La Guerra Civil Española: Caos, Revolución y Resistencia

La organización de la guerra

El caos y la fragmentación reinaban tras el golpe de estado. Los republicanos quedaron incomunicados por el ejército rebelde, provocando el colapso de la autoridad gubernamental. El gobierno liberal republicano de Quiroga se vio desmantelado, y el ejército y la policía no tenían fuerza para instaurar un control centralizado. La confusión y disolución territorial se hicieron patentes: funcionarios, oficiales administrativos de ministerio y el gobierno local desaparecieron.

Donde fue posible, los partidos obreros y sindicatos se encargaron de la huelga general, que representaba el primer paso para la movilización contra el golpe militar. Las primeras medidas de Casares fueron tímidas: decretos disolviendo unidades militares relacionadas con el golpe de estado. Azaña nombró nuevo primer ministro el 19 de julio a José Giralt.

Las autoridades de Madrid no podían ni controlar la propia ciudad. Giralt aprobó dar armas a los sindicatos y partidos populares. El colapso del gobierno provocado por el golpe facilitó la violencia política en los primeros meses de la guerra por parte de las clases populares. La violencia popular (paseos, sacas) dificultó el consenso interclasista. El golpe destruyó la alianza del frente popular entre clases populares y medias, dando lugar a una crisis del estado sin precedentes.

El estado central se encontraba con dificultades en las comunicaciones para saber qué ocurría en todo el territorio. El poder recaía en los sectores populares movilizados a través de sindicatos y partidos con tendencia particularista de los territorios y sobre todo de las comunidades históricas (Cataluña y País Vasco).

El PSOE y las JSU (Juventudes Socialistas Unificadas, dominadas por los comunistas) tuvieron gran importancia en la organización de la guerra. El PCE y el JSU formaron las MAOC (Milicias Antifascistas Obreras y Campesinas) y a partir de aquí se creó el Quinto Regimiento (modelo en el que se basa el ejército popular).

En septiembre, Azaña nombró un nuevo gobierno liderado por Francisco Largo Caballero (coalición de fuerzas republicanas). Escogió a Largo Caballero porque tenía buena relación con los partidos y sindicatos de izquierda. Apoyó la militarización de las milicias e implementó los decretos de octubre que limitaban las colectivizaciones de tierras e industrias. Dejó las que ya estaban hechas y también restableció formalmente los gobiernos municipales desaparecidos después del golpe (conflictos con los comités populares, más visibles con Negrín).

A finales de septiembre la CNT entra en el gobierno de la Generalitat (maniobra de Companys, que no supo parar el golpe). Companys agradeció a la CNT que gracias a ellos se detuviera el golpe de estado y les ofreció el gobierno, pero no lo quisieron, serían un gobierno paralelo. En noviembre, cuatro ministros de la CNT (García Oliver y Federica Montseny) entraron en el gobierno central.

El 6 de noviembre el gobierno se trasladó a Valencia porque había fuerzas rebeldes en las afueras de la capital desde finales de octubre, y porque pensaban que el gobierno de Madrid caería de un momento a otro. Madrid quedó bajo la protección de Miaja, encargado de la resistencia de la capital (ninguna junta de defensa de Madrid). Por debajo, el teniente coronel Vicente Rojo creó el plan de defensa para la capital, y más tarde también la ofensiva de la batalla del Ebro.

Largo Caballero dimitió después de los hechos de mayo del 37 y fue sustituido por Juan Negrín (del Partido Socialista). Estos hechos se dieron sobre todo en el edificio de Telefónica de la plaza Cataluña en Barcelona. Hubo un enfrentamiento dentro de las fuerzas republicanas. En ese edificio estaban los de la CNT y algunos del POUM que decían que para ganar la guerra debía haber al mismo tiempo una revolución. Los otros (los comunistas del PSUC en Cataluña y ERC) estaban en contra de la revolución, había que ganar la guerra primero. En el trasfondo había:

  • Companys quería volver a controlar el gobierno de la Generalitat sin compartir.
  • Los comunistas querían tener más poder y tenían órdenes de perseguir a los trotskistas. Decían que los trotskistas y los anarquistas eran traidores que estaban trabajando para el ejército rebelde.

Los hechos de mayo fueron ganados por los comunistas y ERC. Los trotskistas fueron perseguidos y los comunistas mataron a Andreu Nin. Y torturaron a gente del POUM y anarquistas: a partir de aquí se produjo una división entre los que apoyaban la revolución.

Cuando Negrín estuvo en el poder intentó detener los incontrolados, conseguir aliados internacionales a parte de la URSS (para no depender de ella) y restablecer las garantías constitucionales.

Durante el tiempo que duró la guerra, el ejército rebelde fue avanzando (intentando exterminar a los rojos) pero la gente huía antes de que llegaran. Muchos fueron a Cataluña como refugiados y ese aumento de población significó un problema a la hora de mantener la organización de la distribución de alimentos en una situación de guerra. Hubo un esfuerzo muy importante de recursos. También hubo muchos bombardeos (sobre todo de la aviación italiana en Cataluña) que destruyeron la ciudad mucho más que en Guernica. Provocaron que la gente se asociara para construir refugios antiaéreos. En Barcelona habilitaron los túneles del metro y tenían alarmas (que si fallaban eran mortales). Algunas personas se exiliaron a Inglaterra y utilizaron sus técnicas en Londres durante la II Guerra Mundial.

Mucha gente tuvo que exiliarse (sobre todo las mujeres y niños) y a veces eran bombardeados por la aviación rebelde. El exilio fue una experiencia traumática. Muchas personas huyeron del estado español y fueron a campos de refugiados en Francia, con condiciones terribles. Con la II Guerra Mundial no los querían en Francia y muchos fueron a México y Argentina. A los que se quedaron en el sur de Francia se les obligó a ir al ejército, a la resistencia francesa o volver a su país de origen. A algunos que volvieron, los fusilaron, llevaron a campos de concentración, etc. (Sobrevivieron 200 personas).

La revolución, colectivizaciones agrarias e industriales

A partir del golpe de estado hubo una revolución en las zonas donde había anarquistas. En Cataluña afectó a las zonas de Aragón, Valencia, etc. Tras el golpe de estado había un poder paralelo al gobierno central o de la Generalitat de Cataluña. En Cataluña y las zonas de Aragón se dio el proceso revolucionario (colectivizaciones agrícolas e industriales, es decir, los trabajadores se hacen cargo de las empresas. Todas las tierras son de todos). Hubo un intento de revolución donde los anarquistas intentaron poner en práctica sus ideas.

En un principio la Generalitat debe aceptar el poder de la CNT (poder popular paralelo) y Companys les ofrece el gobierno, que no aceptan (el 20 de julio). Funciona una dualidad de poderes. Companys consigue que la CNT acepte la formación de un Comité Central de Milicias Antifascistas con el visto bueno de la Generalitat. A finales de septiembre el comité irá a sacarle el poder e influencia a la CNT y volverá a ser el único centro de poder en Cataluña. La Generalitat acepta las colectivizaciones llevadas a cabo hasta entonces con el decreto de colectivizaciones (24-10-1936). Pone limitaciones y clasifica las empresas colectivizadas en:

  • a) Más de 100 trabajadores o abandonadas.
  • b) Entre 50 y 100 trabajadores con acuerdo.

Sanciona y detiene los hechos. Hechos de mayo 1937: la CNT pierde su poder.

La zona rebelde

Organización

Golpe liderado por Mola con otros generales como Queipo de Llano y Cabanellas. Unidad del bando rebelde. Junta de Defensa Nacional de Burgos (24 de julio de 1936) -> Cabanellas. División inicial en 3 zonas:

  1. Mola (Navarra y Burgos)
  2. Queipo de Llano (desde Sevilla el resto de Andalucía)
  3. Franco (desde el norte de África, salta a la península hasta Madrid).

En octubre de 1936 se produce la reunión de Salamanca donde se decide el mando, lo asume Franco (ejercía el estado). Dentro del gobierno había:

  • Falangistas: papel destacado.
  • CEDA
  • Otros partidos de la derecha
  • Carlistas (importantes en la zona de Navarra)
  • Alfonsinos

El objetivo común de todos ellos era establecer la monarquía autoritaria, establecer un estado autoritario y corporativo, eliminar y reprimir las asociaciones políticas y sindicales de la clase obrera, desmantelar la democracia. Aceptaron que su futuro dependía del éxito de la sublevación. Franco supo manipular a estos grupos para poder tener el control.

Juan de Borbón, que era heredero de la corona e hijo de Alfonso XIII, era el candidato monárquico de los alfonsinos, quería reestablecer una monarquía, contrariamente a las ideas de Franco. Así pues, Franco hace creer a los falangistas que ha sacado de en medio a Juan Carlos para evitar la revolución.

El control de la Falange se hace gracias a un consejero de Franco: Ramón Serrano Suñer, el “cuñadísimo”, que quería un partido único. Dentro de la Falange estaba el grupo liderado por Hedilla (designado por Primo de Rivera) y los legitimistas -> Agustín Aznar. Suñer propone a Hedilla que si acepta la unificación con los carlistas, Hedilla sería el nuevo jefe del partido, pero tenía que colaborar para deshacerse de los legitimistas. Hay un enfrentamiento entre los dos grupos y Aznar es detenido.

En abril de 1937 -> decreto de unificación de fuerzas de grupos rebeldes en el FET (tradicionalistas) y de las JONS. Formarán el Movimiento Nacional. Se nombra jefe de partido a Franco, Hedilla solo se integra en la junta política y se negó -> detenido y condenado a muerte, pasa a ser condena perpetua. A los carlistas tampoco les gustaba el decreto pero no se quejaron, quien lo hizo acabó en la cárcel.

En la zona rebelde se forma el estado corporativo, tiene control de la economía y vida social. Promulgaron una serie de leyes como:

  • Fuero de Trabajo: similar a la Carta del Lavoro de Mussolini. Organiza el sistema laboral, sindicatos verticales -> fascistas, formados por empresarios y trabajadores. Favorecían a los empresarios.
  • Se reinstauraron los privilegios de la Iglesia.
  • Estado nacional católico.

Represión

Franco quería una guerra lenta para aniquilar al otro, a los rojos. Decía que había que “limpiar España de rojos”. Régimen de temor y masacre en la mayor parte de España del bando rebelde. Miembros del Frente Popular y sindicatos eran odiados y fácilmente liquidados a medida que se conquistaba territorio. Básico para la victoria -> imponer régimen de terror y miedo.

  • Final batalla del Ebro.
  • General Yagüe: conocido como el carnicero de Badajoz. Mató solo en Badajoz a más de 2000 personas llevadas a la plaza de toros (campo de concentración).
  • A las mujeres les daban aceite de ricino y las hacían pasear por las calles, las mujeres eran violadas al llegar las tropas y en las cárceles, sobre todo en las de monjas las condiciones de vida eran terribles.

La guerra civil en la escena internacional

Francia e Inglaterra acordaron un pacto de no intervención. En realidad es una política contra la República:

  • No se dejaban llegar suministros hacia la República.
  • Tuvo las Brigadas Internacionales a partir de 1936. En Barcelona en julio se iban a celebrar los Juegos Olímpicos alternativos antifascistas que no se llevaron a cabo debido al golpe de estado. Venían milicianos de otros lugares, idealistas sin conocimientos de armas. Lucharon hasta 1938, se van porque les dijeron que lo tenían todo perdido.

Evolución de la guerra

La Batalla de Barcelona (19 julio 1936)

Liderados por los generales Mola y Sanjurjo, y siguiendo el ejemplo de los hechos del día anterior, la gran mayoría de las unidades militares, con el apoyo de fascistas civiles, se sublevan contra la República, con un éxito desigual. En los Países Catalanes fracasan en todas partes, excepto en Mallorca. Las organizaciones obreras de signo anarquista asaltaron el cuartel de Sant Andreu de Palomar la mañana del día 20 de julio donde consiguieron gran cantidad de armas y material de guerra. Las armas y la determinación a la hora de enfrentarse a los militares insurrectos hicieron de la CNT-FAI la auténtica fuerza del poder en la Barcelona del día siguiente del golpe de Estado.

El mismo 20 de julio por la tarde, Juan García Oliver y Buenaventura Durruti, entre otros dirigentes anarquistas, se presentaron armados en el despacho del presidente Companys, el cual, en un intento controvertido de mantener la legalidad democrática, aceptó la creación del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña, que debía ser el auténtico órgano de poder en Cataluña hasta su disolución el mes de septiembre.

Paralelamente a la eclosión de personalidades dentro del anarcosindicalismo que eran partidarios de colaborar con las autoridades republicanas en la victoria sobre los militares sublevados y la necesidad del mantenimiento del orden y la legalidad (Juan Peiró, Juan García Oliver, Diego Abad de Santillán), aparecieron otros dirigentes -en su mayoría de la FAI- que proclamaron la revolución y promovieron las Patrullas de Control del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña o de incontrolados, que sembraron el terror por todo el país (Manuel Escorza del Val o Dionisio Eroles y Batlló).

Batalla de Madrid (octubre 1936 – 28 marzo 1939)

La Batalla de Madrid fueron los combates entre las fuerzas leales al gobierno de la República Española y los militares sublevados durante el mes de noviembre de 1936 por hacerse con el control de la ciudad al inicio de la Guerra Civil española. La batalla acabó con la victoria republicana, que se hicieron fuertes en la ciudad y consiguieron mantener la comunicación por vía terrestre con los territorios que aún se mantenían leales al gobierno democrático, básicamente Cataluña y la zona oriental de la península. Esta situación perduró y dio lugar al llamado sitio de Madrid, situación de bloqueo bajo la presión militar, que duró hasta la caída de la ciudad en manos de los franquistas el 28 de marzo de 1939.