La república se proclamó tras unas elecciones municipales, en las que ganaron mayoritariamente los partidos republicanos de izquierda. Nada más proclamarse la república se producen dos crisis: una en octubre cuando dimiten Zamora y Maura debido al explícito laicismo constitucional; y una segundacrisis que tiene como protagonistas a los radicales de Alejandro Lerroux y a los socialistas de Largo Caballero, que se enfrentan por el poder. La CEDA, al frente de la cual está José María Gil Robles, gana las elecciones en 1933. Alcalá Zamora le encarga a Alejandro Lerroux formar el gobierno, líder del Partido Radical, uno de los partidos que integran la CEDA. Pero no será por la derecha por donde la república se sienta más amenazada, sino por la izquierda. La revolución de octubre de 1934, en Asturias y Cataluña, y los sucesos de Casas Viejas. El gobierno de derechas no es estable y convoca nuevas elecciones en 1936. Pero son ganadas por una coalición de izquierda: el Frente Popular. El nuevo gobierno pone en marcha las reformas que habían quedado en suspenso. Quizás lo más llamativo de la época es el cambio social que se produce en España. La derecha tratará de consolidar la revolución liberal con un régimen democrático. Laizquierda tratará de fomentar las transformaciones sociales hasta conseguir una revolución social.
La proclamación de la república no supuso el cambio automático de la estructura social del país, pero la oligarquía burguesa perdió el control de sus órganos de gobierno. El campesinado es el sector de la población más activo políticamente. La agricultura es la principal fuente de recursos para la mayor parte de la población. La mitad de la fuerza de trabajo campesina era jornalera, y la otra mitad propietaria o arrendataria de explotaciones de todos los tamaños. Para ellos la república significaba la reforma agraria política, que acabase con la gran propiedad. El proletariado supone un 55% de la población activa, del cual un 45% está en el sector primario. Con la crisis aumenta el paro. Se crea una Caja Nacional del Seguro Contra el Paro. La alimentación del proletariado era pobre y poco variada. Se llevaba el 64% del presupuesto familiar, y el resto era para vestido, medicinas y vivienda. Había graves problemas de analfabetismo. Los sindicatos tenían tendencias revolucionarias. El alto índice de afiliados que tienen la UGT y la CNT se explica por la esperanza del proletariado de provocar una revolución socialista. Del otro lado están los sindicatos confesionales, agrarios y de la pequeña burguesía, como la Confederación Nacional de Sindicatos Católicos El problema más acuciante de resolver es la situación agraria. Pero las oligarquías terratenientes y la crisis mundial impiden que se lleve a cabo. La industria se estanca al no poder vender sus productos en el extranjero. La crisis del 29 domina las decisiones económicas de todos los gobiernos de la época. En 1936 las oligarquías económicas se sienten más alejadas que nunca del poder, por lo que deciden acudir al fascismo y al Ejército, para recuperar el poder a través de un golpe de Estado. El 17 de julio de 1936 comienzan los incidentes en el cuartel de Melilla, y el 18 de julio la rebeldía se extiende por toda España.
España queda dividida en dos bandos, el leal a la república y el sublevado. En el bando leal se desencadena un proceso revolucionario. Aparecen dos bandos unorevolucionario que pretende acabar con la república, dominado por la CNT y el POUM, y otro que pretende mantener la república, dominado por el PCE y el PSOE. Pero quienes habían detenido a los fascistas habían sido las milicias, que no estaban dispuestas a luchar por una república burguesa. Los comunistas del PCE tenían claro que paraganar la guerra era necesario la ayuda de las democracias occidentales. El PCE desencadena un proceso contrarrevolucionario, contra el POUM y la CNT, que tiene su culmen en la guerra civil de los tres días de mayo de 1937. Durante toda la guerra el gobierno de la república está en crisis, y hasta los anarquistas entran a formar parte de él. Los defensores del golpe también desencadenan una revolución, pero de carácter fascista. Francisco Franco será quien aglutine todas las fuerzas bajo una estructura militar. Franco hará, también, su contrarrevolución, depurando a los más extremistas de su bando. Las fuerzas rebeldes tienen bajo su control la España agrícola, que en una guerra larga será más importante que la industrial.