La Transición Española: De la Dictadura a la Democracia (1975-1982)

La Constitución de 1978: Los Gobiernos Democráticos (1979-2000)

1. Introducción: El Amanecer de la Democracia

A pesar de que Franco murió creyendo haber dejado todo “atado”, su fallecimiento en 1975 desencadenó un cambio político sin precedentes en España: la transición hacia la democracia. Este proceso, gradual y no violento, se basó en el consenso de las principales fuerzas políticas y culminó con la Constitución de 1978. A partir de entonces, España se convirtió en una monarquía parlamentaria donde se alternarían en el poder partidos como UCD, PSOE y PP.

2. El Carácter de la Transición

El 20 de noviembre de 1975, con la muerte de Franco, se abre un periodo de incertidumbre política. El entonces jefe de Gobierno, Arias Navarro, continúa en el cargo mientras el país se debate entre la continuidad y la ruptura. El 22 de julio, Juan Carlos I es proclamado rey y en su discurso inaugural realiza un llamamiento a la reconciliación y a la construcción de un nuevo futuro democrático.

La transición española se convirtió en un modelo de cambio pacífico hacia la democracia. Con la llegada del rey, se abría la puerta a un gran desarrollo social, económico y político para España.

3. El Primer Gobierno de la Monarquía: Arias Navarro

Arias Navarro continuó como jefe de Gobierno en un primer momento. Este gobierno, aunque con ciertos atisbos aperturistas, se asemejaba en gran medida al de la dictadura. El rey nombra presidente de las Cortes a Torcuato Fernández Miranda con el objetivo de transformar las instituciones franquistas en un régimen parlamentario.

Se llevaron a cabo reformas limitadas: libertad de prensa, derecho de reunión y asociación, reformas en las Cortes… Sin embargo, estas medidas fueron consideradas insuficientes por la oposición. La conflictividad laboral, las movilizaciones autonómicas en Cataluña y País Vasco, y las manifestaciones feministas, evidenciaban la necesidad de un cambio más profundo.

Finalmente, Arias Navarro dimite el 1 de julio de 1976. La oposición, agrupada en la Coordinación Democrática, exige una ruptura democrática y un cambio político real.

4. Adolfo Suárez y la Reforma Política (1976-1977)

El 5 de julio de 1976, Adolfo Suárez, un hombre proveniente del régimen franquista, es nombrado presidente del Gobierno. Con él se aceleran los cambios hacia la democracia. En septiembre, presenta el proyecto de Ley para la Reforma Política, ideado por Torcuato Fernández Miranda. Tras una inteligente maniobra política, la ley es aprobada por mayoría en referéndum el 15 de diciembre de 1976, abriendo el camino hacia la democracia.

A pesar de los avances, la transición se enfrentó a diversos obstáculos:

  • Terrorismo de extrema derecha: como el atentado de Atocha contra abogados laboralistas de CCOO y PCE.
  • Terrorismo de izquierda (GRAPO) y nacionalista (ETA).

A principios de 1977, en una muestra de la voluntad democrática de Adolfo Suárez y con el apoyo del rey para frenar posibles asonadas militares, se legaliza el Partido Comunista de España (PCE).

En junio de 1977 se celebran las primeras elecciones democráticas desde 1936. Con una gran participación (77%), la Unión de Centro Democrático (UCD), liderada por Adolfo Suárez, obtiene la victoria, aunque sin mayoría absoluta. Le siguen el PSOE, el PCE y Alianza Popular (AP). Los grupos nacionalistas vascos y catalanes también cobran fuerza en estas elecciones.

5. Proceso Constituyente y Constitución de 1978

5.1 Proceso Constituyente

Tras las elecciones de junio de 1977, se forma el segundo gobierno de Adolfo Suárez, un gobierno de coalición con un apoyo parlamentario frágil. A pesar de la inestabilidad, el gobierno de Suárez tuvo que afrontar importantes retos:

  • Crisis económica: El 25 de octubre de 1977 se firman los Pactos de la Moncloa, un acuerdo entre el Gobierno, los partidos políticos, los empresarios y los sindicatos para afrontar la crisis económica. Los pactos contemplaban medidas para reducir la inflación, reformar el sistema fiscal y la seguridad social, y sanear las empresas públicas.
  • Problema regional: El gobierno de Suárez impulsó la creación de un Estado autonómico. El 29 de septiembre de 1977, Josep Tarradellas, presidente de la Generalitat de Cataluña en el exilio, regresa a España y asume el gobierno autonómico. En el País Vasco, el proceso fue más complejo debido a la división social y política.
  • Proceso constituyente: El gobierno se propuso elaborar una nueva Constitución que reflejara el consenso social y político. En agosto de 1977 se crea una ponencia parlamentaria encargada de redactar el borrador de la Constitución. El texto fue ampliamente debatido en el Congreso y el Senado.

5.2 Constitución de 1978

El 6 de diciembre de 1978, la Constitución Española es aprobada en referéndum con un 88% de votos a favor y una participación del 67% del censo. La Constitución de 1978 establece:

  • Un Estado social y democrático de Derecho.
  • Una monarquía parlamentaria.
  • La indisoluble unidad de la Nación Española, reconociendo y garantizando el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran.
  • Un amplio catálogo de derechos y libertades fundamentales.
  • Un Estado aconfesional.
  • La abolición de la pena de muerte.
  • La defensa de la propiedad privada y la libertad de mercado, pero contemplando la intervención del Estado en la economía.
  • Unas Cortes Generales bicamerales: Congreso de los Diputados y Senado.
  • La separación de poderes y la colaboración entre los mismos.

6. Elecciones de 1979 y Gobiernos Constitucionales hasta 1982

El 1 de marzo de 1979, Adolfo Suárez convoca nuevas elecciones generales. La UCD vuelve a ganar, aunque con menor apoyo que en 1977. El 3 de abril de 1979 se celebran las primeras elecciones municipales democráticas, en las que el PSOE obtiene importantes victorias, arrebatando a la UCD las alcaldías de Madrid y Barcelona.

Durante este periodo se produce un importante impulso al proceso autonómico. El 25 de octubre de 1979 se aprueban en referéndum los Estatutos de Autonomía del País Vasco y Cataluña, aunque con una alta abstención en ambos casos. En 1981 se aprueba el Estatuto de Galicia y en 1982 el de Andalucía.

A la crisis económica se suma la persistencia del terrorismo de ETA y GRAPO. El 23 de febrero de 1981, un grupo de guardias civiles asalta el Congreso de los Diputados durante la votación de investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo, sucesor de Suárez al frente de la UCD. El intento de golpe de Estado fracasa gracias a la firmeza del rey Juan Carlos I en defensa del orden constitucional.

La Transición Española, a pesar de las dificultades, logró sentar las bases de un sistema democrático sólido y estable en España. La Constitución de 1978 se convirtió en el símbolo de la reconciliación nacional y el punto de partida para una nueva etapa de progreso y libertad.