La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
El Golpe de Estado
El 13 de septiembre de 1923, el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, dio un golpe de Estado. Ocupó los servicios telefónicos de Barcelona y leyó un manifiesto ante la prensa.
Contexto y causas
La dictadura fue una solución autoritaria a la crisis del sistema de la Restauración. Este sistema se mostraba incapaz de renovarse y la inestabilidad social crecía desde 1917. Las elecciones eran corruptas, los gobiernos inestables e ineficaces, y existía un temor a una revolución. Además, el fracaso de la política militar en Marruecos, especialmente tras el desastre de Annual (1921), aumentaba el descontento.
Apoyos al golpe
El golpe contó con apoyos clave:
- Alfonso XIII: Veía amenazada la monarquía.
- El Ejército: Deseaba restablecer el orden.
- El empresariado catalán: Aspiraba a acabar con el anarquismo y la violencia en Barcelona.
Medidas iniciales
Primo de Rivera disolvió las Cortes y suspendió la Constitución (sin derogarla), presentando la dictadura como una solución transitoria. Su lema, “menos política y más administración”, reflejaba la creación de un Directorio Militar.
La dictadura se consolidó gracias a su firmeza inicial y a una coyuntura económica favorable. Sus principales acciones fueron:
- Restablecer el orden público: Se implantó el estado de guerra, se persiguió a los anarquistas y se clausuró la CNT.
- Actuar contra el catalanismo: Se suspendió la Mancomunidad de Cataluña y se prohibió el uso público del catalán.
- Acabar con el problema de Marruecos: Este fue su mayor éxito.
Intento de institucionalización
Tras resolver la violencia social y la guerra de Marruecos, Primo de Rivera buscó perpetuarse en el poder. Sustituyó el Directorio Militar por uno civil, creó el partido Unión Patriótica y la Asamblea Nacional Consultiva (de representación corporativa).
Política social y económica
La política social buscaba la “paz social”. Se creó el Consejo de Trabajo (Organización Corporativa Nacional) con “comités paritarios” para resolver disputas laborales.
La política económica fue proteccionista e intervencionista, con el Estado promoviendo la producción nacional. Surgieron monopolios estatales como CAMPSA y se invirtió en obras públicas. Sin embargo, España mantenía un déficit comercial.
Caída de la Dictadura y la Monarquía
La crisis de 1929 agravó los problemas económicos y la falta de apoyos a la dictadura. Primo de Rivera dimitió en enero de 1930. Alfonso XIII intentó restablecer el sistema parlamentario, pero la monarquía estaba debilitada.
El general Berenguer intentó la vuelta a la normalidad constitucional, pero los partidos se negaron a participar en las elecciones. Tras su dimisión, el almirante Aznar convocó elecciones municipales. La victoria de la Conjunción Republicano-Socialista en abril de 1931 condujo a la proclamación de la Segunda República.