El Crecimiento de la Economía Británica durante la Revolución Industrial

La Población

Entre 1761 y 1841, la población se multiplicó por 2,3. Este crecimiento se atribuyó más a la caída de la mortalidad. En la primera mitad del siglo XVIII, la mortalidad ascendió al 3,9% porque desde el siglo XVII el país se había liberado de las antiguas mortalidades fruto de la peste y las hambrunas. Entre 1761 y 1801, la natalidad aumentó 3,7 puntos mientras que la mortalidad descendió 1,6. Entre 1811 y 1841, la natalidad se incrementó en 1,8 y la mortalidad cayó 3,5. La Revolución Industrial conllevó un aumento de la demanda del factor trabajo que creó una situación de pleno empleo. Ello hizo que se adelantara la edad nupcial y aumentasen los matrimonios, lo que llevó a una mayor tasa de natalidad.

Tres causas del descenso de la mortalidad:

• Progresos en la medicina.
• Mejor alimentación.
• Mayor salubridad.

Las innovaciones en medicina fueron la vacuna contra la viruela, el diagnóstico de algunas enfermedades y el descubrimiento de la quinina para combatir la fiebre. El aumento de la producción agraria elevó el consumo de alimentos, lo que disminuyó la mortalidad por desnutrición. El descenso de la mortalidad media del país oculta diferencias entre el campo, las ciudades pequeñas, los barrios burgueses de las grandes ciudades y los suburbios obreros de éstas. Aquí la mortalidad fue mucho mayor por tres razones: una dieta de peor calidad, hogares con mayor hacinamiento y menor higiene. El crecimiento de la población fue acompañado de cambios en su estructura por edades y por sectores productivos, puesto que disminuyó el porcentaje de activos en la agricultura en beneficio de la industria y los servicios, y esto provocó un tenso proceso de urbanización. Se ha discutido si la revolución demográfica fue causa o consecuencia de la Revolución Industrial.

La Agricultura

El aumento de la producción agraria exigió cambios tecnológicos e institucionales. Desde las últimas décadas del siglo XVII, los farmers empezaron a introducir en las tierras la rotación de cultivos que suprimían el barbecho. Esos sistemas se generalizaron debido a sus éxitos. El que más se extendió fue la rotación cuatrienal: la primera hoja de la tierra era para el trigo, la segunda para tubérculos, la tercera para cereales y leguminosas, y en la cuarta para forrajeras. Los tubérculos y las forrajeras nitrogenan el suelo, y así al año siguiente podía utilizarse para otras cosas. Estas dos alimentaban mejor al ganado.

Otras innovaciones:

• Selección de semillas.
• Cría de ganado.
• Utilización de arados de hierro y máquinas sembradoras tirados por caballos.
• Drenaje de suelos húmedos.

Después de 1830, la productividad siguió creciendo gracias a la utilización de guano de Perú y de fertilizantes químicos. Entre 1660 y 1750, el Parlamento promulgó 83 leyes de cercamiento de open fields y common lands. Este proceso de concentración de la propiedad tuvo un efecto positivo: innovaciones tecnológicas, que sin embargo tuvieron un coste social porque los yeomen se convirtieron en asalariados y los cottagers perdieron el uso de los comunales. Estos campesinos abandonaron la agricultura encontrando empleo en las ciudades. Los cambios tecnológicos e institucionales explican que la producción aumentara. Hubo una inexistencia de censos agrarios hasta 1880. Todos coinciden en que el crecimiento fue menor en el siglo XVIII que entre 1800 y 1850, ya que la superficie cultivada con rotaciones sin barbecho creció mucho más que entre 1760 y 1800. Entre 1760 y 1850, la producción de trigo se multiplicó por 2,4.

Los cambios en el sector agrario tuvieron efectos muy importantes para el crecimiento económico:

1. El aumento de la producción elevó el consumo de alimentos.
2. El campo incrementó su demanda de bienes industriales de capital y consumo al crecer los beneficios de los propietarios.
3. La agricultura suministró una parte sustancial del capital invertido en la industria y los servicios.
4. El aumento de la productividad agrícola permitió que más de un 75% de la población activa trabajara en los sectores secundario y terciario.

El consumo de alimentos por persona creció durante la Revolución Industrial, pero en proporción inferior a la que se creía antes de la década de 1980. La agricultura incrementó de modo considerable la demanda de bienes de capital. Esa demanda creció mucho más que a principios del siglo XIX. La tercera hipótesis es que los terratenientes reinvirtieron buena parte de sus beneficios en carreteras, canales, minas de carbón y fábricas. Los landlords financiaban los cercamientos mientras que los farmers corrían con los demás gastos.

La Industria

Las industrias del algodón, hierro y minera fueron las primeras que utilizaron las nuevas tecnologías. La Inglaterra de mediados del siglo XVIII poseía incentivos y libertad para innovar, artesanos cualificados y emprendedores.

Causas de la eclosión de las nuevas tecnologías:

1. Aumento de la demanda del mercado británico.
2. La segunda, del mercado exterior.
3. La tercera, una de oferta según la cual el desencadenante provino de los elevados costes de producción del sistema domiciliario por encargo.

El caso del algodón

Antes de 1730, los hilos se tejían manualmente, las telas se lavaban con sustancias orgánicas, se realizaban en hogares de campesinos y en talleres artesanales, y la industria estaba organizada mediante el Verlagssystem. En 1733, John Kay inventó una lanzadera volante para tejer más rápido. Hargreaves patentó la spinning jenny, Arkwright la water-frame y Crompton la mule-jenny. El desafío era que no fueran movidas por el hombre, y se consiguió haciéndolo hidráulicamente. La máquina de vapor la ideó en 1769 James Watt, permitía movimientos no solo verticales sino rotatorios.

Hay dos teorías sobre el origen de las fábricas:

• Se crearon porque la nueva maquinaria era incompatible con el trabajo doméstico.
• Se instalaron para controlar y disciplinar a los trabajadores evitando costes al Verlagssystem.

El crecimiento de la industria del algodón provocó economías de aglomeración en las regiones donde se concentró y tuvo efectos de arrastre sobre industrias de otras zonas del país.

Las economías de aglomeración pueden simplificarse:

1. Aparecieron industrias auxiliares que proveían a la textil de insumos y medios de producción.
2. La industria textil y sus auxiliares provocaron un intenso proceso de urbanización que elevó la demanda de otros bienes industriales.
3. Uno y otro hecho fomentaron el crecimiento del transporte y de los demás servicios.

La industria siderúrgica

Aumentar la producción siderúrgica presentaba dos obstáculos: la utilización del carbón y que en la energía hidráulica fuelles y martillos se movían lentamente. El carbón vegetal se sustituyó por el mineral y las máquinas movidas por hidráulicos por vapor, esto elevó el rendimiento de los altos hornos. Entre 1760 y 1830, el aumento de la demanda de hierro provino del cambio tecnológico de la agricultura, de la urbanización… El boom de 1831-1850 se debió a la construcción de ferrocarriles.

Desarrollaron economías de aglomeración:

1. Crecimiento hacia atrás de industrias de utillaje.
2. Crecimiento hacia delante de la industria de bienes intermedios y de la de bienes producidos en protofábricas o por herreros.
3. Urbanización y aumento de la demanda de otros bienes industriales de consumo que comenzaron a producirse en la región.
4. Crecimiento de transportes y demás servicios.

El Comercio y Otros Servicios

El aumento de la producción agraria e industrial y de las exportaciones e importaciones exigió nuevos medios de transporte, ya que los antiguos imposibilitaban un tráfico rápido y barato.

Hubo tres innovaciones:

1. Construcción de una densa red de carreteras.
2. Construcción de una red de canales.
3. Tercera afectó al comercio exterior, los barcos fueron sustituidos por clippers, que doblaban la velocidad sin disminuir la carga.

Los nuevos medios de transporte contribuyeron al crecimiento económico. Ello fomentó el comercio interior y exterior y se incrementó la productividad al tener mayor especialización de cada región en aquello en lo que tenía ventaja comparativa y convertir a Inglaterra en el taller del mundo. El ferrocarril provocó muchas externalidades sobre la industria al disparar la producción de traviesas, raíles, locomotoras… Inglaterra se especializó en la venta de bienes industriales. Los precios de los bienes exportados descendieron gracias a la mayor productividad del sistema fabril y esto no ocurrió con los de las importaciones. Hubo que exportar más para importar una misma cantidad de materias primas y alimentos, aunque ello no generó pérdidas en las rentas inglesas, sino que generó empleo. Inglaterra no adoptó el librecambio hasta 1840, cuando la Revolución Industrial ya había finalizado. Se pidió la desaparición de aranceles y no se aplicó por: Hacienda se beneficiaba de los ingresos de aduanas y los landlords se oponían a la derogación de las Corn Laws, que gravaban las importaciones de cereales. El aumento de la demanda fue consecuencia de tres factores: crecimiento demográfico, mayor renta per cápita y el incremento del comercio exterior.

La Formación de Capital

El origen de los capitales invertidos en las primeras fábricas fue objeto de debate durante las décadas de 1950 y 1960. Las primeras fábricas textiles y fundiciones de hierro fueron financiadas en la mayoría de los casos por artesanos y pequeños comerciantes. Como los bancos se mostraban reacios a conceder créditos a largo plazo, los empresarios pioneros reunían el dinero recurriendo a mercados informales y después iban aumentando el capital fijo mediante la reinversión de beneficios. Los country banks tuvieron un papel decisivo en la industrialización al prestar dinero a corto plazo a las nuevas empresas para que hicieran frente a sus necesidades de capital circulante. Las sociedades anónimas emitían acciones remuneradas con dividendos, lo que permite a los socios fundadores reunir importantes sumas de dinero de múltiples ahorradores y la responsabilidad es limitada. En 1720, la Bubble Act prohibió constituir este tipo de sociedades si el Parlamento no lo autorizaba. La ley no supuso un problema para el desarrollo de sociedades anónimas porque el Parlamento permitió que tomaran esta forma jurídica, porque desde 1826 los bancos pudieron constituirse como sociedades anónimas. Durante el siglo XVIII, la tasa de formación de capital fue mayor que la propuesta por Deane, las inversiones experimentaron un crecimiento gradual, la tasa se dobló, esto último permitió aumentar el capital fijo por trabajador, lo que constituyó una de las claves del crecimiento económico sostenido que inauguró la Revolución Industrial.

El Papel del Estado

El Estado contribuye al crecimiento económico realizando varias funciones:

• Mantiene un marco institucional que permite la asignación de recursos por el mercado y el progreso individual.
• Produce bienes preferentes.
• Redistribuye la riqueza.
• Estabiliza el ciclo económico mediante medidas de política fiscal y monetaria.
• Regula la actividad económica.

La primera función es imprescindible para que exista una economía de mercado y las otras tratan de resolver fallos de mercado. El Estado británico desempeñó un papel mínimo durante la Revolución Industrial porque cumplió con el laissez-faire. Esta tesis se apoya en dos hechos: La Gloriosa creó un marco institucional de naturaleza liberal y el Estado inglés intervino menos que el alemán o el japonés. La agricultura estuvo protegida mediante las Leyes de Granos, los aranceles a la importación de productos siderúrgicos fueron medidas típicas, como lo fueron: la rebaja de derechos arancelarios a la importación de materias primas necesarias en la industria, la devolución de esos derechos en el caso de que aquellas utilizadas en la producción de bienes se exportaran, la abolición de los aranceles de exportación para la mayoría de los bienes industriales, los subsidios a la exportación en determinados sectores, la prohibición de exportar maquinaria y la prohibición de contratación de trabajadores cualificados en el extranjero.