Las Elecciones de 1922 y el Triunfo Radical
En las elecciones presidenciales de 1922 en Argentina, diversas fuerzas políticas presentaron sus candidatos. Los conservadores, bajo la Concentración Nacional de Fuerzas Opositoras, apoyaron a Norberto Piñero y Rafael Núñez. El Partido Demócrata Progresista (PDP), rechazando esta coalición, postuló a Carlos Ibarguren y Francisco Correa. Los socialistas, por su parte, propusieron a Nicolás Repetto y Antonio de Tomaso. Finalmente, la Unión Cívica Radical (UCR) presentó a Marcelo T. de Alvear y Elpidio González, quienes triunfaron con el 48% de los votos.
Alvear, proveniente de una familia aristocrática, se propuso profesionalizar la administración del Estado, evitando el partidismo y respetando las facultades del Congreso. Su postura liberal se manifestó en la promoción de la transparencia, el equilibrio de poderes y el respeto a los derechos constitucionales.
La División del Oficialismo
Durante las elecciones de 1922, la UCR se dividió en dos facciones que disputaban el control del partido. Esta división reflejaba tanto las ambiciones personales de los dirigentes como las tensiones ideológicas internas. La facción aleminista defendía un sistema representativo, republicano y federal, mientras que la yrigoyenista promovía una concepción centralizada de la nación. La disputa se agudizó en 1924 con la creación de la Unión Cívica Radical Antipersonalista, compuesta por figuras que se oponían al estilo de liderazgo de Yrigoyen. Aunque Alvear simpatizaba con este grupo, evitó involucrarse directamente en las luchas internas.
Esta división no fue exclusiva de la UCR. Otros partidos, como los conservadores y socialistas, también enfrentaron conflictos internos, influenciados por la Primera Guerra Mundial y sus consecuencias.
La Bonanza Económica
Durante la presidencia de Alvear, Argentina experimentó un período de bonanza económica, coincidiendo con la recuperación global postguerra. Este período se caracterizó por:
- Aumento del poder adquisitivo
- Mayor ocupación laboral
- Retorno de la inmigración
El comercio internacional se expandió, desarrollando un “comercio triangular” con Gran Bretaña y Estados Unidos. Argentina exportaba alimentos a Gran Bretaña e importaba maquinaria y automóviles estadounidenses. Si bien el comercio con Estados Unidos era deficitario, las ganancias del comercio con Gran Bretaña compensaban la balanza.
En la década de 1920, la agricultura argentina, especialmente los cultivos de trigo, lino y maíz, dominaban las exportaciones. A pesar de su prosperidad, la producción agrícola se acercaba a su límite, ya que los aumentos se basaban en mejoras tecnológicas, no en la expansión de tierras cultivadas.
Sin embargo, la producción agrícola fuera de la pampa húmeda y la industrialización crecieron notablemente, impulsadas por inversiones extranjeras, principalmente estadounidenses. Sectores como la automotriz, textil, metalúrgico y químico se vieron beneficiados con la llegada de empresas como General Motors, IBM y Colgate-Palmolive.
La Cuestión del Petróleo
En 1927, durante la campaña presidencial, el Congreso debatió un proyecto sobre la explotación del petróleo. En 1922, Yrigoyen había creado Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) para asegurar la intervención estatal en el sector. Bajo Alvear, YPF, dirigida por el coronel Enrique Mosconi, mejoró la producción, controló a las empresas extranjeras y promovió el autoabastecimiento, reduciendo los precios del combustible.
El proyecto del gobierno de Alvear proponía la nacionalización de los recursos del subsuelo y el monopolio estatal de su explotación. Sin embargo, este plan enfrentó la oposición de empresas extranjeras y provincias que otorgaban concesiones a compañías privadas. A pesar del debate generado, el proyecto no fue aprobado, pero la cuestión petrolera se convirtió en un tema central de la campaña electoral.
El Retorno de Yrigoyen a la Presidencia (1928)
En las elecciones presidenciales de 1928, los partidos conservadores y el radicalismo antipersonalista formaron el Frente Único, postulando a Leopoldo Melo y Vicente Gallo para evitar el regreso de Yrigoyen. Alvear, manteniendo su política de abstención, no intervino en la provincia de Buenos Aires, bastión del yrigoyenismo. El radicalismo personalista proclamó a Yrigoyen y Francisco Beiró. Yrigoyen ganó con cerca del 60% de los votos, en lo que se conoció como “el plebiscito”. Beiró falleció antes de asumir, siendo reemplazado por Enrique Martínez.
Yrigoyen asumió su segundo mandato con problemas de salud, lo que afectó su gestión. Reprodujo prácticas de su primera presidencia, concentrando decisiones y generando tensiones con la oposición.
Un Gobierno Bajo el Signo de la Crisis (1928-1930)
El segundo mandato de Yrigoyen coincidió con la crisis mundial de 1929, que afectó gravemente la economía argentina. La caída de los precios internacionales de productos agrícolas impactó las exportaciones, reduciendo los ingresos fiscales. Yrigoyen no pudo cumplir sus promesas electorales y tuvo que realizar despidos masivos en la administración pública, perdiendo popularidad rápidamente.
Las dificultades en el comercio internacional se agravaron por las exigencias de Australia y Canadá, que pedían preferencia en el mercado británico. En respuesta, el gobierno de Yrigoyen promovió un acuerdo comercial con Gran Bretaña en 1929, liderado por Lord D’Abernon. Este acuerdo comprometía a Argentina a comprar productos británicos a cambio de asegurar la compra de productos agropecuarios argentinos. El tratado fue aprobado por la Cámara de Diputados, pero no por el Senado, mientras la economía argentina seguía en retroceso.
El Avance de la Oposición y el Golpe de Estado de 1930
Con la crisis económica, la oposición ganó terreno. En las elecciones legislativas de 1930, la UCR fue el partido más votado, pero la diferencia con la oposición se redujo. La actividad parlamentaria era escasa. La oposición denunciaba las prácticas del oficialismo, acusando al gobierno de Yrigoyen de despilfarrar fondos públicos y anular el sistema republicano.
Paralelamente, surgió un movimiento nacionalista que criticaba al gobierno y al sistema democrático. Inspirado en modelos autoritarios europeos y liderado por figuras como los hermanos Irazusta, este grupo condenaba el sufragio universal y promovía la violencia, creando la Liga Republicana.
El 6 de septiembre de 1930, un golpe de Estado derrocó a Yrigoyen. El golpe fue impulsado por el malestar social y la conspiración de civiles y militares. El general José Félix Uriburu, con apoyo de los nacionalistas, lideró el levantamiento que obligó a Yrigoyen a renunciar.
Resumen del Video: Episodio 06: La Voluntad de las Mayorías (1916-1930)
El episodio describe el período de la presidencia de Yrigoyen y la transición hacia la democracia en Argentina. Se destaca la elección de Yrigoyen en 1916, la Reforma Universitaria de 1918, las reformas sociales y políticas, la oposición de sectores conservadores, la crisis económica y el golpe de Estado de 1930.