Dictadura de Primo de Rivera: Causas, Etapas y Caída

Dictadura de Primo de Rivera

El 13 de septiembre de 1923, Miguel Primo de Rivera dio un golpe de Estado, declarando el estado de guerra. Publicó un manifiesto en el que declaraba los motivos para rebelarse y sus intenciones. Contó inmediatamente con el apoyo del rey Alfonso XIII, legalizando así un acto anticonstitucional y convirtiéndose en responsable directo de la Dictadura.

Causas del Golpe de Estado

  • Crisis y degeneración del sistema político de la Restauración: Los partidos conservadores y liberales se turnaban en el poder, pero se habían mostrado incapaces de acabar con el sistema caciquil y estaban fragmentados, por lo que se eligió la implantación de una dictadura para solucionar la crisis.
  • Descontento del ejército por la guerra de Marruecos: El desastre de Annual desprestigió al ejército y el Expediente Picasso aumentó la desconfianza de los militares hacia los políticos.
  • Agudización de los conflictos sociales: Desde la crisis de 1917, hubo numerosas huelgas y protestas de las clases trabajadoras. La burguesía estaba atemorizada ante el aumento del terrorismo anarquista y se mostraba partidaria de medidas de fuerza para atajarlas.
  • Auge y radicalización de los nacionalismos periféricos, en especial el catalán.
  • Triunfo del fascismo en Italia: La Marcha sobre Roma llevó a Mussolini al poder. También en otros países europeos se impusieron dictaduras derechistas. La dictadura de Primo de Rivera no es una excepción.

Los objetivos del golpe eran acabar con el sistema parlamentario, garantizar el orden público, terminar con el separatismo y solucionar el problema marroquí. Primo de Rivera tenía valores tradicionales, creía que bastaba la buena voluntad, la honradez y el patriotismo para gobernar un país, combinaba ideas regeneracionistas con la influencia del fascismo italiano.

Apenas hubo oposición al golpe de Estado. Los socialistas no ofrecieron resistencia e incluso colaboraron con el régimen. Anarquistas y comunistas fueron los únicos que se opusieron, convocando manifestaciones y huelgas.

Etapas

Directorio Militar (1923-1925)

La dictadura se presentó como una solución provisional. Era una dictadura autoritaria, cuyas medidas fueron: la suspensión de la Constitución de 1876 y de los derechos constitucionales, la disolución de las Cortes y el establecimiento de un directorio militar. El dictador concentraba todos los poderes, siendo asesorado por el resto de los militares. Prohibió los sindicatos y las huelgas, y mantuvo el orden público con mano dura. Acusó a los nacionalistas catalanes de romper la unidad de España. Prohibió el uso de la lengua y la bandera catalana, pero logró radicalizar el catalanismo aún más, surgiendo un nuevo partido presidido por Macià. En 1924, formó la Unión Patriótica (UP), su partido político y el único legal. Las tropas españolas desembarcaron en la bahía de Alhucemas y vencieron a las kábilas rifeñas. El final victorioso le dio una enorme popularidad.

Directorio Civil (1925-1930)

Primo de Rivera quiso permanecer en el poder e institucionalizar la dictadura como un régimen. En 1926, entraron seis civiles de extrema derecha al Directorio. La UP solo llegó a ser una propaganda oficial de políticos fracasados y oportunistas. En 1927, se constituyó la Asamblea Nacional Consultiva, pero fracasó en su tarea de preparar un proyecto de constitución, que no se aprobó.

Entre las realizaciones del régimen, destaca su política económica, llevada a cabo por el ministro Calvo Sotelo. Aprovechando la coyuntura económica favorable, la etapa de la dictadura fue de prosperidad económica, consolidándose el capitalismo en España. Hubo un fuerte intervencionismo estatal, controlando todos los sectores productivos. Aparecieron las Confederaciones Hidrográficas y los monopolios que se ocupaban de la distribución y venta del petróleo. El Estado se endeudó en exceso y, aunque los obreros mejoraron su nivel de vida, continuaron con salarios bajos.

En cuanto a la política social, se crearon los Comités Paritarios, que eran unos organismos oficiales compuestos por representantes de patronos y obreros, y un representante del gobierno. Los socialistas de la UGT participaron en estos Comités, haciendo una política reformista. Pero fueron muy criticados por los comunistas y anarquistas. También colaboraron los Sindicatos Libres. Estableció el Somatén, una milicia catalana formada por voluntarios, apoyada por las clases medias para combatir el sindicalismo.

Caída de la Dictadura (1930-1931)

A mediados de 1928, se hizo patente la decadencia de la dictadura. Se explica por varios factores: el creciente aumento de la oposición al régimen, el descontento en un sector del ejército, las crecientes dificultades presupuestarias del Estado, endeudado e incapaz de realizar una reforma fiscal, la Exposición Universal de Sevilla, que el dictador había organizado por cuestión de prestigio, aumentó la deuda, así como el inicio de la crisis de 1929. Ante el fracaso de la dictadura, Alfonso XIII quiso volver al régimen parlamentario y nombró jefe de gobierno al general Berenguer, con la tarea de reponer la Constitución de 1876 y salvar la figura real. El 14 de abril de 1931 se proclamó la Segunda República, ante el entusiasmo popular.