CUANDO EL MUNDO SE DIVIDE EN DOS

LA RIQUEZA DE LA PRODIGIOSA EDAD DE ORO:

Al terminar la guerra, Italia estaba arruinada, su producción había descendido. En 1946, un referéndum acabó con la monarquía de Víctor Manuel II y se instauró la república. Las elecciones a la Asamblea Constituyente dieron la mayoría a los partidos de la resistencia antifascista, es decir, a la Democracia Cristiana. Respecto a Alemania, también se apresó a un número significativo de nazis que comparecieron en el Juicio de Núremberg. Se desmantelaron las grandes empresas alemanas, se eliminó la producción bélica y se autorizó el reparto de fábricas. El resultado fue que Alemania cayó en la más completa ruina. En 1946 se celebraron en la zona occidental elecciones que fueron ganadas por el partido Cristiano Demócrata.

En el oeste se fundó la República Federal Alemana por una constitución de tipo occidental, mientras que en el este, la República Democrática Alemana pasó a ser un país socialista. No todos los países europeos ampliaron la democracia, algunos permanecieron sometidos a dictaduras militares, fue el caso de España, donde se mantuvo hasta 1975, en Portugal la dictadura de Oliveira Salazar duraría hasta que en 1974, el propio ejército en la Revolución de los Claveles le puso fin.

Después de la Segunda Guerra Mundial, los aliados condenaron estas dictaduras. En Grecia, la agitación social y política fue atajada por un golpe de estado militar que estableció la llamada Dictadura de los Coroneles. A pesar de que todos estos países estaban sometidos a terribles dictaduras, estos países formaron parte del bloque occidental liberado por EE. UU. En 1951 se creó la CECA (Comunidad Europea del Carbón y del Acero) compuesta por Francia, Alemania, Italia, y Benelux (Luxemburgo, Países Bajos y Bélgica). El éxito fue enorme, las potencias crecieron paralelamente a esto, Francia, la República Federal Alemana y Benelux firmaron en Roma los tratados de la Comunidad Económica Europea (CEE).

No hay que olvidar el caso de Japón, país de gran interés estratégico para EE. UU. pues era parte fundamental de la contención del comunismo en Asia. Su rendición tras los primeros bombardeos atómicos abrió la puerta al ejército estadounidense que completó la desmilitarización y depuración de los crímenes de la guerra. En 1947 se proclamó una nueva constitución en la que se abandonaba legalmente el carácter divino del emperador y se adoptaba el sistema político de la democracia estadounidense.

Se celebraron las Conferencias Interamericanas de Cooperación que culminaron con la creación de la Organización de Estados Americanos (OEA). EE. UU. hizo importantes inversiones en estos países, como contrapartida se exigía que los gobiernos de la zona fuesen firmes en la lucha contra el comunismo. EE. UU. practicó la injerencia constante en los asuntos internos de estos países valiéndose tanto de la presión económica como de la intervención militar. Guatemala sufrió la economía de las tropas de EE. UU., el argumento para la inversión fue la lucha contra el comunismo que supuestamente pretendía acabar con la propiedad privada.

En 1959 en Cuba, las guerrillas apoyadas por un fuerte movimiento popular acabaron con la dictadura de Batista, aliado de EE. UU.

Fidel Castro se convirtió en el jefe político del movimiento y su gobierno comenzó una política de nacionalizaciones que afectaba a grandes empresas de EE. UU. También fueron frecuentes en Iberoamérica las dictaduras populistas, entre estos dictadores destacan el brasileño Getulio Vargas y el argentino Juan Domingo Perón, su esposa, Eva Duarte, se ocupó de organizar una red de auxilio a los pobres. Existían en muchos lugares, que fueron muy fuertes, en Perú, Colombia, Venezuela, Uruguay y Argentina. En Chile en 1970 ganó las elecciones la Unidad Popular, alianza de izquierda encabezada por Salvador Allende que fue nombrado presidente y puso en marcha un programa de mejora en los transportes, minería y otros sectores.

LA EDAD DE ORO DEL CAPITALISMO:

Desde los años 50 hasta la crisis de 1973 tuvo lugar el mayor crecimiento que el capitalismo haya conocido nunca. Las causas de este crecimiento son:

• Un gran crecimiento de la población.
• Avances científicos y tecnológicos.
• Circuitos electrónicos, transporte y la televisión.
• Los discos de vinilo, los casettes, los relojes digitales, etc.
• Solo los países desarrollados y las grandes empresas tenían capacidad para producir estas mercancías.
• Energía abundante y barata, el sistema necesitaba petróleo.
• Fuerte incremento de la productividad por trabajador.

LOS GRANDES CAMBIOS SOCIALES:

Apareció una sociedad de consumidores. Los avances tecnológicos permitían producir más con menos mano de obra. Se hicieron importantes inversiones en publicidad. El estímulo constante para la compra mercantilizó la vida de los ciudadanos y así se consolidó nuestra sociedad de hoy, la producción y el consumo sin límites.

LA OTRA MITAD DEL MUNDO DIRIGIDA POR LA URSS:

La URSS recibió la Doctrina Truman y el Plan Marshall como un ataque a los países socialistas, a la independencia de los pueblos y a la paz.

Desde 1945, la URSS ejerció su hegemonía en Europa Oriental. Los comunistas de la Unión Soviética gobernada por Stalin creían que el capitalismo no podía superar la situación de posguerra. La URSS y con ella, las democracias populares adoptaron una estrategia de confrontación y consolidación del bloque capitalista. Cuando la República Federal Alemana se fundó, paralelamente, entre la alianza militar del este, el Pacto de Varsovia, se creó un sistema económico que integraba a la URSS y a los países socialistas europeos. En 1947, la Unión Soviética lanzó el Plan Molotov para la cooperación económica de Europa Oriental. En 1949, se creaba el Consejo de Ayuda Económica Mutua conocido como COMECON. Desde la creación del COMECON todas las economías de la democracia popular siguieron las direcciones de la URSS. Se desarrollaron planes quinquenales y colectivización de las tierras.

Reino Unido:

A pesar del importante papel que el conservador Churchill había desempeñado durante la guerra, las elecciones de 1945 dieron la victoria a los laboristas. Posteriormente, en 1951, los conservadores dirigidos por Churchill volvieron al poder, pero conservaron los logros fundamentales del nuevo estado de bienestar. En estos años, el Reino Unido perdió el resto de su imperio. Después de 1964, el déficit presupuestario obligó a los laboristas a acelerar la descolonización de África. Los antiguos súbditos del imperio llegaron a la metrópolis como inmigrantes. En 1973, coincidiendo con la crisis del petróleo, Reino Unido pidió su ingreso en la UE.