los precios subieron, por lo que el mercado negro se extendió. La destrucción provocó enfermedades y muertes. Hubo una reducción de la producción industrial debido a que los hombres eran enviados al frente. La población femenina (en la zona republicana) se incorporó al mundo laboral, y las industrias se dirigieron a la producción de armamento y avituallamiento militar, lo que dejó muy desabastecida a la población de productos de consumo. Los bombardeos fueron utilizados por los sublevados como un instrumento de terror y un arma de destrucción.
La Población Desplazada: Refugiados y Exiliados
Debido al temor por ideales políticos, los civiles huían del territorio en el que se encontraban. Con el avance de las zonas franquistas, el movimiento de refugiados se dio sobre todo en la zona republicana. Hacia el final de la guerra, población de toda España y miles de soldados en retirada cruzaron la frontera francesa. Gran parte de los refugiados fueron conducidos a campos de concentración. En pocos meses, la mitad volvieron a España, mientras que el resto inició un largo y penoso exilio.