1. Las Bases del Régimen de Franco
1.1. Los Pilares Ideológicos del Franquismo
Los elementos que definieron al franquismo fueron:
- Nacionalismo español: El régimen concebía a España como una comunidad radical, lingüística, religiosa e histórico-cultural, con una misión histórica definida como la “reserva espiritual de Occidente”.
- Imperialismo: Se promovía la idea de una “vocación imperial” de España, entendida como la difusión de principios espirituales por el mundo, a pesar de la pérdida de colonias.
- Nacionalcatolicismo: Esta fue una de las bases fundamentales del franquismo, representando la unión entre la Iglesia y el Estado. Los principios católicos impregnaron la vida del país, y la jerarquía eclesiástica se integró en las instituciones estatales.
- Anticomunismo: El régimen se oponía firmemente al comunismo, considerándolo contrario a los valores cristianos. Esta postura facilitó el acercamiento al bloque occidental durante la Guerra Fría.
1.2. Las Bases Políticas
El franquismo fue un régimen político no democrático y dictatorial, institucionalizado a través de las Leyes Fundamentales del Reino.
Forma del Estado
España se configuró como un Estado:
- Centralista: Se impuso la unidad lingüística, prohibiendo las lenguas autóctonas.
- Confesional: La religión católica era la oficial del Estado.
- Social: Con influencias de la Segunda República y la dictadura de Primo de Rivera.
- Tradicionalista: Se basó en una interpretación manipulada de la historia de España, especialmente la imperial.
En 1947, España se definió como reino, pero el trono permaneció vacante. Franco se mantuvo como jefe del Estado vitalicio, con derecho a designar a su sucesor.
Poderes del Estado (Sin Constitución)
La Ley Orgánica del Estado (LOE) otorgó a Franco el poder de designar al jefe de Gobierno. La iniciativa legislativa correspondía al jefe del Estado, y las Cortes se convirtieron en un órgano de validación de leyes, con procuradores designados de forma compleja.
Religión
El catolicismo fue reconocido como la religión oficial. Las relaciones Iglesia-Estado se regularon mediante el Concordato de 1953. La doctrina católica influyó en la legislación, la moral, la educación y la sanidad. La jerarquía católica obtuvo puestos relevantes en los órganos consultivos del Estado.
Regionalismo
Se impuso un centralismo rígido que anuló cualquier forma de autonomía regional.
Derechos, Libertades y Política Social
El Fuero de los Españoles, una especie de constitución, reconocía derechos individuales, pero subordinados a los principios del régimen y limitados por una legislación autoritaria. La política social se enfocó en el trabajo, con leyes sobre seguridad social y protección familiar. Se prohibieron los sindicatos de clase y se creó la Organización Sindical, compuesta por sindicatos verticales que agrupaban a empresarios, técnicos y obreros.
Participación Política
Se impuso un sistema dictatorial llamado “democracia orgánica”, basado en la representación de entidades naturales (familia, municipio, sindicato). Se utilizaron referéndums en dos ocasiones (1947 y 1966), con voto obligatorio. El régimen fomentó la despolitización de la sociedad.
El Movimiento Nacional (Partido Único)
La Falange Española Tradicionalista y de las JONS (FET de las JONS) actuó como partido único, aunque compartió influencias con otras tendencias ideológicas del bloque dominante, conocidas como “familias del régimen”: católicos, tradicionalistas, tecnócratas y militares. Controló la Organización Sindical.
Bases Sociales
El régimen se apoyó en:
- La antigua clase terrateniente y propietaria (burguesía agraria).
- Los pequeños y medianos agricultores.
- Los militares.
- La mayor parte del clero.
- Las clases medias urbanas.
2. Etapas del Franquismo
2.1. Posguerra y Autarquía (1939-1953)
En 1939, España era un país devastado por la guerra, con una sociedad desestructurada y duras condiciones internas y externas, agravadas por la Segunda Guerra Mundial.
La Posguerra
Fue una etapa de carencias. Se impuso el racionamiento de alimentos (cartilla de racionamiento). La población sufrió problemas de vivienda, epidemias y escasez de transporte. La “pertinaz sequía” agravó la situación. Se impuso una estricta moral pública bajo la influencia de la Iglesia, con censura en prensa, libros y películas. En la enseñanza, se separó a niños y niñas, y se promovió una historia manipulada con fines propagandísticos.
La represión afectó a miles de presos republicanos, muchos de los cuales fueron ejecutados o empleados como mano de obra forzada. La oposición antifranquista fue débil, aunque hubo guerrillas que hostigaron a las fuerzas de seguridad. Muchos exiliados republicanos sufrieron las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial. Diego Martínez Barrio fue elegido presidente de la República en el exilio.
Política Exterior
Estuvo condicionada por los acontecimientos internacionales. España proclamó su neutralidad al inicio de la Segunda Guerra Mundial (1939), pero pasó a ser “no beligerante” en 1940, coincidiendo con los éxitos del Eje. Hubo una entrevista entre Hitler y Franco en Hendaya (1940), pero no se llegó a un acuerdo para la entrada de España en la guerra. Tras la invasión de la URSS, España envió la División Azul al frente oriental. Las victorias aliadas llevaron a España a declararse nuevamente neutral en 1943.
El fin de la guerra supuso un aislamiento internacional para el franquismo. Sin embargo, el inicio de la Guerra Fría y el anticomunismo de Franco permitieron un acercamiento al bloque occidental. A finales de los años cuarenta, la presión internacional disminuyó, y en 1953 se firmó un acuerdo militar con Estados Unidos.
La Autarquía
Fue la política económica de los primeros gobiernos franquistas. Se caracterizó por:
- Creación del Instituto Nacional de Industria (INI) en 1941 para impulsar la industria nacional.
- Aprovechamiento de materias primas propias.
- Protección de la agricultura con proyectos de colonización y precios garantizados.
- Altas barreras arancelarias para proteger la industria española.
La autarquía no logró sus objetivos.
2.2. La Ruptura del Aislamiento (1953-1959)
El Fin del Aislamiento
En 1953, dos acontecimientos marcaron el fin del aislamiento:
- Concordato con la Santa Sede (agosto de 1953): Franco obtuvo el respaldo del Vaticano y la intervención en la designación de obispos. La religión católica se convirtió en la única de la nación española.
- Convenio de Amistad y Cooperación con Estados Unidos (septiembre de 1953): España cedió el uso de bases militares a cambio del reconocimiento del régimen y de inversiones económicas.
En 1955, España ingresó en la ONU.
La Descolonización de Marruecos
España renunció a su Protectorado sobre Marruecos en 1956, tras la independencia concedida por Francia. Hubo incidentes fronterizos por la reclamación marroquí de Ifni, que finalizaron con la cesión de la zona de Tarfaya y parte de Ifni (integrado definitivamente en Marruecos en 1969).
La Economía Semiindustrial
El intervencionismo estatal convivió con una creciente liberalización económica. La industria ganó peso en la economía. Aumentaron las importaciones, pero no las exportaciones, lo que frenó la expansión económica. Se implementaron proyectos de desarrollo en zonas atrasadas.
2.3. El Desarrollismo (1959-1973)
El Plan de Estabilización (1959)
La economía española sufría alta inflación, déficit público y deuda elevada. La autarquía limitaba el desarrollo industrial. Los políticos que accedieron al poder en 1957, vinculados a los tecnócratas y al Opus Dei, impulsaron el Plan de Estabilización, promovido por Alberto Ullastres y Mariano Navarro Rubio. El plan incluyó:
- Devaluación de la peseta.
- Reducción del gasto público.
- Liberalización parcial del comercio exterior.
- Reducción de trabas a las inversiones extranjeras.
Tuvo altos costos sociales: congelación de salarios, aumento del paro y olvido del sector primario.
Los Planes de Desarrollo
A partir de 1964, se establecieron planes cuatrienales con previsiones de crecimiento. El tercer plan no se completó debido a la crisis de 1973. Los planes se centraron en las regiones más industrializadas y promovieron la industrialización de ciudades de nivel medio mediante la creación de polos de desarrollo.
Factores del Desarrollismo
- Turismo extranjero: Aumentó gracias a los bajos precios, el clima, la aceptación internacional del régimen y la mejora del nivel de vida en Europa. Estimuló la construcción, la hostelería y el transporte, e introdujo nuevas culturas. Aportó divisas para equilibrar la balanza de pagos.
- Emigración: Más de un millón de trabajadores se desplazaron a Europa, aliviando el paro y contribuyendo al saneamiento del déficit comercial.
- Inversiones extranjeras: Especialmente las norteamericanas, encontraron facilidades por parte del Gobierno. Importaron tecnología y contribuyeron al desarrollo industrial.
Transformaciones Sociales
Se consolidó la sociedad de consumo, con el aumento de la clase media. Se produjo un éxodo rural masivo hacia las grandes ciudades, provocando problemas de infraestructuras y chabolismo.
Aspectos Políticos
Los cambios económicos no afectaron a la política del régimen. Se promulgó la Ley Orgánica del Estado (1967). Juan Carlos de Borbón fue designado sucesor a título de rey. Entró en vigor la Ley de Prensa (Manuel Fraga Iribarne), que suprimió la censura previa, pero la mantuvo a posteriori. Se renovaron los estudios no universitarios (José Luis Villar Palasí), estableciéndose la enseñanza básica obligatoria.
La política exterior se caracterizó por la reivindicación de Gibraltar, la dependencia militar de EE. UU., la descolonización de Guinea Ecuatorial, las buenas relaciones con países árabes e iberoamericanos y el acercamiento comercial a países del este de Europa. Fracasaron los intentos de adhesión a la Comunidad Económica Europea.
La Oposición al Régimen
- Reunión de Múnich: Encuentro de representantes de la oposición para democratizar España.
- Partido Comunista: El PCE aceptó el pluralismo político y renunció al estalinismo, iniciando el eurocomunismo.
- Católicos: Influenciados por el Concilio Vaticano II, participaron en la lucha por la democracia.
- Sindicatos: Organizaron huelgas y protestas desde la clandestinidad (UGT y Comisiones Obreras).
- Universitarios: Sustituyeron los sindicatos oficiales por asambleas libres y promovieron manifestaciones. El régimen cerró facultades y desactivó la protesta.
- Independentismo Vasco: Del Partido Nacionalista Vasco (PNV) surgió ETA, que empleó la lucha terrorista a partir de 1964.
2.4. El Final del Franquismo y el Comienzo de la Transición (1973-1975)
Carrero Blanco, Presidente del Gobierno
Tras el asesinato de un inspector de policía por el FRAP, Franco separó los cargos de jefe del Estado y presidente del Gobierno. Luis Carrero Blanco, vicepresidente y representante del sector inmovilista, fue nombrado presidente en junio de 1973. La economía española sufrió la crisis del petróleo. Aumentó la conflictividad social y la represión gubernamental (Proceso 1001 contra miembros de CC.OO.). El 20 de diciembre de 1973, Carrero Blanco fue asesinado por ETA.
El Espíritu del 12 de Febrero
Carlos Arias Navarro, ministro de Gobernación, sustituyó a Carrero Blanco. La crisis del petróleo afectó gravemente a la economía española. Arias Navarro pronunció un discurso en las Cortes defendiendo una apertura controlada del régimen (“espíritu del 12 de febrero”). Pío Cabanillas reforzó este talante aperturista.
Sin embargo, la ejecución del anarquista Salvador Puig Antich y el “caso Añoveros” (intento de expulsar al obispo Añoveros por defender la cultura vasca) evidenciaron las tensiones entre el régimen y la Iglesia. La Revolución de los Claveles en Portugal (1974) movilizó a la oposición. Se creó la Junta Democrática, impulsada por el PCE, que abogaba por la ruptura democrática mediante una huelga general. Un atentado de ETA en la cafetería Rolando causó numerosas víctimas.
El Final del Régimen
En 1974 entró en vigor la Ley de Asociaciones Políticas, con grandes restricciones. En 1975, Arias Navarro incorporó al gobierno al aperturista Fernando Herrero Tejedor, pero su fallecimiento en accidente devolvió la cartera al franquismo tradicional (Adolfo Suárez). Se intensificó la represión (estado de excepción en Vizcaya y Guipúzcoa). Entró en vigor una dura Ley Antiterrorista. La censura se recrudeció.
Una parte de la oposición, recelosa del PCE, fundó la Plataforma de Convergencia Democrática (PSOE, UGT, PNV, etc.), que también defendía la ruptura democrática.
En septiembre de 1975, fueron ejecutados dos militantes de ETA y tres del FRAP. Franco reapareció en público el 1 de octubre. La situación se complicó con la cuestión del Sáhara Occidental. Hassan II organizó la Marcha Verde. Don Juan Carlos, jefe de Estado en funciones, visitó El Aaiún. El gobierno de Arias Navarro, presionado por EE. UU. y sin apoyo de la ONU, firmó el Tratado de Madrid (noviembre de 1975), cediendo el Sáhara a Marruecos y Mauritania.
El 20 de noviembre de 1975, Francisco Franco murió en Madrid. Arias Navarro comunicó la noticia y leyó el testamento de Franco.