La Restauración (1884-1902)
El término Restauración se refiere a la vuelta al trono de los Borbones, que lo habían perdido tras la revolución de septiembre de 1868. La Restauración comenzó el 29 de diciembre de 1874, con el pronunciamiento del general Martínez Campos en Sagunto, que supuso el final de la I República, presidida por el General Serrano. El ideólogo de la Restauración fue Cánovas del Castillo. Su modelo político era la Inglaterra victoriana. Se inicia un sistema en el que predominan los valores conservadores de orden, propiedad y monarquía.
El papel del Rey
Su prematura muerte en 1885, pudo significar un duro golpe para el sistema que se veía desprovisto de uno de sus apoyos, pero el acuerdo al que llegaron Cánovas y Sagasta conocido como el Pacto del Pardo permitió poner en funcionamiento el tuno de partidos y en consecuencia proporcionar estabilidad al sistema.
Falseamiento electoral
El sistema político diseñado por Cánovas del Castillo no tiene en cuenta el cuerpo electoral y fabrica las mayorías desde el Ministerio de Gobernación falseando las elecciones. El encasillado es el proceso mediante el cual se colocan en casillas correspondientes a cada distrito electoral los nombres de los candidatos del partido que está gobernando o de la oposición. En ese periodo se pone en marcha la Constitución de 1876 y el Partido Conservador monopoliza el gobierno hasta 1881 en que los Liberales accedieron al poder y comenzó la alternancia.
OPOSICIÓN AL SISTEMA
Se inicia un periodo de protesta social y de acción directa con atentados como el de Cánovas en 1897. La pérdida de Cuba, Filipinas y Puerto Rico, últimas colonias de ultramar que le quedaban a España, constituye el epicentro de lo que se conoce con el nombre de la crisis del 98 o la primera quiebra del sistema, y que tendrá consecuencias muy importantes en la política española de los años siguiente.
Desarrollo de la guerra de Cuba
El problema de la insurrección cubana se había solventado con la Paz del Zanjón en 1878, pero resurgió con la Guerra Chiquita. Comenzó entonces una feroz guerra de desgaste que se prolongó durante 1896-97 entre el ejército español y los cubanos apoyados económicamente por EEUU. Tras el asesinato de Cánovas en 1897, Sagasta intentó llevar a cabo un nuevo proyecto de autonomía pero era demasiado tarde. La voladura del Maine en 1898 sirvió de escusa para la entrada en la guerra. La guerra era ya inevitable.
Sexenio
Comienza el sexenio con un pronunciamiento militar en Cádiz y termina con otro golpe de estado, el del general Pavía. Este período histórico significó varias cosas muy importantes en la política española. Posibilidad de profundos cambios en lo económico y social que pretendieron acabar con la estructura de la propiedad de la tierra.