Introducción. La llegada al trono español de Carlos de Austria fue resultado de la política matrimonial de sus abuelos. Fue el monarca más poderoso de Europa por herencia y la figura central de la política europea durante la primera mitad del siglo XVI. Con él se inicia la dinastía de los Austria y con ella la subordinación de los intereses hispanos y el papel de defensa del catolicismo. Su tiempo fue brillante por hazañas bélicas y por el resplandor de la cultura del Renacimiento.

Tras la muerte de Fernando el Católico en 1516, Carlos, hijo de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, nacido en Gante en 1500, llegó a España para hacerse cargo de la herencia materna. De Isabel recibió: Castilla, América y Navarra; de su abuelo Fernando recibió: Aragón y sus posesiones del Mediterráneo (Sicilia, Cerdeña y Nápoles). Más tarde heredó de su abuela paterna, María de Borgoña: Flandes, Luxemburgo y el Franco Condado. A todo esto hay que añadir que en 1519, tras la muerte de Maximiliano I de Austria, heredó: Alemania y la corona Imperial del Sacro Imperio Romano Germánico. Desde entonces se le conoce con el nombre de Carlos I de España y V de Alemania.

Su programa político tenía tres objetivos claros:

• Mantener las posesiones heredadas de sus abuelos.
• Crear una monarquía universal bajo el dominio del Emperador, entendido no como rey de reyes, sino como árbitro de la política europea.
• Crear una Europa unida bajo el signo de la religión católica, defendiéndola de ataques exteriores (Islam) como interiores (reformas protestantes).

La gran extensión de sus territorios dotaba a Carlos de gran poder y de la hegemonía europea, pero a su vez tenía dos inconvenientes: gran dificultad de gobierno, al tratarse de territorios dispersos y heterogéneos, y una lucha constante y agotadora con sus enemigos en distintos frentes.

Política Interior

La autoridad de Carlos no era igual en todos los territorios. Carlos no estableció una capital estable para todos sus territorios, él viajaba de unos territorios a otros, lo que permitió que ninguno de ellos se sobrepusiese al resto. Creó nuevos consejos, el de Italia y Flandes. Los crecientes gastos en política exterior fueron minando la Hacienda, especialmente la castellana, quien para hacer frente a la deuda, vendió tierras, cargos municipales… lo que provocó que las oligarquías locales se hicieran con el control de los municipios.

Las Comunidades

En 1520, Carlos embarca para Alemania para recibir la corona imperial, mientras se produce la sublevación de las principales ciudades castellanas (Toledo, Segovia y Salamanca). Entre los grupos sociales que las apoyan destaca sobre todo la burguesía urbana que atraerá a los campesinos, con lo que la revuelta toma un cariz social. Las ciudades sublevadas fueron derrotadas en Villalar en 1521 y sus jefes, Padilla, Bravo y Maldonado, fueron ajusticiados. Las consecuencias de la derrota fueron muy graves para el futuro de Castilla, se impusieron los intereses de la monarquía y la nobleza, frustrando el desarrollo de la burguesía, y las ciudades quedan sometidas al rey.

Las Germanías

Las Germanías se producen en Valencia y Palma de Mallorca en 1520. Las causas fueron las revueltas antiseñoriales; le apoyan los artesanos, campesinos y el bajo clero, que fueron derrotados por los señores y tropas del rey. El emperador hizo del castellano su idioma habitual. Los castellanos aceptaron con entusiasmo las ideas políticas del emperador a pesar de que a veces poco tenían que ver con sus intereses y supusieron sus últimos años y morir en el monasterio de Yuste (Cáceres).

Política Exterior

Guerras contra Francia

Las causas fueron el enfrentamiento tradicional heredado de los Reyes Católicos, la lucha por la hegemonía de Europa y luchas territoriales en Navarra, Borgoña e Italia. Las hostilidades empezaron en 1521 cuando Francisco I invade el Milanesado y Luxemburgo, aprovechando la inestabilidad política derivada de las comunidades y Germanías. La victoria de Carlos en Pavía (1525) y la paz de Madrid (1526) hacen que Francia abandone momentáneamente sus pretensiones en Italia y Borgoña. La alianza con el papa Clemente VII y las ciudades italianas del norte, recelosas del papel de Carlos en Italia, hacen renacer el conflicto que se salda con la Paz de Cambrai (1529) en la que Francia obtiene Borgoña y Carlos, Milán.

Guerras contra los Turcos

En el contexto de la expansión por el Norte de África, con un triple objetivo:

• Religioso: prolongación de la lucha contra el infiel, iniciada en la reconquista.
• Geoestratégico: controlar el Mediterráneo Occidental (camino español).
• Comercial: defender las rutas comerciales del Mediterráneo Occidental del ataque de los piratas.

Tuvo dos escenarios: Zona central de Europa: ocupan Hungría y amenazando la casa de Austria; y, Mediterráneo Occidental: conquista de Túnez (1535).

Guerras contra la Reforma Protestante

En Alemania, la difusión de la reforma iniciada por Lutero fue asumida por motivos religiosos, políticos y económicos. Carlos se erige defensor del cristianismo. El fracaso de la política conciliadora llevó al conflicto militar. La victoria de Carlos V en la batalla de Mulhberg (1547) derivó en la paz de Augsburgo (1555), donde se mantenía la unidad del imperio a cambio de la libertad religiosa. Cada príncipe alemán podía establecer en su territorio la religión que desee.

Conclusión

A su hermano Fernando le dejó el patrimonio de las Austrias y el imperio, y a su hijo Felipe II los reinos de la Península Ibérica y la casa de Borgoña. Carlos mantuvo y acrecentó las posesiones heredadas, aunque no pudo mantener la unidad cristiana frente al luteranismo.