Pueblos que habitaban la Península Ibérica a la llegada de los romanos en el año 218 a. C. y que se encontraban divididos en dos áreas culturales diferenciadas.

Situados en el sur y en el litoral mediterráneo, constituían el área más avanzada de la Península, gracias a la influencia de las primeras colonizaciones de griegos, cartagineses y fenicios. Se regían a partir de una sociedad jerarquizada, dominada por caudillos. Disponían de una economía diversificada, lo que favoreció el uso de moneda. Su cultura era refinada, utilizaban la escritura y tenían creencias religiosas. Se asentaban en poblados amurallados, cercanos a las rutas de comercio.

Se localizaban en la Meseta, en el oeste y norte de la Península y constituían el área más primitiva y arcaica. Disponían de una economía agrícola-ganadera de subsistencia muy precaria. Se asentaban en poblados castreños y la sociedad estaba jerarquizada, con la existencia de una aristocracia guerrera. Existió además un área de pueblos celtíberos, nexo de las dos anteriores.

Tribus prehistóricas que habitaban los territorios de la actual Navarra y algunas zonas de Guipúzcoa, Aragón y la Rioja a la llegada de los romanos a partir del siglo III a. C. Hoy se cree que las características culturales de los vascones son el resultado de la evolución que sufren los grupos asentados en esta zona desde el Paleolítico.

Proceso de conquista y dominación del territorio peninsular que se inicia con el desembarco romano en Ampurias (218 a.C) y finaliza en torno al 19 a.C.

Proceso de asimilación del marco cultural romano por parte de los pueblos sometidos al Imperio Romano. Este importante legado cultural constituyó la base de la civilización occidental.

Antigua ciudad romana ubicada en el municipio de la actual Mendigorría que alcanzó su momento de mayor esplendor en los siglos I y II d. C.

Régimen político implantado en la Península Ibérica a comienzos del siglo VI, tras la caída del Imperio Romano.

Etapa de máximo esplendor político, económico y cultural de Al-Andalus.

Estados musulmanes de Al-Andalus que se constituyeron en 1031 tras la desaparición y fragmentación del califato en múltiples reinos o taifas independientes.

Cristianos que vivían en Al-Andalus tras de la invasión musulmana en el 711.

Proceso protagonizado por los núcleos cristianos del norte de la Península (Asturias, Marca Hispánica) frente a Al-Andalus, que se inició a principios del siglo VIII y finalizó en 1492.

Núcleo cristiano que surgió en la zona montañosa de la actual Navarra, en torno a la ciudad de Pamplona, en el siglo IX (830) con Iñigo Arista como primer caudillo.

Entre el siglo IX y XI los territorios aragoneses y catalanes llevaron a cabo primero la independencia de la Marca Hispánica y después un proceso de consolidación y expansión territorial.

Institución política característica de los reinos cristianos y que tuvo su origen en la Baja Edad Media.