La Expansión Imperialista
1. Del Colonialismo al Imperialismo
El término imperialismo surgió en el vocabulario político y periodístico hacia 1890 para designar un nuevo fenómeno. La novedad que el capitalismo había provocado el surgimiento de una economía mundial.
Las causas económicas son la superproducción a escala mundial que favoreció la extensión de políticas proteccionistas.
También hubo motivos de carácter político. Estas causas son, con las económicas, las más destacadas. El nacionalismo de este periodo dio lugar a una política de poder y de prestigio.
Otras de las causas fue el crecimiento de la población europea, que alivió la presión demográfica con la gran emigración a ultramar y a las colonias.
Las zonas ya colonizadas adquirieron importancia para la nueva economía mundial como productoras de materias primas y como consumidores de productos manufacturados fabricados en las metrópolis.
2. La Hegemonía Colonial Británica
Reino Unido, como primera potencia económica y su política de finales del siglo XIX, disponía de una cadena de enclaves estratégicos para articular el comercio mundial.
Un tipo de colonias británicas eran las llamadas de poblamiento, territorios escasamente poblados.
Pero la mayoría de las colonias eran de explotación: surtían de materiales primas y servían de mercado a la metrópoli. La colonia de explotación típica era la India.
India era la “Joya de la Corona”, todo un continente, muy poblado y con una cultura milenaria.
3. El Reparto de África
En 1880, África era un continente casi desconocido en el que los europeos ocupaban algunos enclaves costeros con interés estratégico y comercial. En 1914, su territorio ya estaba totalmente repartido entre las potencias europeas.
Francia, que había iniciado la ocupación en 1830, se convirtió en una colonia de poblamiento, en la que vivían cerca de un millón de franceses en 1914.
Leopoldo II de Bélgica, inició por su cuenta la explotación del río y del valle del Congo creando en el centro del continente el estado del Congo.
Las relaciones francobritánicas entraron en conflicto cuando Reino Unido ocupó Egipto en 1882, las dos naciones controlaban de mutuo acuerdo el canal de Suez.
En estas circunstancias entre las potencias europeas, se celebró a finales de 1884 la Conferencia de Berlín, para establecer el reparto de África.
Las consecuencias de la colonización fueron enormes. No obstante, este reparto colonial fue, a largo plazo, muy perjudicial para la vida de los pueblos africanos.
Las Causas de la Primera Guerra Mundial
Las rivalidades económicas y territoriales entre los países europeos, así como el nacionalismo radical y los enfrentamientos coloniales, fueron creando un ambiente belicista.
1. Las Rivalidades Europeas
La enemistad entre Francia y Alemania arrancaba de la guerra franco-prusiana de 1870, en la que Francia perdió los territorios de Alsacia y Lorena.
Las relaciones entre los estados europeos estuvieron condicionadas por el deseo francés de recuperar sus territorios.
Alemania se convirtió en la primera potencia del continente, al constituir la Triple Alianza con Austria-Hungría e Italia.
Las diferencias económicas y políticas entre Reino Unido y Alemania se pusieron de manifiesto a principios del siglo XX.
En 1907 firmó un acuerdo con Francia y Rusia, la Triple Entente, que se convertía, posteriormente, en una alianza militar.
La creciente tensión propició que los grandes estados europeos iniciaran la llamada “carrera de armamentos” con el fin de aumentar su potencia militar.
2. El Conflicto Balcánico
El conflicto en la región de los Balcanes estaba causado por el choque de intereses entre Austria-Hungría, que deseaba ampliar sus fronteras, y Rusia, que quería controlar el paso de los estrechos para que su flota pudiera navegar libremente desde el mar Negro al Mediterráneo.
La Primera Guerra Balcánica, entre la Liga Balcánica y el imperio otomano, estalló en octubre de 1912; apenas duró tres meses y acabó con la derrota turca.
La Segunda Guerra Balcánica surgió por las diferencias entre los miembros de la Liga Balcánica.
En vísperas de 1914, Serbia no ocultaba su deseo de crear una Yugoslavia que agrupase a todos los serbios y a los otros pueblos eslavos que estaban bajo su dominio de Austria. Estos conflictos balcánicos agravaron las tensiones en Europa.
3. El Nacionalismo Radical
Las causas profundas de la inminente guerra hay que buscarlas en el nacionalismo radical que se expandió por Europa en los años anteriores a 1914. Las pequeñas nacionalidades, que reivindicaban su independencia, eran numerosas y se encontraban en los imperios austro-húngaro, ruso y otomano. Mientras, en los grandes Estados, cristalizaron los nacionalismos exaltados. Ambos tipos de nacionalismos crearon un ambiente general de tensiones.
4. La Marcha hacia la Guerra
La chispa que encendió el conflicto bélico fue el asesinato del heredero al trono del imperio austro-húngaro.
El asesino era un nacionalista bosnio y la investigación descubrió que formaba parte de una organización terrorista serbia.
Aunque transcurrió casi un mes y medio entre el atentado de Sarajevo y el comienzo de la Primera Guerra Mundial, el desarrollo de los acontecimientos, la hizo inevitable.
El 23 de julio, los austriacos remitieron a Serbia un ultimátum, cuyos duros términos resultaban difíciles de aceptar, y cinco días después, Austria declaraba la guerra a Serbia.