El Imperio de Carlos V: Conflictos Internos, Comunidades y Germanías
Carlos heredó de su madre Juana Aragón y Castilla, y de su padre Felipe Austria, territorios de Habsburgo en Austria y Alemania, y de su abuela María territorios como Flandes, Países Bajos y Luxemburgo. Tuvo la idea del imperio universal cristiano centrado en España. El imperio nunca fue ni un estado ni una monarquía, solo fue una unidad jurídica con escasa cohesión. Su diplomacia tuvo tres objetivos: 1) Enfrentamiento con Francia por la hegemonía europea y por el apoyo al turco. 2) Enfrentamiento con el turco en el Danubio y en el Mediterráneo. 3) Problema protestante, Carlos defensor del catolicismo se enfrenta a la reforma del Lutero. Primero intentó un acuerdo pacífico a través del diálogo y la negociación, pero acabaron enfrentándose militarmente y Carlos les derrotó, firmando posteriormente la Paz de Augsburgo en la que reconoce la libertad religiosa. En 1556 abdicó en su hijo Felipe y su hermano Fernando y se retiró a Yuste.
En las comunidades de Castilla hubo un movimiento de protesta en las ciudades castellanas contra los consejeros extranjeros de Carlos y contra su política imperial. Reclamaron la protección de la industria textil frente a la competencia extranjera y el respeto a las leyes de Castilla. Frente a la rebelión, Adriano de Utrecht aplastó la sublevación y en la batalla de Villalar los principales dirigentes (Bravo, Padilla y Maldonado) fueron decapitados y el movimiento reprimido.
En las germanías de Valencia y Mallorca hubo un conflicto social por parte del artesanado y la pequeña burguesía que trataron de tomar el poder de las ciudades ante el abandono por la peste y los ataques berberiscos.
La Monarquía Hispánica de Felipe II. La Unidad Ibérica
El sucesor en el trono de España de Carlos I fue su hijo Felipe II (1556-1598). Personalmente resolvía todos los asuntos del gobierno y la administración, con ayuda de sus secretarios, y reestructuró las instituciones de los Reyes Católicos para ponerlas al servicio del poder real. Sus viajes fueron escasos, y fijó una sede permanente para la Corte, estableciendo la capital en Madrid.
La política exterior de Felipe II tuvo como objetivo luchar contra disidentes tanto religiosos como políticos.
– Los enfrentamientos con Francia por el dominio de Italia. Su victoria frente a los franceses en San Quintín, dio paso a un largo periodo de concordia con Francia ya que Francia renuncia a intervenir en Italia. Como recuerdo a la victoria en la batalla de San Quintín, ordenó construir el Monasterio del Escorial.
– El dominio del Mediterráneo. La unión de la armada española con la veneciana venció a los turcos en Lepanto. Este triunfo supuso un freno a la expansión otomana en el Mediterráneo.
– La rebelión de los Países Bajos. Felipe II tuvo que hacer frente a la extensión del calvinismo y al protestantismo. Tras la rebelión, el sur de los Países Bajos se convertirán al catolicismo mientras el norte serán protestantes.
– Los enfrentamientos con Inglaterra, ya que defendía a los protestantes de los Países Bajos y practicaba la piratería en el Caribe. Felipe II envió a Inglaterra a la armada española (Armada Invencible) que fue derrotada. Esto hizo posible una mayor libertad de comerciar con América para los ingleses.
Paralelamente, Felipe II se encontró con graves problemas en el interior de sus reinos, en particular la sublevación de los moriscos de la región de Granada en protesta de una ley que prohibía el uso de su lengua y sus costumbres. Fueron derrotados y los moriscos se dispersaron por toda la Península. También tuvo que enfrentarse a la limitación de las libertades de Aragón ya que Felipe II modificó los fueros aragoneses para que reconociesen el predominio absoluto de la figura del rey.
En cuanto a la unidad ibérica, tras la muerte del rey de Portugal Sebastián I, Felipe II aprovechó el ser hijo de Isabel de Portugal para hacerse con el trono y ser reconocido por las cortes portuguesas. La unión de ambos reinos en 1581 significó la realización de la plena monarquía hispánica ya que por primera vez todos los territorios de la Península Ibérica se encontraban bajo un mismo soberano. Felipe II intentó evitar problemas con sus nuevos súbditos, por lo que mantuvo la independencia de las instituciones portuguesas. La unión de España y Portugal, convirtió a Felipe II en el monarca más poderoso del mundo.
La España del Siglo XVI: El Modelo Político de los Austrias
La monarquía de los Austrias no fue un estado unitario. La corona era el punto de unión de Virreyes, máxima autoridad representante del rey. Los diferentes reinos mantuvieron una política exterior común con relativa centralización y tendencia al absolutismo. Los secretarios del estado eran la burocracia. Había un gobierno polisinodial formado por los consejos, órganos especializados en resolver asuntos de gobierno. También había audiencias que eran los órganos de justicia, juntas que coordinaban las tareas de gobierno, cortes que se mantienen en cada reino, concejos o cabildos, el ejército y la inquisición.
Economía y Sociedad en la España del Siglo XVI
En la Economía del siglo XVI aumentó la población, siendo más numerosa en Castilla que en Aragón. El reinado de Carlos I fue de crecimiento económico: Sevilla se enriqueció con el comercio indiano y los puertos del norte de España con la exportación de lana a Europa. Durante el siglo XVI tuvo lugar la revolución de los precios por el aumento de la demanda y la llegada de metales preciosos de América. Los salarios no subieron al mismo ritmo que las mercancías. Es así como los propietarios se enriquecieron mientras que las clases populares se empobrecieron. Con Felipe II se evidenciaron los primeros síntomas de crisis. Los motivos fueron:
– El coste de las guerras. – El endeudamiento de la Corona, – La crisis del vellón, – El escaso desarrollo de la agricultura y de la industria.
En la sociedad se distinguían los siguientes grupos:
– Nobleza. La alta nobleza era propietaria de latifundios y estaba asentada en la Corte; la pequeña nobleza se arruinó por culpa de la inflación. Como consideraban una deshonra trabajar, ingresaban en el ejército o emigraban a América.
– Clero. Los altos cargos de la Iglesia eran ocupados por los segundones de la nobleza y disponían de buenas rentas. El bajo clero era pobre y carecía de cultura.
– Burguesía. Era escasa porque la artesanía y el comercio estuvieron controlados por extranjeros.
– Campesinos y trabajadores urbanos. Fueron los más perjudicados por la política fiscal y económica de la Monarquía.
Cultura y Mentalidades en la España del Siglo XVI. La Inquisición
La monarquía española se insertó en el marco de la política y el pensamiento europeo, el humanismo. El desarrollo del pensamiento y de las artes fue favorecido por la alta nobleza, la iglesia y la corona difundido gracias a la imprenta. El cardenal Cisneros fundó la universidad de Alcalá donde se difundió el erasmismo. La universidad de Salamanca impulsó el derecho internacional. Esta fue la época dorada de la literatura (El Quijote) y en la arquitectura se introdujeron nuevos elementos decorativos y destacó el plateresco, el purismo, el herreriano (monasterio del Escorial). En la pintura gran influencia del estilo flamenco y la pintura italiana.
Respecto a la inquisición fue un tribunal eclesiástico fundado por los RRCC para contener la ortodoxia católica en sus reinos frente a los herejes y otros delitos. Estaba bajo el control de la monarquía y tenía tribunales provinciales y sus sentencias podían implicar la muerte en la hoguera.
La España del Siglo XVIII: La Guerra de Sucesión y el Sistema de Utrecht
Carlos II, que había muerto sin descendencia, nombró sucesor a Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV de Francia y bisnies XIV de Francia y bisnieto de Felipe IV, quien fue coronado con el título de Felipe V. Acababa así la dinastía de los Habsburgo y llegaba al trono español la dinastía de los Borbones.Se formaron así dos bandos dentro y fuera de España que no aceptaba al nuevo rey y apoyaban al pretendiente el Archiduque Carlos de Habsburgo. La guerra civil y europea estalló. El conflicto tenía un lado el ascenso al trono español de Felipe V representaba la hegemonía francesa y la temida unión de España y Francia bajo un mismo monarca. Este peligro llevó a Inglaterra y Holanda a apoyar al candidato austriaco
A continuación los ejércitos de FelipeV obtuvieron las victorias militares de Almansa, Briguega y Villaviciosa y el archiduque fue declarado nuevo emperador por lo que ante el posible desequilibrio del conflicto internacional se firmaron los acuerdos de Utretch y Rastadt estipulando: Felipe V era reconocido por las potencias europeas como Rey de España pero renunciaba a cualquier posible derecho a la corona francesa.Los Países Bajos españoles y los territorios italianos (Nápoles y Cerdeña) pasaron a Austria. Inglaterra obtuvo Gibraltar, Menorca y el navío de permiso (derecho limitado a comerciar con las Indias españolas) y el asiento de negros (permiso para comerciar con esclavos en las Indias).
10.2 La España del siglo XVIII : cambio dinástico, los primeros borbones
Felipe V era una persona inestable el cual estaba rodeado por administradores franceses que apartaron de las decisiones de gobierno a la aristocracia la cual controlaba los Consejos. En 1714 Isabel de Farnesio (segunda mujer por muerte de Mª Luisa de Saboya), rodeada de consejeros italianos (cardenal Alberoni) lleva a cabo un cambio radical en la corte e impone su programa político, subordinando los intereses españoles a una política exterior agresiva en caminada a recuperar los dominios de Italia y conseguir reinos para sus hijos. En 1724 abdica en Luis I pero este muere repentinamente y vuelve Felipe V . Su secretario Patiño lleva a cabo un ambicioso programa de rearme y se conquista Nápoles y Sicilia, que fueron entregados a Carlos (Carlos III). Se firmó el Primer Pacto de familia con Francia.
Tras la muerte de Felipe V llegó Fernando VI. Protagonismo del Marqués de la Ensenada que introdujo nuevas medidas reformistas como: Política exterior de pacificación (con Inglaterra). Reforzamiento de la Armada asi como la Construcción de astilleros y fábrica de armas. Política encaminada a reforzar el estado absoluto y el crecimiento económico para modernizar el país. Reforma fiscal: catastro (impuesto único sobre las propiedades y las rentas que incluiría a los privilegiados). Se suprimieron los impuestos que grababan el tráfico interior del grano y se liberalizó el comercio colonial
10.3 La España del siglo XVIII: reformas en la organización del estado. La monarquía centralista.
La dinastía de los borbones con Felipe V como primer rey de la misma llevó a cabo una serie de reformas entre las cuales estuvieron el apoyo al centralismo y absolutismo (modelo francés) que suponian la abolición de los fueros de Aragón, Valencia, Cataluña y Mallorca y conservaban los fueros del Pais Vasco y Navarra. Ademas hubo una unificación política con el objetivo de regenerar el país con una administación más eficaz. Esta nueva administración se componía de instituciones las cuales eran: la monarquía absoluta, la secretaría de despacho, los consejos los cuales van perdiendo importancia y las cortes de Castilla que solo sirven para la jura de herederos. También se realizó una división de provincias que estaban controladas mediante un capitán general, las audiencias, el intendente y los corregidores. También se reorganizó la hacienda saneando la misma mediante la implantación de un impuesto único en la que cada uno pagaba en función de su riqueza. Por último se reformó el ejército haciendo que la participación en el mismo fuera obligatoria, creando la academia de artilleria en Segovia y de la marina de guerra etc.
10.4. La práctica del despotismo ilustrado: Carlos III
El reinado de Carlos III supuso la instauración del Despotismo ilustrado. Carlos participó de forma continua en las reformas internas
·Carlos III participa activamente en las reformas internas impulsadas desde arriba. Con ayuda de ministros ilustrados extranjeros (Grimaldi, Esquilache) y Campomanes, Floridablanca.
·Oposición de los grupos privilegiados a su programa de reformas: el motín de Esquilache 1766. Revuelta compleja (¿golpe de estado?) en la que se unieron el malestar popular por la crisis de subsistencia (malas cosechas, alza de precios del trigo, carestía de alimentos), supresión de la liberalización del comercio del trigo (especulación), la resistencia de los privilegiados a las reformas. Todo confluye en una revuelta popular en Madrid contra las medidas de reformas sociales, saneamiento y orden público (prohíbe los chambergos y capas largas; juegos de azar, armas de fuego) tomadas por el ministro Esquilache (fue destituido). El motín se extendió a otras localidades (Zaragoza, Guipúzcoa) por la crisis de subsistencia.
·Afirmación de las regaliás del estado: defensa de la autoridad y prerrogativas del rey, frente a la Iglesia (promover una religión ilustrada). Derecho a nombrar los cargos eclesiásticos, controlar la Inquisición (poner al clero al servicio del estado)
·Expulsión de los Jesuitas (Campomanes, 1767): Por su enorme influencia en el Estado y la sociedad (enseñanza), por su obediencia directa al papado y por la instigadora del motín de Esquilache. Efectos negativos en las reducciones coloniales y en la enseñanza.
·Reformas económicas.
oAranda emprende el primer reparto de comunales (fracasa). Campomanes disminuye los privilegios e la Mesta. Olavide empezó la colonización de Sierra Morena. Floridablanca impulsa la construcción de canales (Imperial de Aragón), pantanos. Jovellanos publica un Informe sobre la Ley Agraria (plantea una desamortización)
oImpulso de las fábricas reales de tipo mixto (capital privado y estatal): tapices (Santa Bárbara), porcelanas (Retiro), cristales (La Granja). Altos hornos (Liérganes y La Cavada)
oDecreto de libre comercio colonial (1778). La Casa de la Contratación pierde el monopolio y se traslada a Cádiz.
oCreación del Banco Nacional de San Carlos. Controlaba los vales reales (deuda pública), se hizo cargo de los pagos a Hacienda.