LOS MOVIMIENTOS SOCIO-POLITICOS

La Internacional Obrera se había caracterizado por la existencia en su interior de dos corrientes ideológicas antagónicas: anarquistas y marxistas. Ambas corrientes, presentes en España desde el Sexenio Democrático, desarrollaron su actividad en el periodo de la Restauración.

Movimiento obrero

La posibilidad de actuar en legalidad llevó a los anarquistas a fundar la Federación de Trabajadores de la Región Española.

Las tendencias anarquistas fueron las seguidoras de las teorías de Bakunin quien proponía la colectivización total, excepto el fruto del trabajo, y de Kropotkin, el cual defendía que todo fuera colectivizado.

En general, el movimiento anarquista era pacifista, exceptuando las acciones violentas que fueron obra de activistas individuales. Los actos terroristas estuvieron motivados frecuentemente por la sed de venganza existente dentro del movimiento. Un ejemplo de esta violencia fue el asesinato del presidente del Gobierno.

El Partido Democrático Socialista Obrero Español se fundó en 1879, fundado por Pablo Iglesias que se unió inmediatamente a la Segunda Internacional.

Más tarde, se creó el periódico El Socialista, principal medio dedifusión de sus ideas. En el programa fundacional del partido quedaba patente el ideal de la nueva organización política: completa emancipación de la clase trabajadora, la abolición de clases, transformación de la propiedad individual en propiedad colectiva y control del poder político por la clase trabajadora.

Siguiendo  las directrices de la Segunda Internacional, comenzó la celebración del 1º de mayo. Se iniciaba así el ritual de manifestaciones que habría de influir en la toma de conciencia del mundo obrero. A partir de ese año, el Partido Socialista participó en solitario en todos los procesos electorales, siendo esta política aislacionista de no colaboración con los partidos burgueses. La fuerte crítica realizada contra el reclutamiento y contra la propia guerra colonial le atrajo las simpatías populares. Será a partir del nuevo siglo cuando el socialismo consiga sus primeros representantes en las Cortes.

En esta época comenzó también la acción social católica. El papa definía el cambio de estrategia de la Iglesia católica, denunciaba la teoría marxista, y animaba a la participación activa en los procesos políticos, según el mensaje del Evangelio. En España, el pionero de la acción social católica fue el padre Vicent, que creó los Círculos Católicos de Obreros

Regionalismos

Uno de los hechos políticos más significativos de finales del siglo XIX fue la aparición de los movimientos políticos de tendencia regionalista o nacionalista. Hasta entonces, las reivindicaciones anticentralistas se habían encauzado a través del carlismo o del republicanismo federal.

El nacionalismo catalán

Varios son los motivos que permitirán la aparición de una ideología que defendiera los intereses catalanistas, entre ellas el desarrollo de una burguesía industrial dispuesta a defender sus intereses. Para ello, van a encontrar su fundamento ideológico en la propagación de los ideales federalistas y los planteamientos foralistas del carlismo de fuerte implantación en la región en épocas anteriores.

Más tarde, se fundó la primera asociación del catalanismo, el Centre Catalá. Otro colectivo político, denominado Lliga de Catalunya, se incorporó también a la política de reclamaciones y solicitó la constitución de las Cortes catalanas, el reconocimiento de la oficialidad de su lengua y de la enseñanza en catalán, y la  formación de tribunales catalanes.

Así, en 1892 nació la Unión Catalanista, que intentaba unificar a todos los grupos e instituciones defensoras del catalanismo. Un año después se hicieron públicas las llamadas Bases de Manresa, redactadas por Prat de la Riba, en las que se definía un futuro programa de autonomía para Cataluña.

Un momento clave fue en el que la crisis política nacional se aprovechó para pedir a la Reina regente la implantación  de  la autonomía administrativa en Cataluña, aunque el hecho mas destacado en ese momento fue la publicación del manifiesto del general Polavieja.

Más tarde, se creó el primer partido catalán, la Lliga Regionalista, para participar en las elecciones convocadas por Sagasta. En principio, se trató, de un partido interclasista y regionalista, pero dominado, sobre todo, por la tendencia conservadora y por el mundo rural. Sus lideres eran Prat de la Riba y Cambó.

El nacionalismo vasco

Un decreto puso fin a las exenciones fiscales y militares de las que había venido disfrutando el país vasco, al analizar el nacionalismo vasco hay que tener en cuenta varios factores que le anteceden y lo explican. Por una parte el peculiar marco político tradicional de la zona.

 Por otra parte el proceso industrializador, había comenzado a amenazar la estructura del mundo tradicional vasco. La supresión de los fueros en el país vasco determinó la aparición del movimiento del fuerismo. En el terreno cultural, la sociedad Euskalerria de Bilbao hizo posible la recuperación del euskera como lengua culta.

Sin embargo, fue Sabino Arana el que defendía la superioridad de la raza vasca, sus costumbres tradicionales, el catolicismo, el antiespañolismo y acuño el termino Euskadi para designar la patria común de todos los vascos.

El Bizcai-Buru-Batzar se convirtió en el embrión del futuro partido nacionalista vasco (PNV). Arana se vio obligado a sustituir su discurso antiespañolista por otro más moderado.